Ya he votado – He votado con mi hijo de 18 años

A las diez, como hago siempre, he acudido a votar a las escuelas de la calle Tívoli. Al entrar salía del Colegio el Lehendakari Ardanza con su esposa Mari Glori. Al ver a Iker se han extrañado. Le habían  conocido  de pequeño y veían ante ellos un chavalote cumplidos los 18 años en junio y con derecho a voto. Ha sido agradable conversar con ellos. Y mi mayor ilusión del día ha sido votar y votar con el chaval. Y que me haya votado.

A María Esther le tocaba otra aula pero a Iker y a mí la 33-A. Y allí hemos votado los dos. El presidente de la mesa, un hombre amable, le ha felicitado y dicho: «Bienvenido al club».

Al salir me han preguntado por la votación. Les he dicho que esa elección también competía a los vascos y que el senado también se elegía y con listas abiertas. Obviedades que se han desconocido en esta sesgada campaña.

Luego he hablado con la gente del PNV que allí estaba. Hemos constatado que en otras oportunidades a esa hora había más gente y me han comentado que ha habido problemas para constituir las mesas y que en alguna han tenido que echar mano de los segundos suplentes. Veremos qué nos indican estos datos.

Al bajar le he visto a Pepe Rubalcaba. Su padre era primo de la madre de Alfredo Pérez Rubalcaba. «No me votes al primo» le he dicho. Nos hemos reído.

Y ahora a esperar. Que sea lo que Jaungoikoa quiera.

Un senador reflexionando

Sábado 19 de noviembre de 2011

Ayer, viernes 18, se acabó la campaña. Por un día. Comenzará de nuevo el lunes. Las campañas duran cuatro años. No quince días. Es agotador.

La nuestra acabó con confetis en el viejo pabellón de La Casilla. Allí la habíamos iniciado en 1977. Concretamente el 21 de abril de 1977. Curiosamente era tanta la expectación y la avidez por un acto público en Bilbao tras la sequía franquista  que tuvimos que editar diez mil entradas con el himno vasco en su reverso. Lo organizaron las Juntas Municipales de Bilbao. Las entradas se agotaron.

Sobre la tribuna había un enorme poster de Sabino Arana  en la cárcel y un cartelón que pedía “Aministia” junto con un gran lauburu y el slogan del Partido de aquel momento:”Batasuna ta Indarra”. Para las ocho no cabía un alma. Se calculó la asistencia en unas 12.500 personas. Fuera, pudieron seguir el mitin los muchísimos que se quedaron sin poder entrar pudiendo escuchar el mitin a través de los altavoces.

En la presidencia, tras una espectacular y emocionante entrada  al pabellón de Manuel de Irujo se encontraban los históricos Pedro de Basaldua, Manu Robles Arangiz, Concha Azaola y los que íbamos a intervenir tras cuarenta años de silencio y persecución en Bilbao.

Tras las presentaciones del bertsolari Azpillaga el primero en intervenir fue Carlos Garaikoetxea que era el presidente del Euzkadi Buru Batzar. De nuevo Azpillaga, que me presentó a mí. En mi intervención aludí a Juan de Ajuriaguerra. El público espontáneamente se puso en pie y le aplaudió a rabiar. Xabier Arzalluz fue el penúltimo en tomar la palabra y señaló el peligro del “gauchismo” sobre todo en los jóvenes. ”Del gauchismo, según la experiencia de la historia, se pasa fácilmente al fascismo”. Respecto al origen de  los vascos y hablando de la igualdad  recordó  que todos tenemos colgadas en las puertas las abarkas del abuelo.

Irujo cerró aquel mitinazo. Vestido como siempre de oscuro, con la corbata negra trasmitió a los presentes el abrazo que de niño le había dado Sabino Arana. Aquel abrazo gesticulado fue un bombazo. Desgranó el discurso que durante cuarenta años no le habían dejado pronunciar y aquel pabellón se cayó porque Irujo era un grandísimo orador y un encantador de multitudes.

Aquel mitin inició la campaña para las elecciones del 15 de junio de 1977. Ayer, 18 de noviembre, fue la última, de la novena legislatura para iniciar la décima. Nada que ver con aquella en la que había una ilusión desbordante y una entrega única. La de hoy, pasados 34 años, es puro marketing, pose, abrazos, mensajes pildorizados para los medios, confetis, y lenguaje medido. Son los tiempos. La técnica mejora las cosas pero acartona la espontaneidad. Y la plastifica.

De todo eso me acordaba cuando fuimos a las once de la mañana de ayer viernes  a hacer una especie de resumen de la campaña en el mismo pabellón mientras carpinteros y técnicos preparaban los bastidores para los cartelones de la tribuna y los técnicos de sonido convertían el viejo pabellón en un plató digo de la mejor CNN. Todo perfecto, pero me quedo con aquella vieja ilusión.

En Bilbo Zaharra

Terminamos los recorridos de la campaña al mediodía  dando una vuelta por el Casco Viejo bajo los sonidos del txistu y el tamboril y repartiendo propaganda. Los presentes comentaban que se sentía un repunte del PNV a mitad de campaña, un cierto estancamiento de Amaiur, el desfonde absoluto del PSOE en España, la chulería del presidente de la Rioja Pedro Sanz que con su orden de impedir que los habitantes de la Rioja alavesa puedan ser tratados en Logroño, les habían puesto a los dirigentes del PP vasco en todo un brete. Del mismo partido, el alcalde de Oion mantenía una huelga de hambre, mientras el citado presidente decía que a él no le influía nadie y que quien quiera ser atendido que pagara. Si esto lo hubiera hecho Ibarretxe nos hubieran enviado la Brunete, pero no solo la Mediática, sino la Acorazada. Pero como el problema es entre buenos españoles del PP y del mismo partido, las cosas se quedaron  en un mero escarceo electoral. Verles en Logroño al estirado Alfonso Alonso y a Oyarzabal consolando al alcalde  de Oion de su  mismo partido era todo un poema porque cuando en una democracia los alcaldes tienen que hacer huelgas de hambre para solucionar los conflictos es que no funcionan muchas cosas. Entre otras, las relaciones de un PP que se jacta de articular España.

Chocolate en Rekalde

A las seis estábamos en el batzoki de Rekalde lleno hasta los topes. Fuera tocaba la charanga y, al lado, en una mesa, el cocinero repartía chocolate con pastas. Y ya se sabe, todo lo que es gratis, está llamado al éxito. Y la gente tomaba su chocolate y repetía. Y hasta bailaba en aquella tarde de un otoño primaveral.

Allí nos fuimos juntando Isabel Sánchez Robles, Oscar Ugarte, José Mari Cazalis, Pedro Azpiazu que llegaba de una comida con economistas, Aitor Esteban que estrenaba foulard, Irati Gondra que nos contaba del trabajo de su aita en los caseríos de Mundaka, Iñigo Landa y mucha gente. Con ellos y con Ruth Martínez hemos hecho el mayor número de encuentros de reparto de propaganda, y se han formado amistades como las de Cazalis con Azpiazu que ya planeaban como iniciar tramitaciones de leyes o con Isabel Sánchez Robles, ex concejal de Bilbao, quien cuarta en la lista, puede ser diputada en cuatro años y que nos contaba la ilusión que le había hecho estar nominada para ese puesto. Yo le  contaba una historia como la que nos decía  Ajuriaguerra  que hacía hincapié en que si bien era muy importante ser candidato a diputado o senador para salir, también lo era el haber sido nominado aunque no se saliera ya que eso era un honor y una muestra de confianza del partido hacia tu persona.

Y de allí al mitin, debidamente reseñado por la prensa y la propuesta fallida que hicimos para, en la jornada de reflexión ir a Lekeitio y reforzar a Cazalis. No nos hicieron ni caso.

Ya se ha visto. Los senadores no han pintado nada en una campaña personal  que se ha desarrollado tratando de sacar cabeza entre el bipartidismo y la amnesia, los debates y los pocos mítines en la calle, la propaganda personal, y la ciaboga de una Izquierda Abertzale que habiendo dicho que no había que ir a Madrid ni a heredar, quieren ahora ir a la Villa y Corte a plantear el Derecho de Autodeterminación sin pagar derechos de autor.

Acabó la campaña. Comienza la realidad.

 

Un senador en campaña (15)

Viernes 18 de noviembre de 2011

No nos engañemos – El Senado no ha existido en campaña – Acto parlamentario en Vitoria-Gasteiz – En Portu

Vi el debate a tres en ETB del jueves por la noche. Me gustó más el que se había producido con todos los partidos, la semana pasada. Reflejó mejor la pluralidad de la sociedad. Y, tras el debate, estuvo bien Maite Ubiria, directora de Gara, en criticar la ausencia de Amaiur. Guste o no, existen, y tienen que tener su espacio, como lo tendrán  a partir del domingo. Hacer lo contrario como se hizo  es falsear la realidad. Me hubiera gustado que lo hubiéramos denunciado. Lo que nos hacen a nosotros en Madrid, no es de recibo hacerlo aquí en Euzkadi a los demás. Por eso el resultado de la encuesta, un 91% de apoyo al PNV por parte de los chavales presentes, no es muy representativo. Me gusta, y ojalá se traduzca en las urnas, pero no obedece a la realidad.

Y otra reflexión. ¿Por qué estos debates no se producen todas las semanas del año en un medio público pero para hablar de todo lo que le interesa o debería interesar al cidadano?. En la televisión hispana solo existe debate político en La Noria. Aquí ni eso. O solo lo hacen los periodistas. Y un Ente Público es un Ente Público y está para eso.

El Senado no ha existido en campaña    

El domingo se eligen diputados y senadores. A eso se les llama Las Cortes Generales. Y a los senadores en listas abiertas. Pero el Senado y sus candidatos han estado ausentes de la campaña. La sociedad del espectáculo requiere emisarios únicos, algo propio de esta sociedad degenerada en lo democrático. Y así pasa lo que pasa. Y surgen los 15-M,con razón. Porque la vida es pluralidad y muchas voces. No solo una. Si una voz habla por todos, ¿para qué hay que elegir 350 diputados y 210 senadores?. Se eligen cuatro y se acabó. Menos mal que Ajuriaguerra ya no vive. Hubiera predicado en contra de esta simplificación de la verdad. Y lo hacía en nombre de la democracia. Y del respeto a los demás. Todos los candidatos son tan dignos como el que más y hay que respetarle a quien se presenta  y al que le vota.

Pero en esta campaña las cosas no han sido asi. El Senado ha estado desaparecido en combate. Y existe, y se le elige, y la gente trabaja tanto o más que en el Congreso. Y algo de esto dije en la entrevista que me hicieron para El Correo junto a Sañudo y Rabanera. Y en El País. En ningún otro medio.

Escuché a un político definir la globalización: ”Es como aquel que enciende la televisión, ve la torre Eiffel y cree que está en Paris”. Ha pasado lo mismo en esta campaña. Y luego nos quejamos.

 Acto parlamentario en Vitoria-Gasteiz

La idea era buena pero la acumulación de actos y actitos en campaña, malogró su organización. Se trataba de demostrar que el PNV desde 1977 ha hecho política en la Villa y Corte. Y que por la Carrera de San Jerónimo y la Plaza de la Marina, ha pasado mucha gente .Pero ese acto se debería haber planteado de otra forma.

Día de frío, interrumpiendo el paso, delante de la verja del Parlamento Vasco, Urkullu pronunció un discurso sólido y sopesado, pero el efecto de la concentración no se vio por parte alguna. Y eso que había viejos rockeros a los que hacía años no veía. Pero faltaron otros y nadie habló de los presentes. Para ese viaje, no hacía falta ninguna alforja. Lo mejor el recordar aquel slogan  con el que Juan de Ajuriaguerra resumió lo que para él, en aquel momento, 1977, resumía la oferta del PNV. ”Fuerza, eficacia y honradez”. Menos mal que luego, convertido en spot, se disimulan los errores, pero da pena se malogren buenas ideas.

Fuerza, porque sin fuerza en política no haces nada. Eficacia, ante el desgobierno del franquismo y una sociedad necesitada de apuestas de futuro bien hechas. Y honradez, para limpiar toda la podredumbe acumulada.

De allí fuimos al Mercado de Abastos, pero no a repartir propaganda. Y luego con Beloki y Azpiazu arreglar el mundo. Una pena que no hubiéramos sacado más chispa a una buena idea.

En Portu

Segunda vez que fui a Portu en esta campaña. Con Ana Madariaga y Aitor esteban. Concentración en el batzoki que ve pasar frente a si, por las rampas mecánicas, la gente que va arriba. Una visión futurista.

Fernando y Javi, a los mandos y visita al Puente. Fernando recordó  como una vez que fui en campaña  y llovía tanto que hicieron la toma dentro de una tienda. Y tras esto subir y repartir propaganda. No hubo charanga. A palo seco. Y todo terminó en la lonja en el Ojillo. Se ha trabajado bien ensobrando, llamando a los afiliados para que se movilicen, activando la capilaridad de la organización municipal. Es la gran riqueza de los partidos. Su militancia y la fe de una afiliación que sigue creyendo en la política y que ésta ha de estar al servicio del ciudadano.