Domingo 27 de diciembre de 2020
Juan de
Ajuriaguerra presidió el BBB en 1935 así como en 1977. Nos contaba que ser
burukide era un “deporte” de riesgo. En el
anterior BBB al de la guerra, varios de sus burukides fueron
encarcelados en la prisión de Larrinaga y el siguiente ejecutivo del PNV de
Bizkaia, el suyo, la mitad fueron condenados a muerte entre ellos, él. Confiaba
que en el nuestro de 1977, presidido por
él, no iba a ser tan emocionante.
Recordaba la figura de Ramón Azkue, fusilado el 15 de octubre de 1937 como jefe
de Euzko Gudarostea así como a algunas figuras como la de José Mari Izaurieta, con
el que tuvo una gran amistad. ”Aquel hombre era un cerebro para los números. Aquí
hubiera presidido cualquiera de los grandes bancos” nos decía.
En
estos días de confinamiento, al encontrar la fotografía que ilustra esta página
me he acordado de él y, picado por la curiosidad, he querido tener más datos
sobre quién fue aquel burukide fallecido en 1995 en México a los 86 años. Y me
puse a tirar de la cuerda. Para ello contacté con Miren Iñurrategi, hija del Fiscal
y Magistrado de Tolosa, quien me hizo llegar hasta su hija en México a quien
envié las fotografías. Inmediatamente me contestó. ” Muchas gracias por
las fotos. Me han hecho una gran ilusión, además la bebé soy yo y no tengo
ninguna de esa etapa. Nací en México en abril, unos meses después regresaron
los aitas conmigo a Francia y estas fotos pertenecen a esa etapa. A poco de
llegar se inició la II Guerra Mundial. Me imagino que mis padres se deshicieron
de muchas cosas. Es un gran regalo de Navidad!!!. Eskerrik asko”.
Tras esto pensé que el vicelehendakari Jon Azua sabría de la familia
Izaurieta. Su respuesta fue la siguiente. ”Efectivamente,
conocí a José María Izaurieta con quien aita mantuvo una buena relación. Era
una persona muy reconocida y apreciada en el mundo vasco y, en especial, en los
círculos del Alderdi y ELA y con prestigio en el mundo empresarial mexicano. Su
casa, estilo neovasco y su frontón acogían campeonatos de pala y cesta los
fines de semana”.
Me acordé que el palacete de la Av. Marceau se compró por esos meses y que
Koldo San Sebastián le había entrevistado en su casa en México y con entusiasmo
me habló de su figura “José María
Izaurieta fue un «clásico» del Partido. Un hombre muy preparado,
especialista en banca y seguros internacionales, hablaba varios idiomas y
estaba muy bien relacionado en los medios europeos de su sector (también
en los de Madrid). Fue elegido miembro del Bizkai Buru Batzar en 1933. A
partir de 1935 formó parte del «consultivo» y fue uno de los asesores de Juan Ajuriaguerra (de quien era amigo desde
la infancia). Fue Izaurieta quien comunicó a Ajuriaguerra la preparación del
golpe y lo que reservaban los golpistas a los jeltzales. Al estallar la guerra,
Izaurieta hizo varios viajes por Europa (para el partido, sobre todo, y para el
Gobierno): estuvo en Suiza y, acompañó a don Alberto Onaindia a Roma para el
asunto del cumplimiento del Pacto de Santoña. Toda una historia. A destacar la
entrevista con el conde Ciano en Roma donde casi los detienen los fascistas.
Le ofrecieron un «puestazo» en
México (aunque hizo un viaje a Europa antes del comienzo de la guerra). En
México, tuvo mucho éxito económico. Su casa era un impresionante
caserío vasco con un frontón de largo profesional. Ayudó
económicamente al PNV y al Gobierno, y sobre todo, fomentó los
intercambios con empresas vascas (recordad que no había relaciones diplomáticas
porque México solo reconocía la República), algo de lo que informaba a
Ajuriaguerra. Su mujer estuvo toda su vida en Emakume Abertzale Batza”.
Tras esto, seguí preguntando y lo hice con Patxi, Agirre, historiador: Me
dijo. ”José María Izaurieta fue un
dirigente jeltzale, miembro del BBB, promotor, junto con Agirre, Manu
Robles, y Leizaola, de AVASC (Agrupación Vasca de Acción Social Católica),
organización creada en 1931 de la que fue secretario. Izaurieta pronunció
una conferencia en París el 21 de diciembre de 1936, donde se resaltaba el
valor del respeto religioso para que el Partido hubiese aceptado, a través de
Irujo, la entrada en el Gobierno español en plena guerra civil”.
Tras estos apuntes y al aparecer nombrada su esposa quise saber quién fue y su hija me lo contó:
“El nombre de ama era
Carmen aunque todos la conocían como Karmele de Juan Arbe. Nació en Tolosa, y
vivió en Villabona donde mi abuelo era gerente de la papelera. Tanto el abuelo
como la hija euskeldunes de corazón y de ideas bastante liberales para la época
y más para un pequeño pueblo. Hablaba muy bien el euskera, además del francés y
lo poco que recuerdo viene de ella. En México formó parte del grupo de Emakumes
que estuvieron apoyando a los refugiados y a los que se quedaron en Euzkadi.
Ama era alpinista, andaba en bicicleta, usaba falda-pantalón y se educó en
colegio de monjas francesas, me parece que en Irún. Era bajita pero con un gran
temple e inteligencia. Aita y ama se conocieron en San Miguel del Aralar en un
encuentro que hubo del PNV al que asistieron de todos los lugares. Ama
comentaba que un amigo le dijo “ese es Izaurieta”. Ella lo veía pero como no
coincidía con la representación que de él se había hecho de “un hombre maduro”,
por los escritos que publicaba, no lo “veía”. Un tiempo después, aita y otros
militantes fueron encarcelados como miembros del BBB. Ama escribía para darles
ánimo, cuando los liberaron, aita fue a Villabona para agradecer las misivas.
Así inició el romance. Se casaron en Aralar, en la Ermita de Larraitz, de ahí
mi segundo nombre y con el que identifico mi origen y, Miren, corresponde
a la parte de mi crianza y desarrollo en México. Fue una persona muy humana,
compasiva y generosa, además de inteligente”.
Mi hermana Maitena me transcribió una serie de cartas de Izaurieta a Xabier de Landaburu imposibles
de leer por la letra y el papel cebolla utilizado. Se las he ido enviando a
Miren Larraitz y a su hermano Ramón. El
me biografió a su aita:
“Aita nació el 15 de septiembre de 1907 en Algorta (Getxo). La familia
Izaurieta era originaria de Plencia, dedicada a la marina mercante. Su
padre fue administrador de la Compañía de Tabacos de Filipinas, en donde murió
siendo aita muy pequeño, apenas 12 años. Fue el menor de cuatro hermanos, un
varón que falleció durante la gripe del 18 y dos hermanas solteras.
Estudió con los Jesuitas y se licenció en Ciencias
Económicas en la Universidad de Deusto, donde por un corto tiempo realizó
labores de docencia. Ingresó a trabajar en La Aurora, Cía de Seguros de Bilbao,
quienes lo mandaron a Suiza a especializarse en Actuaría. Aita y Ama, que era
Tolosarra y amantes del alpinismo, se
conocieron en la cumbre del Aralar. Compartían sus inquietudes políticas y
nacionalistas y cada quien en su ámbito desarrollaba una actividad intensa. Se
casaron en junio del 36 e hicieron su viaje de bodas a Mallorca y la vuelta
por Paris por lo que tuvieron que obtener la visa francesa lo cual
resultó muy útil para ellos y para el gobierno de Euzkadi.
Con el estallido de la Guerra Civil se trasladaron a
Iparralde y de ahí a Paris. Desde ahí atendía instrucciones del PNV así como de
La Aurora. Podían moverse con libertad al contar con la visa francesa. Estando
ahí, una compañía de seguros mexicana se puso en contacto con la Aurora pidiendo
que les asesorara en la organización del ramo de Vida y ellos les recomendaron
comunicarse con aita, quien previa aceptación del partido partió con ama,
embarazada de Miren. Llegaron a México a finales del 37, con un contrato
de un año. Miren nació en abril del 38. Habiendo concluido su misión antes de
tiempo, en agosto volvieron a Francia para ponerse nuevamente a disposición del
partido. La empresa en México, satisfecha por su desempeño y resultados, le
dejó el contrato abierto para volver si así lo deseaba. Al volver a Francia,
entre otras tareas, colaboró con el gobierno francés para colocar exiliados
vascos en industrias francesas que requerían de gente capaz y confiable ante
los acontecimientos que se presagiaban para Europa. Finalmente, al
desatarse la guerra mundial y siendo Francia invadida por los alemanes,
partieron nuevamente a México en 1940, con el consentimiento del PNV.
Su carrera profesional la desarrolló con éxito en los
seguros y la banca. Organizó, echó a andar y dirigió una compañía de reaseguros
de vida, Unión Reaseguradora Mexicana. También dirigió el Banco Español
Mexicano, cuyos accionistas, importantes miembros de la antigua colonia
española, le pidieron encabezar el proyecto para crear un banco, con una
filosofía totalmente apolítica. Las muchas y muy variadas relaciones personales
y profesionales que desarrolló resultaron en una herramienta más que útil
para ayudar a un sinnúmero de compatriotas a colocarse o a abrirles puertas en
el país.
Al no haber relaciones diplomáticas entre México y
España (el gobierno mexicano nunca reconoció al régimen de Franco y acogió con
los brazos abiertos a los exiliados españoles, a quienes les facilitó la
naturalización voluntaria como mexicanos y mis aitas lo
aceptaron), se instrumentó un mecanismo de compensación de pagos para los
intercambios comerciales entre ambos países. El Banco de México le pidió
incorporarse al equipo de negociación mexicano y le expidió un pasaporte
diplomático el cual le servía de salvoconducto para viajar a España cada dos
años y, entre otras cosas, poder visitar a la familia y mantener vivos muchos
contactos con sus afines.
Espero con esta breve reseña aportar algo de lo que
necesitas. Te agradezco mucho tu interés por aita. Fue un hombre muy querido,
de sólidos valores, muy generoso y euskaldun como nadie.
Felices fiestas eta urte berri on.”
Seguí
tirando de la cuerda y tengo más información que aquí no cabe. Solo quería este
apunte sobre un burukide y su familia, dignos de ser recordados.