Los diputados y senadores del PP, ante algo que haga referencia a Euzkadi en los debates de las Cortes, siguen las órdenes de Rajoy y no de Basagoiti, quien a pesar de ser un bocazas, pinta menos que Maximino en Haroi. Lo vimos en el Blindaje del Concierto, lo acabamos de ver en el cambio de la grafía de los nombres de los territorios vascos. Por su parte los diputados y senadores del PSE, hacen lo mismo. Su jefe de filas es Toño Alonso y no Pastor. En verdad, poca diferencia.
Los únicos que barremos para casa somos los diputados y senadores del PNV. Es nuestro ámbito de actuación y lo que queremos es completar el Estatuto de Gernika, y por eso aprovechamos cualquier oportunidad legal. todo es legal, para reforzar a Euzkadi. Nos eligen para ello. Y lo hacemos. A la menor oportunidad, chutamos a gol. Los que actúan ilegalmente son ellos que mantienen el estatuto sin cumplir, mientras UGT y CC.OO solo hablan del peligro de que rompamos la Caja Única. No de cumplir la ley.
Pasó el miércoles 22 de junio. El Pais lo titulaba así: ”El PNV logra arañar más poder para los sindicatos nacionalistas”. No decía para el PNV, sino para los sindicatos nacionalistas, es decir ELA y LAB. ¿Por que?. Hemos logrado en Madrid volver a la situación de 1994 cuando conquistamos con Felipe González crear los convenios autonómicos, para los que estaban excluidas materias de competencia estatal como la movilidad y la seguridad en el trabajo, entre otras. Pero ante la nueva negociación colectiva se pretendía que prevalecieran los convenios estatales. El PNV ha logrado manteniendo el pulso hasta el final y gracias a que Zapatero tiene el agua al cuello, logramos se eliminara esa expresión que exige acuerdo previo y en segundo lugar reducir el listado de materias excluidas de esos convenios autonómicos. Todo un éxito. No es un marco autónomo de relaciones laborales pero se le acerca. La partida de póker se ganó. Dijimos que íbamos a votar negativamente y CIU se sumó al carro y, enterado el PP, los que se iban a abstener, cambiaron el voto al No. Se iba a armar y, en el último segundo del último minuto, cambió la cosa. Nosotros defendíamos Euzkadi. El PP que cayera el gobierno. CIU, se apunta a lo que sea. Y el acuerdo se logró. A Zapatero le pusieron a bajar de un burro y, a nosotros, a bajar del otro. Queríamos romper España.
Tan es así, que la caverna puso el grito en el cielo. ”Se rompe España”. La Razón clamaba en su editorial: El resultado del mercadeo no es baladí, pues el gobierno abrió un poco más la puerta de la desvertebración en las relaciones laborales al introducir un nuevo factor territorial al ya por si complejo marco de la negociación colectiva”. ”Es una amenaza a la unidad del mercado laboral” afirmó el experto español en Derecho del Trabajo Iñigo Sagardoy. En su opinión, hay otras dos derivadas del pacto PSOE-PNV ”Un mayor poder para los sindicatos autonómicos y un estímulo a que se firmen convenios de ámbito regional, que eran casi inexistentes hasta ahora”.
Podía seguir transcribiendo opiniones como éstas. La prensa madrileña estaba lleno de ellas.
Un acuerdo de estos debería haber sido recibidos en Euzkadi con cohetes, habida cuenta del cabreo estatal. Pues no. Los secretarios generales de ELA y LAB, al día siguiente nos pusieron a parir. En un acto celebrado en San Sebastián, ante unos 2.500 sindicalistas nos reprocharon que no les hubiéramos consultado ni nos hubiéramos reunido con ellos. Encima de que nos hemos volcado para que ellos tengan el protagonismo que merecen nos dicen que todo esto es “de un déficit democrático y de una falta de respeto impresionante a los sindicatos que acreditan la mayoría de representación”. Aparte de que no es verdad ya que se ha hablado con ellos y nos hemos reunido con ellos, que por cierto son gente intratable y en la onda inamovible de la izquierda abertzale, se fijan en las formas y no en el contenido logrado. Como Bildu que han podido presentarse a las elecciones gracias a un pulso a Zapatero del PNV y, aparte de no dar ni las gracias, nos quitan tres ayuntamientos en los que habíamos ganado. Y ahora dicen que quieren que Zapatero termine su legislatura el año que viene y que apoyemos al presidente socialista. El colmo del doble lenguaje y del doble juego.
Es decir, el PNV es el pushing pol para esta gente. Hagas lo que hagas jamás estarán contentos y jamás reconocerán nada. Como los adolescentes. Gentes con muchos complejos, exceso de ideología y falta de sindéresis. Una pena que jueguen a tan corto plazo. Desde luego no tienen una mínima visión de la jugada y si una muy corta visión del país. Gente o muy obtusa o gente muy mal intencionada.
“La abstención del PNV (no fue un voto a favor) supone un fraude a los trabajadores de Euskal Herria (el complejo de los de LAB con el nombrecito) porque no se puede decir que se ha garantizado el ámbito vasco de negociación colectiva” decía Ainhoa Etxaide. Pues si maja, si. A ver si tu con las pocas cartas que teníamos hubieras hecho más.
El voto útil en Madrid no es el que se le da a los socialistas ni a los populares ni a los de Bildu. El voto útil para los vascos sigue siendo el PNV. Es el único partido que barre para casa y cree que todo es bueno para el convento. Vasco, por supuesto. Ojalá en Galicia el Bloque tuviera más fuerza. Ladran Sancho, señal que cabalgamos