Santiago Ibargüen Beitia, médico exiliado, fundador de la Universidad Vasca y aita de las hermanas Ibargüen

Miércoles 1 de noviembre de 2023

Nació en Elantxobe el 20 de septiembre de 1912 y falleció en Bilbao en 1977. El  periódico Euzkadi, 28 de junio de 1929, anunció que Santiago Ibargüen volvía de Santiago de Compostela, junto con su madre y hermanos, al obtener la matrícula de honor en el primer curso de medicina, siguiendo después una carrera brillante.

Casado con Gezina  Batenburg fueron padres de cuatro hijos, Nekane, Frank, Begoña y Amaia, tres de ellas muy conocidas en el EAJ-PNV. Nekane Ibargüen, responsable de comunicación de IHOBE, Bego Ibargüen, quien fuera Directora de Gabinete y Relaciones Públicas del ayuntamiento de Bilbao con los alcaldes  Ortuondo, Azkuna, Areso y Aburto y Amaia Ibargüen, Directora de la Secretaría Técnica  y responsable de Actas del EBB y trabajadora del PNV en los edificios Granada  y Sabin Etxea.

Santiago Ibargüen en 1931 ingresa de alumno interino en hospital de Basurto. Fue nombrado ayudante clínico de medicina 1936, y al estallar  la guerra es militarizado, en el Cuartel Sanitario Muñoa en Burtzeña. Dio clases de fisiología en Facultad de Medicina de Euzkadi, con médicos de la talla de José Luis Obregón, Pedro Toledo, Julián Guimón, Rodrigo González Pinto, José Salaverri, entre otros. En plena guerra le hacen director del hospital  Médico de Durango. El 28/02/1937 es trasladado al hospital provisional del Club Deportivo de Bilbao. El 14/06/1937 los enfermos del hospital del Club Deportivo de Bilbao son evacuados a Santander.

Santiago Ibargüen fue afiliado al Partido Nacionalista Vasco (PNV), directivo del S.O.V. (Agrupación Médicos Vascos), profesor en Facultad de Medicina Universidad del País Vasco, siendo fundador de ella en noviembre de 1936, asesor técnico Hospital Club Deportivo y del Tribunal Médico Militar y voluntario desde el 19/07/1936. Se embarcó en buque de guerra de la República «José Luis Díez» y el 14/09/193 se refugió en Biarritz, explicándole al Lehendakari Agirre en carta motivos de su salida. En la Consejería  de Defensa lo incluyen en la lista del citado barco para salir en él a Francia.

Estuvo en el campo de refugiados en La Rochelle, Francia, auxiliado por Ramón de la Sota Aburto quien lo saca del mismo.

Santiago ya había convalidado y obtenido el título de médico en Francia, especializándose en gastroenterología, pero no comparte la situación política en ese país y decide marchar. El 13/05/1940 junto a su madre y hermanos, Juan y Julián, obtiene permiso de entrada a Venezuela. Salieron desde Marsella en junio de 1940. En Venezuela la vida no le fue fácil, ya que debía homologar su título para trabajar. Fue a Curazao y trabaja de médico en la Shell. Conoce a Gezina Batenburg Bakker de origen holandés que trabajaba como enfermera voluntaria en la Royal Dutch Shell. Vuelve a Venezuela, convalida el título, realiza curso de medicina tropical en el estado Anzoátegui. Pasó cuatro años como médico rural en Bergantín (Edo. Anzoategui)

Viven en Caracas donde se casó con Gezina. Trabajó en  la Clínica  del Dr. Aranguren como internista y otras como anestesista. Además de practicar la medicina privada durante quince años en Caracas. Fue socio fundador del Centro Vasco de Caracas. Marchó a Holanda en 1959, ofreció conferencias y estableció coloquios en la Universidad de Leiden sin cobrar, porque además se hacía entender en  holandés. Hablaba además euskera, francés e inglés.

Entró al estado español tras la guerra con pasaporte venezolano, dejando a los hijos en Holanda. En visita a Bilbao decide quedarse a vivir en esta ciudad, en 1960. Ejerce medicina privada, con clientela en Bilbao, Getxo y muchos pueblos de Bizkaia. Fue secretario general de los Gastroenterólogos de España. Fallece el 20 de abril de 1977 en San Mamés viendo un partido del Athletic.

Santiago Ibargüen, además de sus muchos méritos en Euzkadi fue uno de los profesionales de la medicina muy apreciados en Venezuela.

PJA

España juramentó a su Princesa. Todos muy felices

Martes 31 de octubre de 2023 

Todos los que nos criticaron y critican por nuestras denuncias contra el rey Juan Carlos, cuando decíamos que era un auténtico sinvergüenza y que no trajo democracia alguna se han dado cuenta, aunque nunca lo reconocerán, que teníamos toda la razón del mundo cuando han visto  que hasta su familia se avergüenza de él y de sus fechorías y estando en Madrid no le han invitado a tan señalada ceremonia, la de  su nieta al jurar  una Constitución que lo consagraba como «símbolo de unidad y permanencia», como ha recordado la joven Leonor. Eso se lo saben de memoria, aunque no tanto aquello de la «utilidad y ejemplaridad». Al pobre Campechano le han tratado como a un leproso de Molokai.

No invitarle, como al pariente pobre, no se hace. Con lo que hubiera disfrutado recibiendo esas reverencias hasta el suelo, parabienes, peloteos y él contando gansadas y soltando esas carcajadas borbónicas que tanto le caracterizan. Cuando estire su real pata, no lo verá, pero los que preparan su funeral lo trabajan ya como al de Isabel II y aquí paz, y luego gloria. Eso sí. No le invitarán ni a Corinna ni a sus amantes, que España en esto es muy rigurosa. Pero si recordarán que nos trajo la democracia y nos salvó  de sus cómplices el 23 F.

No desentonó la ceremonia alusiones a una España compuesta de naciones, es decir plurinacional, como en Bélgica, pues fue una ceremonia castellana de una monarquía castellana con princesa estudiando el uso de las armas pero no de los idiomas. Que nunca se sabe lo que pueda pasar habida cuenta como está el mundo. Se notaba que son descendientes de Felipe V, aquel rey que mandó Luis XIV y acabó con todo viso de heterogeneidad e impuso el jacobinismo .Si lo dudan  que lo pregunten a los catalanes que apostaron por los Austrias y en 1714 sufrieron las de Cain en  su osadía. Eso de pasar de las Españas de los Austrias a la España Una de los Borbones tiene su coste. Por eso después de Felipe V, vino Felipe VI. La cadena no se ha roto.

Me ha sonrojado verle al dirigente del PP Borja Semper disfrazado como si estuviera en una fiesta de Halloween. Fue aquel héroe vascongado que engañó a los propensos cuando dijo aquello que dejaba todo en Euzkadi para dedicarse a su vida privada y que la política había sido tan solo un paréntesis  en su vida. Era de verle hoy  declarando como  un marqués en la puerta del Congreso. De punta en blanco y con una  real medalla con bandera española colgando, imitando la del rey, que ya le gustaría haberla tenido Manuel Fraga. Siempre me ha parecido este caballero un auténtico fantasma y muy explicativo de lo que el PP representa  en Euzkadi. Un señor de Irun que en lugar del Real Unión o la Real Sociedad sea seguidor del Real Madrid, indica el pelaje del sujeto y sus tácticas para medrar en la Corte. Su banderín no pasó desapercibido. Ya no solo lleva la bandera en la muñeca, sino en el corazón. Le dará sus frutos. ¡Bravo Borja!. Llegarás lejos. Esas son las cosas que gustan  en la Cibeles. Vascos mayordomos y solícitos y buenos apaleadores del nacionalismo vasco.

Un dato histórico. El Lehendakari Ardanza estuvo en acto similar en la juramentación del padre de la Princesa en 1986. Pero han pasado cuatro décadas y todos hemos visto el pelaje  de un rey defraudador de hacienda, comisionista, mujeriego, con una máquina de contar billetes en Zarzuela, inútil para el deseado Pacto con la Corona, y un hijo que en lugar de arbitrar durante el Procés, se comportó como si fuera Abascal y no aceptando un estado plurinacional. Todo esto ha hecho que el Lehendakari Urkullu y el EAJ-PNV, no hayan estado  durante los casi cuatro minutos de aplausos de socialistas republicanos y peperos entusiastas. Plácido Domingo hubiera logrado por lo menos diez.

Si ha estado y muy contento el ex Lehendakari Patxi López que sin terminar sus cuatro años de Lehendakari se fue a Madrid  y ha sido hoy uno de los que se ha despellejado las manos aplaudiendo. Algo que debería haber hecho Urkullu en  opinión del consejero socialista Hurtado  que ha dicho respetar la decisión de Urkullu. ¡Vaya manera de hacerlo!.

En  todo caso, ha afirmado que, «si tuviéramos un lehendakari socialista habría acudido, como muestra de respeto institucional», dado que la jura de la Constitución por parte de la princesa, «más allá de otras valoraciones», supone «el sometimiento de la corona a la soberanía popular representada por todos». ¡Faltaría más!

No sé qué hubieran pensado de esto Largo Caballero, Indalecio Prieto, Zugazagoitia y hasta el propio Meabe, pero es el socialismo monárquico que tenemos que pasa del JuanCarlismo al Leonorismo, sin solución de continuidad. Y esto lo decía muy serio el consejero socialista Hurtado  actuando como portavoz del Gobierno Vasco en la Sede de Lehendakaritza, en sustitución a Zupiria, ausente por viaje.  Podía el hombre haber dicho, que no le correspondía dar una opinión contra su jefe en un acto institucional de un gobierno de coalición,pero es preciso hacer méritos. Pues no. Urkullu ha hecho mal. Pues yo creo que ha hecho muy bien. ¿qué quieren que les diga?.

Pelillos a la Mar. Ya tenemos princesa y ahora a conseguirle un novio guapo y obediente, no un Froilan cualquiera ni menos un juerguista  Juan Carlos cualquiera con sus risotadas tan graciosas. Formalidad. Para que dure el negocio.

Y un toque gracioso. La foto de la bandera descolorida es la de los pastelitos. La chapuza madrileña aupada por su Majestad la princesa Ayuso, es así. Las banderitas se han pegado al cartón de la caja y al abrir la movida queda tal que así. Algo tenía que fallar ante tanto protocolo y felicidad.

También Franco juró la constitución

Lunes 30 de octubre de 2023

Tenemos espectáculo garantizado, taconazos, discursos, acto en las Cortes para asistir a la juramentación de la Constitución española de la hija de Felipe VI, la joven de 18 años, Leonor. Previamente, y vestida de militar, lo hizo en Zaragoza. Ya se sabe. El ejército es quien mantiene la unidad de España y eso es mil veces más importante que hablar los idiomas cooficiales consagrados en una Constitución que no se cumple aunque se venere con evidente hipocresía.

Un amigo me comenta lo siguiente:

“Hoy la borbona Leonor, jura la constitución, vamos a retrotraernos un poco en esta cuestión…, Juan Carlos (el abuelo), juró lealtad a España, pero «regaló» el Sahara a Marruecos a cambio del apoyo de USA a su corona, luego juró lealtad a esa misma constitución…, pero su nombre sale constantemente como implicado en el golpe de estado del 23 F (de exilios, impunidades, corruptelas y amoríos, hablamos otro día).

Felipe (el padre), juró lealtad a esta misma constitución, pero luego se metió en política (cosa que no puede hacer), en la cuestión catalana (amparando que se impidiera votar por la fuerza a pacíficos ciudadanos en una teórica democracia. Y, de la opacidad de la institución, hablamos otro día), ahora Leonor quiere jurar esa misma constitución (primero se fue a jurar bandera ante el ejército…), pues que lo haga, también Franco juró lealtad a la república….

Eso es lo que pasará hoy en el Congreso. Me alegro de que el PNV dijera que no iba a estar presente.”