Como saben los que siguen estas y otras líneas desde hace tiempo, en materia de negociaciones presupuestarias con los gobiernos españoles de cualquier signo no me ando con zarandajas. Obviamente sin pasar la línea roja de lo deshonesto, se trata de arrancar lo más que se pueda. No nos vamos a escandalizar por que la política se rija por la más elemental ley de la oferta y la demanda y por el principio del aprovechamiento del momento. Puesto que nunca se sabe cuándo te puede caer encima una mayoría absoluta en la que no rascas bola, hay que optimizar los periodos de ejecutivos en minoría. En concreto, este de Pedro Sánchez, al que incluso le sablea su socio principal, es lo más parecido a una bicoca para el ejercicio que planteo. Bien es verdad que el tipo luego ha demostrado largamente que compensa la facilidad para firmar compromisos con la habilidad para incumplirlos.
En este escenario, me satisface que haya dos formaciones vascas tirando del bolsillo. Porque se saca más y porque por fin hemos descubierto que negociar con el estado no es una muestra de sumisión perruna a cambio de migajas sino algo perfectamente legítimo. Y luego hay otra cosa, oigan, que casi todo puede ser bueno para el convento. Les pongo como ejemplo el millón de euros que ha apañado EH Bildu para rehabilitar el Horno Alto número 1 de Sestao de cara a convertirlo en punto de interés turístico sobre el pasado industrial de Bizkaia. Sí, han leído bien: punto de interés tu-rís-ti-co. Y a mí, que conozco esa imponente instalación, me parece una idea estupenda. Otra cosa es que me cueste poco imaginar qué se diría si una enmienda así llevara la firma del PNV.
El éxito tiene muchos padres, el fracaso es huérfano. En este caso, según se percibe el peso real del turismo en la economía del país (precisamentez hostiazo Covid mediante), lo que antes se aplicaba al turismo a nivel local (y desentonante) en plazas concretas como Donostia se convierte sin solución de continuidad en la política general.
Ni siquiera es cosa de Bildu ni de un proyecto en concreto. Cualquiera diría, por cómo se han subido al carro, que todo el mundo estaba de acuerdo con los grandes proyectos. La hemeroteca dice otra cosa.
El futuro de Biscay, antes Bizkaia, está inevitablemente ligado al turismo, al de los guiris normales y a los congresos de ricachones como el de esta semana. Lejos de mí cualquier oposición más que nada porque quién carajo me va a hacer caso.
Por eso la DFB, IBERDROLA Ayuntamiento de la Capital del Mundo y muchos satélites del asunto convocan sus eventos en inglés, quizás porque el Euskara no tiene gancho y hasta a alguno le moleste o avergüence su uso o simplemente haya asumido que el viejo idioma no sirve para explicar física cuántica como decía el PP. Have a nice day with pintxos and beer. Nótese la ortografía euskaldun de pintxo, por aquello del folklore, como el «café con leche» de la señora Botella. Y nos reíamos de ella.
Muy bien por ese millón de euros para rehabilitar el Horno Alto con fines turísticos y también didácticos, pues es un potente recurso para que las nuevas generaciones sepan lo que fue el pasado industrial y siderúrgico de la margen izquierda de la Ría.
Y es que la historia de esta zona, no se puede entender sin conocer lo que fue la siderurgia durante casi siglo y medio, tanto en lo económico como en lo social.
Cierto que esta asignación económica llega con mucho retraso, y que el deterioro de ese Horno Alto, abandonado durante tantos años, es muy fuerte y cada vez será más costoso ponerlo en condiciones de ser visitado con seguridad y fidelidad a lo que fue.
Por eso, bien por esta primera aportación económica, después de muchos años, pero que le sigan otras hasta alcanzar el objetivo final. De lo contrarios ocurrirá como con intentos anteriores, que lo que se hace hoy se lo «come» el óxido en poco tiempo. Y vuelta a empezar.
En gran parte comparto tu opinión, Javier, pero en un tema del calado de los Presupuestos Generales del Estado para 2022, creo que, aparte de el planteamiento legítimo de “qué hay de lo mío”, sería deseable que por parte de todos se aclarase la posición sobre la bondad y adecuación de los mismos a situación del país. A todos nos van a afectar, a estos efectos no existe “paraíso Vasco” que valga. En mi opinión estos son unos presupuestos desubicados y con un gran riesgo de resultar descuadrados, por el lado de los ingresos, claro. Al tiempo.
ya te digo
Copian lo que ya está inventado y han criticado con dureza y despreció
Ya les conocemos ,nunca dejarán de sorprendernos
En un blog vecino se suele decir que «aciertan cuando rectifican».
Pues eso, no hace falta decir más.