Defenderé la Casa de mi Padre

Jueves 22 de agosto de 2024

En este Bilbao festivo que, como dije ayer la ikurriña está desaparecida y solo aparece relegada a las fachadas institucionales prima lo festivo-reivindicativo y para comprobarlo solo es preciso acudir a Fort Apache en el Arenal. Ayer comentaba el lamentable concepto festivo de barricada, con buenos ingresos, de estas txoznas del Arenal tan reivindicativas donde toda causa radical y ajena tiene su asiento ante nuestra complacencia. ”Solo es una vez al año pero no se te ocurra pedir en sitio tan emblemático nada que sea asumido por toda la sociedad” te dicen. Y a callar.

Por eso es bueno recordar que si se reivindica el euskera, que apoyo con entusiasmo en este Bilbao tan euskaldun que predicaba Itziar Ituño, echo en falta el recuerdo al insigne bilbaino Gabriel Aresti, top de los poetas euskaldunes que publicó en 1964, es decir, ahora hace sesenta años su poesía más emblemática:

“Aitaren etxea defendituko dut: otsoen contra, sikarioen contra….”Y es que el olvido de Aresti me parece significativo. Me gustaría que la Vicelehendakari y la Diputada de Cultura lo hicieran pues solo esta poesía es un resumen y un mandato de nuestra vieja lucha. El título del poemario de Gabriel Aresti es “Harri eta herri” 1964. Fue clarividente: piedra y pueblo…

En castellano, dice así:

Defenderé

la casa de mi padre.

Contra los lobos,

contra la sequía,

contra la usura,

contra la justicia,

defenderé

la casa

de mi padre.

Perderé

los ganados,

los huertos,

los pinares;

perderé

los intereses,

las rentas,

los dividendos,

pero defenderé la casa de mi padre.

Me quitarán las armas

y con las manos defenderé

la casa de mi padre;

me cortarán las manos

y con los brazos defenderé

la casa de mi padre;

me dejarán

sin brazos,

sin hombros

y sin pechos,

y con el alma defenderé

la casa de mi padre.

Me moriré,

se perderá mi alma,

se perderá mi prole,

pero la casa de mi padre

seguirá

en pie.

Ni el VII de caballería puede entrar en el Arenal

Miércoles 21 de agosto de 2024

En este Bilbao festivo-reivindicativo se echa en falta la presencia de la ikurriña, relegada a las fachadas institucionales. Se nos han olvidado las guerras de las banderas de los hoy pacíficos kaleborrokas que alentaban la intifada palestina. Hoy solo existe una causa mundial que es la Palestina, y sobre todo la causa anti israelí. Estando en contra de lo que hace Netanyahu, solo hay que recordar que además de Gaza existen cientos de causas que se deberían recordar porque no estaría nada mal y daría pluralidad al cotarro festivo por ejemplo la terrible situación de las mujeres en Irán y Afganistán, entre otras. O la de Venezuela y el robo de unas elecciones. Pero al parecer esto no va con el movimiento feminista radical ni con la filosofía de un espacio coto cerrado, porque todo esto desentona.

Les recomendé a dos amigos que viven en Costa Rica y de paso por Bilbao fuesen a ver en el Arenal el Parque Temático que montan cada año las Comparsas y que lo han acrisolado con más de cuarenta años de ardua dedicación. Un espacio con música a tope, lemas de hace cincuenta años y un cierto olor característico que sigue respondiendo a aquel EMK ya difunto. Merece la pena darse una vuelta por él pues es algo único en el mundo. No hay nada parecido. El tiempo se ha detenido en el Arenal bilbaino. Parece que viviéramos en 1976. Puños muy cerrados, alusiones al imperialismo yanki por doquier, una pintada alusiva al periodista Pablo González sin foto del recibimiento que le hizo Putin, fueras a la policía municipal, apoyo irrestricto a los manteros, sin olvidarnos del Che Gevara y Mao….una auténtica maravilla, un revival cutre donde tú no puedes poner tu txozna porque el recinto es de ellos. Si se nos ocurriera montar una Txozna en favor de la democracia en Venezuela, estoy seguro que a los cinco minutos ardería como una pira.

Y es curioso porque Bilbao Konpartsak no se presenta a las elecciones pero al parecer representa a todos los bilbainos aunque nadie les haya otorgado esa representación. ¿Quién se la ha dado?. ¿La han cogido y nadie les dice nada?.

¿Desde cuándo un grupo de festejos decide que leyes se cumplen y cuáles no?

La ocupación del suelo del Arenal y sus zonas de paso son lugares de máxima concentración y de densidad elevada de personas por lo que es un peligro y un problema de seguridad pública que no se debería permitir y si se permite es porque se le tiene miedo a un colectivo que podría ejercer una violencia de todo tipo. Es lo que late en el fondo.

En relación con los manteros si son trabajadores explotados entonces lo que tiene que pedir Bilboko Konpartsak es que sea identificados los que suministran el material que venden, esas copias ilegales y que la inspección de trabajo analice sus contratos y su jornada laboral y sus condiciones de trabajo.

Y siendo grave el asunto de los manteros es aún peor la autoatribución de funciones de los comparseros si se producen agresiones sexuales en su atención e identificación de los hechos. Es muchísimo más grave, porque pueden frustrar fácilmente la persecución de delitos. Los poderes públicos tienen que ser muy claros y descartar ese autoproclamado e inaudito papel y aunque se diga que es complicado de evitar, lamentablemente algunos dicen que solo tendría solución si ocurre una desgracia. ¿Hay que esperar a eso?

En fin, que todo esto funciona en base a una gran permisividad que ampara muchísima cutrez y una dejación absoluta de autoridad al no contemplarse la pluralidad a la hora de convertir el Arenal en Fort Apache que ni siendo del VII de Caballería te permiten entrar.

Los 81 años del Txalupero Olabarrieta

Martes 20 de agosto de 2024

Jon Mikel Olabarrieta nació en Caracas hijo del exilio del PNV en Venezuela. Nieto del penúltimo alcalde de Deusto es un ingeniero reconocido. Asiduo al Centro Vasco de Caracas no era comprensible un fin de semana sin él. Paralelamente a su trabajo profesional y a su participación activa en el Centro, fue presidente de Eusko Etxea, siendo una de las personas claves del funcionamiento de la Radio Euzkadi clandestina (la Txalupa) que emitía  en onda corta desde Venezuela. Con JJ Azurza, Jon Gómez y Kepa Lekue formaban el cuerpo técnico de aquella maravillosa quijotada que funcionó durante trece años.

Alazne Korta, presente en la comida, me contó como su marido Joseba Urresti, muy joven fue uno de los que tuvo que subir a la antena que pusieron en medio de aquel erial y el esfuerzo le ocasionó una hernia. Joseba Urresti, hijo de los Urresti de Ondarroa, y de Paulin y  Miren que, cantaron en el Coro del Gobierno Vasco del exilio Eresoinka y vivieron años exiliados en Venezuela fueron una de esas familias referenciales de la colectividad. Quede constancia del esfuerzo de aquel chaval en una obra colectiva de la clandestinidad vasca.

Jon Mikel, el homenajeado, ahora vive en Olabeaga (Bilbao) con su hija Nere. Tiene otro  hijo en Madrid y otra hija, Ainhoa en Caracas y nietos en Inglaterra y  un nieto, Gontzal, que vive con él y que le cantó a su aitite, con un gusto y voz estupendas, varias canciones que fueron seguidas y aplaudidas por todo el comedor que llenaba la sala del batzoki de Tenderia terminando apagando las dos velas de su 81 cumpleaños.

Y allí estuvimos con sus familiares y amigos. Además de su hija que le bailó el aurresku y su nieto Gonzalo estuvieron Jon Gómez y su esposa Maiteder Barrenetxea, hija de otro ex presidente del Centro Vasco de Caracas, Jose Mari Barrenetxea. También Amaia Agirre, hija de Paul Agirre una de las personas claves de la Txalupa y su marido Iñigo Camino. Iñaki Erkoreka y su esposa Conchi. La viuda y las dos hijas de Juan Mari López Eizagirre un gipuzkoano que llevaba todo lo referente a la mecánica de la Radio y que tenía un troquel en el que el Gordo Inza troquelaba monedas de Sabino y las vendía para sufragar aquel invento. Y  familiares, en total unos 25. En la foto Jon Mikel, Jon Gómez, Iñaki Erkoreka y yo, partícipes de aquel invento clandestino. En la foto colectiva solo falta  Mikel Erkiaga, que salió antes y Santi Aznar, nieto del Consejero Santiago Aznar, quien sacó la fotografía. Y sin olvidarnos  de Tainara, regente del Batzoki que con su equipo hizo un muy buen trabajo y además lo celebró con nosotros con un potente licor brasileño.

Jon Mikel fue recibido en Sabin Etxea hace un mes por el presidente del EBB Andoni Ortuzar y la secretaria de la ejecutiva Mireia Zarate.

En la comida hubo cantos, bailes pero no palabras. No hicieron falta. Jon Mikel es hombre de hacer cosas y hablar poco. Si me dijo que seguía al segundo la situación de Venezuela a través de youtube. Como en tiempos de la Txalupa.