Es pensar en el otoño y lo primero que viene a la mente es pasear sobre una alfombra de hojas secas por uno de esos magníficos bosques teñidos de colores ocres. Qué mejor lugar para hacerlo que la Selva de Irati, el segundo bosque de hayas y abetos más extenso de Europa.
Para realizar esta ruta debemos entrar al parque por su parte occidental, siguiendo la carretera NA-2030 que sube por el valle de Amezkoa y pasa por Orbaizeta. Cuando dejamos atrás esta localidad debemos tomar la carretera que conduce al área de acogida de Arrazola (835 m), siguiendo las señales a la Selva de Irati y Embalse de Irabia. Dejamos nuestro vehículo en el aparcamiento pagando la cuota de 5 € para la conservación del parque. Desde este mismo lugar comienzan las rutas balizadas que vamos a seguir hoy: la SL-NA-50C Anbulolatz y la SL-NA-51C Azalegi y San Esteban.
En esta primera parte del recorrido ambas rutas comparten trazado. El sendero discurre por el hayedo junto al arroyo Arrazola y paralelo a la pista de cemento que conduce a Irabia. No tiene pérdida, ya que sólo tendremos que estar atentos a las marcas blancas y verdes y seguirlas.
Más adelante ganamos un poco de altura por la derecha del cauce hasta que llegamos al cruce señalizado donde debemos elegir si continuamos hacia Azalegi o giramos a Anbulolatz. Escogemos la segunda opción y ya volveremos luego a este cruce. Giramos a nuestra izquierda tal y como indica la señal y bajamos hasta la pista hormigonada, a la altura del abrevadero o fuente de Orionzilo. La cruzamos y encontramos otra señal que nos invita a continuar hacia Anbulolatz atravesando una pequeña pradera.
Ahora caminamos por un estrecho y bonito sendero en el que ganamos metros entre bojes y hayas. En esta zona húmeda superaremos algún peldaño rocoso que otro mientras seguimos avanzando siguiendo las marcas y señales.
Cuando dejamos de subir llegamos a unos pastos (1020 m) donde giramos hacia el Sur para volver a perder altura.
En frente tenemos Azalegi, el siguiente objetivo. Salimos de esta zona desarbolada volviéndonos a introducir en el hayedo. Pasamos junto a la sima de Anbulolatz y bonitos ejemplares de hayas. De hecho, antes de llegar abajo no debemos pasar por alto el Haya de los Tres Brazos, un peculiar ejemplar declarado como Monumento Natural en 1991.
Llegamos de nuevo a la pista, donde caminamos hacia el desvío Azalegi por el que habíamos pasado antes. Salimos del bosque ganando altura siguiendo un sendero que asciende en diagonal por la ladera. Delante a nuestra izquierda el Ezkanda y Mendizar nos vigilan mientras empezamos a sudar.
Después de este primer tramo, la subida da un pequeño respiro al llegar a una amplia pradera. La atravesamos mientras la silueta del Ori (el primer dos mil occidental) comienza a aparecer en el Este.
Llegamos a una pista que recorremos durante escasos metros hasta alcanzar una señalización cerca del collado. Seguimos la indicación por nuestra derecha hacia la cima a través del praderío. Nos enfrentamos a la última cuesta y en seguida coronamos Azalegi (1165 m).
En la cima encontramos un pequeño túnel que data de la Guerra Civil. Ambas entradas están protegidas con una valla aunque se puede entrar a explorar. También merece la pena pararse un momento a disfrutar de las vistas al Ori, Valle de Belagua, Mendizar, Ezkanda, Mendilatz y Abodi.
Ya sólo queda el descenso, que comenzamos siguiendo un marcado sendero que nos lleva hacia el bosque en dirección Suroeste.
Alrededor de 500 m después pasamos junto a la ermita de San Esteban (1080 m), recostruida en los años 60 y abierta para visitarla o como refugio.
Nos acercamos a la parte final del recorrido. Caminamos junto a la alambrada de nuestra derecha hasta salir a terreno abierto cruzando por el paso correspondiente.
De nuevo a la sombra de altos árboles, continuamos hasta que encontramos una señal que nos invita a desviarnos a nuestra derecha.
Ahora debemos perder altura rápidamente siguiendo un pronunciado descenso. Aquellos que no lleven el calzado adecuado es probable que acaben con el culo en el suelo en más de una ocasión debido a lo resbaladizo del terreno.
Sin mayores problemas, llegamos al fondo del barranco junto a la regata.
Caminamos hacia nuestra izquierda y tras cruzar un puente de madera llegamos al aparcamiento, cerrando esta circular otoñal.
Antes de abandonar esta zona podemos acercarnos a la Real Fábrica de Armas y Municiones de Orbaizeta, continuando hacia Francia un par de kilómetros desde el cruce con la NA-2030.
Track: https://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=20564343