¿Reconocerá Bildu que se equivocó felicitando a Trump?

Jueves 7 de enero de 2021

Saco este tema porque si en lugar de ser Bildu, hubiera sido el PNV el que hace cuatro años felicitara a Trump por su victoria contra Hillary Clinton, todas las reflexiones de Gara, de Iñaki Soto y de sus dirigentes se centrarían en descalificar no a Trump sino al PNV por haber enviado aquel nefasto telegrama. Nos hubieran tildado de populistas, extrema derecha, amigos  de un fascista y lindezas parecidas y es por lo que recuerdo lo que Bildu nunca quiere recordar. No deja de ser curioso. Que  hace cuatro años le deseara  el mayor de los éxitos a un personaje arbitrario, faltón, autoritario y en definitiva un peligro para la democracia mundial como así lo ha demostrado. No sé que vieron en este matón  de reality show para haber cometido semejante pifia.

Y como uno tiene sus experiencias recuerdo una en la que la entonces HB hizo de las suyas. Fue en mayo de 1980 con un Parlamento Vasco recién inaugurado y que sesionaba en las dependencias de la Diputación de Bizkaia. Una reivindicación sindical como la de los obreros de Nervacero hizo que invadieran el Parlamento Vasco en plena sesión y nos tuvieran hasta las tres de la madrugada con amenazas. Entró la guardia civil y la policía, hubo heridos y una escena insólita. HB que no iba al Parlamento Vasco se presentó en plena bronca a apoyar a los ocupantes de la sala de sesiones. Aquello fue el colmo de los colmos del comportamiento antidemocrático.

Hoy quiero creer que Bildu está en otra longitud de onda pero conviene recordar estas cosas cuando su crítica hoy al gobierno vasco es tan acerba, tan desmesurada, tan populista.

Y un dato más. IU forma parte de Podemos. Bueno pues IU ha estado en la sesión constitutiva de la nueva Asamblea Nacional venezolana nacida de unas elecciones fraudulentas y no reconocidas por ningún país democrático.

Recordar también que  Arkaitz Rodríguez, secretario general de Sortu, estuvo en la toma de posesión de un demócrata de la calaña de Nicolás Maduro.

Creeré en la esencia democrática de Bildu cuando no tenga dos varas de medir. Y hoy las sigue teniendo. Critica a Trump pero sigue manteniendo el mismo pelo de la dehesa  populista y antidemocrática de siempre.

Confío en que la experiencia del telegrama y en sus intentos de rebasar líneas rojas con los sindicatos le hagan reflexionar sobre eso que han practicado hasta ahora y que nos dicen que el fin justifica los medios.

La democracia necesita demócratas de 24 horas en su defensa en beneficio de toda la colectividad. Trump es el ejemplo que no hay que seguir. Trump no quiere salir de la casa Blanca, pero es que Maduro tampoco quiere hacerlo de Miraflores. Y ellos siguen apoyando a Maduro.

Maduro, como Franco, ya tiene sus Cortes Orgánicas

Miércoles 6 de enero de 2021

El oficialismo chavista tomó ayer el  control de Parlamento de Venezuela tras cuestionadas elecciones no reconocidas por la Unión Europea. Todos los países las calificaron de fraudulentas.

En una entrevista realizada a Últimas Noticias, la ahora primera vicepresidenta del Parlamento oficialista ratificó que una de sus primeras acciones será emitir órdenes de captura contra Juan Guaidó y sus diputados, así como revocar la nacionalidad venezolana a los políticos acusados de conspiración.

Estos fueron los países que mandaron una delegación para la instalación de la Asamblea Nacional oficialista: Irán, Siria, Cuba, Nicaragua, Turquía, Arabia Saudita, China, Bolivia, Trinidad y Tobago, Egipto, Vietnam, Rusia, India, Bielorrusia, Dominica, Argentina, Barbados, Guinea Ecuatorial, México, Palestina, Argelia, Qatar y Abjasia. Solo la enumeración de estos países no democráticos y conculcadores de todos los derechos habla a las claras del tipo de dictadura que es la venezolana.

Laureano Márquez, conocido líder de opinión en Venezuela, sacó en twitter unas reflexiones que resumen bien la situación de Venezuela.

Agur Tere

Martes 5 de enero de 2021

Se nos está yendo una generación única. Única y excepcional. Una generación que vivió la guerra, el exilio, la vuelta a casa. Y nadie mejor  para representar estas vivencias como Tere Ganboa, hija del colaborador del Lehendakari Aguirre Marino Ganboa, hermana  de Marín  y de José Mari, herido en las Ardenas, esposa de Ramón Villalonga, jefe de seguridad del Lehendakari Garaikoetxea y madre de Javier y Tere.

Esta  foto la saqué, cuando cumplió 90 años, en el hall de su casa en la Alameda Mazarredo. Tere está sentada bajo el cuadro que Aurelio Arteta le hizo a los seis años. Cumplía aquel  22 de agosto nueve décadas magníficas de una vida muy interesante en la que tuvo el privilegio de conocer a personalidades vascas de una humanidad increíble como el Lehendakari Aguirre, Jesús de Galíndez, Manu Sota, Indalecio Prieto y todo ese mundo de aquel segundo exilio en Nueva York. Tere trabajó en la Comisión de Exteriores del EAJ-PNV cuando teníamos la sede en el edificio Granada de la Gran Vía, entre otras cosas, por su magnífico conocimiento del francés y del inglés.

Casada con Ramón Vilallonga, quien fuera jefe de seguridad del Lehendakari Carlos Garaikoetxea y hombre de confianza de Luis M. Retolaza, tuvo  dos hijos que la mimaban, como debe ser. Javier vive en Barcelona y nos contó cómo ayudó a su tío José Mari dibujando la batalla de los Bous contra el Canarias en la batalla de Matxitxako. Su tío, junto a Joseba Aguirre y Jean Claude Larronde promovieron el Instituto Bidasoa que editó varios trabajos sobre aquella increíble batalla así como la de las Intxortas o la biografía de Manuel Intxausti, entre otras iniciativas.

Fue una velada muy agradable en su casa de Bilbao donde rodeada de amistades, algunas de ellas con esos apellidos que están en la historia más reciente de Euzkadi, Tere celebró su noventa cumpleaños.

Preguntamos a Tere

Como he comentado, conocíamos a Tere de su actividad y presencia en el batzoki de Abando y en todos los actos públicos nacionalistas y, como se dice, de toda la vida y, además, como sabía un perfecto inglés y francés le fichamos para que nos echara una mano en la Comisión de Asuntos Exteriores del PNV, eso sí, sin cobrar un duro.

Y Tere venía todos los días a la sede el PNV que se encontraba entonces en la Gran Vía, cerca de la Plaza Elíptica, en el llamado entonces edificio Granada. Allí contestaba cartas, ordenaba papeles, atendía a visitantes, viajaba a las reuniones que teníamos en Bruselas y marcaba presencia. Nunca le agradecimos lo suficiente su dedicación.

Congreso del PPE. La Haya. 11 de febrero de 1986. Se pueden ver de pie: Gorka Agirre y Julio Jauregi. Sentados: Sabin Pujana, Pili Pujana, Iñaki Anasagasti, Koldo Mediavilla y Tere Gamboa

Muy circunspecta en lo relativo a su historia familiar, de vez en cuando nos hablaba del Lehendakari Aguirre en Nueva York, de Jesús de Galíndez, de Manu Sota, de Jon Bilbao y de aquella delegación del Gobierno Vasco en la Quinta Avenida así como de las familias exiliadas que se reunían en fiestas familiares después de la llegada del Lehendakari tras su huida, con falsa documentación, atravesando el Berlín en guerra.

Por fin, logramos con sacacorchos, que nos contara algo de sus experiencias personales que nos sirvieron  para conocer otra faceta del exilio vasco y que logré obtener de ella hablando por mi parte como un sacamuelas. Como conclusión podemos decir que todas aquellas idas y venidas no le habían dejado el menor mal recuerdo  sino todo lo contrario. Estaba agradecida a las colectividades vascas, a aquel increíble entorno familiar con la vecindad de la familia Aguirre en Nueva York, el Lehendakari en el piso 14 y ellos en el 16, con la continua presencia de vascos de todo tipo, gudaris, pastores de Idaho y Reno, y aquella Delegación en la Quinta Avenida de Nueva York y de cómo habían ido a la boda de Marín, su hermano mayor en Buenos Aires, ella con su madre y como por ser mujeres les costó un mes llegar a la ciudad argentina, porque saliendo de La Habana, en Panamá les sacaron del avión pues la prioridad era para los hombres en aquellos momentos de escasez de asientos en los aviones. Y les pasó lo mismo en Lima. Les bajaban y llevaban a un hotel céntrico con la buena suerte que el director era de Lekeitio y les atendió con ramos de flores y mucha cortesía, les enseñó la ciudad y allí estuvieron conociendo Lima hasta que llegaron a Buenos Aires, haciendo mucha vida en el Centro Vasco Laurak Bat de la calle Belgrano.  Al volver se habían instalado en Biarritz y se había casado en 1955 y allí había tenido a sus dos hijos.

Todo el tiempo nos decía que la guerra es muy cruel y dura pero que ella no tenía trauma alguno porque su vida había sido muy interesante, lo había pasado bien y apenas tenía nada que contar. ¡Pues si lo hubiera tenido!

Tengo una larga entrevista con ella y con fotos inéditas que me facilitó. Y termino con una de ellas que es expresiva de ese grado de relación con el Lehendakari.

GB Tere!!!

En el Uruguay, junio 1946. Viaje de vuelta a Europa. Grupo familia Aguirre, con el Lehendakari, Manu Sota, Maria Ibargaray, José Mari y Tere Gamboa, con el cocinero del barco que resultó ser vasco.