Presentado libro “Jarrones Chinos” en San Cugat del Vallés

Viernes 4 de julio de 2014

769.2El jueves 3 de julio cogí de nuevo el avión, la víspera habíamos estado en el Palau de la Generalitá, y llegué a San Cugat del Vallés donde me esperaba Josep M. Valles, que me había invitado a presentar mi libro “JARRONES CHINOS” y a cenar con él y un grupo de amigos para hablar de la situación política ya que con estas cenas y entrevistas quiere hacer un libro que recoja lo que opina cada invitado sobre asuntos de actualidad. Ya han pasado por estas invitaciones Jordi Pujol, Lluis Recoder, Albert Rivera, Quim Nadal, David Fernández… y en setiembre le esperan al president Artur Mas.

Previamente en el claustro románico del Monasterio benedictino, en pleno centro de San Cugat del Vallés, Recoder y yo presentamos el libro. Lluis Recoder es un viejo amigo. Coincidimos en el Congreso 13 años, antes de que LLuis fuera elegido alcalde de San Cugat y posteriormente conseller del gobierno de Artur Mas. Y recordamos vivencias de aquellos años y analizamos el libro y los personajes. Recoder es hombre muy apreciado habiendo hecho una magnífica gestión municipal que es muy recordada habiendo dejado a CIU en quince concejales, de los nueve que tenía cuando asumió la alcaldía.

La sala estaba llena y con gentes de pie y aunque hacía calor, la hora y pico en la que estuvimos, con presentación y preguntas, fue amena e interesante. Posteriormente firmé 24 libros y saludé a la hija de quien había sido nuestro alcalde en Getxo, Barquin.

Tras el acto, en una casa particular y con una temperatura espléndida, en el jardín de una casona trece personas, amigos entre ellos, y al calor de un plato de arroz, me preguntaron de todo y me comentaron como viven el cambio de chip de una sociedad harta de aguantar una situación de tensión por falta de aceptar que en este estado, al inicio de la transición, había tres demandas políticas y no 17. Con todo lo que ha significado para Catalunya no tener una financiación adecuada y no tener el reconocimiento debido a sus apuestas democráticas.

Urdangarin se quejó a Zarzuela por decir que “no era ejemplar”

3 de julio de 2014

728.14El yerno del rey Juan Carlos protestó porque con las palabras sobre su conducta se le condenaba de antemano

«Lo siento alteza, pero no cuento con usted». Con estas palabras un alto cargo de la Casa del Rey comunicó a la infanta Cristina que no la llamarían más para participar en actos oficiales de la Familia Real, como consecuencia de la investigación que el juez José Castro había abierto en torno a los negocios presuntamente irregulares de su marido, Iñaki Urdangarin. La hija menor de Juan Carlos I no lo encajó mal, pero no fue tan comprensivo Urdangarin, que no se explicaba cómo se le daba la espalda cuando en diciembre de 2011 el jefe de la Casa Real, Rafael Spottorno, anunció a los medios de comunicación que el duque de Palma quedaba apartado de la agenda oficial por su comportamiento «no ejemplar». Urdangarin llamó a Zarzuela para quejarse de que con esas manifestaciones sobre su conducta le estaban condenando de antemano.

«¿Y qué pasa con la infanta Cristina?», preguntaron entonces los periodistas. «Ya veremos», les contestó Spottorno. Lo cierto es que desde ese mismo momento Cristina de Borbón también quedó fuera de los actos de representación de la Familia Real. Con esta decisión los responsables de Zarzuela intentaban establecer un cortafuegos y evitar el desgaste que la instrucción del caso estaba provocando a la institución.

Los gestos de Zarzuela para marcar distancias con los duques de Palma no se limitaron a apartarlos de la agenda oficial. En noviembre de 2012 Cristina e Iñaki Urdangarin visitaron en el hospital al rey Juan Carlos, acto que fue desautorizado por la Casa Real. Unas semanas después se eliminó el perfil de Urdangarin de su página web.

Los casi tres años que lleva abierto el sumario del caso Nóos han supuesto un enorme desgaste en el prestigio de la Corona. Ahora, a pocos días de que el juez Castro cierre la instrucción del caso Nóos y decida a qué imputados se debe procesar, la sucesión en la Corona ha conseguido alejar aún más a la infanta Cristina de Zarzuela, pues como hermana de Felipe VI ya no es miembro de la Familia Real.

Rajoy respetará decisión de la Justicia sobre doña Cristina

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha subrayado que respetará la decisión que adopte la Justicia sobre la situación de la infanta Cristina en el caso Nóos, aunque ha recordado las palabras del rey Juan Carlos en las que señaló que «la Justicia es igual para todos».

Rajoy ha sido preguntado por la evolución que puede tener la situación de doña Cristina en el caso Nóos en su comparecencia ante los periodistas en Gdansk antes del inicio de la X cumbre hispano-polaca.

Ha señalado que no hay ninguna novedad al respecto y que él lo único que hará y cree que debe hacer todo el mundo es respetar las decisiones que adopten los tribunales de Justicia así como el posible recurso de las personas afectadas.

«Ahí creo que debemos estar todos, a lo que digan los tribunales, además de recordar aquellas palabras de don Juan Carlos cuando dijo que la Justicia es igual para todos. Así tiene que ser», ha sentenciado.

Los Vascos expresan un desafecto total hacia la Monarquía

2 de julio de 2014

Los vascos expresan un desafecto total hacia la Monarquía. Dos terceras partes no confían en los partidos políticos.

La institución peor valorada en Euzkadi es la Monarquía, según se desprende del Barómetro de Verano realizado por la Universidad de Deusto. Con un exiguo 1,5 sobre 10, la institución obtiene la peor nota, seguida del Gobierno central (1,9), la Iglesia católica (2,1) y los sindicatos (2,6). Tampoco sale bien parado el Ejecutivo vasco, que no alcanza el aprobado, con un 4,3, al igual que las Diputaciones, con un 4. Las 1.000 personas encuestadas por Deusto a través de Internet, con un grado de error del 3,09%, según explicaron los responsables del equipo sociológico del centro, únicamente muestran su respaldo a la Universidad, con un 5,7 y a la Ertzaintza, con un 5,1.

Los partidos políticos tampoco cuentan con la simpatía de la sociedad, dos terceras partes de los encuestados no confían prácticamente nada (menos de un dos sobre 10) en las formaciones, incluso más de la mitad de la población, en concreto un 53%, cree que la democracia podría funcionar y sostenerse sin partidos, frente a un 28% que opina lo contrario. Grave noticia.

El estudio también analiza el impacto de la crisis económica en la sociedad vasca. Los resultados arrojan que un 52% de los encuestados considera que ha descendido de clase social, así como que la política de recortes y austeridad seguirá aunque la economía comience a dar síntomas de recuperación.

Las personas consultadas apuntan que la crisis es ¿estructural» y sólo un 29% espera que sus hijos puedan vivir mejor que ellos, el mismo porcentaje de jóvenes que opinan que sus condiciones serán peor que las que han podido disfrutar sus progenitores.

La pérdida de recursos y capacidad económica se traduce, según el estudio, en que un tercio de los vascos asegura que ha reducido su gasto en alimentación a consecuencia de la crisis, un 30% considera que no compra la cantidad de ropa que realmente necesita, el 24% ha decidido dejar de ir al dentista y sube del 5 al 10% las personas que Un 85% desconoce el Plan de Paz y Convivencia del Gobierno vasco han tenido que reducir sus gastos en sanidad.

Los resultados obtenidos entre los jóvenes también dibujan un panorama desolador a causa de la crisis. El 18,3% de las personas entre los 25 y 34 años se ha visto obligada a regresar a casa de sus padres, mientras que ha creciendo el porcentaje de menores de 24 que renuncia a emanciparse.

Los malos datos también se repiten en el apartado laboral. El 73% de los vascos que no tiene trabajo no espera encontrar uno en los próximos seis meses, así como el 17% de los que tienen empleo creen ¿muy probable» que puedan perderlo en medio año. Una gran mayoría de encuestados, un 77%, considera que la generación de puestos de trabajo corresponde a las medidas que se puedan impulsar desde la administración, mientras que un 16% opina que deberían ser los empresarios los que trabajaran para crear empleo. La mayoría de las personas consultadas mantiene una actitud cada vez más crítica con las empresas. A ello se suma que casi la totalidad, un 91%, apoya las movilizaciones contra los gobiernos.

El Barómetro de Deusto también aborda el sentimiento de identidad territorial y la situación del proceso de paz en el País Vasco. Respecto a la primera cuestión, el estudio arroja que la mayoría de la población, un 41%, se siente tan española como vasca, frente a un 25% que se considera más vasca que española. En los extremos, un 15% opina que es únicamente vasco y un 2%, sólo español.

Respecto al segundo apartado, un 80% de los vascos asegura que en ningún caso se puede justificar la violencia para alcanzar ningún fin político, un porcentaje que ha descendido siete puntos respecto a hace seis meses. Además, una amplia mayoría de ciudadanos, un 85%, desconoce el Plan de Paz y Convivencia del Gobierno vasco, mientras que un 11% considera que los presos de ETA deberían cumplir íntegramente su condena sin ser acercados a cárceles de Euzkadi, frente al 34,2% que aunque opine que deben hacer frente a sus penas, tendrían que ser acercados a prisiones de la comunidad.