Peces Barba bombardearía Edimburgo

Sábado 21 de enero de 2012

Cuando el pasado domingo fallecía en Madrid Manuel Fraga Iribarne, su compañero de ponencia constitucional Gregorio Peces Barba, decía de él que había desaparecido “un patriota español, un hombre de estado». Hacía buena la frase del escritor catalán Josep Pla cuando afirmaba que “lo más parecido a un español de derechas es un español de izquierdas».

Y ya son tres, de los siete ponentes constitucionales (excluyeron al PNV), que han desaparecido, aunque aquel espíritu constitucional goce de una estupenda salud de hierro. Por cierto, Fraga, siendo ministro de la gobernación nos detuvo a Joseba Goikoetxea, Bingen Zubiri y a mí, cuando preparábamos el Aberri Eguna de Iruña de aquel año. Esto debe ser el patriotismo constitucional del que habló Peces Barba.

Cuando una editorial catalana, me encargó un libro al que puso el título “Extraños en Madrid”, lo presentaron en la Villa y Corte el líder de Unió, Josep A. Duran y el entonces presidente del Congreso, José Bono. Éste, llevaba diciendo algún tiempo que él a pesar de haber sido presidente de Castilla La Mancha, reconocía que en el estado español solo hay dos demandas de autogobierno claras: la vasca y la catalana. Pero en aquella presentación dijo algo más que pasó, curiosamente, totalmente desapercibido.

“El café para todos -dijo Bono- fue una salida pero no una solución. Se llegó a esa salida porque cuando acabó la dictadura el ejército no estaba dispuesto a que la constitución reconociera el derecho al autogobierno del País Vasco y de Catalunya y para evitar una posible sublevación se les dijo a los militares que lo mismo que se le iba a reconocer a vascos y catalanes se le iba a reconocer también al resto mediante la formación de distintas comunidades autónomas». Dicho ésto por un exministro de Defensa, no está nada mal. A confesión de parte, relevo de pruebas.

Pero volvamos a Don Gregorio. Este buen señor a todas horas se la pasa hoy en día defendiendo al rey de las andanzas de su yerno y a España de las aspiraciones de los nacionalistas. Y repito que es uno de los que llaman Padres de la Constitución.

Pues bien, eI pasado mes de octubre en Cádiz se celebró el X Congreso Nacional de la Abogacía y allí el ex presidente del Congreso hizo ésta gracieta: «Siempre me pregunto medio en broma, qué hubiera pasado si nos hubiéramos quedado con los portugueses y hubiésemos dejado a los catalanes”. Con el mismo tono indicó: hubiera habido un gran problema que no es otro que no se hubiese podido jugar un partido Madrid-Barça».

Peces Barba se refería a los hechos producidos alrededor de 1640, tiempo en el que a la corona española le coincidieron dos revueltas de carácter muy similar en Catalunya y en Portugal, la llamada Guerra de la Restauración portuguesa y la Guerra de Els Segadors. «Cuando el Conde Duque de Olivares se encontró al mismo tiempo con el alzamiento de los catalanes -que por cierto celebran sus derrotas como sus fiestas nacionalesy los portugueses, se tomó una decisión: dejar a los portugueses y quedarnos con los catalanes» dijo el exquisito ponente constitucional.

Pero es que éstos comentarios se producían después de que otro ponente constitucional que participaba en la conferencia, José Pedro Pérez Llorca, el llamado “zorro plateado”, alertara de la posibilidad «de que nos encontremos con una España fragmentada por procesos independentistas, lo que significaría que ellos (Peces Barba y Pérez Llorca) como redactores de la Constitución de 1978, habrían fracasado porque perseguían la unidad de España.

Fue en ese momento cuando Peces Barba la volvió a poner de oro. Se declaró optimista y señaló que veía imposible que se produjera esa situación “con esos efectos tan negativos”. “No soy pesimista, estaremos en mejores condiciones que en otras épocas. No sé cuantas veces hubo que bombardear Barcelona y creo que ésta vez se resolverá sin necesidad de bombardear Barcelona». ¡Qué gracia!.

Repito que estamos hablando de dos ponentes de la Constitución de 1978 Gregorio Peces Barba y José Pedro Pérez Llorca, y que Manuel Fraga votó contra el capítulo VIII y contra el Estatuto de Gernika.

Lo malo de todo ésto es que Peces Barba no descansa. El uno de diciembre escribió un artículo, tras las elecciones del 20 de noviembre, dándole al PSOE unas pautas de comportamiento en relación con los nacionalismos que no tenían desperdicio y que vale la pena reseñar ya que están elaboradas por un catedrático de Filosofía del Derecho, ex presidente del Congreso, ex rector y ex po­nente constitucional. Un buen español, en suma.

Nos advertía: «Los nacionalistas excluyentes, ya existentes y el nuevo que es Amaiur, viven de una hipótesis que nunca van a realizar plenamente. Podrán tener mayor o menor repercusión pero nunca podrán alcanzar su meta última que es la independencia del fragmento del estado que cada uno representa (Cataluña o País Vasco). «El separatismo en España es una ilusión imposible y un esfuerzo inútil». «Habría que decir a los separatistas el lema que encabeza el libro sobre el infierno de la gran obra de Dante, «La Divina Comedia», (Lasciate ogni speranza. Abandonad toda Esperanza)». «En los grandes problemas con los que España se va a enfrentar en estos próximos años, el PP ganador y el PSOE perdedor tienen que hacer una piña de lealtad y de compromisos por el interés real de España». ¿Apelando al ejército Don Gregorio y haciendo uso de lo que ustedes redactaron en el artículo 8?. ¿Bombardeando Barcelona y Gernika de nuevo?.

EI resumen iconográfico de esta recomendación de Peces Barba la vimos en el mensaje real del 24 de diciembre. Tras el rey, hablando de una “justicia igual para todos” (menos para él y su hija Cristina), aparecía flanqueado por una fotografía de Zapatero y Rajoy. PSOE y PP. La España real.

Edimburgo es la capital de Escocia. En ella vive un señor llamado Alex Salmond que es su primer ministro y que ha ido más allá de lo que fue el Lehendakari Ibarretxe con su libro verde “Propuesta de estatuto Político para la Comunidad de Euskadi”.

Haciendo caso a la doctrina Peces Barba, Zapatero y Rajoy, los dos, rechazaron y ni siquiera admitieron a trámite lo que el Lehendakari les llevaba a aquel hemiciclo producto de una votación mayoritaria en el Parlamento Vasco. Gran portazo. La España eterna de Pla. Frente a ésto, el primer ministro británico David  Cameron les ha dicho a los escoceses que muy bien, que acepta el reto y que sí, que convoquen un referéndum pero con una pregunta muy clara. ¿Se imagina alguien algo así dicho por Rajoy y aplaudido por Peces Barba?. Pues no. Esa es la diferencia que además la cocinan con una amenaza, y no solo militar: «si os vais, la Unión Europea no os admitiría. España diría que no y fuera hace mucho frío». Y no se sonrojan.

Y otra curiosidad es que Cameron lanza el órdago pensando que como mucho el 40% de los escoceses quiere la independencia y por tanto no hay mayoría, como para dársela. Lo curioso es que el 43% de los ingleses apoya el plan independentista del autogobierno de Edimburgo. «Iros, dejarnos en paz» parecería que es lo que están deseando.

El debate pues está en la calle europea. Los nacionalistas, observamos lo que está pasando porque Cameron ha arrojado una piedra en el quieto estanque y sus ondas muy en breve llegarán de nuevo al Golfo de Bizkaia. Ya nadie hablará de aventuras, de locuras, ni de «eso está bien pero sin violencia»,  porque no la hay. Solo existe en los Peces Barba que hablan de bombardear Barcelona y de que abandonemos cualquier esperanza en base a la fuerza militar o a la numérica.

José Antonio de Aguirre era diputado en el Aberri Eguna de 1932, y le tocó hablar en aquella primera fiesta patriótica del nacionalismo vasco. Dijo lo siguiente:

“Vamos a discutir una parte pequeña de nuestras aspiraciones contenida en el Estatuto; una parte pequeña pero apreciabilísima en cuya defensa pondremos todos nuestro corazón ya que también en las cosas pequeña está la Patria entera contenida. Seguimos adelante sin titubear. Pero si la incomprensión de quienes han de oírnos es tanta que aquel Estatuto se nos negara, sabed compatriotas en este momento solemne que vuestros Diputados están conjurados para pedir en pleno parlamento arrostrando hasta la muerte, si preciso fuera, la independencia plena de Euzkadi”.

La cosa se pone interesante. Con ETA desaparecida, veremos si en Europa ganan los Peces Barba o los Salmond. Al loro.

Martin Schultz no hubiera hecho lo de Jerzy Buzek

Viernes  20 de enero de 2012

No creo que con el nuevo presidente del Parlamento Europeo se hubiera producido el pasado lunes el minuto de silencio en recuerdo de Manuel Fraga porque al día siguiente, martes, el Parlamento Europeo tenía un nuevo presidente, el socialdemócrata Martin Schultz, en sustitución del polaco y hombre de derechas Jerzy Buzek.

Schultz, de 56 años, europeísta acérrimo y conocido por su vehemencia en sus discursos ante la Eurocámara, ha aceptado el cargo proclamándose como un presidente «incómodo» por su rechazo hacia la prepotencia de los jefes de Estado y de Gobierno a la hora de dirigir Europa sin contar con el PE. «Se celebra una cumbre tras otra, sin resultados, dejando fuera al Parlamento Europeo y dejando a los representantes nacionales como meros delegados subsidiarios de lo que decide Bruselas», denunció en su primer discurso como presidente. Durante su mandato, Schultz se ha fijado el objetivo de «que prevalezca el interés general por encima de cualquier interés nacional».

Schultz ha llamado la atención en este sentido sobre el hecho que «por primera vez se baraje como opción real el fracaso de la Unión Europea (UE)». «O ganamos todos, o perdemos todos», señaló.

«Nuestros padres querían darnos una vida mejor a la suya, y la tuvimos. Pero ahora no sabemos si podremos dar esa mejora a nuestros hijos», se lamentó Schultz. El presidente de la CE, José Manuel Durao Barroso, destacó «la gran personalidad» del recién elegido presidente, quien indicó: «Soy como soy. Los ciudadanos nos dicen que siempre decimos las mismas cosas y para contrarrestar eso debemos darles voz».

Schultz consiguió la mayoría absoluta para proclamarse presidente en la primera vuelta con 387 votos válidos emitidos a su favor.

La victoria de Schultz era esperada por todos dado que el Partido Popular Europeo (PPE) y los social-demócratas (S&D) rubricaron en 2009 un pacto legislativo para dividirse la presidencia en el periodo de cinco años.

Una historia de magia

Entre las miles de historias de los pasajeros del “Costa Concordia”, una de las más increíbles es la de una mujer anglo-venezolana de 30 años, residente en Londres, llamada Rosalyn Rincón. Probablemente a nadie le pilló el naufragio en peor momento o en una situación más delicada. Según ha contado al diario británico “Daily Mail”, trabajaba a bordo en los espectáculos de entretenimiento del barco. Su marido es mago y ella es la clásica señorita que el prestidigitador mete en una caja y corta en trozos, separando las partes del cuerpo por compartimentos. Precisamente así estaba cuando el barco chocó con el arrecife y empezó a inclinarse entre el pánico general. Fue en medio del espectáculo que como cada noche tiene lugar en el teatro del buque, mientras de forma simultánea hay un turno de cena. Entre el caos general, su marido logró sacarla de la caja y al final se salvaron.

Nunca es tarde

«Tarde piaste pajarito» es la expresión que podíamos endosar a los miembros de la Izquierda Abertzale que el lunes protestaron por el ataque en Bilbao y concretamente en Rekalde por unos veinte encapuchados que con su acción nos dicen que ahí están. Ojala ésta denuncia la hubieran dicho hace veinte años, pero como a las cosas hay que mirarlas desde otro prisma, del lado positivo, digamos más bien que nunca es tarde si la dicha es buena.

Traigo ésto a colación ante lo hecho por veinte encapuchados en un ataque perfectamente organizado previamente y cerca de tres mil euros que saldrán de las arcas del Ayuntamiento de Bilbao para reparar los daños causados por la quema de dos contenedores en el barrio de Rekalde durante la noche del pasado lunes. La reaparición de la kale borroka tras meses en barbecho sorprendió a los dirigentes de la izquierda abertzale oficial en medio de una agitada agenda en la que los ejes de acción son claros: una salida viable para el colectivo de presos de ETA y la legalización de Sortu. Un guión que los radicales han hecho peligrar con el sabotaje registrado en la capital bizkaina, el primero de estas características en meses, y que ha forzado a la izquierda abertzale histórica a abroncar a sus protagonistas.

Sin entrar a debatir si el sabotaje es algo residual o puede suponer una escalada en las protestas que pequeños grupúsculos han protagonizado en las últimas semanas -ataque a la sede de DEIA en Gernika, proliferación de pintadas a favor de ETA en la vía pública…, a nadie escapa que estas acciones de otra época suponen un lastre para la antigua Batasuna. Que veinte encapuchados (de los que ocho ya han sido identificados por la Ertzaintza) alteren el orden público de forma organizada no ayuda a este movimiento político, sino todo lo contrario. Y como a buen entendedor pocas palabras bastan, sus propios integrantes se apresuraron en rechazar en una nota lo sucedido la víspera en Rekalde. Una acción que, según advirtieron en el comunicado, es «incompatible» con la estrategia de la izquierda abertzale y fortalece la «posición inmovilista» que, a su juicio, mantienen los estados español y francés desde que ETA anunció el pasado 20 de octubre el cese definitivo de su actividad armada.

«En un contexto en el que la sociedad vasca reclama de forma absolutamente mayoritaria la superación de la confrontación violenta y el fin de la vulneración de derechos, la actividad represiva y actos como los del lunes por la noche están fuera de lugar», destacó la izquierda abertzale en el comunicado.

Está bien. Pero lo que preocupa es que siga habiendo grupos organizados de esta entidad y dispuestos a hacer lo de siempre.

Paco Marhuenda premio internacional de Historia del Carlismo

Francisco Marhuenda, director de LA RAZÓN, ha recibido, en su XII edición, el Premio Internacional de Historia del Carlismo Luis Hernando de Larramendi. Las personas que integraban el jurado se reunieron en la localidad navarra de Estella para sus deliberaciones. Lo hicieron en la misma sede del museo del Carlismo que existe en esta ciudad.

Bajo la presidencia de Luis Hernando Larramendi Martínez, se decidió otorgar este galardón a Francisco Marhuenda, con el voto unánime de todos los miembros que participaron en la decisión. Un premio que se anunció posteriormente en el transcurso de un acto público que discurrió en Estella-Lizarra y al que también quiso asistir la alcaldesa de U.P.N. La obra, que fue seleccionada entre un conjunto de ocho trabajos de investigación que también se habían presentado para ganar este concurso, lleva el título de “El estado carlista en la guerra civil de 1833-1840”. La concesión de este premio también incluye la posterior publicación del trabajo para que alcance la mayor difusión posible.

Conocí a Marhuenda en la Junta de Portavoces del Congreso. Sustituyó al ahora ministro del Interior  Jorge Fernández que como secretario de estado acudía a aquellas reuniones para hacer saber qué opinaba el gobierno del PP sobre los distintos órdenes del día. Pero lo que no sabía de Marhuenda era su erudición en relación con el carlismo. Tiene buen tajo si quiere seguir investigando sobre la manera como se cargaron este invento tan navarro los carlistas Esteban Bilbao que fue presidente de las Cortes franquistas y el Conde de Rodezno, ministro de justicia, con el dictador. Estos dos personajes dejaron al carlismo irreconocible. De seguir una de las ramas dinásticas a hacer seguidismo de una dictadura implacable que acabó con el partido.

 Paco Marhuenda es hombre culto y cordial que se transforma cuando habla del nacionalismo vasco y del catalán. No hay más que seguir el diario La Razón. Pero como es amigo de Rajoy, modulará su periódico en función de los intereses del presidente del gobierno. Esperemos.

López Aguilar no tiene autoridad moral para criticar a Orban

Jueves 19 de enero de 2012

Sinceramente no le entiendo a Carmen Chacón. Le conozco y sé que actúa con la mejor de sus intenciones pero es como que alguien se imagine que Rubalcaba lleve en su candidatura a Barrionuevo y dijera que éste iba a abanderar democráticamente la lucha contra la delincuencia. No tendría la menor credibilidad.

De ahí que me parezca incomprensible que el eurodiputado y ex ministro de Justicia, Fernando López Aguilar, ante la presencia del primer ministro checo Viktor Orban en Estrasburgo, se atreva a opinar sobre las demasías constitucionales de este hombre al que no le ha quedado más remedio que rectificar, recular, y poner en valor democrático una Constitución como la checa que atentaba contra la libertad de expresión y la seguridad jurídica en su país. Y gracias a la presión comunitaria, cosa que está muy bien, lo ha hecho porque la Unión Europea es un club democrático.

López Aguilar le ha dado a Orban clases de democracia y le ha dicho que ésta se basa en el gobierno de las mayorías pero respetando a las minorías. Como teoría está muy bien, pero ¿qué hizo en la práctica López Aguilar siendo Ministro de Justicia con el asesinato del cámara, José Couso?.

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz dictó en octubre de 2005, orden de detención internacional contra los tres militares norteamericanos acusados de matar a Couso.

Tras la resolución judicial, los entonces ministros de Justicia, Juan Femando López Aguilar, y de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, se pusieron en contacto con el embajador norteamericano para tranquilizarlo.

López Aguilar le transmitió que el Gobierno «pondría todo su empeño en cuestionar la decisión del juez basándose en argumentos técnicos», mientras que Moratinos le aseguró que «si el magistrado arreglaba las cuestiones técnicas, el Ejecutivo pasaría a apelar la resolución».

Con esta información, el embajador envió un telegrama confidencial en el que señalaba que «los ministros españoles están trabajando para que no prosperen las órdenes de detención».

La fiscalía recurrió la resolución de Pedraz y en marzo de 2006 la sección segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional archivó el “caso Couso”.

Poco después, la entonces vicepresidenta del Gobierno María Teresa Fernández de la Vega se reunió con el embajador y le dijo que Conde-Pumpido le había informado de la «excelente cooperación de la que había disfrutado por parte de la embajada y las autoridades norteamericanas para ayudar a concluir el caso».

Sin embargo, la familia de Couso recurrió al Tribunal Supremo y en diciembre de 2006 éste les dio la razón y ordenó a la Audiencia Nacional que reabriera el caso.

¿No es una inmoralidad que López Aguilar esgrima la bandera de los derechos humanos cuando engañó a la familia de José Couso, obstruyó a la justicia y movió la colita de perro faldero ante el embajador norteamericano?.

Carmen. Tu candidatura está muy bien, pero has elegido un pésimo compañero de viaje. Quien hace lo que hizo éste compañero tuyo apellidado López Aguilar no debería estar en tu candidatura. Conociéndole como le conocemos, me fío más del informe del embajador que de éste personaje tan ególatra y pagado de sí mismo. Y lo que hizo fue una inmoralidad.

No se puede unir Fraga con Vaclav Havel

Las noticias en el estado español siempre giran sobre lo mismo y es difícil romper el muro de silencio que hay sobre otras informaciones tan jugosas o más que las habituales.

De Fraga se ha dicho de todo y todo bueno. Solo la izquierda y algunos nacionalistas, entre ellos el PNV, se han condolido por la muerte de un ser humano pero han puesto las cosas en su sitio. Fraga no fue un demócrata, Fraga se ha ido al otro barrio sin rendir cuentas de sus excesos y  Fraga no hay que rendirle semejante pleitesía.

Critiqué ayer al presidente del Parlamento Europeo por habar pedido un minuto de silencio y alabado a Fraga como un estadista europeo cuando impidió que España entrara en la Unión durante treinta años. Pero es que ha habido más.

La decisión del ya expresidente del Parlamento Europeo, Jerzey Buzek, de guardar un minuto de silencio en memoria de Manuel Fraga y de Vaclav Havel, fallecido el pasado mes de diciembre, levantó ampollas entre algunos eurodiputados que criticaron la «encerrona» de equiparar a ambos.

Para la eurodiputada británica Sarah Ludford, del partido Demócrata Liberal, “relacionar a los dos es un truco barato”. En un comunicado recuerda que “Fraga nunca renunció o se disculpó por los estándares represivos del régimen de Franco en el que él participó”, recalca Ludford, mientras destaca el compromiso de Havel a lo largo de toda su vida con la defensa de la democracia y los derechos humanos.

“La Unión Europea fue fundada como reacción a los horrores de la dictadura, es un insulto no sólo a la memoria de Havel, sino también a los millones de personas que murieron y sufrieron en manos de regímenes autoritarios como el de Franco”, sentenció la británica.

Por su parte, el diputado catalán Raül Romeva tildó el homenaje de “encerrona”. En su opinión hubiera sido absurdo negarse a guardar el minuto de silencio -también dedicado a las víctimas del crucero accidentado en Italia- porque “todo el mundo merece un respeto”, pero coincide en que Fraga y Havel “no eran figuras equiparables”.
Havel, que murió el pasado mes de diciembre en Praga, es conocido por liderar la Revolución de Terciopelo que logró acabar con cuatro décadas de dictadura soviética en la República Checa, país del que sería el primer presidente elegido democráticamente.

“Fraga, pese al importante papel que jugó en la Transición, tenía muchas sombras”, asegura Romeva, quien recuerda que el fundador del Partido Popular “nunca pidió perdón por los que hizo el franquismo y por las decisiones que él mismo tomó”.

Por su parte, el Partido Popular Europeo (PPE) expresó sus condolencias a la familia de Fraga y destacó su “extraordinaria trayectoria política” y su contribución a la redacción de la Constitución española, sin mencionar su papel como ministro de la dictadura franquista.

La delegación española del Partido Socialista no quiso hacer comentarios sobre la polémica. No nos extraña. Nunca marcan perfil democrático. Y luego quieren analizar el por qué pierden las elecciones.

Homenaje a Imanol Olaizaola

Imanol Olaizola, hijo del músico Olaizola, fue director de Cultura de la Diputación de Gipuzkoa. Cuando le veía le solía comentar que solo le faltaba el monóculo para parecerse al general Espínola, aquel militar portugués que encabezó la revolución de los claveles en su país. Culto, elegante, pausado, acaba de recibir un merecido homenaje.

Con las vibraciones de la percusión de Martin Grübinger aún resonando en el Auditorio del Kursaal, se le rindió un emotivo homenaje al fundador y primer presidente de la Orquesta de Euzkadi Imanol Olaizola, en el año en el que la OSE cumple su treinta aniversario. En el acto, participó la Consejera de Cultura, Blanca Urgell, y el lehendakari Carlos Garaikoetxea, entre otros.

Traigo a Imanol a colación porque es una pena que personalidades de este calado no hayan escrito sus memorias. Porque no solo hablarían de cultura sino también de lo que fue el franquismo. Recuerdo como en una ocasión me enseñó unas revistas en las que aparecía el viejo casino del Kursaal de Donosti sirviendo de exposición del armamento incautado por las tropas franquistas a los «rojo-separatistas» y de cómo aquella exposición, al meter tanquetas en aquellos salones rompió todos los mármoles del suelo de la sala.

Ojalá algún chaval que estudie periodismo o historia grabe una larga conversación a este interesante intelectual y testigo de la historia. No le defraudará.