Viernes 2 de septiembre de 2016
Habrán ustedes oído hasta la saciedad hablar sobre las bondades de la Constitución española y de su consabida ley electoral y de sus formas de elección de presidente. No ha estado mal para los intereses del bipartidismo que hemos padecido estos años, donde el PP(UCD) y el PSOE se han distribuido el poder por turnos. Sin olvidarnos claro de una ley electoral para las elecciones europeas, la más jacobina de Europa con su circunscripción única porque como nos dicen «todos somos españoles». El glorioso estado de las autonomías gloria y prez de la humanidad, puesto ante el mundo como ejemplo, tiene una sola circunscripción europea frente a la jacobina Francia que tiene diez.
Pero no quería destacar solo esto, sino la falta de visión de los que con una ley electoral como la actual y con un sistema de elección de presidente como el actual están ya preparando las terceras elecciones generales gracias a un PSOE sin liderazgo y a un PP sin capacidad de negociar temas medulares.
Pero en Euzkadi no ocurre eso.
Tras las elecciones del próximo 25 de setiembre tendremos Lehendakari a la primera porque así lo propicia nuestro sistema de elección que dice que en una primera vuelta hace falta una mayoría absoluta, que el candidato puede lograr pactando con otras fuerzas que le den la mayoría, pero si eso no se obtiene, en la segunda vuelta la mayoría requerida es la simple, el que tiene más votos, que en el caso vasco, sin lugar a dudas será Urkullu.
Con todo lo listos que son algunos comentaristas y políticos españoles no sé como no se fijan en lo que pasa en Euzkadi, se ponen las pilas y actúan como aquí.
Mejor les iría y dejarían de ser el hazmerreír de Europa.
No les des buenas ideas Iñaki, que se cuezan en su salsa.
Podría haber dos candidatos y empatar a votos si el quinto partido se abstuviese, es muy difícil pero también se podría dar una situación de bloqueo, o ,¿ está previsto como en la elección de alcalde que fuese el candidato más votado?