Jueves 14 de junio de 2012
Ya tienen la manera de desviar la atención de lo que verdaderamente le importa al ciudadano que es su día a día, la prima de riesgo, los avales bancarios, la subida del paro y demás. Como en tiempos de Franco y remedando la película Casablanca, «siempre nos quedará Gibraltar».
A García Margallo, ministro de asuntos exteriores se le ha ocurrido llevarle al rey a AIgeciras para homenajear ala Guardia Civilen su “heroica” lucha contra las autoridades gibraltareñas que defienden sus tres kilómetros de costa, frente a las más de ocho mil españolas. Y es que a García Margallo, monárquico de uña en el rabo, le gusta utilizar al rey para estas y otras cosas y que no de malos ejemplos en las demás. Lo llevó a Brasil y Chile en un patético viaje con Emilio Botín vestido de rojo con calcetines blancos y ahora lo usa para responder al viaje del príncipe Eduardo que ha viajado ala Rocapara celebrar con ciudadanos británicos el jubileo a su madre.
Y a la reina Sofía le obligaron a no acudir a la cena oficial en el Palacio de Windsor, algo que a la buena señora le apetecía, pero García Margallo presionó para que no viajara y no fuera en momentos en los que a España le interesa tener amigos y no gente enrabietada. De hecho ha logrado que la prensa inglesa haga continuas chanzas de la familia real, los amoríos del rey con Corina, el juicio a su yerno y demás.
También García Margallo quiso llevarle al príncipe Felipe a un viaje oficial a Melilla, siendo disuadido por el jefe dela Casa Realya que la iniciativa era un disparate que iba a abrir otro flanco en el sur, ya bastante tocado por mil problemas.
Dije en su día y me alegré que José Manuel García Margallo hubiera sido elegido por Rajoy como su ministro de Asuntos Exteriores porque creía que era un hombre inteligente, experimentado y con sentido del humor. Pero sus seis meses en el cargo me dan suficiente información para creer que Moratinos, a pesar de sus resbalones en América, lo hizo mejor. Desde luego no se le hubiera ocurrido utilizar al rey para ir contra la reina de Inglaterra. Moratinos tenía un segundo nivel de colaboradores que estaban todo el día hablando con la oposición, mientras Margallo como el rey sol, es él, solo él y nadie más que él, y solo habla con el cuello de su camisa. Y después el desierto. Que para eso tienen mayoría absoluta. Moratinos no hubiera anunciado dos veces la presentación dela Marca España, para luego decir que la cosa no está madura, sin decir la verdad, que la cosa está podrida. Menuda Marca España se puede hacer con el rey, con Divar, con Rato, con Mafo, con Goirigolzarri y con tantos y tantos impresentables que pululan porla Españacañí para convertirlos en una marca.
En fin. Que estamos como cuando Franco tenía un problema y sacaba a pasear la situación de Gibraltar y decía: “España limita al sur con una vergüenza”, y ponía a toda la prensa a hablar de ello. El problema no se resolvía sino se enconaba, pero lograba por decreto que no se hablara de otra cosa en aquellos antros oficiales.
Y ésto ocurre mientras Mariano Rajoy sigue despreciando al Parlamento. No comparece que para eso tiene mayoría absoluta. Pues que lo cierre. Que Sotogrande está al lado de Gibraltar y se pasa mejor tomando un marianito y no dando explicaciones.
Por eso, como en Casablanca, siempre nos quedará Gibraltar.
No diría usted lo mismo si en vez de ser el Peñón de Gibraltar, los ingleses llevasen 300 años en el Monte Igueldo, contaminaran la Concha con el Bunkering ilegal, y ganaran terreno ilegalmente con rellenos en aguas españolas.
Claro, Mainake, porque en el mismo segundo en que Gibraltar pase a estar bajo soberanía española -suponiendo que algún día eso se produzca de manera pacífica y democrática, que esa es otra-, desaparecerá por arte de magia la contaminación de la bahía y las actividades económicas ilegales. Como en Galicia, territorio de soberanía española donde absolutamente nadie vive del contrabando.
Eso obviando el hecho de que gran parte de la contaminación en la Bahía de Algeciras no se produce solo en la parte gibraltareña, sino también como resultado de una industrialización acelerada y exagerada que el franquismo tuvo que promover para que la economía de la zona no se desplomara tras el atrabiliario cierre unilateral de la Verja en 1969.
No comento lo de «ganar terreno con rellenos en aguas españolas» porque, sinceramente, no tengo ni idea de qué quieres decir con eso.
Y supusieran un impacto negativo de mas de mil millones de euros para las administraciones y ciudadanos de la zona, querido mainake. No se olvide usted de eso. ¿Pero que le importan a Anasagasti los pescadores y comerciantes gaditanos?; pues eso, un pimiento.