¿Apoyar o no apoyar la prórroga del Estado de alarma? He ahí el dilema. O sea, la tremenda trampa para elefantes en que han caído las formaciones que auparon a Napoléon Sánchez a Moncloa y que lo han venido respaldando con lealtad. Si lo hacen, como podría indicar cierta lógica y quizá (esto ya es más discutible) la necesidad del momento, estarán regalando de nuevo al prócer máximo la facultad de seguir haciendo de su capa un sayo dictatorial. Si no lo hacen y, en consecuencia, decae la prórroga, la nueva caverna, que es un calco inverso de la otra, se lanzará con los ojos inyectados en sangre a acusar a estos partidos de cómplices criminales de Vox, el PP y los restos de serie de Ciudadanos. De rebote, la tri(ultra)derecha recién citada se pondrá cachonda y llamará al alzamiento nacional.
En resumen, la opción es entre lo malo y lo peor. O lo sería, si no fuera porque es muy probable que en este minuto del partido la lucha contra el bicho y sus consecuencias se pueda afrontar con la legalidad ordinaria. No lo digo yo, que en esto soy igual que cualquier cuñado de grupo de guasap. Lo anotan catedráticos de Derecho Constitucional de diversos credos, en cuyos análisis deslizan algo que debería parecernos terrorífico: Sánchez ha banalizado groseramente una herramienta excepcional de la democracia.
La prorroga es necesaria si primamos la SALUD.
Ahora bien, si primamos la economía y el cachondeo padre y madre de las salidas como estos días pasados, ale, todos a la calle y a aplaudir a las 20.00h . Que ya volverán las oscuras golondrinas y entonces otra vez habrá quien se lleve las manos a la cabeza.
Yo, que tampoco tengo ni idea; sí prorrogaría el estado de alarma estos próximos 15 días. Y si la evolución de contagios y demás siguen en fase descendente (hay que ver también los efectos de la salida masiva a las calles desde el pasado fin de semana), ya serían los últimos.
Son solo 15 días y ya sé que decirlo así puede sonar, como dices, a banalizar el instrumento y su utilización política y a permitirle a un Sánchez con pocos escrúpulos (eso ya lo tenía demostrado antes) ese juego…pero van a pasar rápido..y va a haber mucho tiempo muchas ocasiones y oportunidades después de pasarle las facturas políticas (es más; si yo fuese él, a cambio del apoyo en este periodo, ofrecería el fin anticipado de la legislatura; volver a llamar a las urnas en un año o así si el tema de la epidemia se ha controlado).
Ahora mismo creo que una vez que se ha doblegado la dichosa curva creo que lo prudente es «darnos» otros 15 días. No van a ser además 15 días como los anteriores; la actividad ya está volviendo a las calles y a las empresas; se puede hacer dentro del estado de alarma. Y además en estos 15 días muchas actividades están en proceso o tareas de adaptación y adopción de las medidas necesarias para la reapertura. A día de hoy…si se adelantan plazos, a mucha gente se le hace faena.
Eso se está produciendo ya pero el estado de alarma sirve un poco de dique psicológico de contención. Ya hemos visto lo que ha sido este fin de semana. Si ahora se desactiva el estado de alarma…este fin de semana va a parecer nochevieja.
Creo que tanto Txagorritxu como Larry confunden «estado de alarma» con confinamiento. Es la otra trampa en la que hemos caído gracias a la Brunete mediática de Sánchez. A estas alturas, creo que nadie se opone a la idea de que las medidas de contención de la enfermedad se van a seguir tomando. De hecho, muchos gobierno autonómicos, comenzando por el Gobierno Vasco, ya habían tomado sus medidas antes de que el congreso decretara el estado de alarma. Estado de alarma que no es otra cosa que suspender la organización descentralizada y dar todo el poder al gobierno central.
Dicho de otro modo, decir «no» a la prórroga del estado de alarma no significa decir «barra libre para salir y hacer lo que nos dé la gana». Decir «no» a la prórroga del estado de alarma significa solamente decir que de ahora en adelante, las diferentes medidas que van a afectar a Barakaldo, Labastida o Amoroto no las va a dictar un señor en Madrid de un modo uniforme, sino que la tomarán las autoridades sanitarias vascas que conocen más de cerca la realidad del país. O al menos eso creo yo, o al menos eso dejaron claro políticos de la talla de Casado cuando puso a Getxo en Gipuzkoa. Si este es el nivel de conocimiento de la realidad vasca de los políticos madrileños, desde luego no dejaría en sus manos ni la organización de un campeonato de mus.
Pues viendo a Casado, Diaz Ayuso y demás líderes mundiales paseando sus cuerpos serranos por las calles, bien repartiendo pizzas o bocadillos de calamares al estilo Evita Perón o pasando revista a unas tropas variopintas, da cierta rabia no poder moverse uno libremente.
Pero por otro lado la olla tiene tanta presión que abrir la tapa de repente puedecresultar peligroso.
El mejor complemento de mascarillas y geles es el sentido común.
Las cavernas sólo esperan el cuanto peor, mejor.
Entiendo lo que dices, Oscar, y además así es pero se trata precisamente de esa confusión. Esa confusión existe y lo mismo que nos confundimos nosotros, se confunde todo el mundo y nos guiamos por asociaciones de ideas.
Y desactivar el estado de alarma, a nivel de mentalidad, se va a asociar a desactivar la alarma y eso lleva a una relajación de hábitos y de precauciones que creo que en los próximos 15 días es necesario mantener.
Lo que debería suceder es que el gobierno aplicara de otra forma esta herramienta del estado de alarma, como le están pidiendo los grupos políticos y las CCAA. Con más diálogo, coordinación…y menos arrogancia e imposición.
Pero creo que, visto lo visto este fin de semana, es peligroso que la gente se quede con el mensaje de que ya no estamos en alarma.
Parece ser, según algunos comentarios, que el surgimiento de una amenaza, como un ataque inesperado y excepcional de un virus, en este caso, o de cualquier otro evento peligroso, solo se puede controlarse mediante la declaración legal de estado de alarma.
Esto no es así. Por dos razones:
1. El estado de alarma tiene su efecto en la limitación de ciertos derechos, como el de reunión, libre circulación, etc.. Es, en este sentido un instrumento de carácter civil, a utilizar lo menos posible y con una finalidad de orden superior a los derechos mermados. No tiene por qué afectar a la gestión y tratamiento del problema, sino ayudar a la solución.
2. Si el problema a resolver es el surgimiento de un repentino mal sanitario, el desconocimiento de su influencia y sus efectos letales, y superación de las dotaciones sanitarias suficientes para afrontarlo, podría perfectamente haber durado sólo la primera quincena, la del decreto gubernamental. Una vez conocido a lo que nos enfrentamos, una vez organizados los equipos para afrontarlo y marcados los objetivos, una vez conocida la experiencia de otros países, la alarma ya no existe. A partir de ahí lo que hay es una situación problemática a controlar y gestionar. Pues hágase con aquellas instituciones que la constitución y los estatutos de autonomía han conferido atribuciones.
Lo que debe haber es capacidad política para creer en el estado de las autonomías, y valorar la eficacia en el servicio público antes que el éxito partidario o particular para actuar en conjunto, coordinando, cooperando y controlando.
Por eso, el presentar como contrapuestos el estado de alarma y la salud indica el verdadero pelaje de unos políticos que relamen el plato del estado excepcional de alrma, como si el problema fuera de orden público, no sanitario.
También se puede plantear por parte de los partidos (y hay muchos en esa línea de exigencia) un estado de alarma CONDICIONADO a que el Mando único sea solamente en (aquí se puede incluir lo que acuerden los que no están de acuerdo en prorrogar tal cual se ha venido ejerciendo) y en el resto recuperen las Comunidades autónomas el poder que les corresponde. Y, esto es perfectamente constitucional, permitiría mantener los temas como ERTES, movilidad fuera del territorio etc…por el Estado de Alarma, pero dejaríamos de tener mando único en temas que ya no tiene sentido ejercer.
Bueno, más allá de consideraciones legales, el tema fundamental es el uso “torticero” que se ha hecho de la figura legal del ESTADO DE ALARMA, aprovechando la situación de ANOMALÍA DEMOCRÁTICA para “colar” determinadas cuestiones que, precisamente, no parece que tuviesen que ver mucho con el intento de atajar los efectos de la pandemia, ni tenían una urgencia especial. Desde la inclusión de tapadillo de Pablo Iglesias en la cúpula del CNI hasta el burdo intento de control de las redes sociales por parte de G.C. y Policía, pasando por la generosa previsión de regar con fondos públicos a determinados medios afines. Aparte de todo, la gestión centralizada de la crisis no se ha caracterizado precisamente por su eficiencia, creo que no hace falta enumerar los sucesivos dislates que se han protagonizado desde el pretendido MANDO ÚNICO.
De todas formas, son “tormentas en un vaso de agua” y mucho “postureo”. Al PNV no le queda otra apoyar a Sanchez, si no quiere encontrarse con un problema mayor en la CAPV; y si hiciese falta, por un remoto casual, ahí estarían los CINCO votos de EHBILDU ( no me invento nada). Incluso los votos de ERC están ahí: si no son necesarios, pues se hace el “paripe” y se queda bien con las parroquia catalana, pero lo ni ERC ni EHBILDU van a permitir es que el gobierno de Sanchez e Iglesias tenga un percance fuerte y mucho menos que caiga.
De todas formas, todo esto de lo que estamos hablando puede ser totalmente inútil. Acabo de leer la noticia:
“EL CONSTITUCIONAL ALEMÁN DA TRES MESES AL BANCO CENTRAL EUROPEO PARA JUSTIFICAR SUS COMPRAS MASIVAS: La máxima corte alemana considera parcialmente inconstitucional el programa de compra de bonos del BCE y activa todas las alarmas en Bruselas”.
GAME OVER. ¡A ver quien nos compra la morterada de deuda que España se va a ver obligada a emitir!
Todos tenéis razón , pero , ¿ qué se puede esperar de nuevo y diferente al modelo actual de un gobierno que ante la actuación del Director de Emergencias de Osakidetza ya ha empezado a liar el palangre de excusas para no actuar ?
En un sistema creible este señor habría sido llamado a Lehendakaritza , se le habrían pedido explicaciones y en su caso se le habría dejado la pistola para que acabara su trabajo , pero nos encontramos ante una persona que desde los 20 años ha vivido de morroi del partido y ya se sabe que «perro no come perro «
Cada día que pasó desde que se sabía que la epidemia estaba haciendo estragos en Italia fueron decenas de miles de infectados más y miles de muertos más.
Que sí, que gracias al cierre después no ha continuado la expansión geométrica que tenían los números. Pero no se procedió al cerrojazo una semana antes (y no se dejaron las cifras en comparables o mejores que las de Alemania) porque había una decisión política detrás. Nada tenía que amenazar al 8M. Que el hecho de que no fuera origen de la explosión (eso venía de antes) no quita que fue la razón de que no se tomaran medidas. Y ahora hay más razones políticas en haber ligado el ERTE al estado de Alarma.
Ah, ¿Y toda ese gente dejándose la piel? Pagada por las autonomías. Porque el control del cotarro se lo han quedado con mucha alegría, pero en ninguna parte del estado de alarma dice que se encargarán de pagar el tremendo facturón que, encima, se ha inflado por su necesidad de controlarlo todo.
Por comentar.
El director de Emergencias de Osakidetza, JON SANCHEZ IBARLUCEA multado en un piso de Castro Urdiales al saltarse el confinamiento.
La consejera Murga mantiene en su cargo a Jon Sánchez pese a que partidos y sindicatos vascos le exigen su dimisión.
Menudo ejemplo.
Pues yo que quieres que te diga, me da la sensacion de que al ocurrencias de moncloa «IVAN EL TERRIBLE 2» en cuanto se levante el estado de alarma le van a enviar de embajador al desierto del sahara.
El sanchez este, que? se ha pasado o es el llamado estado de alarma el que se ha pasado.