CARTA DEL PRESIDENTE DEL EBB A SANTIAGO ABASCAL

vox

Att. D. Santiago Abascal Conde Presidente

c/Bambu, 12

28036 MADRID

Bilbao, 30 de enero de 2025

Señor presidente de Vox:

Por la presente, hago acuse de recibo digital de su carta, tan fértil en mentiras como errónea en sus apreciaciones. Tal vez el hecho de que su misiva no haya llegado aún a esta hora a Sabin Etxea en formato papel obedezca a que no haya superado algún tipo de filtro que haya implementado Correos para detectar y retirar de la circulación documentos que incorporen bulos, fake-news o infundios. Es solo una hipótesis. De lo que no me cabe la más mínima duda, y justo es reconocerlo, es que su carta obra en mi poder gracias a la afamada eficacia con que opera el ecosistema digital de barro, odio y mentira que ha ideado y articulado el Partido que usted preside y que, por desgracia, tan solvente está resultando en su indisimulado propósito de intoxicar, hasta hacer irrespirable, el ambiente político y social del Estado­ naci6n que tanto dice amar y defender. Ocupar y ejercer la presidencia de un Partido centenario como EAJ-PNV, al que avala su intachable hoja de servicios en defensa de la causa de la democracia, la libertad y los Derechos Humanos a lo largo de sus casi 130 años de existencia, es para mí, ante todo, un honor. También una alta responsabilidad que acarrea algunas obligaciones. Escribir esta carta de réplica es una de ellas. Ni me agrada, ni me complace, ni me apetece escribirle estas líneas, pero mi incomodidad resulta irrelevante frente a la obligaci6n moral, la necesidad política y la demanda hist6rica de desmontar sus patranas, y hacerlo además públicamente, ya que publica ha sido también su ristra de falacias.

Empecemos este ejercicio con los hechos. De acuerdo con el informe historiográfico elaborado a petici6n de la Secretaría de Estado de Memoria Democrática del Gobierno español, el 12 de septiembre de 1936, Francisco Belausteguigoitia Landaluce, emigrante vasco residente en México, envió 65.000 dólares a Heliodoro de la Torre, tesorero de EAJ-PNV. A su vez, De la Torre traspasó este dinero a Marino de Gamboa, quien adquirió el edificio del número 11 de la Avenida Marceau, en Paris, y puso en marcha un entramado societario para protegerlo, consciente del complejo contexto político y social, iniciada ya la Guerra Civil en España. Preste usted especial atención a las fechas y cotéjelas con esta otra: 7 de octubre de 1936, día en que se constituye el primer Gobierno Vasco.

Años más tarde, en 1940, Francia fue invadida por el Ejército nazi y la Gestapo se incautó de aquel edificio de la Avenida Marceau adquirido por EAJ-PNV con la inestimable ayuda de Pedro Urraca, reconocido franquista que captura al president Luis Companys. Empieza entonces un recorrido judicial que conviene también repasar. Citemos primero la sentencia de 21 de julio de 1943 en Francia, que reconoció, efectivamente, la propiedad al Estado franquista, pero lo hizo tras un juicio celebrado en rebeldía, en el que solo se persona el Estado español sin oposici6n alguna, con pruebas manipuladas y la connivencia de las autoridades sometidas a los nazis ocupantes.

Pasemos ahora a las sentencias dictadas en el Estado español. En ningún caso, y digo en ningún caso, un Tribunal español se ha pronunciado sobre el fondo del asunto, que es la propiedad del edificio. Y no lo ha hecho porque el ordenamiento jurídico no contemplaba hasta ahora, cuando se ha recogido expresamente en la Ley de Memoria Democrática de 2022, las devoluciones de las incautaciones que se hubieran producido en el extranjero. La Sentencia del Tribunal Supremo del año 2003, que tan constante como falazmente citan quienes pretenden negar a EAJ-PNV la titularidad del edificio, desestimaba nuestra reclamación por razones formales y de procedimiento, sin entrar a valorar si la abundante prueba documental aportada pudiera ser determinante para acreditar que era propiedad o no del PNV, aunque toda ella venga en ese sentido a justificar que sí resultaba de su propiedad. Y lo hace porque la Ley entonces vigente es la Ley 43/1998 de Restitución o Compensación a los Partidos Políticos de Bienes y Derechos Incautados en aplicación de la normativa sobre responsabilidades políticas del período 1936-1939, que restringía su aplicaci6n a los bienes y derechos incautados a los Partidos Políticos por el Estado español en territorio del Estado Español, y siempre que la incautación estuviere vinculada a la Legislaci6n sobre Responsabilidades Políticas que surgió a la terminación de la Guerra Civil, dictada por el régimen franquista. Mi Partido recurri6 entonces al Tribunal Constitucional y este, en mayo de 2004, tampoco entra al fondo del asunto (la propiedad del edificio) sino que se limita a decir que la Constitución fue aprobada en 1978 y que no puede ser aplicada con carácter retroactivo.

Sin embargo, en la actualidad, y tal y como he citado unas líneas más arriba, el ordenamiento jurídico español si contempla la posibilidad de devolver las incautaciones que hubieran tenido lugar en el extranjero. Lo hace en su Disposición Adicional Novena la Ley 20/2022 de Memoria Democrática, que, aunque no sea de su agrado, forma parte de la legislación española. Le invito a que la consulte.

Además de este marco legal necesario para la restituci6n del bien al PNV, los hechos históricos que le he relatado han sido acreditados y certificados gracias a la abundante documentación presentada y que ha resultado en un informe historiográfico elaborado a petición de la Secretaría de Estado de Memoria Democrática del Gobierno español.

No seré único. No lo lamento, pero créame cuando le digo que comprendo perfectamente su malestar, su tristeza y su desasosiego ante la pérdida de un edificio, el del número 11 de la Avenida Marceau de Paris, que sus parientes políticos de la época -los mismos que tuvieron una complice participación en el bombardeo de Gernika- nos arrebataron ilegalmente y en nombre del fascismo. Y lo comprendo porque esa misma sensación de malestar, de perdida y de desasosiego la hemos padecido, durante más de 80 años, miles y miles de afiliados y afiliadas de EAJ-PNV. Un sentimiento de vado, dolor e injusticia que este mes de enero han mutado en justicia y en reparación en el seno de miles de familias vascas que ven, al fin, alcanzada y reconocida la victoria final en su justa causa. Me quedo con nuestra sana alegría, y no con su insano rencor.

Por todo ello, le ahorro las 24 horas de espera. Puede darse usted por contestado. A pesar de todo, atentamente,

El Palacete de la libertad

Jueves 30 de enero de 2025

Enrique Barón, Expresidente del Movimiento Europeo Internacional (MEI) y del Parlamento Europeo

Jordi Xuelá, Presidente del Consejo Catalán del Movimiento Europeo

El Consejo de Ministros del 23 de diciembre de 2024 reconoció la titularidad del Partido Nacionalista Vasco (PNV) sobre el edificio de la avenida Marceau 11 de París, antigua sede del PNV en el exilio, incautada por el ocupante nazi durante la Segunda Guerra Mundial.

Esa es una vieja reivindicación del Movimiento Europeo, con el apoyo de todos los grupos políticos –incluido el PP- desde hace muchos años. Incluso en 2012 el presidente del Movimiento Europeo Español Eugenio Nasarre, siendo diputado del PP, consiguió colocar una placa en el sonado edificio con presencia del Movimiento vasco y español, donde se reivindicaba una vez más la restitución del inmueble a su propietario, la formación jeltzale.

El inmueble fue comprado en 1937, a título personal, pero por encargo del PNV, por Marino de Gamboa con la aportación de varios exiliados en Estados Unidos. La empresa Finances et Enterprices S.A. (integrada por militantes del PNV), a su vez, lo compró en 1939 y lo alquiló a la Liga Internacional de Amigos de los Vascos, entidad del PNV, que lo concedió para el establecimiento del gobierno vasco en el exilio. En 1940 la Gestapo con el apoyo de policías militares, ocupó el edificio, que se convirtió en sede de la Falange en París. En 1943, un tribunal francés bajo la ocupación nazi adjudicó los bienes de la empresa propietaria al Estado español. En mayo de 1944, el PNV recuperó el control del edificio hasta que en 1951 un tribunal francés ordenó la entrega al Estado español en base a la sentencia de los tiempos de la ocupación nazi.

El edificio tiene una especial significación histórica, porque en él se constituyó el Consejo Federal Español del Movimiento Europeo (CFEME), el 8 de febrero de 1949, tras el reencuentro de demócratas exiliados españoles en el Congreso del Movimiento Europeo de La Haya de 1948 a iniciativa de Salvador de Madariaga, con la participación de José Antonio Aguirre, Indalecio Prieto y el  doctor Josep Trueta, entre otros.

En el acto fundacional del CFEME estuvieron representadas diversas corrientes de la oposición antifranquista. Participaron Charles Pi i Sunyer, Ramón Nogués, Josep Tarradellas y Joan Sauret, de Esquerra Republicana de Catalunya, Fernando Valera y Juan Arroquia, de Unión Republicana, Salvador Quemades y Julio Just, de Izquierda Republicana; José Antonio Aguirre, José María Lasarte y Javier de Landaburu del Partido Nacionalista Vasco; Trifón Gómez, del Partido Socialista Obrero Español, y Salvador de Madariaga. El resultado fue la creación de un instrumento de coordinación y cooperación de la oposición democrática en el exilio llamado a jugar un papel clave en el entendimiento entre la oposición interior y exterior en la lucha antifranquista.

Su primer paso fue el Congreso del Movimiento Europeo de Munich en 1962, calificado de contubernio por la propaganda franquista, que deportó a Fuerteventura a muchos de sus participantes. Entre ellos, Fernando Álvarez de Miranda, que fue presidente del Congreso de los Diputados constituyente. Fue una escuela de diálogo y libertad en la transición democrática y tuvo gran relevancia en el proceso de adhesión de España al Consejo de Europa y a las Comunidades Europeas.

En el libro 75 años del Consejo Federal Español del Movimiento Europeo, París, febrero de 1949 editado por Francisco Aldecoa y Eugenio Nasarre, se explica con todo detalle los fundamentos jurídicos y la controversia sobre la sede del PNV en el exilio. Situándolo en su contexto histórico.

Se ha realizado un acto de memoria democrática con voluntad de futuro.

HARÍAN BIEN, FEIJÓO, TELLADO, SAMPER Y ANDRES EN CONSULTAR CON AZNAR

Miércoles 29 de enero de 2025

Conseguida la devolución de los Batzokis en los primeros años de la transición quedaba como la gran joya el edificio de la Av Marceau y otros dos inmuebles, en Francia de tal forma que necesitado José María Aznar de nuestros votos para asegurar su legislatura en 1996, negoció con el PNV este apoyo. Felipe González, tras catorce años de gobierno había sido superado por Aznar y éste quería con el apoyo de CiU, CC y el PNV, ser presidente del gobierno.

Tratamos en primer lugar de lograr un pacto de legislatura pero por presión  sindical, a cuenta de la transferencia del régimen económico de la Seguridad Social, nos ajustamos a un Pacto de investidura con tres acuerdos:

1.- Cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika.

2.- Renovación y Adaptación del Concierto Económico

3.- Devolución del Patrimonio Incautado por motivo de la guerra y la dictadura. Lógicamente en este apartado estaba la Delegación de la Av. Marceau a lo que el PP de Aznar accedió.

He contado como Álvarez Cascos nos remitió al abogado del estado Fernando  Moreno y  con él negociamos este apartado. En  este tira y afloja nos ofrecieron comprar la inmueble. Reconocían que era el PNV el propietario pero nos decían que su ubicación cerca de la embajada española en París era todo un conjunto y que nos era mejor se lo vendiéramos al estado algo a lo que nos negamos. El llamado Palacete es un edificio simbólico consagrado aún más por esta polémica interesada de la derecha y ultra derecha española responsable de su incautación en 1940 por la Gestapo y en 1951 por el gobierno de Franco.

Para mí ha sido una gran sorpresa que el Partido que negoció con el PNV este asunto haya salido mintiendo, injuriando, acusando de venta del PNV por unos simples votos a Sánchez de un Palacio en París. Vale absolutamente todo.

Esta semana ha continuado la polémica en los medios. Afortunadamente ayer en La Vanguardia el ex presidente del Parlamento Europeo Enrique Barón lo centraba en la construcción europea ya que en ese edificio en 1949 se creó el Consejo Federal del estado español del Movimiento Europeo. Conté como logramos colocar una placa en su pasillo de entrada con un añadido tóxico que nos escribió el ministerio de exteriores.

Pero el colmo ha sido los distintos informativos y editoriales madrileños así como programas de TV.

La semana pasada estuve con Risto en Cuatro explicando cómo siendo portavoz del PNV en el Congreso me tocó negociar con el PP este asunto tras el pacto con Aznar. Pero el tema siguió y este lunes tuve una polémica en Cuatro con la diputada del PP Ana Vázquez que aparte de acusarnos de pro etarras con medias verdades montaba toda una argumentación absolutamente asquerosa. Llegué a decirle que si no le importaba las incautaciones de la Gestapo y de Franco era todo menos demócrata. Javier Chicote le dijo que  yo siempre había estado en contra de ETA.

Pero ayer mismo, la manipulación vino de Javier Andrés que metió en su argumentación hasta a Mussolini y el Pacto de Santoña. Vale todo. Pilar Rahola desde Uruguay intervino y nos defendió muy bien pero Andrés insistió  en el Pacto de Santoña, y todo sacado de contexto. Olvida Andres que Franco se había sublevado contra un régimen elegido como el de la República y que ganó la guerra con ayuda del nazismo y el fascismo y que ante aquel abuso de Hitler y Mussolini en la guerra civil ayudando a los sublevados y ante la indefensión absoluta, bombardeos incluidos, el PNV pactó con los italianos  el fin de la guerra pues entre dos males parecía el menor  hacerlo con el general Roatta, mucho más que con el español golpista general Valera o con Franco. Pero no sirvió de nada pues Franco encarceló sanguinariamente a todos los líderes y gudaris en Santoña.

Sacar esto como argumento a cuenta de un edificio adquirido en agosto de 1936 y desconociendo que el gobierno vasco se creó en octubre de 1936 y Bilbao cayó en 1937 en manos del fascismo. Que venga ahora Andrés metiendo a Mussolini de por medio o Borja Semper hablando de regalo inmobiliario o Manuel Tellado llamando al PNV “aprovechategui asqueroso” nos da una fotografía de situación de una derecha no democrática, no sensible con el robo, profundamente autoritaria e impresentable.

Como diría un chaval, ante lo que hemos visto estos días, flipo. Y Flipo a colores ante semejante manada de Gorilas como diría Esteban González  Pons.