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  1. Cómo los rivales de Maduro demostraron que las elecciones en Venezuela fueron robadas
    The Observer 11 de agosto de 2024Tiago Roger

    Los activistas dicen que Edmundo González, arriba, ganó el 67% de los votos.
    El mes pasado, al final de la jornada electoral en Venezuela, un observador acreditado por la oposición pidió una copia del recuento de votos emitidos por cada candidato en el centro de votación que estaba supervisando. Un soldado se negó y, cuando el observador insistió en que era su derecho legal, lo arrastró hasta un baño y lo encerró. Solo cuando todos los demás se habían ido del centro de votación, el observador fue liberado.

    En la calle, un hombre le entregó un papel: era un funcionario electoral que, durante el tumulto, había impreso en secreto una copia adicional del recuento de votos. “Toma esto, no le digas a nadie que te lo di”, le dijo.

    El observador tomó una fotografía del código QR y la envió a través de una aplicación de mensajería segura. Luego se dirigió a una casa cercana donde otros voluntarios usaban un escáner para digitalizar copias de los registros que habían reunido.

    Escenas similares se produjeron en todo el país ese domingo por la noche en una operación meticulosamente planificada que involucró a decenas de miles de voluntarios de la oposición que trabajaron juntos para revelar el verdadero resultado de las elecciones.

    El consejo electoral de Venezuela, controlado por el gobierno, pronto declaró la victoria de Nicolás Maduro, el heredero político autoritario de Hugo Chávez, quien dijo que había ganado con el 51,21% de los votos, en comparación con el 44,2% de su rival Edmundo González. Pero dentro de las 48 horas posteriores a la elección, la coalición de oposición anunció que su candidato había ganado, y tenían las pruebas para demostrarlo.

    Gracias a un plan que se había elaborado durante meses, los activistas de la oposición habían logrado reunir más del 83% de los escrutinios, que mostraban que Maduro había ganado solo el 30% de los votos y González el 67%. Los escrutinios escaneados se subieron a un sitio web, que mostraba el resultado general y el resultado en los distintos centros de votación.

    “Ha sido una brillante jugada política de la oposición, un logro logístico sumamente impresionante”, dijo Andrés Pertierra, candidato a doctorado en historia de América Latina y el Caribe en la Universidad de Wisconsin-Madison. “Básicamente, la oposición está obligando al chavismo a reconocer el hecho de que están robando las elecciones”.

    La operación para reunir los votos se preparó durante nueve meses y se llevó a cabo a plena luz del día bajo uno de los regímenes más autoritarios del mundo. “Ya sabíamos que el CNE [el consejo electoral controlado por el gobierno] no era un árbitro imparcial, así que desde el principio supimos que no sólo necesitábamos ganar sino demostrar que habíamos ganado”, dijo un activista de la oposición, que pidió el anonimato por temor a ser arrestado.

    Aunque las estrategias no fueron reveladas públicamente, la existencia del plan nunca fue un secreto. En enero, la opositora María Corina Machado –quien nombró a González como su reemplazante cuando el gobierno le prohibió postularse– anunció la creación de la red “600K”, en referencia a los 600.000 voluntarios que esperaban reunir.

    Los activistas fueron capacitados para utilizar una aplicación especial para informar retrasos o irregularidades en los centros de votación y para escanear el código QR en cada recuento.

    En un esfuerzo por frustrar la campaña, el gobierno añadió nuevos obstáculos para registrarse como observador. Los colegios electorales fueron custodiados por soldados, policías y leales chavistas que lograron negar el acceso a las actas en aproximadamente el 16,5% de los 30.026 colegios electorales. “Lo intentaron”, dijo el activista. “Pero no lograron detenernos”.

    El gobierno de Maduro ha descartado el resultado de la oposición como un fraude, pero los recuentos han sido verificados por cuatro análisis independientes.

    El fiscal general de Venezuela, Tarek Saab, leal a Maduro, dijo que abriría una investigación criminal sobre el sitio web de resultados de la oposición, alegando falsificación de documentos públicos, delitos informáticos y conspiración.

    Estados Unidos y otros países han reconocido la victoria de González, mientras que incluso los gobiernos de izquierda de México, Brasil y Colombia –tradicionalmente simpatizantes del chavismo– han instado a Maduro a publicar los recuentos de votos.

    Entre las al menos 1.200 personas detenidas desde el día de las elecciones se encuentran decenas de activistas implicados en el operativo. Andrés Caleca, ex presidente del consejo electoral, afirmó: “Los héroes de estas elecciones fueron los observadores de la oposición en los colegios electorales”.

    Título del artículo: Cómo los rivales de Maduro demostraron que las elecciones de Venezuela fueron robadas
    Publicación: The Observer
    Autor: Tiago Rogero
    Página de inicio: 27
    Página final: 27

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