Jueves 12 de noviembre de 2015
He estado en el programa de mediodía de ETB «En Jake». Lo dirige Xabier Lapitz. Y nos ha tocado seguir simultáneamente lo que ocurría en el Parlament de Catalunya con la segunda votación a Mas, perdida por éste. Además de Lapitz estaban en la Mesa Ekain Rico, Gorka Angulo, Pelayo Serrano y Teresa Toda. A Teresa no le había visto desde 1990, en el Congreso, cuando le mataron a Josu Muguruza. Era la corresponsal de Egin. Después ha estado encarcelada y ahora jubilada acude a tertulias y se mueve en colectivos. Tengo buena opinión de ella como mujer hormiga trabajadora y que se prepara bien las cosas.
En relación con Artur Mas, le he visto a este hundido en su escaño. Creo que no ha medido bien las fuerzas. Alguien no le ha dado una buena información. Y no sé cómo se ha metido en semejante agujero sin escalera escapatoria. Quedarte en manos de un Grupo Antisistema como la Cup no se le ocurre ni al que asó la manteca. Con esta gente no se puede ir ni a heredar. Y ha ido y este error, este inmenso error le ha debilitado en su estrategia. Y ERC en el fondo, se frota las manos.
He recordado lo que comentaba Xabier Arzalluz: «El pequeño tiene que ser inteligente». Pero el que ha diseñado este pulso, no ha sido inteligente.
Quienes hemos conocido aquella poderosa CIU y vemos los destrozos que ha sufrido gracias a una estrategia, no entendemos demasiado lo que está ocurriendo.
Convergencia deberá refundarse. Ha roto la coalición con Unió que llevaba funcionando desde 1979 y Esquerra no quiere ir con ellos conjuntamente ahora en las próximas elecciones legislativas.
Y, para colmo, y lo peor, le están haciendo la campaña gratis a Rajoy. Este ya no habla de la recuperación económica. Todo es ahora fortalecer la Unidad de España, mientras el PSOE hace el ridículo como perrito faldero con declaraciones increíbles de Sánchez y de los presidentes de Castilla La Mancha y de Extremadura. Y no digamos nada de Susana Díaz.
Nada nuevo bajo el sol de otoño. Ya lo hicieron con Ibarretxe. Se pusieron de acuerdo Zapatero y Rajoy y ni le admitieron a trámite la reforma estatutaria.
¿No había otro momento para semejante pulso?.
Todo ésto te lleva a la conclusión que España, como Nación de Naciones, como les gusta identificarse, no existe. Existe el estado español, duro y patriotero con partidos «vertebradores». Nunca asumirá que es, o debería ser, en todo caso, una Nación de Naciones.
Para eso deberían cambiar varios chips y funcionar democráticamente.
No lo harán.
En Madrid, la inteligencia española, no opina. Embiste. Le llama a lo que está ocurriendo en Catalunya, «Golpe de Estado».
E insisten. Aquí hace falta «cirugía» no «cataplasmas».
Y ¿quién elige a los miembros del Tribunal Constitucional?. A un árbitro casero que actuará siempre defendiendo la España Una, Grande y no Libre.
Cambiaron la ley para que pudiera actuar coercitivamente en un pis pas y ahora actúan ad hominen y con una rapidez inusitada. No guardan ni las formas.
Y encima nos enseñan al Rey como para decirnos que está preocupado y que está ahí para lo que sea. No para solucionar nada, sino para que España no se rompa.
Nada que ver con Cameron. Que encima quiere un referéndum para salirse de Europa.
Confío que las aguas vuelvan a su cauce y, la estrategia se recomponga, Mas se fortalezca y el proceso avance democráticamente.
Pero lo de este jueves ha sido duro.
No hay palabras para describir lo ocurrido en Paris. El horror del terrorismo paraliza a la sociedad. Y desde el primer momento todas las televisiones europeas se pusieron en cadena. No era para menos.