El Gobierno apoyará una petición de indulto para Paco Larrañaga.

Preocupado por la situación de estancamiento en la prisión de Martutene de Paco Larrañaga le pregunté a la ministra Trinidad Jiménez el martes 5 de abril si podían ellos como gobierno solicitar el indulto. Y me contestó que sí. Ojalá lo hagan pronto y el chaval pueda rehacer su vida. El careo fue este:

El señor Presidente: Pregunta del senador Anasagasti.

El señor Anasagasti Olabeaga: Muchas gracias, señor presidente.

Señor presidente, usted recordará como en la anterior legislatura viajó a Manila y le entregó a la presidenta Macapagal una carta interesándose por la situación de Paco Larrañaga. En la anterior legislatura también se realizó un viaje de una delegación parlamentaria y estuvimos con Paco Larrañaga en la prisión de Manila.

Este no es un caso cualquiera, es un caso muy seguido por la opinión pública, y tenemos ahora una cierta preocupación, señora ministra. Paco Larrañaga se encuentra interno en el centro penitenciario de Martutene, donde fue ingresado, tras ser trasladado desde Filipinas a Madrid el 6 de octubre de 2009, para cumplir una condena de cuarenta años en prisión. Larrañaga fue condenado por las autoridades filipinas a dos condenas de cadena perpetua por la comisión de los delitos de violación y asesinato de una mujer y la desaparición de otra.

Al no existir condena a cadena perpetua en España, la Audiencia Nacional convirtió las dos condenas en una de cuarenta años de prisión. Por eso, a nosotros nos preocupa la situación estancada de Larrañaga ante la posibilidad de concederle un indulto. El artículo 11 del Tratado sobre el traslado de personas condenadas entre la República de Filipinas y España, hecho en Madrid el 18 de mayo de 2007, señala que solo el Estado de condena, es decir Filipinas, podrá conceder el indulto, la amnistía o la conmutación de la pena o medida de seguridad conforme a su Constitución y a sus leyes. Sin embargo, el Estado de cumplimiento podrá solicitar del Estado de condena la concesión del indulto, la amnistía o la conmutación mediante petición fundada.

Por lo tanto, únicamente Filipinas puede conceder el indulto —ya lo sabemos—, aunque se puede solicitar por parte de España, y eso es precisamente lo que nosotros le estamos solicitando en esta pregunta. Hemos consultado con Instituciones Penitenciarias el caso del señor Larrañaga y nos han informado que cumple los dos tercios el 1 de julio del año 2021, las tres cuartas partes el 3 de septiembre de 2024 y que tiene como fecha de cumplimiento definitivo el 28 de septiembre de 2034.

Por ello, señora ministra, le preguntamos a usted si el Gobierno baraja la posibilidad de solicitar un indulto, una amnistía o la conmutación de la pena mediante petición fundada en Filipinas en relación con el preso Paco Larrañaga.

El señor Presidente: Gracias, señoría.

Tiene la palabra la ministra de Asuntos Exteriores.

La señora Ministra de Asuntos Exteriores y de Cooperación (Jiménez García-Herrera): Muchas gracias, señor presidente.

Señoría, sé muy bien que no es la primera vez que se interesa su señoría por el caso de Francisco Larrañaga. Sé que se han hecho innumerables gestiones, tanto desde esta Cámara como desde el Congreso de los Diputados, así como desde el Gobierno. Sé también que tanto usted como su grupo siempre han valorado muy positivamente las gestiones que el Gobierno ha llevado a cabo hasta ahora y, de forma particular, las acometidas por el anterior ministro Moratinos.

De hecho, como sabe y como ha señalado, fruto de esas gestiones y también de la labor desarrollada por muchos senadores y diputados, como por distintas asociaciones y la sociedad civil española en su conjunto, el pasado 6 de octubre del año 2009 Francisco Larrañaga fue trasladado desde Filipinas, al amparo del Tratado bilateral sobre el traslado de personas condenadas, a fin de proceder al cumplimiento de su condena en España.

Se trató de un esfuerzo colectivo que valoramos y apoyamos de una manera muy positiva. Y quiero decirle que en este tiempo no nos hemos olvidado de Francisco Larrañaga y hemos continuado interesándonos por su caso. De hecho, desde entonces en distintas ocasiones el Gobierno de España ha transmitido a las autoridades filipinas nuestro apoyo a la solicitud de indulto que los abogados del señor Larrañaga han formulado tras su llegada a España. Sin duda, coincidirá conmigo, como ha señalado en su intervención, en que debemos ser extremadamente respetuosos con el sistema y la soberanía judicial de terceros países y, en este caso particular, respetar también el contenido del Tratado bilateral firmado entre España y Filipinas.

Como su señoría ha señalado, solo el Estado de condena puede conceder el indulto, la amnistía o la conmutación de la pena o medida de gracia conforme a su Constitución y sus leyes.

Por tanto, señoría, sí apoyamos la solicitud de indulto y al mismo tiempo que mostramos el máximo respeto a la soberanía del sistema judicial en Filipinas.

Muchas gracias.

El señor Presidente: Gracias, señoría.

Tiene la palabra el senador Anasagasti.

El señor Anasagasti Olabeaga: Gracias, señor presidente.

Señora ministra, interpreto que el Gobierno español ha solicitado el indulto o la amnistía en los términos que la ley establece y según las posibilidades de actuación. Esa sería una gran noticia, señora ministra. Yo tengo aquí una serie de datos que no tengo tiempo de leer, pero hay sobre todo una cuestión muy importante. Se trata de un dictamen del Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas que sostiene la violación de más de una decena de artículos en el juicio llevado a cabo en Filipinas y un resumen de todo el caso de Paco Larrañaga escrito por los 35 testigos que no pudieron testificar en su juicio, así como declaraciones juradas firmadas por todos los testigos y un certificado emitido por el Departamento de Justicia de Filipinas de fecha 3 de noviembre de 2010, en el que se confirma…

El señor Presidente: Señoría, termine, por favor.

El señor Anasagasti Olabeaga: Sí, señor presidente, termino.

Se confirma la pena máxima a ejecutar. Él ya ha cumplido la mitad de la condena, y por tanto, solicitamos, señora ministra, ese empujón importante y esa solicitud de amnistía que interpreto que ya han formulado.

Muchas gracias, señor presidente.

El señor Presidente: Gracias, señoría.

Tiene la palabra la señora ministra.

La señora Ministra de Asuntos Exteriores y de Cooperación (Jiménez García-Herrera): Muchas gracias, señor presidente.

Señoría, lo que sí quiero señalarle es que el Gobierno apoya la petición de indulto que han formulado los abogados del señor Larrañaga. Nos hemos interesado en numerosas ocasiones por la concesión de dicho indulto ante las autoridades filipinas, porque, como usted sabe, solo estas, en función de su legislación y su Constitución, pueden concederlo. Y lo que ha hecho el Gobierno de España es dirigirse a las autoridades filipinas apoyando la petición de indulto que han formulado los abogados del señor Larrañaga, que son quienes tienen competencia para hacer tal solicitud.

Por tanto, señoría, le reitero que este Gobierno se ha interesado en todo momento por la suerte del señor Larrañaga. Gracias al esfuerzo de todos, de un esfuerzo colectivo, hemos conseguido que se conmute la pena de muerte y que venga a España  a cumplir su condena, y en este momento estamos en el proceso de apoyar la petición de indulto que han formulado sus abogados.

Seguiremos prestando la máxima atención a este asunto, tal y como lo hemos hecho desde el primer día.     

Muchas gracias.

Mala entrevista de Ana Pastor a Solana

Ana Pastor es una buena profesional de TVE que en la actualidad dirige los «Desayunos de TVE». Un día de estos se fue a Irán y le hizo una memorable entrevista al presidente Ahmadineyad, y le hizo una gran entrevista que tuve la suerte de seguir de cerca desde el despacho del Senado. Valiente, incisiva, con preguntas periodísticas, sin arredrarse. Todo un documento. Y pensé era una periodista independiente.

Pero hoy le he visto entrevistando a Solana y me ha hecho pensar que de independiente, nada. Una buena profesional pero del PSOE. ¡Qué entrevista más mala!. Complaciente, sin ninguna pregunta incisiva, aguantándole a Solana su yoismo y su no querer entrar en valoraciones sobre su sucesora, permitiendo hablase bien de Zapatero cuando lo odia, no recordándole que es el mismo Solana aquel que dijo «Otan, de entrada NO» a como secretario general de este organismo bélico, bombardear Belgrado, el Solana inconsistente y ambicioso que teniendo delante una periodista flete logro un publirreportaje. Una pena. Me ha decepcionado Ana Pastor. Pensé era de otra fibra. Con la cantidad de cosas que le podía haber preguntado y se conformó con una faenita de aliño. ¡Mal Doña Ana, muy mal!. Eso no es televisión, eso es propaganda.

Candidatos y la posibilidad de un outsider

En Venezuela, la oposición trata de unirse para las elecciones presidenciales frente a Chávez. Y ayer, Carlos Blanco, un magnífico columnista publicaba un artículo en El Universal de Caracas, barajando las posibilidades de unos y del otro. Lo leí y me dije. ”Parece que está hablando de España”. E hice el juego de quitarle el nombre de Chávez, ponerle a Rajoy, Rubalcaba y Chacón y ha salido ésto:

La zafra de candidatos está en su apogeo. Buena y mala señal. Buena, porque representa la diversidad del campo, sobre todo cuando se tiene enfrente a un candidato único, inamovible, irremplazable, que estima que quien ose pensar en cambiarlo -lo cual incluye a los suyos- es enemigo de la patria. Mala, porque parte de la abundancia está regida por excelentes opiniones que varios aspirantes tienen sobre sí mismos, lo que en el mejor de los casos es un abuso de la vanidad y un exceso de autocondescendencia. Ver a Carme Chacón.

Se discute más sobre nombres que sobre las características que debería tener. Los nombres tienen la ventaja que le dan carne y hueso (a veces mucho hueso y poca carne) a una política, pero una aproximación sobre las condiciones del candidato puede permitir una deliberación más apropiada sobre el futuro. Dada la corrupción del lenguaje imperante, debe advertirse que en castellano cuando se habla de «el candidato» el hablante se refiere simultáneamente a los géneros masculino y femenino. No se incurrirá en esta columna en la barbaridad tan cara a próceres como Zapatero que no saben de estas cosas y se consideran obligados y obligadas a decir candidato y candidata, hombres y mujeres, periodistas y periodistos.

Errores. Hay precandidatos que cometen errores elementales sobre los cuales alguien, de espíritu caritativo, debería advertir. Uno de los más comunes deslices es considerarse particularmente apto para el cargo sin precisar qué elementos se requieren para ejercerlo. La ambición personal no es una buena medida para la capacidad de ejercicio de un cargo tan exigente. Suele ser frecuente el ejercicio de la sobrevaloración. Los corchos son especialmente diestros en flotar pero es la falta de densidad la que se los permite. Experticias en la nada, en cómo discursear sin decir, en frases ampulosas falsamente memorables, no conducen a puerto alguno. Caras circunspectas que se imaginan a sí mismas como El Pensador de Rodin y sólo reflejan estreñimiento terminal, tampoco.

Otro error frecuente es el que ahora, en tiempos social-demócratas, se comete. Se contrata una encuestadora cuyos dueños funcionan simultáneamente como analistas políticos. De día son analistas que ponderan las virtudes del candidato y de noche le cobran como cliente. No hay que hablar de ética en estos casos no vaya a sufrir el concepto, pero sí de maniobras que un Rubalcaba llamaría «mediáticas». Estos errores implican operaciones costosas de opinión, fabricaciones endebles, incapaces de aguantar la arremetida del líder Rajoy.

También hay el fallo de pensar que el dinero lo es todo. Ocurre cuando el candidato se dedica a la innoble tarea del martillo indiscriminado para abrevar recursos, y no hay límites en apelar a contratistas, aseguradores, y otros factores para afianzar una operación sin sustento en las condiciones políticas.

Tampoco parece funcionar esa idea vendida por unos vivos que asesoran a la oposición y también al Gobierno, según la cual no atacar a Zapatero es lo que permite trasegar hacia este lado la simpatía de los socialistas. Esos asesores se hacen los locos con lo que ha sido la principal debilidad opositora: no se le ha visto como alternativa creíble de poder desde hace varios años. Enfrentarse a Zapatero no quiere decir usar su lenguaje procaz, no significa insultarlo ni usar su vocabulario de albañal; es denunciarlo, no darle cuartel, exigir su renuncia, luchar por su reemplazo, no dejarse acoquinar por las acusaciones de golpistas que producen ese extraño fruncimiento en la voluntad de algunos dirigentes.

No basta el dinero ni las ganas sino la capacidad de representar una demanda real. Sólo una alternativa de poder logrará atraer a los vacilantes, que jamás se constituyen en alternativa de poder.

Condiciones necesarias. Una condición indispensable es un elevado nivel ético. Se requiere una persona que sea realmente honrada y que lo refleje. No alguien que pueda ser acusado de disponer ilegalmente de dineros públicos o de los proporcionados por comisionistas para financiar su entrada en escena. No es fácil, dadas las restricciones que la persecución ha impuesto a los disidentes, pero es una obligación moral. El presidente del 2012 será alguien que se parezca más a un abnegado misionero capaz de sacrificarse por el prójimo que a un delirante oferente de promesas.

Debe recordarse que el contendor es un ciudadano llamado Rubalcaba que puede tener de todo, menos escrúpulos. Empleará todas las armas. Apelará a cualquier recurso con tal de aplastarle la cabeza a su adversario. Es capaz de todo y sólo lo detiene la fuerza y la reciedumbre de quienes se le enfrenten.

Una característica esencial que debe tener el candidato es la competencia intelectual. No que parezca que maneje los temas para unas declaraciones ocasionales a los medios, normalmente dictadas por asesores. No. Se requiere competencia en los grandes temas sobre todo para saber a quienes convocaría a formar parte de su gobierno. Quien no sabe de los asuntos llama a sus incondicionales; quien sabe de los asuntos llama a los idóneos. Un líder se rodea de colaboradores a los que estima mejores; un mediocre se rodea de infelices para sobresalir.

El candidato que se necesita no es el calculador que quiere ser candidato, pero que si no es escogido entonces quiere tener también el chollo asegurado por si pierde el chivo. No es un egoísta sino alguien que se arriesgue a perderlo todo.

¿Dónde está el candidato? Ya hay varios en la plaza. Los escarceos han comenzado. La fecha de las primarias está asumida como una inmensa batalla cuando en realidad es un detalle menor porque cualquier fecha tiene ventajas y desventajas. El verdadero problema es saber qué hacen los precandidatos para enfrentarse a las condiciones electorales. Conviene saber qué hacen para vincularse a los conflictos sociales. También es indispensable saber qué hacen para entender que el mundo ni empieza ni acaba en la pequeña mesa que los congrega con exclusividad.

Es posible que el candidato sea uno de los que ya ha mostrado sus ganas. Sin embargo, no es descartable que no haya asomado todavía. Es posible que la voluntad de cambio que carbura en el país pueda acumular fuerza suficiente para un outsider.

Un candidato opositor que se haya sumado a las reglas del juego impuestas por Zapatero terminará haciéndole el juego. El candidato tiene que oler a ruptura, a novedad real, a cambios sin pedir permiso, a arrojo; al mismo tiempo a capacidades, experticias, talento, ánimo de entendimiento. ¿Quién puede ser?.  Dígalo usted.

(Trabajo adaptado de Carlos Blanco)