Jueves 6 de julio de 2023
Estuvo bien Elixabete Etxanobe este pasado miércoles cuando desde la tribuna en Gernika prometió diálogo. Normal. Es lo que se dice. Y lo obligado. Pero añadió, ”reivindico el derecho a la equivocación”. Sugerente innovación.
Está muy bien apuntar maneras de llaneza con la condición de que si te equivocas, lo reconoces, pides excusas y tratas de no repetir la faena. La gente lo agradece. Los cargos públicos no son personas sin defectos, el problema es enaltecerlos, blindarlos, celebrarlos hasta el paroxismo y luego impedir que ante una equivocación, dar explicaciones. Y en eso basa su remontada Pedro Sánchez. En el derecho a equivocarse y rectificar. Ha hecho bien Etxanobe en hacer esta proclama, que queda en el libro de actas. Me repelen los que se creen intocables, puros y no sujetos a cualquier equivocación. Por eso la frase de Agatha Christie: ”la gente inteligente no se ofende, saca conclusiones”.
El equipo que ha formado tiene buena pinta. Solo tengo noticia de la capacidad y buen hacer de Ager Izagirre, exalcalde de Mungia y me dicen es un magnífico fichaje. En Cultura se mejora y se espera que la Diputada no vaya solo a los actos a abrazar y besar sino tenga un modelo propio y sea capaz de emprender cosas. Tiene trayectoria. Y creo que Arrizabalaga dará la talla. A las demás no tengo el gusto de conocerles pero al parecer por sus cv tienen una buena formación. De Basurko no digo mucho pues gente que le conoce, no le gustó que no hubiera aceptado los cargos que le han propuesto incluso recientemente y solo ha aceptado el que le gusta. Eso es anómalo en un partido que se precie. Veremos si logra sacarse esa espina que no habla bien de su solidaridad con una sigla, aunque le deseo sea una buena diputada.
Del candidato opositor poco que decir. Iker Casanova viene a erosionar el trabajo del equipo Etxanobe. Y lo hace desde el mismo día. Es un hueso muy duro de roer y no le hará fácil la estancia de la Diputada General en los plenos de control. Es importante pararle su demagogia, no achantarse ante un verborreico como él y ponerle en su sitio. Decir como dijo el miércoles en Gernika que la actual Bizkaia no da la talla cuando si hubiera gobernado Bildu con él al frente no habría ni Metro, ni Puerto, ni Guggenheim, ni apuestas de futuro, ni Incineradora, ni Depuradoras, clama al cielo. Su modelo anterior era el de las hogueras de San Juan. Veremos cuál será el que quiere encabezar.
Me alegra mucho que Elixabete Etxanobe utilizara la fórmula de Agirre en 1936. Ese juramento lo rescatamos de la historia en 1979 no sin cierta dificultad y es ahora la fórmula más simbólica utilizada por los jeltzales en las instituciones.
Me imagino que todo esto a Casanova le suene a Misa Mayor como al alcalde de Elorrio que ha suprimido la procesión del ayuntamiento a la basílica de la Purísima. Toda una tradición borrada por los complejos ateos de esta gente que dice que no hay que mezclar religión y política cuando se trataba tan solo de un breve paseíllo secular de autoridades que al pueblo le encantaba, era seña de identidad y no mezclaba nada. Según este tipo de acomplejados hay que hacerlo también en Iruña. Afortunadamente cuando Asiron fue alcalde allí se fue con su sombrero de copa. Pero no me extraña nada lo de Elorrio. En este ayuntamiento le quitaron la calle al Lehendakari Agirre por pura mala entraña.
Lo malo es que en esta sociedad dormida nadie diga nada. De seguir así solo vamos a tener las procesiones laicas recién diseñadas y a mayor gloria de lo que no es muy normal en la sociedad. Estos son pues los de la nueva Bizkaia. Con el tiempo nos dirán que Valentín de Berrio Otxoa fue un tipo de Elorrio que anduvo por el mundo adoctrinando a la gente y por eso lo mataron en Vietnam.
La modernidad se ve en las políticas y en la tolerancia no en cargas.


