La increíble postura antivasca de Kepa Aulestia

Kepa Aulestia

Leí en La Vanguardia del martes 28 un insólito artículo de Kepa Aulestia titulado SINGULARES. Venía a decir que el Estatuto Vasco es singular pero se está cumpliendo a base de dar apoyos puntuales al gobierno central de turno con lo que al seguirse éste sistema la singularidad decae y lo que es bueno para Euzkadi, debe ser bueno para todos. No sé si lo escribe para agradar al público catalán de La Vanguardia que reivindica ahora lo que sus dirigentes no hicieron en 1979.

Lo extraño es que lo diga Kepa Aulestia, ex pm, ex dirigente de Euskadiko Ezkerra, ex dirigente de Auñamendi, ex redactor del Pacto de Ajuria Enea que pedía el cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika. ¿Se pueden dar tantos saltos acrobáticos en la vida?. Parece que sí.

Visto lo visto, no me extrañaría que con el tiempo le veamos a Arnaldo Otegi en el PSOE como lo estuvo Mario Onaindia. Leído lo que hemos leído de Aulestia, se ve que esta izquierda caviar, acaba siempre en el españolismo.

Y para que se vea que no invento nada reproduzco la manera como terminaba Aulestia su escrito:

“En este estado de cosas decae el argumento de que el Concierto y el Convenio económicos deben ser para siempre privativos de Euzkadi y de Navarra. «La Constitución ampara y respeta los derechos históricos de los territorios forales», pero aunque su disposición adicional primera sirviera de percha para el afianzamiento de una autonomía financiera y fiscal tan singular, el pasado no puede convertirse en causa para negar el acceso a tal prerrogativa a las demás comunidades autónomas. El problema es que la eventual extensión del sistema de Concierto o Convenio y cupo, tal cual es aplicado en el caso vasco y navarro, subrayaría de tal forma las diferencias territoriales que impediría los mínimos de cohesión social en que se basa el Estado constitucional. Dicho con otras palabras, vendría a demostrar que la situación de Euzkadi y de Navarra es privilegiada, y estas dos comunidades no participan en los flujos de solidaridad que tienden a igualar a todas las demás. Algo que sólo podría mantenerse mediante un sistema de Concierto y Cupo generalizado tan corregido que tendría poco que ver con el actual modelo de financiación vasco o navarro. En este sentido, cabría concluir que el posible acceso de Catalunya a un régimen de concierto dependería de que Euzkadi y Navarra estuvieran dispuestas a compensar su privilegiada posición con una mayor aportación a la solidaridad”.

Lamento que Aulestia en lugar de divulgar la singularidad del Estatuto Vasco y de su por qué, se haya entregado con armas y bagajes al café para todos y  a quitarnos argumentos en la defensa de lo vasco en Madrid. Que un señor que estuvo en ETA considere ahora el Estatuto de Gernika y el Concierto un privilegio, nos da la medida moral, política y humana de esta gente que encima pontifica. Y esto tiene un nombre muy feo que empieza por T.

La diferencia entre Chávez y Mujica

José Mujica

He leído algunos comentarios a mi post sobre la rueda de prensa de Hugo Chávez el lunes en Caracas valorando las elecciones legislativas del pasado domingo a las que asistí como “Acompañante» invitado por el CNE (Consejo Nacional Electoral). En estos comentarios críticos se valora positivamente al presidente Hugo Chávez por su coherencia combativa. No coincido con ésta apreciación.

La democracia es un régimen de opinión pública, y además de respeto a las minorías, suponiendo que haber obtenido la mitad del resultado electoral sea propio de una minoría. Todo lo contrario. Pero mi crítica, entre otras, es a las formas utilizadas. Chávez desconoce al adversario al que ni respeta.

La oposición está nucleada alrededor de la llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) a la que Chávez llama la Mesa de la Ultraderecha sin el menor atisbo de respeto. Pero no fue solo eso. Había que verle con el chándal de la bandera venezolana puesto, delante del cuadro de Simón Bolívar y de otra bandera, con todo su gobierno que de manera sumisa le reía las gracias como si en lugar de ministros tuviera junto a sí a mayordomos.

Y además solo permitió cuatro preguntas. Tres a medios cautivos y una a una periodista de un medio francés que se le ocurrió preguntar el por qué habiendo tenido el mismo resultado Chávez tenía treinta diputados más. En mala hora. Le reprendió, se rió de ella, y al final no le contestó, tras faltarle al respeto. Si esto es la síntesis del socialismo bolivariano, me quedo con los que él llama “escuálidos”.

Frente a eso, tenemos el caso del presidente de Uruguay, José Mujica, antiguo Tupamaro encarcelado y curtido en mil batallas. Éste dijo a Veja que los gobernantes no deben responder a las críticas de la prensa, sino «soportarlas», porque «si reaccionan, pierden dos veces».

En su opinión, también «los periodistas deben intentar actuar con honor» para que «después cada lector o telespectador» interprete «lo que vio o leyó», desde su propia «subjetividad».

Según Mujica, «cuando un Gobierno se muestra más tolerante con la diversidad, ayuda a formar una prensa respetuosa», pero si opta por «radicalizar sus políticas, se va todo al diablo» y «la cosa se pone peligrosa»

Me quedo pues con este presidente civil ex Tupamaro y su concepto de la democracia que con un Chávez tan falto de educación democrática.

Solana reivindica la política

Javier Solana

En la Biblioteca Nacional se presentó el martes el libro «Reivindicación de la Política. Veinte años de Relaciones Internacionales» de Javier Solana en conversación con Lluis Bassets.

Javier Solana (Madrid, 1942), a partir de la victoria socialista en 1982, fue ministro en todos los gobiernos de Felipe González. De modo sucesivo ocupó las carteras de Cultura, Educación y Ciencia y Exteriores, además de ejercer como portavoz. Entró en el sanctasanctórum de las instituciones anglosajonas al ser elegido secretario general de la OTAN e instalarse en Bruselas el 18 de diciembre de 1995. En 1999 hizo la mudanza sin cambiar de ciudad y pasó a ser Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exte­rior y de Seguridad Común (PESC) hasta diciembre del 2009.

He escrito aquí el aprecio que me merece este profesional del abrazo: ninguno. Del marxismo pasó al grouchismo, de la ética a defender el Gal, de la «Otan de entrada No”, a secretario general y a bombardear Belgrado, de republicano a hacer reverencias en su recepción del Toisón de Oro y todo eso revestido del aura de hombre de estado. Para mí un perfecto hombre de plastilina cuya única ideología es el poder por el poder. Lo describe bien la secretaria de todos los presidentes que han pasado por la Moncloa. Esta semana ha dicho.”Para él, no existíamos”.

Reivindica ahora la política. Muy bien. Le falta un detalle. Eso hay que hacerlo desde la sindéresis y la ética. Y Solana no tiene una cosa y carece de la otra. Pero es un santón del PSOE. En resumen, que no pienso comprar su libro. No me merece el menor respeto. Me cargan estos políticos profesionales que se quieren tanto a si mismos y que una vez jubilados no ponen su experiencia al servicio de ninguna causa, sino de su ego.