Domingo 22 de enero de 2012
«¡Que nostalgia!» fue lo que le comentó el ex ministro Moratinos a una colaboradora tras una reunión en el Palacio de Santa Cruz con el nuevo ministro de Asuntos Exteriores, García Margallo y varios ex ministros del ramo. Moratinos ha apostado por Carme Chacón. No salió bien del Ministerio. Siempre le quedará el mal sabor de haber perdido su cartera porque el caprichoso Zapatero se la dio a la perdedora del pulso en la federación Socialista madrileña entre Tomás Gómez y Trinidad Jiménez. Pero es que Moratinos tenía todos los boletos para haber sido el Alto Comisionado de la Política Exterior Europea, el cargo que ocupa hoy una baronesa laborista Catherine Asthon que no se entera de la feria y Zapatero no quiso.
Por cierto. Me llamó la atención un dato que suministraron los laboristas británicos. Tanto Tony Blair como Gordon Brown, los dos ex primeros ministros emigraron de Escocia ignorando las instituciones autonómicas de su país para hacer carrera en Westminster. Como aquí Benegas, Jauregui, Medina, Rojo, Laborda, Solchaga, Aranzadi, Almunia y demás. Y luego se quejan.
Esas pequeñas facturas junto a la juventud y la sonrisa radiante y sobre todo lo desconocido de Chacón le están haciendo subir puntos en la pelea interna del PSOE. Y eso que lleva en su candidatura gentes tan poco presentables como López Aguilar y el secretario general del socialismo navarro, un señor despistado que gobierna, con Yolanda Barcina por el solo placer de pisar alfombra y tras haber dejado al partido socialista en Navarra en los huesos.
Me decía una periodista que la clave de la victoria está en Andalucía y que Chacón repunta. De haber sido tan clara la victoria de Rubalcaba en este importante feudo, ya Griñán, el actual presidente de la Junta se hubiera decantado por él pero, ¿quién se decanta por un reiterado perdedor a dos meses de sus cruciales elecciones?.
En fin que la cosa está al pil pil y que si el PSOE resbala en esta elección, sabe que hay a su alrededor muchos tiburones queriéndose comer la presa. Y, mientras, Zapatero hablando en Castellana 3 con el nuevo ministro del Interior. Nunca he entendido el que un presidente no se pueda mover de La Moncloa para ver qué pasa en extramuros. Dejan el cargo y hacen lo que hacen las gentes normales. ¿No hubiera sido mejor haberlo hecho antes?.
Un auténtico hombre circo
Si gana Newt Gingrich, Obama lo tendrá fácil. Este caballero rompe moldes y una cosa es lo que dice y critica en público y otra la que hace de verdad en privado en una sociedad que mira estas cosas con lupa con una regla sencilla: quien engaña en privado, engaña en público. Y siendo los Estados Unidos el país más puritano del mundo occidental, en el que más gente cree en Dios y en el diablo, la monstruosa hipocresía que exhibe Gingrich promiscuo hombre-circo, le está haciendo ganar. Pero un repaso a la carrera de este candidato indica que el dios que Gingrich más venera es él mismo. Dijo una vez que descubrió cuando niño que su destino era cambiar el mundo. ¡Qué miedo!. El propio Mit Ronmey, que de hipocresía también sabe bastante, dijo esta semana que «era un chiflado”. Otro dijo que era listillo pero no listo. Lo malo es que Ronmey es irremediablemente soso, cosa que Gingrich categóricamente no lo es. Escritor de 24 libros, entre ellos “Cinco Principios para una Vida Exitosa» es capaz en media hora de citar a Platón, George Washington, el duque de Wellington, Alvi Toffler, el general Custer y John Wayne sin parpadear.
A pesar de esta manera de ser, es posible que este extraterrestre pueda ser el próximo presidente de los Estados Unidos. Gingrinch dijo en un discurso una vez «Creemos como Lincoln, que es posible engañar a algunos parte del tiempo, pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo». Ya veremos si sigue siendo verdad.
Una sociedad condenada
El 2 de febrero de 1905 nació en San Petersburgo la filósofa y escritora estadounidense (de origen ruso) Alissa Zinovievna Rosenbaum, más conocida en el mundo de las letras bajo el seudónimo de Ayn Rand, y falleció en marzo de 1982 en New York. Nunca más oportunas las palabras de la autora de esa magnífica novela que es Atlas Shrugged, traducida al español como La rebelión de Atlas, una suerte de anticipo de lo que nos está pasando a los españoles y en mayor o menor medida a todo el mundo:
«Cuando advierta que para producir necesita obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes trafican no bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no lo protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un autosacrificio, entonces podrá afirmar, sin temor a equivocarse, que su sociedad está condenada.»
Ayn Rand (1950)
¿Que Iñaki, ya te incluyes entre los españoles por propia iniciativa o ha sido un lapsus o dislepsia consecuencia de tus variados escenarios?