Por favor. No nos den clases de democracia ni de participación

Los comportamientos democráticos no son fáciles de adquirir. Este imperfecto  sistema político es una apuesta por la convivencia, por la empatía, por compartir y  por renunciar muchas veces a parte de tu verdad. Pero así se estructura  una sociedad  libre, madura y en progreso.

EI mundo de HB en 1977 cometió, aparte de un inmenso delito moral, un garrafal error estratégico. Existía una ETA nacida bajo el franquismo en respuesta violenta a la violencia institucional del régimen y, en lugar de dar una  oportunidad a la convivencia pacífica, creyeron en una victoria que llamaban militar por parte de una organización que practicaba el terror y nos quería organizar nuestras vidas en base a una Euzkadi socialista, reunificada y euskaldun. Todavía no habían hecho suyo el nombre permitido por el franquismo y utilizado por el carlismo de Euskal Herria.

En el hotel Txiberta de Anglet se juntaron representantes de ETA (M), ETA (PM), ANV, EIA, LAIA, EHAS, ESB, Branka, el Grupo de alcaldes de Bergara y el PNV representado por Juan José Pujana, Gerardo Bujanda  y Joseba Azkarraga. El anfitrión fue Telesforo de Monzón. La propuesta mayoritaria era la de no acudir a las primeras  elecciones legislativas convocadas por Suárez para junio de ese  año 77. Fue el  propio Argala el que quiso escenificar la oferta que  hacía  ese mundo de dejar las armas si se asumía aquel programa común, poniendo su pistola encima de  la mesa, tal y como  recordaba José Elkoro, participante en aquellas  conversaciones como alcalde de Bergara. El  PNV se  negó y argumentó que fallecido el dictador era la hora de la política y de acabar con  aquella pesadilla  y participar en la contienda, entre otras razones, para sacar a los presos de las cárceles, como  así  ocurrió al poco con la  ley de Amnistía en octubre de ese año. Desgraciadamente ETA y la llamada Izquierda Abertzale decidieron seguir con la lucha armada. La primera víctima tras aquellas elecciones fue el ex alcalde de Bilbao, Javier Ibarra. El PNV había obtenido ocho diputados y con el PSE y ESEI logró el cupo en senadores eligiendo a personalidades tan representativas como Manuel de Irujo, Ramón Rubial y Goyo Monreal. La política daba sus primeros balbuceantes pasos por un lado, y la  violencia  terrorista, continuaba por el otro.

De aquella Asamblea de Parlamentarios Vascos, con diputados y senadores socialistas navarros  en su seno, antes de la ruptura del PSE, surgió el borrador del estatuto de Gernika. El resto de la historia es conocida. Fue la gran  apuesta política.

El  mundo de HB acudía a las elecciones pero posteriormente no participaba en los foros para los que había sido elegida. Ni en el  primer Parlamento Vasco, ni en las Cortes Generales. Consideraban  que el hacerlo era legitimarlos  y como dijo Karmelo Landa en 1999: “no tiene mucho sentido que la izquierda abertzale defienda la participación en unos  comicios en los que se elige a los máximos representantes del marco político español. La coherencia nos exige cortar con las elecciones españolas. Cerramos el paso a la intromisión del estado español en el proceso democrático vasco».

Cuatro años antes militantes de Jarrai  habían ocupado los estudios de la cadena SER en San Sebastián y ante las críticas de todos  los partidos, el miembro de la Mesa nacional de HB José María Olarra, calificó la  iniciativa  como “una forma de presión y de lucha perfectamente  asumible».

En ese contexto ETA planteó, aprovechando  las elecciones legislativas que PNV, EA, IU y EH no participáramos en dichos comicios sino que organizáramos unas elecciones aparte para constituir un “Parlamento Nacional Vasco”. La propuesta incluía la Comunidad Autónoma Vasca, Navarra e Iparralde, similar a la que en 1996 se realizó en la región de la Padania, donde el líder de la Liga, Umberto Bossi salió elegido  como presidente. HB calló, como  siempre, y nosotros les dijimos que  era una propuesta infantil, irreal, fuera de lugar y sin sentido. Nada que ver con la  realidad.

Salpimento  algunos   recuerdos de estos años de  plomo, sin olvidar los asesinatos de ETA y del Gal, para, pasado el tiempo, ver con interés  como el  mundo de la IA acepta ya el marco y promete cumplir la  ley de partidos a rajatabla». Han pasado 34 años de vivir en el error, de manifestaciones cada fin de semana, de  cárceles y cementerios llenos, para que al final  hagan lo que hicimos todos  los partidos  en 1977.

Contaba Don Manuel de Irujo que  al final  del franquismo tanto Areilza como Dionisio Ridruejo parecían los únicos abanderados de la democracia  en España habiendo sido los dos colaboradores  del franquismo desde el falangismo  y desde la derecha más dura, pero habían ido evolucionando y ante las  perspectivas de un nuevo tiempo, aparecían como entusiastas apóstoles de la democracia dando lecciones a quienes perseguidos por ellos, se habían pasado cuarenta años en el exilio. Y ante aquel panorama escribió su citado  artículo al que  tituló: “Los conversos a la  cola”. El título resumía la petición.

Entiendo que en HB jamás harán la mínima autocrítica. En ese cerrado mundo no hay todavía mucho converso y si mucho estratega pero nuestra obligación es dar una oportunidad a la paz, a la  convivencia, al libre juego democrático, pero no dejando pasar ni una a estos nuevos demócratas que acaban de descubrir el juego institucional, todavía  tienen objeciones de fondo para pedirle a ETA  que desaparezca y quieren borrar estos treinta años de ignominia, de frases altisonantes para nada, de plataformas para todo, de tratar de representar desde la minoría la totalidad de lo vasco  y de miserable tiempo perdido sin mover un músculo. Ante ellos solo decirles: «Bienvenidos a casa pero, los conversos a  la cola!».

Lombana reivindica a Valentín de Foronda

José Luis de la Lombana era un joven militante del PNV alavés que llegó a ser director del diario Euzkadi en Barcelona tras la buena dirección de Pantaleón Ramírez de Olano. En 1938 el PNV le envió a Nueva York al Congreso Mundial de la Paz y de peripecia en peripecia  apareció en  Colombia donde rehizo  su vida.

En los años cuarenta le escribió una carta a su amigo Javier de Landaburu donde le pedía datos del patricio alavés Valentín de Foronda con  el fin de trabajar en una  biografía sobre aquel ilustre personaje. No me extraña  que  el diputado tolosarra Jon Andoni de Irazusta dijera que en Álava había cuatro personalidades de primer nivel en ese  momento y que eran Jesús de Galíndez, Javier de Landaburu, Antonio Gamarra y José Luis de la Lombana.

De esa carta  extraemos el apartado referido a Valentín de Foronda. Decía así:

Valentín de Foronda. Vascos en la Independencia de los Estados Unidos

Y, para final te voy a hablar y hacerte heredero de mis aficiones hacia Valntín de Foronda, castizo vitoriano bautizado en la Parroquia de San Vicente, del que tengo muchas papeletas, más de 500 enterradas en Gasteiz (¡pobrecillas y pobre de mí!) y estaba para escribir su biografía con Baig Baños, que murió poco antes de la guerra. El alavés, fue hombre liberal, estuvo también en la cárcel en la Coruña y en Vitoria y luego expatriado escribió en Francia, Burdeos, un libro sobre Tributación de Alava, libro que tiene que ser de un interés enorme por ocuparse del “irundirun», uno de los pocos impuestos que conservaba el nombre euzkeldun y que indica la forma en que se pagaba. Él, depositó un ejemplar del libro impreso en Burdeos y así consta en el Archivo de allí, el ejemplar, tiene que estar en la Biblioteca Nacional en París; si algún día quieres pasearte por las calles viejas de nuestro pueblo, con el espíritu y rondas las piedras de la Herrería, vete a la Biblioteca y lee a don Valentín.

Y es que Foronda, fue traductor de Condillac.- Segunda Edición de la Lógica de — puesta en diálogo por don Valentín de Foronda. -Madrid.- Benito Cano. 1800. Se distinguió en su época por su anticervantofia, como su padre don Manuel y estudió las «interpretaciones del Quijote”. Su figura destaca como profesor del Seminario de Vergara y yo guardaba la copia de la relación de sujetos condenados y procesados por la Inquisición en 1797, que encontré entre los papeles no clasificados en el Archivo Histórico Nacional en Madrid, en la que aparece don Valentín. Fue muy amigo de Xerica y como él expatriado. Estuvo de Cónsul de España en Filadelfia y perteneció a la Sociedad Filosófica de allí, donde se hizo el anteproyecto de la Constitución norteamericana, entonces don Valentín, les enseñó un ejemplar del Fuero de Bizcaya, para que vieran como en él, se consagraban y regulaban los derechos individuales. Cuando estuve en Filadelfia, visité la Sociedad, di una conferencia, sobre la significación de don Valentín, pero resulta, que aquella entidad ha evolucionado, y hoy tiene un matiz contrario al que le dieron sus fundadores. La intervención de otros vascos en la independencia de los Estados Unidos, fue estudiada en nuestra época por don Juan Francisco Yela Utrilla. «España ante la independencia de los Estados Unidos», dos tomos, premiados por la Academia de la Historia; aquí, no se preocupa de don Valentín, pero si se puede estudiar el medio ambiente de su época. De este Maestro tenía yo una carta el cual me decía que en el Archivo del Ministerio de Estado, había encontrado un documento, en el que se veía, como los vascos habían llegado a América antes de Colon; él, me facilito una copia y también está bajo la tierra que menos pesa… ¡Gasteiz!.

¿Por qué el PSOE y el PP no quieren un referendum?

La sorpresa del debate del martes en el Congreso fue el acuerdo hecho con secretismo y nocturnidad entre  Zapatero, Rubalcaba y Rajoy. Acordaron por indicación de  Angela Merkel y Sarkozy incluir en la Constitución un tope al déficit. España se alinea con Alemania y Francia y a menos de un mes de la convocatoria electoral  y con todos los plazos a punto de vencer, se lanzan a algo tan serio como un cambio constitucional de esta envergadura.

Pero lo hacen con trampa.  No quieren que haya un referendum  democrático y así como Zapatero para aquella fallida Constitución para Europa, hizo un referendum que salió con muy poca participación, en esta oportunidad se han puesto de acuerdo para no hacerlo. Y se aferran a su pacto que se podría romper si en el Congreso los 25 parlamentarios del PSC con el grupo Mixto pidieran se hiciera un referendum o, si en el Senado, lográramos 26 senadores dispuestos a ello.

Pero ¿por qué el PP y el PSOE no quieren algo tan sustancial con el funcionamiento democrático  como consultar al pueblo una decisión de esta envergadura?.

Pues muy sencillo. Porque tienen antes otra reforma que no quieren abordar y si abordaran ésta tendrían que hacerlo con la pendiente. ¿Cuál es?. Es el cambio constitucional para que no exista la supremacía del varón sobre la mujer a la hora de la sucesión en la jefatura del estado. Es decir que el machismo de esta Constitución y semejante violencia de género contra la mujer  deje de existir. De no haberlo consagrado así aquellos machitas e impresentables «padres constitucionales» como Roca, Cisneros, Pérez Llorca, Peces Barba, Sole Tura, Fraga y Herrero no le hubieran quitado a la Infanta  Elena su mejor derecho  de esta monarquía parlamentaria .Felipe es el tercer hijo, no el primero. Y lo malo es que lo consagra esta sacrosanta Carta Magna, machista e impresentable. Mala la monarquía, mala esta disposición.

Pero saben el PP y el PSOE que abordar un referendum solo con una pregunta sobre el Déficit  Público que al ciudadano se la trae al pairo y no incluir semejante agravio constitucional, sería un inmenso y muy criticable error político y, si incluyen una pregunta sobre esta anomalía contra la mujer, saben que ese referendum se convertiría  en un referendum sobre la monarquía española y sobre la pareja Felipe -Letizia. Y, aunque hoy por hoy, seguramente la ganarían se encontrarían con una campaña muy fuerte en contra, con una bandera para los indignados del 15M y los republicanos, una gran abstención y un resultado ajustado que pondría muchas cosas patas  arriba. Y es por esta razón por la que no están dispuestos a hacer referendum alguno. No hay más cáscaras.

El PP y el PSE, el PSOE y el PP se dicen a sí mismos que vertebran España y no están por la labor de poner en cuestión el gran chiringo y antidemocrático sistema monárquico. Y aunque la democracia se basa en la voluntad popular  y en  contar con la opinión del ciudadano que a ésta le den morcilla. Los experimentos con gaseosa.

Esta es la grave  explicación.