Viernes 21 de diciembre de 2018
Es una lástima que Félix Aranbarri no haya podido ver su funeral. O igual si. El caso es que le hubiera llamado la atención que gentes que le habían adversado o gentes que le habían traicionado, allí estaban rindiéndole homenaje y un tributo de reconocimiento a la trayectoria de toda una vida de hombre bueno, como lo ha destacado el sacerdote oficiante con otros tres en la Iglesia Andra Mari de Ondarroa, este viernes, a las cinco de la tarde.
La iglesia es un notable edificio que se alza sobre la ría del río Artibai en un promontorio rocoso con una relevante cimentación sobre arcadas que le dan un carácter singular y fuerte. Gótica tardía de 1480, todavía se pueden ver argollas donde se ataban los barcos. Su pórtico inundado en 1983 fue limpiado por Joseba Azkarraga y quien esto firma por encargo del párroco. Hasta allí habían llegado las aguas.
Ha sido un funeral de transversal y de amplia e importante presencia institucional dada la relevancia de Félix y de su ejemplo en los momentos más duros. Allí estaban el Lehendakari Urkullu, el Lehendakari Ardanza, el presidente del EBB Andoni Ortuzar, la presidenta del BBB Itxaso Autxa, el Diputado General de Bizkaia Unai Rementería, el ex Diputado José Alberto Pradera, y varios diputados, el senador Cazalis, la senadora Etxano, el ex miembro del EBB Ansotegi, el ex consejero Gatzagaetxeberria, la miembro de la Gestora Josune Ariztondo, Kepa Etxeberria, Manu Legarreta, Esteban Burgoa y representantes de las ikastolas del Obispado, ya que trabajaba ayudando en el Obispado de Bilbao cuando le ocurrió en Ondarroa el fatal accidente, así como varios más en una iglesia repleta..
Me he interesado si el ayuntamiento, gobernado por Bildu, había puesto la ikurriña a media asta o publicado una esquela. Me han dicho que no a las dos cosas, aunque si la de la familia, del EAJ-PNV y de su cuadrilla Zutiko, pero que el actual ayuntamiento redactó una nota reconociendo su trabajo de 1979 a 1987 pero desconociendo su paso por la Gestora de 2007 a 2011. La familia ante eso les dijo que Félix era uno y que ponían todo o no ponían nada, y lo corrigieron. Lástima que esa nota no la hayamos visto publicada en ningún sitio. Lo positivo nunca es noticia y debería haber abierto las ediciones. Mi esposa, Maria Esther, que estuvo en la Gestora con Félix, me ha comentado que ha saludado al ex alcalde de HB Loren Arkotxa y que también estaban el parlamentario Urruzuno y el alcalde Zunbeltz Bedialauneta. Un buen gesto.
Si ha llamado la atención y ha sido comentado verle al quien fuera alcalde Aitor Maruri llevando una corona en nombre del batzoki que como se recordará, la negativa de Maruri a asumir la alcaldía en el 2007 obligó a Félix a tomar a ser designado presidente de la Gestora por indicación del Bizkai Buru Batzar. También estaba el diputado Joseba Agirretxea, que había sido concejal con Félix en las legislaturas de elección pero que se había negado a formar parte de la Gestora como se lo había pedido el BBB. Seguramente a Félix le hubiera gustado ver todas esas manifestaciones de reconocimiento a su trayectoria, mucho más cuando ha vivido en los últimos años con la tristeza lógica de quienes no le ayudaron en nada en aquellos durísimos tiempos. Pero es mejor así. A Félix, le hubiera gustado ver lo que se ha visto. Lástima que no lo haya podido vivir.
Decía el lehendakari Ardanza en una emotiva semblanza escrita este viernes en Deia que una generación se iba yendo y era a la que le había tocado apechugar no solo con poner en pie unos ayuntamientos democráticos sino con una generación de gentes que les hicieron la vida imposible pero que ese “viejo partido” había sabido superar esa dura etapa por contar con gentes de principio como Félix.
Todos los cumpleaños me llamaba. Lo hizo este pasado mes de noviembre. Estaba cargado de planes y de ganas de vivir, pero ya no le tenemos entre nosotros y ya no me va a sonar el teléfono cada cumpleaños. Pero quienes más van a sufrir su ausencia van a ser su viuda Mariasun, que ha mostrado una gran entereza y dignidad, así como sus dos hijos Iñigo eta Xabi y el resto de su familia.
Al final del funeral de cuerpo presente y con muchas coronas solo ha faltado escuchar un buen coro con el Hallelujah de Haendel como colofón a una vida de total éxito por la simple razón de que ese ondarrutarra como hombre bueno tuvo como norte preocuparse por los demás. GB Félix.