¿Qué va ser de la Marca España y de la Cumbre de Cádiz?

Lunes 28 de mayo de 2012

América Latina le ha cogido el pulso a Europa y sabe que ésta no existe ni política ni económicamente. Se vio en su día cuando el mismo Evo Morales, presidente de Bolivia, nacionalizó diversos intereses de varios países europeos y Europa como tal, España entre ellos, no hizo nada. Y es que, Morales sabe que poderoso caballero es don dinero y que los intereses económicos cruzados pueden con cualquier tipo de solidaridad.

La primera conclusión que saco a lo ocurrido en Bolivia es que Europa no existe y que hará bien Felipe González en repetir esta obviedad: “Europa nunca se construirá mientras los estados europeos no cedan soberanía”. Mucho antes lo dijeron los padres fundadores, Monnet, Schuman, De Gasperi y Adenauer, pero es ahora cuando algunos empiezan a darse cuenta que la cosa va en serio.

La segunda conclusión es que España está sumamente debilitada. Con una economía  a punto de ser intervenida, con un paro desatado que se acerca a los seis millones de desempleados, con los sindicatos movilizando la calle, con el gobierno incumpliendo todas sus promesas electorales, con la constatación de haber montado en treinta años un estado autonómico inviable, con una jefatura del estado cuestionada e incluso ridiculizada y en graves aprietos por el caso de la cacería de elefantes y el juicio a Iñaki Urdangarin, con un déficit que no se sabe cómo se va a pagar, España poco pecho puede sacar en plena borrasca.

La tercera conclusión es que aparentemente, perdido el respeto, no se sabe cuál va a, ser el siguiente movimiento contra una empresa española. Todo apunta a Venezuela, que lo ha intentado varias veces y que lo hizo en el estado Yaracuy contra propietarios de tierra canarios, contra la empresa Agroisleña y, en su país, contra Radio Caracas Televisión, pero todo depende de la salud de un Hugo Chávez que no está para grandes sesiones patrióticas sino más bien para grandes sesiones de quimioterapia que lo tienen al borde de la muerte y cercano a unas elecciones a celebrarse el próximo 7 de octubre y que los militares de su entorno no quieren celebrar. Y es en este ambiente donde las pequeñas y medianas empresas españolas y vascas en Venezuela tienen todas las de perder.

La cuarta conclusión parece que la ha sacado el gobierno español después de lo ocurrido con Argentina. Cristina Fernández de Kirchner, presidenta de aquel país nacionalizó YPF, criticó a Repsol por falta de inversiones, sacó a empujones de la sede de YPF en Buenos Aires a los empleados españoles, dijo que no pensaba indemnizar ni con ocho, ni con siete, ni con tres mil millones de euros dicha nacionalización y se rió a mandíbula batiente de las bravatas de los ministros García Margallo y Soria, de la declaración de Rajoy, e incluso de un amago de protesta europeo y norteamericano. Quince días después y ante la inocuidad de la presión, su socio y amigo Evo Morales ha hecho lo mismo, aunque un poco más elegantemente, habida cuenta que la dimensión de YPF nada tiene que ver con Redesa.

Pero esto suena, salvando las distancias, a lo acontecido en noviembre de 1975 cuando moribundo Franco, su “hermano” el rey Hassan II puso a caminarla Marcha Verdey se apoderó a la brava del Sáhara Occidental. Y hasta hoy. En política internacional no hay amigos ni enemigos permanentes, solo intereses. Ya se ve.

Ante este panorama el gobierno  Rajoy que se las veía muy felices para sacar a mediados de mayo la “Marca España”, como panacea y ariete de venta de un estado y un país con sus empresas e intereses, ve que todo el invento hace agua por todas partes fundamentalmente porque la moneda española, hoy por hoy, no cotiza en ningún mercado. Y, en segundo lugar, ve con preocupación que su gran Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno a celebrar en Cádiz, tiene la misma pinta de lo que sucedió con la última celebrada en Paraguay. Cumbre a la que no fueron ni la mitad de los presidentes, mucho más ahora con una Argentina, Bolivia, Venezuela y Cuba en clave beligerante, un Brasil que se lava las manos y un México en campaña electoral. El Bicentenario dela Constituciónde Cádiz que se llevaba preparando con mimo para tratar de reproducir los éxitos dela Cumbrede Salamanca, comienza a naufragar como aquel Titanic que tras el choque contra el iceberg pensó que la cosa no iba con ellos.

Y en este duro contexto tan negativo y donde nadie se atreve a volver a repetir aquello de «¿Por qué no te callas?», la situación de las empresas españolas y vascas que ante la parálisis europea veían a América como su flotador, están muy preocupados. Lógico. Pero poco puede hacerse mientras Europa no sea Europa. Es la clave.

Para paliar esta asimetría, sería necesario poner en marcha un código internacional que no parta del principio de voluntariedad y que posea un carácter imperativo, coercitivo, sancionador y exigible ante los tribunales competentes. En esa misma línea, habrían de crearse tanto un Centro de Empresas Multinacionales -adherido a Naciones Unidas y gestionado entre empresarios, gobiernos, movimientos sociales y sindicatos; que se encargara de analizar, investigar e inspeccionar las prácticas de las transnacionales sobre el terreno, lo que permitiría contrastar y evaluar la información unilateral que actualmente se recoge en las memorias de Responsabilidad Social Corporativa como un Tribunal Internacional para las multinacionales.

Con todo ello, nos encontraríamos en disposición de empezar a afrontar uno de los grandes desafíos en la era de la globalización: medir los verdaderos efectos sociales, económicos, laborales, ambientales y culturales de las actividades de las empresas transnacionales por todo el planeta.

Republicanos en Bilbao

Sábado 26 de mayo de 2012

Tras la mesa redonda celebrada en Bilbao al pasado jueves 17 de mayo sobre “Monarquía o República”,  me obsequió con este libro su autor Jon Pencha, doctor en Historia porla UPV, un estudioso del movimiento político republicano al que ha dedicado su tesis doctoral trabajando con Joseba Aguirreazkuenaga y Mikel Urquijo. También desarrolla su labor investigadora en torno a la historia parlamentaria. Le agradecí su obsequio. Me comentó que preparaba una exposición sobre el primer Consejero de Sanidad del Gobierno Vasco, Alfredo Espinosa, fusilado ahora hace 75 años y que fue además Gobernador y Concejal de Bilbao.

Este libro aborda el estudio del republicanismo en Bilbao entre 1868 y 1937, es decir, desde su aparición en el Sexenio De­mocrático hasta su extinción tras la caída de Bilbao ante las tropas franquistas. Para tal fin, el autor divide su estudio en cinco apartados. En el primero de ellos analiza la evolución político-ideológica del repu­blicanismo bilbaíno. Se trata de un estudio pormenorizado de todos y cada uno de los partidos que conformaron el panorama republicano bilbaíno, prestando atención a su fundación, su evolución, su ideología, su organización y su posterior desaparición. Seguidamente, se realiza un acercamiento a las formas de sociabilidad republicanas, sus organizaciones paralelas, esto es, casinos, juventudes, organizaciones laborales, organizaciones femeninas, escuelas laicas y masonería. El tercer apartado está dedicado al estudio de la élite política republicana bilbaína, para el cual se ha realizado un estudio prosopográfico de los 173 personajes que ostentaron algún cargo público -concejales, diputados provinciales y diputados a Cortes- por Bilbao y su distrito entre 1868 y 1937. En el cuarto apartado se realiza un estudio de sociología electoral, con el fin de analizar el componente social del voto republicano. Por último, el autor se adentra en la práctica política republicana en las instituciones -Ayuntamiento y Diputación Provincial- para examinar cuáles fueron los temas que más preocuparon a los republicanos bilbaínos.

 

Cuando Carmen Calvo no quiso saludar a Luis Iriondo

Viernes 25 de mayo de 2012

Hace un tiempo en la sesión de control parlamentario al gobierno, el senador Maqueda le preguntó a la entonces ministra de Cultura Carmen Calvo, cuando iría el «Gernika» a Gernika. Le dijo que en la tribuna estaban el alcalde de Gernika, el superviviente Luis Iriondo y el concejal de Cultura del ayuntamiento de esta Villa.

Eso la irritó. Dijo que ya había contestado cuatro veces a la misma pregunta y que el reglamento le obligaba a responder al senador, no a la gente que estaba en la tribuna. Y dijo que el Gernika no se movería del Centro de Arte Reina Sofía porque Picasso dijo que el cuadro volvería a España. ¡Olé!.

Después salió escopeteada. No quiso recibir la carta que el superviviente Luis Iriondo le iba a entregar. No solo actuó como una mal educada sino como una pésima política incapaz de controlar sus cabreos.

Es que el asunto la alteró.

Si para la ministra, Madrid es España; ¿lo es también Gernika? Si no lo es, sería bueno que nos lo dijeran para aclarar algo el panorama.

Luego fuimos a comer al Asador Real.

Luís Iriondo es hermano del jugador del Athletic, Rafa Iriondo y nos contaba que después de los partidos de fútbol de aquellos tiempos aquel grupo se quedaba en San Mamés para seguir repitiendo jugadas y que su hermano cobraba mil pesetas.

Sobre el cuadro nos comentó que el pintor Ucelay le decía que seguía siendo delegado de Cultura del Gobierno Vasco de 1936 pues nadie le había cesado y Ucelay le contó la vinculación vasca con la obra de arte.

Iriondo da clase de pintura y dibujo en Gernika a sus 84 años y quería que el control al gobierno fuera el viernes para él no tener que dejar un solo día de clase. Le dijimos que el control se produce los miércoles y a Madrid nos vino para asistir incrédulo a todo lo que oyó de la ministra de cultura, una impresentable de tres al cuarto, que irrespetó a una víctima del bombardeo.

«Si tienen miedo a que se descascarille ya le daremos un retoque, nos comentaba Iriondo con gracia, como han hecho con la capilla Sixtina en Roma». Y es verdad. Si el hombre llega a la luna, ¿como no va a ser posible que el Gernika vaya a Euzkadi?

Y es, que efectivamente Madrid es España pero Gernika parala Sra. Calvono lo es. Ahí está la madre del cordero. Por eso no lo llevan. Es el extranjero.

Las bombas para Gernika. El cuadro en un Museo con nombre de Reina.