Mas, Van Rompuy y Rajoy

Martes 17 de diciembre de 2013

Una de las claves de la actual situación catalana tiene nombre y apellido: Artur Mas. Madrid le minusvaloró. Creyó que después de Pujol, nadie tendría su fuerza y ascendiente así como su determinación. Creyeron que era un vendedor de El Corte Inglés en lugar de un líder político con una idea clara sobre su país. Una vez más se equivocaron. Posteriormente creyeron que a Mas podrían tratarle como al Lehendakari Ibarretxe. Se ponen de acuerdo Rajoy y Rubalcaba y se acabó. Pero la cuestión es distinta. El Lehendakari llevó a Madrid una reforma estatutaria valiente, pero susceptible de no admitirse a trámite como sucedió. Mas estaba en la tribuna de invitados y aprendió de aquella arriesgada y valiosa decisión del Lehendakari.

Y Artur Mas habló con su familia. El único camino para que Catalunya sea respetada es éste. Su familia le dio el visto bueno y ahí está liderando una opción a la que ya han comenzado a tirarle encima plomo líquido. Nada nuevo. Estaba previsto.

Van Rompuy visitó esta semana Madrid, es decir España, porque Madrid es España. Fue recibido en la Moncloa por Rajoy. Ese día le daban un Honoris Causa en alguna universidad. Pero sabía que en la rueda de prensa le iban a preguntar por Catalunya. Y se trajo la respuesta escrita para rechazar la consulta y meterle un palo en la rueda. Podía haber estado más prudente, ya que en su país, en poco tiempo, en Flandes plantearán lo mismo. El día que lo eligieron presidente del Consejo Europeo uno de los que más le conocían dijeron de él que tenía el carisma de una bayeta. No lo sé. Demostró falta de personalidad ante Rajoy, porque ¿cómo se le quita a un europeo su nacionalidad europea?.

Y, finalmente Rajoy. No habrá referéndum. Es lo único que se le ocurre decir. No analiza el por qué los catalanes, mayoritariamente, no quieren ser españoles. ¿Se han vuelto locos o están hartos?. Y si están hartos ¿por qué están hartos?. No, eso no se analiza. España es Una, Grande y Libre y se acabó. A diferencia del primer ministro inglés, tan conservador como él, Rajoy no acepta democráticamente el desafío. Solo dice que no se hará, mientras acarician el 155 de la Constitución para suspender la autonomía catalana. Palo y tente tieso. Pero el camino es irreversible. También a Mandela le metieron 27 años de cárcel y al final estaban todos en su funeral.

Esto se pone interesante.

 

2 comentarios en «Mas, Van Rompuy y Rajoy»

  1. Buen articulo.Tenemos ahora 2 estadistas que son Artur Mas y Oriol Junqueras.
    Pero quién lidera el proceso es el Pueblo.Artut Mas y CIU quisieron liderar el proceso pero como la gente les vió dubitativos bajaron 12 diputados.Ahora CDC ha decidio apostar seriamente por un estado independiente y así si que se mantendrá a flote e incluso ganará votos.
    Ahora parece ser que los grandes empresarios ya han dado el visto bueno al estado independiente.Las PYMES pequeñas y medianas empresa ya eran casi al 100% independentistas.

    Resumiendo : A favor de la independencia tenemos :
    1. Al Publo catalan,la mayoría y cada vez más.
    2. Al Govern, la Generalitat de Catalunya.
    3. A l’AMI, la mayoría de los ayuntamientos.
    4. A los partidos políticos ; CDC,ERC,CUP y seguramente Unió i ICV.
    5. L’Abadia de Montserrat, que es la Iglesia Catalana.
    6. Dijo Juan Rossell que los grandes empresarios estan virando hacia el soberanismo.

    IM-PA-RA-BLE.

    Saludos, y los próximos Euskadi porque sin el dinero catalan iran a buscar vuestro dinero y se os llevaran hasta el arbol de Gernika esas elites extractivas de Madrid.

  2. ¡Qué morro tiene,Senador!
    El Mas que yo he conocido, el que con cargo al Presupuesto nos invitaba al cinco estrellas más relucientes, acompañado de su séquito, para hacerse propaganda como heredero de Pujol desde su posición de «conseller en cap» era un impresentable entonces y lo es ahora. Un impresentable pasado por las escuelas francesas, pero un impresentable porque el control del poder es su brújula y no otra cosa. Su padre le regaló un timón pero el ha equivocado el rumbo y. Pretende llevarme a donde no quiero. ¡No queremos ese destino, ni yo, ni muchos otros en Cataluña!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *