El Presidente del Banco Central Europeo sin cinturón

Sábado 14 de enero de 2012

Mario Draghi es el presidente del Banco Central Europeo. Tiene fama de ser una persona impecable. Un empollón perfecto. Por eso ha llamado la atención que un fotógrafo lo haya pillado en Roma conduciendo él su Toyota, sin escolta, sin cinturón de seguridad y hablando por su móvil. Todas estas infracciones en Alemania serían propicias a recibir una buena sanción social pero, sin embargo, en Italia, le han humanizado porque es lo que hace la mayoría de sus conciudadanos. Curiosa manera de ver la vida. Es el estado de ánimo italiano bajo otro perfecto alemán, como el presidente del gobierno Mario Monti. Un humorista le describió como una persona que «supura humanidad de cada microchip»

No sé si estos venerables político-técnicos lograrán sacar a sus países y a Europa del agujero en el que se encuentra, ojalá, pero conviene recordar quienes son, por encima de las anécdotas.

Goldman Sachs

Es uno de los mayores bancos de inversión mundial y co-responsable directo, junto a otras entidades como la agencia de calificación Moody’s, de la crisis actual, y uno de sus mayores beneficiarios. Sólo a modo de pincelada, en 2007 ganaron 4 mil millones de dólares en operaciones que desembocaron en el desastre actual. ¿Cómo lo hicieron?. Animaron a los inversores a invertir en productos sub-prime que sabían que eran productos basura, y al mismo tiempo se dedicaron a «apostar» en bolsa por el fracaso de los mismos. Eso es sólo la punta del iceberg, y está muy documentado, podéis investigarlo. Mientras leéis este e-mail se están forrando a base de especulación sobre las deudas soberanas.

Papademos

Actual primer ministro griego, no elegido por el pueblo, tras la dimisión de Papandreu.

– ex-gobernador del Banco de la Reserva Federal de Boston entre 1993 y 1994.

– vicepresidente del Banco Central Europeo de 2002 a 2010.

– Miembro de la Comisión Trilateral desde 1998, fundada por Rockefeller, lobby neo­liberal (se dedican a influir a políticos).

– ex-Gobernador del Banco de Central Grecia entre 1994 y 2002. Falseó las cuentas de déficit público del país con la ayuda activa de Goldman Sachs, lo que condujo en gran parte a la actual crisis que sufre el país.

Mariano Monti

Actual primer ministro de Italia, no elegido por el pueblo, tras la dimisión de Berlusconi.

– ex director europeo de la Comisión Trilateral antes mencionada.

– ex-miembro del equipo directivo del grupo Bilderberg.

– asesor de Goldman Sachs durante el período en que ésta ayudó a ocultar el déficit del gobierno griego.

Mario Draghi

 Actual presidente del Banco Central Europeo en sustitución de Jean-Claude Trichet.

– Ex-director ejecutivo de del Banco Mundial entre 1985 y 1990.

– Vicepresidente para Europa de Goldman Sachs entre 2002 y 2006, periodo en que se realizó el falseo antes mencionado.

Bien, qué casualidad, todos de la mano de Goldman Sachs. Los que crearon la crisis se presentan ahora como la única opción viable para salir de la misma, en lo que la prensa estadounidense está empezando a llamar «El gobierno de Goldman Sachs en Europa».

Se tiende a querer hacernos pensar que la crisis ha sido una especie de resbalón, pero la realidad apunta a que detrás de ella hay una voluntad perfectamente orquestada de hacerse con el poder directo en nuestro continente, en una maniobra sin precedentes en la Europa del siglo XXI. La estrategia de los grandes bancos de inversión y agencias de calificación es una variante de otras llevadas a cabo anteriormente en otros continentes, se viene desarrollando desde el inicio de la crisis y esta desde mi punto de vista está siendo la siguiente:

1. Hundimos a los países mediante la especulación en bolsa/mercado. Los volvemos locos de miedo a lo que dirán los mercados, que nosotros controlamos, cada día.

2. Los obligamos a recurrir a préstamos para mantenerlos en Status Quo, o «salvarlos». Estos préstamos están estrictamente calculados para que los países no los puedan pagar, como es el caso de Grecia que no podría haber cubierto su deuda ni aunque su gobierno vendiera el país entero, y no es ninguna metáfora, es matemática. De momento, ante la inexistencia de una gobernanza económica, es solo lo que hay.

El vasco Irazusta

Jon Andoni de Irazusta fue diputado del PNV en las Cortes de la República. Tolosarra, intelectual exiliado, murió en Perú siendo sacerdote. Escritor en euskera de varias obras, la principal «Joanixio», fue portavoz suplente del Grupo Parlamentario Vasco en aquel Congreso de los Diputados tan en ebullición.

Cuando tuve que ir por primera vez a Bahía Blanca a la celebración de la Semana Nacional organizada por la FEVA (Federación de Entidades Vascas de Argentina) con el presidente del Parlamento Vasco Juan José Pujana, el senador Joseba Elosegi y el afiliado Agustín Elorza, nos encontramos allí con un hombre entusiasta al que el delegado del Gobierno Vasco, D. Pedro de Basaldua, temía. «Este hombre con su máquina infernal (un teletipo) me vuelve loco». Simpático, extrovertido, agradable, exagerado, orgulloso de su familia, era el alma del Centro Vasco de Bahía Blanca y no paraba de hablar de su tío. Hoy lamento no haberle cogido notas sobre aquella relación de persona a quien tanto admiraba.

Con el tiempo, viajó a Bahía Blanca Xabier Arzalluz y a su vuelta nos contó que llegaron tarde al aeropuerto e Irazusta logró algo imposible. Que al avión, ya en pista, volviera a recogerlos. Ese era el bueno de Irazusta.

Hace dos años fui a la Semana Nacional Vasca celebrada en Mar del Plata y saludé a mucha gente. En una de las mesas estaba la familia Irazusta y recordé estas cosas. Andoni ya había fallecido. Seguramente estaría allí Iñaki Irazusta, hijo de Andoni, el sobrino del diputado jelkide. Por eso me ha impresionado ver el buen trabajo hecho por Iban Gorriti sobre Iñaki, fallecido a sus 52 años en accidente de la camioneta que conducía. Dantzari, (faltaría más en este horno del abertzalismo que es el Centro de Bahía Blanca), era un gran deportista y seguidor del rugby desde niño y decían de él que no te daba la mano sino un abrazo. Una auténtica lástima esta muerte que ha convulsionado a toda una colectividad y me ha recordado a su aita, el inefable Andoni, aquel abertzale que también lo llenaba todo. Mi pésame a su mujer Alejandra y a sus hijos, Ainhoa, Iker y Xanti.