Aralar era un proyecto definido – Contactos de Navidad – Nació Julen

Martes 27 de diciembre de 2011

Parecería que Amaiur es ya un proyecto consolidado donde todas las aristas de EA, Aralar, Alternatiba, Independientes y HB, están ya limadas. No estaría mal. Pero me da que todavía este puchero tiene que bullir algo más. De hecho en Aralar las cosas siguen sin estar asentadas y hay manifiesta incomodidad en la pertenencia a un proyecto que los está engullendo.

Lo decía claramente Aintzane Ezenarro en Deia el pasado 11 de diciembre: “La violencia ha sido el mayor escollo; no el único. Más impor­tante que el número de diputados en Madrid es reconocer por qué nos ha costado tanto llegar a esta conclusión, que se verbaliza en una frase: la pervivencia de la lucha armada hasta los días de hoy ha sido un error estratégico, polí­tico y humano. Y eso lo tenemos que decir todos, para cerrar defi­nitivamente todas las puertas a una posible reedición del ciclo de la violencia”.

En ese sentido leí una reflexión de Lorth Needa que me llamó la atención. Decía así:

“Está claro, y no por lo que digan Zabaleta o Ezenarro, que hay una clara diferencia en Aralar entre quienes provienen de la mal llamada Izquierda Abertzale y quienes jamás militaron en ella pero creyeron que Aralar tenía un proyecto político que consistía en ser la izquierda nacional vasca alejada de dogmatismos, ensoñaciones, matonismos y seguidismos a una organización criminal y mafiosa.

“Los primeros piensan que el obstáculo para volver a la disciplina batasuna ya se ha eliminado. Qué coño, si el único problema era que ETA atentaba.

“Los segundos piensan más allá: El problema de la mal llamada Izquierda Abertzale no reside únicamente en actuar como monaguillo de ETA, ni el único obstáculo que encontraban para votar o militar en Batasuna era ése. El problema radicaba y radica en la nula identificación del electorado de Aralar, que se ha categorizado como voto joven, urbano, instruido y radicalmente enfrentado al votante tradicional de la IA, con las poses circenses, la absoluta vacuidad de los planteamientos políticos, los bandazos ideológicos, el dogmatismo estalinista y el permanente recurso a una épica vacía y a la amenaza que es la marca de fábrica de la mal llamada “IA auténtica”.

“Son personas que estaban dispuestas a aguantar que les insultaran, que les pintarrajearan las sedes, que les amenazaran e intentaran amedrentarles. Lo sé porque varios amigos míos son de ellos.

“Lo que no están dispuestos a soportar es que les regalen su partido a la misma gente a la que jamás hubieran votado. Y por lo que parece, con mayoría en Aralar, por mucho que manipulen los congresos. Votantes originarios de Aralar que ahora se encuentran traicionados y sin partido, un partido que siempre hemos respetado”.

Hasta aquí lo que me han enviado. Tiene interés.

Como tiene interés otros aspectos de la Navidad como es el saludo de gentes a las que habías perdido la pista o que ya no sabes que hacen porque viven fuera y te vas olvidando de ellas. Y pongo ejemplos. Me llamó Andrés Mitxelena desde Valencia. Andrés era un sacerdote que nos venía a la sede de Radio Euzkadi en Caracas al piso tercero del edificio La Sierra en la Avenida Bolívar. Euskaldun, nos grababa programas en castellano y en euskera y dejaba en la nevera fonográfica trabajo para la semana. Entonaba perfectamente, era muy disciplinado, una magnífica, persona. Pues bien. Me llamó en Navidad. Dejó el sacerdocio, se casó con una maracucha (de Maracaibo) y vive con sus tres hijos en la ciudad del Turia. Me alegró mucho saber de él.

Clemente Sanz fue senador por Segovia del PP. Hicimos buenas migas en algunos viajes parlamentarios. Me invito a la boda de su hija y estuve con mi mujer este verano en La Fuencisla y después cenando con Jesús Posada, el nuevo presidente del Congreso, del que es amigo. Me llamó para pedirme paciencia ante la mayoría del PP ante el nuevo año parlamentario. Tampoco podía faltar la vigorosa felicitación del gudari Moreno. Con 93 años y el espíritu de combate de un chaval, es un orgullo hablar con gente así .También establecí contacto con Juanjo Otxoa de Eribe, fuimos parlamentarios en el Parlamento Vasco y en Madrid. Y parecía que siempre estaba de mal humor, pero esa actitud encubría un carácter socarrón crítico y agudo..

Otra llamada fue la de Bingen Amezaga Iribarren, médico de éxito en Caracas, hermano de Arantxa Amezaga, e hijo de Don Vicente que fue delegado del Gobierno Vasco en Uruguay y secretario del Centro Vasco de Caracas, además de haber sido un gran intelectual que tradujo los clásicos griegos al euskera. Bingen fue presidente en Euzko Gaztedi y quien me llamó para que le sucediera en el cargo. Ahí empecé yo en 1968 mi actividad política. Hoy vive en Caracas, compone canciones, escribe, atiende a sus pacientes y añora a una Euzkadi que conoce como nadie aunque nunca ha vi­vido en ella. Tiene tres hijos. Uno de ellos en París, otra en Madrid y otra en Guadalajara. Una pena. Quisieron volver a la tierra de sus mayores, pero no encontraron cobijo. Hablamos de ésto, de la mala vida que les da Chávez, de sus proyectos. Fue como volver a vivir cosas de hace cuarenta años.

Y me llamó Pérez Bouza, el senador gallego que ha formado parte de nuestro Grupo parlamentario en Madrid. Ha tenido una niña, está tratando de rehacer su vida ya que no salió elegido en noviembre diputado por Ourense y me comentó con preocupación la situación del Bloque haciendo consideraciones sobre cómo romper la muralla de votos en la que están encerrados. Es un tipo de primera. Ojalá no deje la política.

Contacté con Félix Martínez de la Cruz, quien trabajó en la presidencia de IU con Anguita y ahora vive en República Dominicana. Es persona activa que trabaja en proyectos de Cooperación, estuvo detrás del homenaje a los artistas republicanos llegados a aquel país y se mueve mucho. Como Laura Robles que se ha visto obligada a dimitir ya que los resultados del 20 de noviembre han propiciado un cambio de gobierno. Asesora del Secretario de Estado de Exteriores, lo era con Juan Antonio Yañez y es una persona muy eficiente. Asturiana, joven, socialista tiene mucho recorrido por delante.

Y seguiría. Solo decir que la víspera de Navidad me llamó Joseba Zubia para decirme que su hija Goiuri había tenido su segundo hijo, es decir él, su segundo nieto y que había logrado le pongan de nombre Julen. Joseba se llama Joseba Mirena Julen Erapel y uno de ellos le había caído al nieto.

Estaba feliz. Zorionak.

Un tranquilo Señor de Provincias

Lunes 26 de diciembre de 2011

El 25 de abril del año 2000 José María Aznar fue elegido con 202 votos presidente del Gobierno, tras una borrascosa sesión de investidura. Además del PP, le apoyaron CIU y Coalición Canaria. El PNV votó en contra. La sesión fue muy bronca. Joaquín AImunia había dimitido la noche electoral en la sede de Ferraz y aquel trámite le había correspondido al portavoz socialista, el asturiano y ex ministro Luís Martínez Noval a quien Aznar ninguneó, porque toda su batería de hostilidad la reservó para nosotros buscando acuñar el binomio nacionalismo igual a ETA. Fue una sesión durísima hasta el punto que Erkoreka y Azpiazu que acababan de llegar a la Cámara, se pregun­taron: «¿A dónde hemos llegado?».

Once años después, el PP vuelve a tener mayoría absoluta pero hay dos cambios fundamentales. ETA ha anunciado su cese y Aznar dio paso a Mariano Rajoy, que el martes 20 fue elegido presidente. A esto se le une el protagonismo otorgado a Amaiur al impedirle formar Grupo Parlamentario propio, un tremendo error, pero recordé cómo, como antecedente, la extrema derecha asesinó a Josu Muguruza el 20 de noviembre de 1989 cuando éste quiso hacer lo hecho el martes por Iñaki Antigüedad.

Estamos pues, inmersos en una crisis, pero también ante un nuevo tiempo y con un nuevo presidente en La Moncloa. Por eso puede ser interesante saber algo más sobre quien es Don Mariano.

Acabo de leer un librito titulado «Los Mandarines» de Rafael Nadal, un periodista de Girona que fue director de El Periódico de Barcelona. Es un libro que se lee en un pis pas. Son 19 semblanzas en las que Nadal, saca el jugo de su entrevistado y en una de ellas lo hace con Mariano Rajoy. Son ráfagas de una conversación con el nuevo presidente hecha en una comida a dos en Manduca de Azagra en 2009. Y entresaco algunos de los hechos que le han marcado en estos ocho años de oposición.

Le decía a Nadal, Don Mariano:

-Yo fui puesto a dedo. Aznar se inventó aquello de los tres candidatos, pero en realidad lo tenía decidido: porque yo no quería, pero me dijo que Jaime (Mayor Oreja) no podía ser porque era un radical y Rato tenía sus asuntos. Te sonará todo lo raro que quieras, pero fue exactamente así.

O sea que acepté y a los dos días ya me estaba diciendo que hacía mala campaña. Y luego, la que me montó el 11-M pasará a la historia mundial. Y claro, pasé los siguientes cuatro años más derrotado de lo que nadie pueda imaginar; lo pasé muy mal.

-Luego me montaron el auto sacramental de Valen­cia, pero se pasaron. Y los delegados votaron contra Aznar, hartos de tanta agresividad. Y ahora no dependo de nadie. Yo con Valencia, con Losantos y con Pedro J. acabé diciendo: hago mi camino y ya está. ¡A tomar viento!

Todo ésto casa con lo que dijo el martes en el debate de Investidura: “No me veo prepotente ni perdiendo las formas.» Algo es algo, o mucho es mucho, porque en democracia las formas son el fondo, y Aznar las perdía a cada instante. Sobre todo con nosotros.

De él, Mariano Rajoy, me dijo en una ocasión: «Iñaki, no te olvides que Aznar es una víctima del terrorismo». «Si, y lo respeto, pero con eso me dices que no es el hombre para abordar con serenidad un final dialogado de la violencia», le contesté. Sonrió.

Este lunes, Rajoy se presentó ante la Cámara como si fuera una especie de novato en política, sin pasado y con la sola intención de encauzar la salida a la crisis económica. Y sin embargo es todo un veterano, y un superviviente de muchas guerras, sin olvidar que ha sido ministro de Administraciones Públicas, de Educación y Cultura, de Interior, Vicepresidente y portavoz del gobierno de Aznar, y jefe del PP los últimos ocho años. Y seguidor del Real Madrid.

Siendo ministro de Administraciones Públicas fui con el entonces vicelehendakari Juan José Ibarretxe a visitarle a su despacho de Castellana 3 y entre otros asuntos le pedimos abordara la solución del caso del condado de Treviño. Sin inmutarse nos contestó: “Tenéis razón, pero cualquiera organiza una consulta. Si Treviño en lugar de estar en Álava estuviera en Castilla el asunto estaba hecho». Por lo menos fue claro.

De lo que no hay duda es que Don Mariano es un buen hidalgo español y no precisamente un fanático de lo autonómico, aunque nada hará para poner en crisis el invento de las nacionalidades históricas. Xabier Arzalluz solía contar como le impresionó que en un debate en las elecciones en Galicia, se negó a hablar en gallego. Todo un dato. Posteriormente Arzalluz ha dicho que «de esa panda es el mejor». Pues sí. De los Aznar, Mayor Oreja, Astarloa, Acebes, Cascos, Rato, sí es el de mejor cuajo.

De todas maneras, éste señor de provincias no desentonó bajo el gobierno Aznar. Presentado en el Parlamento Vasco lo que llamaron «Plan Ibarretxe», el gobierno español hizo pública una declaración institucional de guerra a muerte. Al día siguiente, el 25 de octubre de 2003, Rajoy, rodeado de todo el PP vasco, reivindicaba el Estatuto de Gernika, que en 1979 habían rechazado, y bajo el Árbol lanzó una gravísima acusación que fue toda una ignominia: «El plan hace suyos los objetivos de ETA». Asimismo cuando culminamos en Santiago el viaje trilateral de la Decla­ración de Barcelona, que encendió todas las luces rojas en Madrid, Rajoy públicamente nos dijo que Santiago no era el lugar más adecuado para que se reunieran  formaciones que «tienen una visión reduccionista de la vida». En esa reunión estaba Artur Mas en representación de una CIU que estaba aún lejos del hoy demandado pacto fiscal. Públicamente le recordamos que otro  gallego, Castelao, había dicho al llegar corno diputado al Congreso que lo primero que había que hacer era quitar del frontispicio del hemiciclo las estatuas de los Reyes Católicos que con su yugo y las flechas y la unidad de España en base a la Inquisición y a la caballería, habían estropeado una convivencia de siglos.

Pero también hay otro Rajoy. Cuando en 1996 Aznar quiso negociar con el PNV su Investidura, tuvimos que ir a Madrid varias veces a discutir hasta donde estaban dispuestos a pactar. Uno de esos días fuimos al hotel Majadahonda donde aparecieron Rato, Montoro, Rajoy, Mayor Oreja y Salmones. En plena discusión sobre el transporte mecánico por carretera, Rajoy se levantó y salió de la sala. Todos creímos había ido a consultar con Aznar. Al poco salí yo. Estaba en la habi­tación de al lado, con los pies encima de la mesa, fumándose un puro y viendo un partido de fút­bol. Y quien hace esto, hay que colegir que también tiene su parte cachonda y menos patética que Aznar. Para triunfar en Madrid tienes que saber pasar entre faquires, tiradores de cuchillos, vendedores de crecepelo y lanzadores de llama. Y de momento, Don Mariano lo ha logrado.

También hay que decir que como todos, tuvo dos abuelos y uno de ellos, Enrique Rajoy Leloup fue promotor del primer estatuto de autonomía de Galicia en la República. De todas formas nada hará, como nada han hecho Zapatero ni Jauregui, para sacar a Franco del Valle de los Caídos.

El caso es que en Moncloa, a partir del miércoles, hay un señor de provincias que manda mucho. En las Cortes, en el Gobierno, en las autonomías y en los medios. Mucho. Y ante eso podíamos haber hecho tres cosas. Votar SI, como si fuéramos UPN, que no lo somos. Votar NO como si fuéramos IU, que no lo somos, o, abstenernos. Y como a él le agradaba la abstención, aunque no nos necesitara, nos dijimos: “Vamos a tratar de mantener un hilo caliente porque ante nosotros tenemos dos retos de envergadura. Consolidar la normalización del país y salir de la crisis económica”. Y el No, de alguna forma, nos marginaba en estos dos trabajos. Y además con cinco diputados, podemos hacer una labor más provechosa que CIU con sus 16 diputados que han votado NO.

Sí, ya sé que todo esto es una apuesta que puede salir bien o puede salir mal. Pero esas son las cartas y si además, Amaiur, en una jugada táctica, inteligente hacía lo mismo, todo el superpurismo abertzale, por lo menos se lo piensa. Y eso que el mismo día salía en Gara una esquela con una frase del dictador comunista coreano fallecido Kim Jon II que decía: «Aunque se releven las generaciones, la revolución no puede detenerse. La lucha tiene que continuar». A eso le añadimos lo que aprendió Rajoy cuando perdieron en Galicia la moción de censura de 1987: «Me di cuenta de que en el Parlamento no gana quien tiene razón, sino quien suma más votos. La vida son resultados». Pues eso.

Un discurso con cinco años de retraso – Justicia igual para todos. ¿También para Usted y para su hija? – Las duras críticas de Peñafiel a la Reina, a las Infantas y a todos

Domingo 25 de diciembre de 2011

Habló el rey en Nochebuena. Le vi lento y como cansado. No tenía la foto de familia sino la de él con Zapatero y Rajoy. Sus apoyos. Un país con dos partidos. No con dos presidentes. El medio es el mensaje.

De todos sus discursos seguramente habrá sido éste  el más escuchado. Había morbo por saber que decía del affaire Urdangarin. Solo ésto: «Ejemplaridad y Justicia Igual para Todos». ¿Por qué no lo dijo cuando se enteró del sucio  asunto?. ¿Por qué lo mandó a Washington como Consejero de Telefónica?. ¿Por qué si la Justicia es igual para todos está tratando de salvar a su hija Cristina que era la socia de su marido?. ¿Por qué no propicia un cambio constitucional donde Él deje de ser irresponsable en virtud de este artículo de la Constitución que lo hace impune e inmune?. ¿Por qué no le dice a Urdangarin que devuelva lo robado?.

Artículo 56-3. “La persona del Rey  es inviolable y no está sujeta a responsabilidad».

Todo pues sigue siendo una farsa ya que los ditirambos de los medios y de los políticos del PP y el PSOE, hoy como en el pasado, van en la misma dirección. Protección absoluta del rey y promoción del Príncipe Felipe. No había más que estudiar la alusión que le hizo su padre y el reportaje previo al discurso donde al final presentaron el contraste de la falta de ejemplaridad del yerno y la honestidad del sucesor. Pura manipulación. No sé qué pensará la hija de todo ésto.

En resumen. Lo de siempre. Si la prensa y los políticos hubieran sido más celosos en el control real e incluso hubieran cambiado este nefasto artículo, origen del latrocinio, otro gallo les y nos  hubiera cantado, pero no se ha hecho y cinco años después les parece  algo revolucionario que el rey diga que hace falta ejemplaridad y que la justicia tiene que ser igual para todos. ¿Para todos Majestad?. ¿Para usted también y para la Infanta?.

Jaime Peñafiel escribe los domingos en El Mundo un análisis de la semana sobre la familia irreal. Y cada vez está más crítico con todos sus miembros y aunque cargue contra Urdangarin de manera especial, Letizia por una parte y ahora la Reina por otra, no salen bien parados.

El domingo 11 de diciembre escribió un duro análisis donde criticaba a la real familia sin dejar títere con cabeza. Desde la reina a la Infanta Elena a la que trata de mentalmente no preparada, a la nuera Letizia y al propio rey.

Dicen que el pescado se pudre por la cabeza, y ésto para la familia de La Zarzuela empieza a tener mala pinta cuando el mayor y mejor cortesano escribe cosas como éstas:

El gran error de doña Sofía

“Me gustaría conocer la reacción del rey Juan Carlos sobre el reportaje aparecido en ¡Hola! con una reina junto a Iñaki “en un gesto interpretado como un apoyo implícito a su yerno”, según se ha publicado. Me cuesta creerlo. Se trata de un gran error de doña Sofía. Mucho más grave que aquellas declaraciones a Pilar Urbano en las que se manifestaba en contra de los matrimonios homosexuales y el aborto, que tanto indignaron a los colectivos afectados. También al rey, siempre tan respetuoso con las leyes. Por cierto, durante la reciente visita de Felipe y Letizia a Chile, ésta expresó opiniones totalmente opuestas a las de la real suegra. El personal no entiende la actitud de la reina, por mucho que haya manifestado, en infinidad de ocasiones, su simpatía por Iñaki. Recuerdo la vez en la que doña Sofía se hizo acompañar por su yerno, en el palco del teatro Campoamor, durante la entrega de los Premios Príncipe de Asturias. Todo el mundo ha entendido que acudiera a Washington para estar unos días junto a su hija Cristina. Pero no se entiende que se exhiba sonriente junto a su polémico yerno que tanto daño está haciendo a la monarquía. Pienso que el rey debería retirarle lo de “profesional”. Con estas fotografías, ha demostrado no serlo, anteponiendo sus sentimientos de madre a los de reina. No hay duda de que 2011 pasará a la historia como el annus más horribilis del rey y no, precisamente, por culpa de la prensa sino de su familia.

Ya la sacrificaron una vez

Siempre se creyó que el artículo 57.1 de la Constitución, tan machista él, por la primacía del varón sobre la mujer, que excluía a la infanta Elena, había sido obra de los redactores de la Carta Magna, que olvidaron los derechos de la primogénita. Pero fue su propio padre que no la consideraba mentalmente preparada para heredera. Luego ha demostrado ser la más sensata, la más borbona y quien mejor representa a la Corona. Miles son los españoles que se declaran elenistas. Resulta curioso observar que, hasta el año 2004, en los tres primeros puestos de la lista de sucesión figuraban el príncipe Felipe, la infanta Elena y… Felipe Juan Froilán, primer nieto del rey, inscrito en el Registro Civil de la Familia Real desde julio de 1998. Ateniéndose al citado artículo de la Constitución y de no haber tenido descendencia Felipe en su     matrimonio con Letizia siendo ya rey, Elena habría sido la princesa de Asturias que su padre no quiso. Froilán, futuro rey. Se me olvidaba decir que figuraba, en cuarto lugar… la infanta Cristina.

¿La sacrificarían por segunda vez?

¿Cómo calificar lo que, en tan sólo ocho años, ha sucedido?. Primero: el heredero contrae matrimonio con una divorciada; segundo: Elena se divorcia de su esposo Jaime Marichalar, un joven descendiente de una familia monárquica y monárquico él, amén de serio y honesto. Tercero: la infanta Cristina se casa con un jugador de balonmano, hijo de un nacionalista vasco que se encontraba en vísperas de contraer matrimonio con una discreta joven catalana, Carmen Cami (quien se enteró del noviazgo de Iñaki y Cristina por la prensa). Años más tarde el príncipe Felipe amenazó: “O lo tomáis o lo dejo todo”. Cristina también le echó un pulso a su padre obligándole a autorizar su boda con Urdangarin en sólo unos meses: “O me voy a vivir con él”. Todo ésto amparado por la reina, sufridora esposa y madre. Ahora, los rumores -anunciados y rectificados oficialmente- de la expulsión de la infanta Elena de ese paraíso tan exclusivo como es la familia real. “Apartarla es tanto como hacer pagar a justos por pecadores”, según podía leerse en un editorial de EL MUNDO. Y ya sería la segunda vez que se le humillaría públicamente excluyéndola de sus derechos como hija de rey, por los pecados de su hermana Cristina y de su impresentable cuñado Iñaki Urdangarin. ¿Qué culpa tendría ella hoy?. ¿Qué culpa tuvo ayer?. Si se trata de la hija más querida de don Juan Carlos, ¿por qué iba a sacrificarla?.

Las infantas y Letizia

El escándalo Urdangarin está afectando de tal manera a la Zarzuela que no sorprende que ande “enredada entre comunicados y contracomunicados” (Santiago González, dixit). No son los medios los que dan versiones erradas, sino la propia Casa Real. La culpa: el maldito yerno. Desde que el príncipe contrajo matrimonio con Letizia, la familia dejó de ser lo que era. No porque con esta boda la monarquía se igualara por abajo, sino porque a la consorte le faltó mano izquierda para ganarse a las infantas, con sangre real en las venas y en el carácter. Desde entonces, la relación entre las cuñadas era polémica.

Y trascendía. Cierto es que tanto Cristina y Elena son muy especiales. Y Letizia… mucha Letizia. Por su actitud parece ser ella la titular del Principado de Asturias. Su relación con los Urdangarín fue, en los comienzos, mucho más fluida que con los Marichalar. Aunque Iñaki fue el encargado de comprarle a Felipe la alianza después esta relación se fue enfriando públicamente. Varias fueron las ocasiones en las que se organizaron posados fotográficos para acallar rumores. Si se diera la salida de las infantas -hoy no- produciría satisfacción a Letizia… El comunicado de Iñaki se espera en cualquier momento”.