EN RECUERDO DE AQUELLA CORPORACIÓN DEMOCRÁTICA DEL ALCALDE ERCORECA Y DEL REPUBLICANO JESÚS SÁENZ RIOSI.

Viernes 20 de junio de 2025

La fotografía la sacó el miércoles Monika Aperribai. Estoy con su aita Emilio, aquel  niño de 8 meses que su ama sacó en brazos del bombardeo de Gernika el 26 de abril de 1937. Todo un honor.

La foto está sacada después de celebrado el acto anual en recuerdo de la corporación democrática de Bilbao surgida tras las elecciones del 14 de abril de 1931 y que eligieron por unanimidad como alcalde a Ernesto Ercoreca. Y en la plaza del ayuntamiento que lleva su nombre allí estuvimos bajo un sol inclemente a las  seis y media de la tarde del miércoles un pequeño grupo.

Cada grupo de concejales estuvo representado por un concejal que se dirigió a los asistentes recordando la fecha, cerrando el acto uno de los  bisnietos  de Ercoreca que glosó la figura de su bisabuelo. Después tuvo lugar la ofrenda floral. Se recordó asimismo a Jesús Sáenz Riosi, asesinado en uno de los campos de concentración nazis.

Al cumplirse el cincuentenario de la muerte del alcalde nos pusimos en contacto con Iñaki Azkuna que nos invitó a hacer algo en su recuerdo. Nuestra secretaria Maybe conocía a la familia Ercoreca y un buen día su nieto Ernesto nos vino a la oficina con un texto de Memorias y fotografías de su abuelo. Y el Ayuntamiento  las editó a través de la Biblioteca Clásica Municipal. Un  precioso libro que se presentó en el Salón Árabe del propio Ayuntamiento.

Detrás de todos estos actos está el profesor Jon Penche que mantiene la llama y ojalá lo haga por muchos años. Honrar, honra.

DOS ACTOS EN AJURIA ENEA

Jueves 19 de junio de 2025

Escuchaba ayer por la noche la entrevista en ETB al Lehendakari y posterior contestación a las preguntas que le formularon un elenco de personas, casi todas jóvenes, al Lehendakari Pradales. Estando en ello recibo el  whatsapp de un parlamentario con el que he convivido en Madrid en el Grupo Vasco. Me decía: ”Lehendakari txapó!. Vaya cambio!. Seguro y bien…contestando con claridad, y solvencia y una presencia muy buena. Aplausos. Ni un pero…”

Le contesté que coincidía con su apreciación, sobre todo en contraste con lo que  el  miércoles había ocurrido en el Congreso. Aquello no era política, sino un insulto perpetuo y el contraste con una persona que argumentaba y no levantaba la voz, era llamativo y en favor de lo que vivimos  aquí y en favor del Lehendakari. Si le dije que, noto un cierto complejo a la hora de los casting preguntones. Que no haya personas mayores nunca, no muestra a la sociedad como es. Y quien organiza las cosas de esta manera se equivoca. Es como avergonzarse de tus aitas porque son mayores y se tienen que operar de cataratas. Es la realidad y la vida. No todo el mundo es joven en esta sociedad envejecida.

Al final del correo, me decía “El acto del lunes organizado en honor de Garaikoetxea fue una chapuza de producción y protocolo, pero hoy el Lehendakari y el acto está de diez”.

Pues si.

Coincido también con su apreciación sobre el acto del lunes  pues no  ponerle al Lehendakari Garaikoetxea un ayudante, fue un error de protocolo grave, habida cuenta de sus limitaciones, propias de la edad. Colocarle a su esposa Sagrario Mina en segunda fila, fue un error muy grave de protocolo y algo insólito y de mal gusto. No organizar un acto incluyendo viceconsejeros y directores de aquel primer gobierno, fue falta de visión política. Las cosas no las hace una persona solamente. Y no invitar a Inmaculada Boneta, vicepresidenta del primer Parlamento Vasco y, fallecido el presidente Juan Jose Pujana, la persona de más relieve de  aquel primer Parlamento que eligió a Garaikoetxera, fue de cesar a quien organizó el acto ya que sitio había de sobra, aunque lo que faltaba era el criterio político. Los referentes en una sociedad son los referentes y además no buscan ni piden nada. Se echaron  en falta personalidades como Azkarraga, Knörr, Errazti….y gentes de una y otra parte que fueron protagonistas de  aquellos años, con sus luces y sus sombras.

Si se quería reconocer a un Lehendakari, idea justa y necesaria, hubiera estado mejor organizarlo todo con mayor sensibilidad política y humana. Quizás la ignorancia, que es osada, cree que lo puede todo. Y así es, pero el saldo es penoso.

Pasadas aquellas tensiones tan dramáticas que tantas consecuencias dejaron, el PNV ya le otorgó el premio de la Fundación Sabino Arana, y, pasado el tiempo se trataba de pasar página con sensibilidad y acierto. Es propio de sociedades civilizadas mostrar lo mejor de si mismas dejando de lado las impurezas humanas que nos rodean diariamente y ese homenaje, bien hecho, hubiera sido para cerrar  muchas heridas. Desgraciadamente ha dejado mucho malestar en personas que no han sido tenidas en cuenta pero que siguen creyendo, dolidas, que por la paz, una ave maría y se callan. No menos de diez me lo han comentado. Y tengo la mala sensación que a futuro se volverán a repetir estas cosas pues convivimos con gentes nacieron sabiéndolo y lo de ellos nunca es preguntar.

El discurso de Imanol Pradales, impecable, con algunas ausencias, aunque  equilibrado.

Y si me permiten, un recuerdo a personas de protocolo que han trabajado en Ajuria Enea y que nadie menta. Begoña Ezpeleta, Begoña Salinas, Begoña Revuelta, Esther Mendialdua, Miren Erezkano….

¿POR QUÉ IKER GOÑI DEBERÍA SER EL PRESIDENTE DE  LA FEDERACIÓN VASCA DE FÚTBOL?

Miércoles 18 de junio de 2025

David Salinas Armendariz

Este viernes 20 de junio se celebran elecciones a la presidencia de la Federación Vasca de Fútbol. Habrá, seguro, nuevo presidente, pues Javier Landeta no concurre a la reelección, y serán los clubes vascos (como reserva la ley autonómica del deporte) los que tendrán que decidir entre tres candidatos: Carlos Gómez, Aritz Hernández o Iker Goñi. De fondo está la propia concepción de la FVF, el prolongar una inveterada limitación en su capacidad de influencia y liderazgo real en el fútbol vasco, o el acometer de una vez el definitivo avance de la mano de la consecución de recursos en colaboración con empresas privadas e instituciones públicas. Se trata de eso y de la necesaria revitalización de una Euskal Selekzioa sumida en un frustrante letargo, no ya en su camino a la oficialidad internacional, sino en su mera presencia en los terrenos con una continuidad perdida los últimos años.

Tres opciones, tres, con nombres nuevos, pero, sin duda, apreciables diferencias. La de Carlos Gómez es una candidatura continuista (así autorreconocida), que hace suyo un período anodino, con una oposición interna final que se ha evidenciado con la no aprobación por la asamblea del nuevo reglamento electoral. Gómez señaló que sólo se presentaría si contaba con el apoyo de las tres federaciones territoriales, y lo hace pese a no conseguir ninguno de ellos. La no concurrencia de Landeta y que lo haga su tesorero seguramente tiene que ver con el triste episodio de guardar en el cajón el proceso a la oficialidad emprendido por su antecesor Luis María Elustondo, por mandato (aún vigente) de la asamblea de la federación. Las dudas sembradas sobre tal expediente se extienden a otros objetivos genéricos no alcanzados en este último cuatrienio.

Aritz Hernández es ‘el hombre de Mardones’, el sempiterno presidente de la federación vizcaína, acostumbrado a dar su apoyo de inicio a un candidato y luego retirárselo cuando pretende ejercer realmente. En esta ocasión ni siquiera promueve a Gómez y presenta a Hernández, que desde su empresa ha prestado servicios a las federaciones, lo que apunta a posibles conflictos de intereses. La tradicional oposición soterrada de Gómez Mardones a la oficialidad no augura avances en esa materia por esta candidatura, circunscrita a determinados clubes vizcaínos y con escasos apoyos en Gipuzkoa y Álava.

Quien sí parece con posibilidades reales de contender ante el continuismo de Gómez es Iker Goñi, que aporta juventud y renovadas ideas, tratándose de alguien con preparación en la gestión deportiva y que fue directivo del Athletic con Aitor Elizegi. Goñi ofrece a los clubes cercanía y colaboración constantes para su difícil día a día, formación y recursos, que es lo que necesitan los de los tres territorios, en los que tiene repartidos sus apoyos. Ha puesto sobre la mesa alianzas con relevantes empresas para subvenir a nuevos proyectos, con defensa de la igualdad y el euskera, además de incorporar en su plancha al olvidado fútbol sala. Puede afirmarse que la alternativa de Iker Goñi es la única que apuesta firmemente por la oficialidad de la Euskal Selekzioa, en un momento en el que la legislación ha propiciado su consecución en pelota y posiblemente en otros deportes, por qué no en el fútbol.

La Federación Vasca de Fútbol tiene que aspirar a ser algo más que un protocolario ‘lacito verde’ y asumir su papel de real catalizador del fútbol vasco, que defienda los intereses de todos sus estamentos, de los clubes, pero también (como la ley exige) de jugadores, técnicos y árbitros. Y de los propios aficionados. La FVF es, tiene que ser, la federación deportiva más importante de Euskadi, y necesita implementar más políticas de actuación y estar en disposición de proporcionar recursos económicos, formativos y de servicios a todos sus agentes, incluida esa Selección verde que una mayoría social quiere ver competir internacionalmente como en otros deportes con arraigo en nuestra tierra.

El día 20, 84 clubes deciden el próximo rumbo del futbol vasco. Que al dar su voto piensen en una comunidad unida de intereses, y en afrontar un reconocible impulso.