¿Quién ha pedido perdón en España por sus crímenes?

Viernes 27 de abril de 2012

Los últimos viernes de cada mes, Aitzol Zubizarreta nos invita a su programa informativo y de opinión de ETB a Txiki Benegas, Ramón Rabanera y a mí. En media hora hacemos un comentario político y discutimos entre nosotros. Hoy los temas del día venían señalados por la actualidad y han sido los siguientes: victoria del Athletic, debate sobre el acercamiento de presos, crecimiento del paro y nuevo ingreso del rey en la clínica a cuenta de una luxación de cadera.

En relación al Athletic todos hemos coincidido en la importancia de haber llegado a las dos finales, en la sintonía entre el equipo y la afición y en la necesidad que tiene una sociedad golpeada por la crisis de tener alegrías así como en la preocupación de que se lleven a Bielsa o a algún jugador en este momento en el que se le ve al equipo tan conjuntado.

En relación a los presos, Ramón Rabanera ha reconocido que el gobierno debería haberse entrevistado previamente conla Asociaciónde Víctimas del terrorismo y no después de dar la noticia. Le he comentado que puede tener razón pero que la culpa de la actitud de algunas Asociaciones de Víctimas la tiene el PP. Durante los años socialistas el PP se ha dedicado a dar a estas asociaciones no la debida cancha en lo que directamente les afecta que es el reconocimiento, lo solidario, lo asistencial, sino una gran beligerancia en lo político y cuando se han acostumbrado a decirle al PP y a todo el mundo lo que tenemos que hacer, es muy difícil desactivar esa matriz de comportamiento. Y lo tienen que hacer, porque en ninguna legislación del mundo existe eso tan etéreo como la pe­tición de perdón. Y es que además, estoy seguro de que si lo hicieran, o no se fiarían y estas Asociaciones no lo admitirían porque dirían que no tienen credibilidad. El caso es cerrar cualquier posibilidad de entendimiento en tema tan delicado. Las victimas tienen que estar en su si­tio, y la política en el suyo. Y no veo punto de unión en algunas asociaciones para llegar con ellas a ningún tipo de acuerdo. Y además ya se ocupará Mayor Oreja de calentar el puchero y de hacer imposible cualquier entendimiento.

Por la otra parte ahí está Bildu que protesta por la iniciativa. Los extremos tocándose. Otros que no se han enterado de que el margen de maniobra  que tiene el gobierno como se ve por la protesta de la extrema derecha es mínimo y otros que no se han enterado que el PP no negociará nada global. Cuanto antes se caigan del burro, mejor para todos.

ETA se tiene que disolver. Es lo primordial. Eso arreglaría las cosas y el gobierno podría proceder si las asociaciones de víctimas trataran de ayudar a salir del atasco, siempre y cuando no se hagan barbaridades por ninguna de las partes.

¿Pedir perdón?. ¿Ya lo hizo la jefatura del estado ayer ante el 75 aniversario del bombardeo de Gernika?. ¿Ya lo hizo el PP ante las crueldades y asesinatos de la dictadura?. ¿Ya lo hizo Fraga por haber pertenecido al gobierno de Franco?. ¿Ya lo hicieron prebostes, policías, embajadores y ministros del antiguo régimen?. ¿No?. Entonces ¿de qué estamos hablando?

Si Batasuna quiere que las cosas se vayan encauzando debe actuar con cabeza política, no con maximalismos imposibles de atender. Si las Víctimas quieren que de verdad desaparezca ETA, deben tener mayor altura de miras aunque sea comprensible su alta sensibilidad. Si el PP quiere que ETA desaparezca debe ser aún más valiente. Si todos queremos normalizar las cosas, el Tribunal Consti­tucional ha de legalizar a Sortu y si todos queremos paz, algo hemos de hacer buscando puntos de encuentro en lugar de sacar espadas flamígeras.

Azurmendi, como siempre, manipula

Jueves 26 de abril de 2012

José Félix Azurmendi, gernikés e hijo del secretario de aquella ANV dela República, estuvo el jueves en la tertulia de Radio Euzkadi. ¡Qué prepotencia!.

Independientemente de que conozca muchas de las cosas de lo que aconteció en aquella Villa por hijo de represaliado, no deja la oportunidad de arremeter gratuitamente contra el PNV. Y voy a recordar dos casos de su manipulación matutina.

Ángel Ojanguren fue procónsul inglés y colaborador de Stevenson, el cónsul británico en Bilbao. A Ojanguren le conocí. Era un vasco republicano que terminó como delegado del Gobierno Vasco en Roma y le editamos su libro. Con su familia Seijó tuvimos la mejor de las relaciones. Pues bien, Azurmendi, gratuitamente, se ha permitido decir que le abandonamos.

De Joseba Elosegui ha dicho que ante la «inactividad” del PNV el hombre se lanza en llamas ante Franco y le lleva a Monzón su libro «Quiero morir por algo» para que se lo editase porque no quería saber nada con el PNV. Da la casualidad que entonces Monzón además de presidente de Anai Artea era afiliado del PNV y seguramente Elosegui optó por acudir a Monzón, pues en tiempos de clandestinidad, no había editoriales que sacasen al mercado libros vascos y probablemente confió más en la vena publicitaria de un Monzón ya que eso lo hacía muy bien. Sin más. No sabe Azurmendi que Granada Televisión, una productora británica hizo un reportaje al que tituló «El hombre enla Ventana» que tradujimos del inglés al castellano en Caracas y luego divulgamos por todas partes. Lo del título venía al verse a Joseba, cuando en el hospital, curaba sus heridas y se le ve de lejos y en un momento asomado a la ventana. Luego, hay que recordar a Azurmendi que Joseba Elosegui no se fue con HB cuando Monzón lo hizo, sino que fue senador del PNV en 1979. Permitirse como se ha permitido Azurmendi y sin venir a cuento, agredir por agredir al PNV sin más, es para criticarle por su irresponsabilidad. Una más. Por su falta de rigor. Una más.

Y él que sabe tanto de todo, podía, haber recordado a otro olvidado que a pesar de ser cura y canónigo, nadie ha mencionado. Me refiero a Don Alberto de Onaindia, hombre clave en la denuncia de aquella masacre.

Pero es la radio pública que tenemos. No saben, no quieren saber, ponen al sabiondo oficial que dice lo primero que se le ocurre contra los demás y tira millas.

 

Socialistas de élite

Lunes 23 de abril de 2012

De Suresnes al club del millón de euros

EI pasado jueves presenté en el Centro Riojano de Madrid, junto a su autor Javier Chicote, la editora del libro María Borras y el presidente del Centro Riojano, “Socialistas de Élite» un libro muy notable, que no carga las tintas en los juicios de valor en relación con todos aquellos socialistas que una vez lo fueron y como tales llegaron al equipo de Felipe González. No se trata pues de un relato de socialistas en activo, como Pérez Rubalcaba o Guerra (aunque la fecha de edición no les cogió a Marín, Chaves y Bono), sino es el seguimiento biográfico de aquella generación que llegó al poder en 1982 y saber que es lo que hacen ahora. De la pana, al caviar, podría ser también otro de los títulos del libro, porque de aquel Isidoro que se presentó en Suresnes con Mugica y Guerra, no queda nada. Absolutamente nada. Sus amigos no son los descamisados de Guerra sino los inmensamente ricos como Carlos Slim y otros potentados.

A todos estos socialistas les he conocido del otro lado de la barrera, es decir cuando eran ministros o secretarios de estado y por eso, analizando el balance que nos deja Chicote en su libro, lo que impresiona es que González, Solana, Solchaga, García Vargas, García Valverde, Cosculluela, Aranzadi, Egiagaray… no se hayan juntado para crear una fundación en favor de algo, sino cada uno ha ido por su lado y se ha convertido en un grande o pequeño capitalista donde lo que les mueve es su interés y el afán de lucro, el cobrar de los mil consejos en los que participan, ejercer las centenares de influencias que usan en función del cargo habido y a veces la nula humanidad. Ser socialista ¿ para eso?.

Se puede entender con treinta años y una vida por delante pero que sesentones y setentones con los hijos criados y educados, las casas compradas y los deberes hechos, solo piensen en dinero llama la atención. El juicio, desde al punto de vista ideológico, no es nada favorable.

Termina Chicote su libro entrevistando a Vera y Barrionuevo. El primero debe tener un borrador escrito con todo lo hecho en la etapa del Gal. Más de uno estará incómodo por el dato. Pero, con acierto, Chicote termina su libro con un epílogo donde habla de la coherencia de Julio Anguita.

Éste vive modestamente de una pensión, hace la compra, juega a las cartas, da conferencias, opina y escribe cuando se le requiere y se ha convertido en un sabio de la vida. Frente al enriquecimiento socialista, la frugalidad del cordobés. Y es que se puede ser todo en la vida menos un desclasado. Lo comenté al terminar mi presentación. Había visto una entrevista del Loco dela Colinaa Joselito, el torero retirado que ha sacado un libro de memorias. Al final el Loco, le pregunta al Maestro si es un nuevo rico o un viejo pobre. Joselito reflexiona y le dice. “Las dos cosas, pero tengo dos hijas y les recuerdo que yo viví en una buhardilla de ocho metros cuadrados con un baño para cuatro buhardillas y si ahora vivimos bien, venimos de aquello, y eso marca. Y el Loco cerró diciéndole: “me gusta la gente que no se desclasa. ¡Ole Maestro!”.

Sin embargo ésto no puede decirse de los socialistas de Felipe González. La investigación y el trabajo de este joven investigador como Javier Chicote, valen la pena. Lo recomiendo.