La nieta de Triki – En la Plaza Nueva – Desmontando mentiras

Domingo 3 de febrero de 2019

Maialen Azpiritxaga Zubizarreta

Tras mi artículo sobre las Berzas y el telegrama a Trump, su nieta, me escribe ésto.

“Mis aitonas no regresaron a Euzkadi porque Venezuela los recibió con los brazos abiertos para labrar su vida trabajando. Quisieron a mi país como unos venezolanos más, construyeron una familia grande y unida, que hoy está dispersa por el mundo. Yo me encuentro en Barcelona, por ejemplo. No vine a cobrar lo que me pertenece, vine como mis aitonas a buscar futuro porque en Venezuela no lo tenía.

Esta semana me he cansado de comprobar como la izquierda abertzale no sabe ni de lo que habla. Debe ser muy sabroso pensar en “socialismo” comiendo tres veces al día, teniendo sanidad pública y todo al alcance de la mano cuando aún les queda margen para darse un gusto en el bar de la esquina. A más de uno, le ofrecí un intercambio sin euros que cambiar y ganando el salario de un trabajador base en Venezuela para que realmente pudiesen opinar.

Gracias por tu apoyo, y por estar atento de ese país que te vio nacer”.

Saludos, la nieta de Triki”.

En la Plaza Nueva

Estuvimos el sábado bajo los soportales de la Plaza Nueva a las siete de la tarde en un día de viento, lluvia y frío de esos propios del invierno. Ese día la consigna mundial era recordar el acuerdo de la Unión Europea en favor de la democracia en Venezuela y aunque Deia este domingo titulaba en primera que Maduro y Guaidó exhibían su fuerza en la calle y demostraban una fractura social, no era correcto este titular. La diferencia de la calle entre Maduro y Guaidó era que Guaidó llenaba plazas y calles de las capitales de todos los estados de Venezuela, Caracas incluida y Maduro lo hacía solo en Caracas y la tercera parte que Guaidó y, en relación con la fractura social, es evidente, pero por algo Maduro no quiere convocar elecciones pues esa fractura está cuantificada en un 80% para Guaidó y un 20% para Maduro. Fractura sí, pero desproporcionada también.

En los soportales nos concentramos unas doscientas y pico personas en las que también se encontraban cuatro hermanos Bengoa, incluyendo a Rafa Bengoa, ex consejero de Sanidad del Gobierno Vasco y nacido en Caracas. Su aita José Mari Bengoa fue uno de los directores de la Organización Mundial de la Salud y representó a Venezuela en importantes organismos internacionales. Y también, como novedad hay que decir que se presentó una representación de bolivianos con su bandera. Ellos también reclaman democracia en su país. Eran gentes sencillas que protestan por la reiterada mentira de Evo Morales y su lucha contra la pobreza. ”Somos pobres y por eso hemos tenido que salir de allí” comentaban. No había pues ningún petrolero bajo los soportales sino gente muy sencilla y que además hacía una colecta para pagar los gastos de entierro de una joven venezolana, Geraldine Irrezabal, que acabada de fallecer en Bilbao y que deja un chaval de siete años. Esa es la oligarquía de la que habla Maduro y de la conjura internacional.

Desmontando mentiras

1.- Juan Guaidó se “autoproclamó”. FALSO.

Como presidente de la Asamblea Nacional (AN), Guaidó asumió las competencias de presidente encargado de acuerdo a lo establecido en el artículo 233 de la Constitución Nacional.

2.- El 23E se dio un golpe y se creó un estado paralelo. FALSO.

  1. a) el golpe se dio en marzo de 2017, cuando el TSJ arrebató competencias legislativas a la AN.
  2. b) El estado paralelo se instaló en julio 2017, cuando se impuso una “Asamblea Nacional Constituyente” a sangre y fuego.

3.- Maduro ganó elecciones presidenciales en mayo de 2018. FALSO.

Tales “elecciones” no cumplieron con los estándares mínimos. De ahí que + de 50 países alrededor del mundo desconocieron su resultado.

4.- El conflicto venezolano es un conflicto entre derecha e izquierda. FALSO

Este es un conflicto entre democracia y dictadura. La transición liderada por Guaidó incluye a partidos y representantes de todas las tendencias ideológicas y está abierta al chavismo disidente.

5.- El gobierno de transición fue elegido en Washington. FALSO.

El gobierno de transición es resultado de un largo proceso político interno que derivó en una gran alianza cívica nacional contra la dictadura.

6.- EEUU quiere apoderarse del petróleo venezolano. FALSO.

La dependencia petrolera de EEUU está a niveles mínimos históricos, compárese con China. No es por petróleo que EEUU, la UE y el Grupo de Lima apoyan la transición democrática de Venezuela.

7.- Sólo el diálogo puede evitar un baño de sangre. FALSO.

El “diálogo” ha sido utilizado una y otra vez por la dictadura para ganar tiempo mientras la sangre de miles sigue derramándose. Es Maduro quien bloquea la salida pacífica.

8.- Apoyar a Guaidó choca con el principio de autodeterminación. FALSO.

No apoyar la transición liderada por la AN, electa por 14 millones de electores y respaldada en las calles, es traicionar el principio de autodeterminación del pueblo de Venezuela frente a un régimen de facto.

9.- Crisis en Venezuela es resultado de sanciones financieras de EEUU. FALSO.

La catástrofe venezolana antecede el anuncio de sanciones financieras (2017).

Datos de 2016: Inflación 800%, pobreza 82%, pérdida de peso anual per cápita: 9Kgs. Éxodo masivo.

10.- Apoyar a Maduro es resistir al imperialismo. FALSO.

Es seguir entregándole el país al imperialismo ruso y chino. Es seguir dándole el 12% del territorio nacional a mafias de la minería y seguir permitiendo que redes internacionales del narcotráfico operen en Venezuela.

 

 

Un País para plantar berzas y enviar a Trump un telegrama.

Sábado 2 de febrero de 2019

En setiembre de 1939 comenzó la segunda guerra mundial. Los vascos refugiados en Euzkadi Peninsular sabían que sus huesos iban a parar a un campo de concentración o a una trinchera. Había perdido una guerra y no estaban dispuestos a perecer en la segunda por lo que un grupo de gudaris decidió cruzar el atlántico en algo más que dos pateras, vaporcitos de seis toneladas, llamadas Donibane y Bigarrena, construidas en Bayona. Les plantaron la ikurriña en popa y salieron en setiembre de ese terrible año a la aventura y al mando del capitán Burgaña. Triki Azpiritxaga tuvo que arreglar la dinamo de una de ellas. Y llegaron a Rio Caribe, Cumaná, y luego a La Guaira en Venezuela. Allí rehicieron sus vidas, y fueron enterrados en aquel país al que Colón denominóTierra de Gracia. Por cierto, muchos de sus descendientes que han tenido que salir, están en Euzkadi y tras una vida de trabajo y de pagar impuestos arbitrariamente no cobran pensión alguna por decisión de Maduro sin que los manifestantes de los lunes jamás se acuerden de este colectivo abandonado. Y son tan vascos como ellos, aunque no para Bildu y Podemos que se han apoderado de una justa reivindicación popular.

El nieto de Triki Azpiritxaga es el actual presidente del Centro Vasco de Caracas. Antes que esta entidad los vascos crearon la Asociación de Socorros Mutuos con la consigna de “Vasco, ayuda al Vasco”. Allí los exiliados reprodujeron un pueblo de Euzkadi. Es el Centro Vasco más grande y mejor de América. Y allí quisieron ser recibidos el pasado diez de enero Arkaitz Rodríguez, secretario general de Sortu y Asier Altuna, responsable de relaciones internacionales de la formación. La Junta Directiva no les recibió. Han sufrido y sufren demasiado para tener que aguantar soflamas justificatorias de la opresión que sufren. Los representantes de Sortu habían sido invitados por la dictadura madurista a la gran farsa de la juramentación de Maduro ante una Corte de Justicia de magistrados designados a dedo, sustituyendo a la anterior, y se prestaron a ser parte del paisaje totalitario y aplaudidor del dictador junto a los representantes de Turquía, Bolivia, Cuba, Rusia, Osetia del Norte, Corea y países con regímenes parecidos. Al parecer estaban a gusto. Deben ser sus referencias ideológicas estas satrapías. De hecho cuando falleció Fidel Castro, Rodríguez le organizó un funeral laico en el Puerto de Donosti al dictador cubano y Altuna y Martín Garitano estuvieron en el funeral de Chávez en el 2013. Como se ve Sortu no ha hecho aún su Perestroika y siguen con las monsergas marxistas leninistas de la V y VI Asamblea.

Ante eso, uno se pregunta, ¿es este el modelo de sociedad que quiere esta gente para Euzkadi?. Si es asé hacen buena aquella frase de Xabier Arzalluz que les dijo que si ésto fuera como lo planteaban había que marcharse de Euzkadi en pateras y dejar una Euzkadi solo para plantar berzas. Tenía razón. Nos ponen como ejemplo un régimen falsamente socialista que ha arruinado un país y cuyos habitantes en más de cuatro millones huyen a pie o como pueden. ¿No han aprendido nada?. ¿No han olvidado nada?.

Parece que no, pues Gara se regocijaba al día siguiente en su portada, publicando esa amenazadora y siniestra fotografía de generales comprados por el madurismo como si el ejército y no la voluntad popular debe ser el apoyo de un gobierno. Tanto publicar manifiestos de ETA con sus capuchas y puños en alto que parecería quieren homologar a este gorilato tiránico con una ETA militar al que algunos siguen añorando.

Me tocó en un debate defender al presidente encargado, no autoproclamado, Juan Guaidó cuyo padre es chófer en Tenerife. Lo presentaban como un hijo de papá educado en la Universidad Católica de Caracas de los jesuitas. Yo he estudiado en esa Universidad y se bien lo que es y su perfil social. Es como atribuirle a la Universidad de Deusto ser una fábrica de pijos cuando la de Caracas ha tenido como rector al P. Luis Ugalde, de Bergara, hoy referencia moral en toda Venezuela como lo fue Ellacuria en El Salvador más vinculados a la Teología de la Liberación y al pueblo llano que ellos. El trabajo social realizado por la UCAB en Caracas y en los barrios limítrofes no lo superará jamás ningunos de estos revolucionarios de limusina que tratan de adoctrinarnos con conceptos de los años sesenta. ¿Puede seguir la Izquierda Abertzale con este discurso tan falso y destructivo pretender hacer una oferta seria a este país?.

Decía Otegi que siente que el ciudadano vasco no se fía de ellos y considera que hasta que eso no sea así no van a poder superar el pasado. Desde luego avalando a una dictadura como la cubana o la venezolana y vanagloriándose de que les hayan invitado a semejante ópera bufa no creo que nadie con responsabilidad en Euzkadi les crea nada para construir entre todos algo serio y lo acabamos de ver en la negociación presupuestaria. Sus vértigos, sus condicionantes, su miedo al compromiso, su discurso de trinchera les impidió demostrar que habían aprendido algo de lo que supuso estar veinte años fuera del Parlamento Vasco diciendo que éste era un ente vascongadillo de dos tercios sin poder alguno a querer darnos lecciones de democracia todos los días para tapar un pasado inicuo.

Les guste o no estamos dentro de Europa y es en ella, y no fuera de ella, donde hemos de encontrar soluciones para todos los vascos. Persistir en esquemas centroamericanos o soviéticos y de dictadura del proletariado, basado en una clase obrera cada vez menos obrera y menos clase es equivocarse porque también es menos masa en la medida que el acceso a la educación es general. Persistir en estructuras de lucha inventadas por Lenin para una situación concreta de la Rusia zarista, cuando las condiciones de vida y de trabajo van cambiando vertiginosamente a impulso de una auténtica revolución tecnológica y digital es como remar en tierra sin percatarse de que ya no hay agua bajo la barca.

Lo mismo que querer engañar al personal hablando de que detrás de lo que ocurre en Venezuela está la oligarquía petrolera y Trump, desconociendo a toda la Unión Europea y su escala de valores o a Canadá y la mayoría de las democracias americanas, cuando la única injerencia que hay en aquel país son los 22.000 soldados y funcionarios cubanos cuidando de que su vaca petrolera no caiga en la democracia burguesa que tanto adversan. Me quedo pues con los valores occidentales de compromiso con todos los derechos humanos, el respeto a la ley, a las minorías y la economía abierta. Lo que esta gente llama democracia burguesa pero que les permite vivir en libertad.

Y sobre Trump, un recuerdo. No fue el Grupo Vasco en Madrid quien le envió un telegrama de felicitación al presidente norteamericano tras su victoria. Fue la diputada Beitialarrangoitia de Bildu quien lo hizo. No sé a qué viene ahora rasgarse las vestiduras porque pida que en Venezuela haya unas elecciones libres y sin voto electrónico causante de todos los fraudes chavistas. No olvidemos que el concepto leninista de “el fin justifica los medios” sigue allí más vigente que nunca.

Finalmente. Venezuela no era un país de emigración. Llegó Chávez y luego Maduro y la gente huye despavorida. En Euzkadi en poco tiempo tenemos casi diez mil emigrantes que algunos lo necesitan todo aunque la gente no sea consciente de ellos y nos digan que ya está bien de hablar de Venezuela. No les han visto porque no llegan en pateras sino en avión, ya que no tienen a la Donibane y Bigarrena de aquellos gudaris. Venezuela abrió sus puertas hace ochenta años al exilio vasco. Hoy sus descendientes vuelven a casa junto a venezolanos de origen de un país que aman mientras Sortu aplaude y trata de justificar semejante satrapía. Los extremos, como siempre, siguen tocándose.

La diferencia entre Carmena y Arkaitz

Viernes 1 de febrero de 2019

He escuchado al mediodía en ETB como Arkaitz Rodríguez, secretario general de Sortu, describía al Gobierno Vasco como Gobierno autoritario a cuenta de la discusión presupuestaria. Una discrepancia de método le hacía insultarnos con semejante descripción. Dicha además por una persona que acaba de estar aplaudiendo en Caracas la fraudulenta toma de posesión de Nicolás Maduro el pasado 10 de enero y sin embargo se atreve a decir ésto. Denota que su nivel de conciencia ética y percepción política está algo trastocada. Como lo estuvo en su día Jone Goiricelaia sobre el estatuto de Gernika que al parecer ahora reivindica. En visita parlamentaria a la cárcel de Zaballa, a la salida ha solicitado muy seria el cumplimiento del Estatuto de Gernika cuando la Izquierda Abertzale se ha pasado la vida despotricando contra este vital instrumento de autogobierno. Aciertan cuando rectifican, aunque no reconocen nada. Pero es que la llamada Izquierda Abertzale, señores, es así. Al parecer les fascina las dictaduras llamadas de izquierda y aborrecen todo lo que consideran una democracia burguesa con parlamento, control, libertad de expresión y derechos humanos aunque vivan calentitos en ella y sean incapaces de irse a Venezuela a ganar seis euros al mes.

Siento que vivimos en una sociedad blanda y hasta latinosa, que pasa por todo y les ríe las gracias y hasta aplaude a esta gente a la que les haría pasar por lo que el catecismo nos decía que había que hacer antes de recibir la absolución por los pecados. Sí, ya sé que me dirán de todo, pero me importa un bledo. Hablo de realidades que hemos vivido. Examen de conciencia, contrición de corazón, confesión de los pecados y propósito de la enmienda. No está mal como norma de urbanidad y para vivir en sociedad. Hoy los chavales no saben estas cosas y la mayoría de los hiperabertzales se ríen de ellas cuando de niños han pasado por ésto, y que alguna huella les debería haber dejado a la hora de hacer política porque no están nada mal aplicar estos criterios sobre cuando se erigen en dedo acusador de los demás y tildan a un gobierno democrático de autoritario.

Hoy, desde Radio Caracas, me han llamado para preguntarme el por qué la Unión Europea necesita tres meses para terminar haciendo lo que va a terminar haciendo con Maduro, ya que no es precisamente su plan el convocar unas elecciones libres con Observación Internacional y con resultados respetados. Deduzco-les he dicho-que saben que ésto va a ocurrir y se tienen que cargar de razón. Puede ser. Otra que todavía hay mucho complejo político mientras un país se desangra en sus más de 50 muertos en dos semanas, y más de novecientos encarcelados, dato del que los obsesionados, con razón, del acercamiento de sus presos, nunca hablan. No sé por qué. Veremos.

Lo que aprendíamos en el colegio era una buena educación no solo religiosa, sino social, porque lo de ahora es de no recibo. Puedes hacer lo que te da la gana y encima ser recibido de vuelta de la cárcel con aplausos y vítores y hasta aurresku y al parecer ésto es el culmen del abertzalismo, la izquierda y la modernidad. Pues bien .Así nos va. Ni reconocimiento del daño causado ni prometer no volver a llevar a cabo una conducta delictiva o por lo menos, tan antisocial, que de abertzale no tiene nada.

Por eso destaco que ante los ejemplos anteriores me quedo con la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, una abogada que sobrevivió a la matanza de los abogados laboralistas de Atocha por parte de la ultraderecha franquista y que ha sido una consecuente mujer de izquierdas toda su vida, siendo en la actualidad la alcaldesa de Madrid.

Pues bien hoy le han preguntado por Maduro y ha sido muy clara y ha descrito lo que se vive en Venezuela en dos palabras: ”es una dictadura horrorosa y considero imprescindible se acabe con ella y reconozco a Guaidó como presidente encargado”. Y ha dicho más, preguntándose lo siguiente. “¿La izquierda, sabe administrar?”.

En el caso del chavismo, la respuesta es. radicalmente no. Son unos incapaces e ineptos absolutos que recibieron clases de otro genio como el celebrado Monedero y algún miembro de la Izquierda Abertzale y ya hemos visto que este tipo de Izquierda basura da los resultados que da. Arruina un país, sus gentes emigran por millones, no hay libertad de expresión, cuando hay una Asamblea que no te gusta creas otra, persigues y encarcelas la disidencia, no permites haya una ayuda humanitaria y echas la culpa a Trump cuando tienes el país infectado de la peor e ideologizada invasión comunista cubana que controla el petróleo, la inteligencia militar, los pasaportes, el sistema electoral, la sanidad y hasta el papel tualé. Pero es lo que a Bildu le gusta y la justifica aunque no le veo a Iker Casanova limpiarse el trasero con papel de periódico y luego cantar la Internacional. Aunque me da que lo haría.

Decía Sánchez hace tres días en la reunión de la Internacional Socialista que no había que confundirse con el chavismo y describirlo como un grupo de izquierda. ”Maduro no representa a la izquierda, Maduro es un tirano”. Algo así nos dijo hace diez años el P. Ugalde en la Universidad Católica cuando le visitamos en el rectorado todos los grupos de la cámara en unas elecciones en las que íbamos de Observadores. ”Chávez tiene una verbosidad que a los ingenuos les confunde. Chávez es un personaje autoritario que va a ir cercenando poco a poco todas las libertades de Venezuela y empobreciendo el país. La verdadera gente de Izquierda, crea riqueza para repartirla. Este militar lo achatarra todo, empobrece a la clase media y lo único que crea es pobreza”. Acertó de lleno. Por cierto, es jesuita, euskaldun y de Bergara, no un mayordomo de la casa Blanca.

Chávez dijo en 1998 que lo suyo era combatir la pobreza. En Venezuela era muy alto este índice al término del mandato del presidente Rafael Caldera. Un 33%. Pues bien. Hoy con los salvadores de los pobres el índice de pobreza ronda el 70%. ¿Cómo esta izquierda abertzale es capaz de reivindicar a esta izquierda antidemocrática?.

Pues lo hacen. Y todos los días. Y con la fe del converso. Han pasado de apoyar la lucha armada de ETA a apoyar una dictadura y a un narco estado corrupto y liberticida. Y se quedan tan campantes y al mediodía a por el vinito y la tortilla.

Me quedo pues con la visión que de la Izquierda tiene Manuela Carmena. ”La abuelita feroz” como la describe la derecha cavernaria porque sabe bien lo que es izquierda y lo que es la derecha, el que no lo sabe es Arkaitz Rodríguez avalando con entusiasmo dictaduras asesinas, sin darse cuenta que ésto no es un problema de geoestrategia sino de derechos humanos. Y éstos, amigo mío, o son universales o no lo son. Pues para Rodríguez, no lo son.