Jueves 25 de julio de 2019
Que lo obvio sea motivo de comentario tiene bemoles. Pero es que lo obvio se descuida. Me refiero a que, el Himno Vasco, el conocido como “Gora ta Gora” (que no está mal la apelación) y que últimamente no se escucha en ningún acto al haber sido sustituido por el ”Agur Jaunak” (curiosamente una canción religiosa a la que en la UPV se le quiso quitar la letra) o el “Gernikako Arbola”, que no lo es.
El Himno vasco fue aprobado en 1936 por el Gobierno Vasco de concentración y en plena guerra por el Gobierno presidido por Aguirre. Por si quedaba alguna duda el lehendakari Aguirre recordó el dato en el Congreso Mundial Vasco en Paris en 1956 y, para más legalidad, se aprobó como ley en debate parlamentario el 14 de abril de 1983 .Tan ley como la LTH. Pero no se cumple.
Ayer, Unai Rementeria dio inicio al acto anual institucional de la Diputación de Bizkaia poniendo el himno a todo meter que sonaba como me dijo Carmelo Bernaola, majestuoso y representativo. Y eso está muy bien y lo destaco.
El acto fue, como siempre, no apto para gente calenturienta. Es una constante que se suda la gota gorda en los magníficos salones de la Diputación. Sabiendo eso, ayer no fui con chaqueta y corbata, sino con una camisa de lino blanca de mangas cortas. Y sonreí viendo a más de uno, incómodo en su corsé. Llevo acudiendo a dicho acto desde que Makua era Diputado General, (tras Makua, Pradera hoy con chaqueta y abanico, José Luis Bilbao, Josu Bergara y Unai Rementería) y recordé con Pilar Aresti que la celebración comenzaba con una misa celebrada por el P. Scheifler. Solía ser por la tarde y cada año se celebraba de esta manera la festividad de San Ignacio de Loyola.
Me quedé en la puerta del gran salón porque para entrar hubiera hecho falta esos empujadores del metro de Tokio, habida cuenta del llenazo. Por cierto, mucha gente joven y mucha mujer, como novedad y noticia de una sociedad cambiante.
Rementería, tras el himno y el aurresku, comenzó su disertación valorando el simbolismo de la hoja de roble como símbolo de Bizkaia a la que este año se le ha sumado el “goazen”. Hizo un discurso de suma haciendo hincapié en la necesidad de la horizontalidad en política y no de la verticalidad. En su intervención destacó los logros de una acción y gestión premiada en las urnas por su progresismo, pies en el suelo y apuestas de futuro. No sé si algún diputado o diputada tomó nota y cambia de una vez su verticalidad de palo de escoba, como si el puesto, que temporalmente ostenta fuera vitalicio.
Saludé a la nueva Diputada Basurko. Su familia proviene de Motriko y mi ama se apellidaba Basurko y era de Motriko. Ella es ondarresa. Tiene un bonito departamento a su cargo.
Yo he agradecido la invitación. He sido nada menos que 36 años parlamentario por Bizkaia y solo les he sugerido se acuerden de todos los que lo han sido. No hay nada más satisfactorio para alguien que ha representado un territorio el que se se acuerden de él o de ella, aunque sea para pasar calor y saludar gente.
En resumen. Pasamos calor, saludamos a mucha gente, y comprobamos que cambian los tiempos y las personas pero la esencia del acto sigue con la misma sintonía afirmativa. Cambian los tiempos pero es el EAJ-PNV quien mantiene la constante. Por algo será. Algo que además ha sido destacado en el discurso de Investidura de Sánchez. Cumplir 124 años gobernando, significa entre otras cosas, hacerlo bien y la demostración, una vez más, ha estado en el acto coral de la Diputación de Bizkaia.
ya era hora de escuchar el Himno de Euskadi. Somos forasteros en nuestra tierra. Gracias.
Buen artículo. Eskerrik asko.