A raíz de la salida en un barquito y con bandera española de tres miembros de ETA de Cuba escribí una reflexión sobre el modelo de sociedad que defiende la Izquierda Abertzale. Siempre me había llamado la atención haber visto en Venezuela, en la burguesa y «podrida» Venezuela anterior al chavismo, a todos estos etarras y revolucionarios a la violeta viviendo plácidamente y ahorrando bolívares cuando su modelo político y social era el cubano. Uno de ellos era José Felix Azurmendi a quien conocí en Caracas dando clases en la «gusanera» Universidad Católica. Eso si. Siempre crítico contra el PNV y el Gobierno Vasco en el exilio.
Azurmendi tras su fracaso en Egin y su necesidad de salir de vivir en Hondarribia eligiendo la muy capitalista Getxo (no se fue a la margen izquierda) y de la mano del PNV fue subdirector de Deia y director de Radio Euzkadi para pasar a ser el responsable de EITB en el exterior, una de esas canonjías a las que no quería renunciar tras haber superado la edad de jubilación en cuatro años.
Hoy es uno de los detractores más acerbos y agrios en Radio Euzkadi contra el PNV en la tertulia en la que participa junto a Germán Yanke y Mikel Huici. Preguntado hoy por el director del programa Dani Alvarez sobre el Alderdi Eguna, al que en el pasado glosó positivamente, nos ha dicho que Urkullu estuvo a la defensiva, que si hablamos de fracaso había que hacerlo del fracaso del PNV ante el insuficiente desarrollo estatutario y las críticas de Ormaza, Retolaza y Arzalluz. Se ha declarado poco menos que albacea de estos abertzales y jelkides en el polo opuesto al de Azurmendi y nos ha dicho que no hablamos de Euskal Herria y sí de Euzkadi sin Navarra (hace falta ser mala gente). Le ha preguntado a Urkullu a cuál de las ETAs se refiere si a la antifranquista o a la de la transición, y ha pontificado diciendo que en definitiva no había que hacer mucho caso al presidente del EBB pues estamos en campaña y que en Navarra vamos con Uxue y con Atarrabie (dicho de forma despectiva) y que no piensa leerse las ponencias para pasar de inmediato a decir que Urkullu no habló de planes. Y lo dijo sin haber escuchado la disertación del presidente del EBB, en los que si habló de los siete ejes de actuación que presenta nuestra organización en estas elecciones.
Mikel Huici le ha contestado muy bien. Le recordaba que Urkullu hablaba de la ETA y de la Izquierda Abertzale fracasada de la de hace 34 años. Así lo dijo. Primera puntualización para quien se jacta de ser un entendido de la reunión de Txiberta. De planes y programas habló Urkullu, pero como no salió al aire en los informativos y Azurmendi no lo vio este indocumentado dice que no existió. De la radio Euzkadi clandestina que funcionaba en Venezuela y así se llamaba y no Radio Euskal Herria, Azurmendi para quitarle valor a aquella proeza dijo que tenía el permiso de los presidentes venezolanos. Se olvidó que esos presidentes eran democráticos y ayudaban a luchar contra la dictadura franquista. Hizo bien Huici en recordarle que el éxito que se atribuye el PNV en estos 34 años es el estatutario, el de la paz, el de la negociación, el de la mitad de paro que en España, el del PIB más alto, el de la investigación… De eso hablaba Urkullu. Ante eso, la IA solo puede exhibir un gran fracaso. El fracaso de Azurmendi, que hasta ahora lo había disimulado haciendo la pelota al PNV. Ahora, para ganar puntos ante esa IA que él ve ya gobernado, ha de desdecirse y nos escupe cada semana.
Pero como vulgarmente se dice estos argumentos para el gran ideólogo son «margaritas para los cerdos». Azurmendi y la Izquierda Abertzale están en la política de la tierra quemada, de ver bien que haya violencia con Kukutza y en atacar a Iñaki Azkuna, de valorar a quienes hacen lo que debieron hacer hace treintacuatro años, del inmenso fracaso de una HB que no ha hecho nada en esos 34 años más que el indio, pero en el caso de Azurmendi que se ha beneficiado todo lo que ha podido y más del PNV y del gobierno vasco y de la situación tan desagradablemente burguesa creada por el PNV, va y cambia para redimir estos grandes pecados y se erige en el defensor de un Chavismo que no lo quiere para Euzkadi, en sacarse de la manga la palabra Euskal Herria, cuando toda su larga vida ha hablado de Euzkadi, y en el revolucionarismo de pico que ahora reivindica un fracaso tras haberse pasado veinte años chupando del bote burgués. Esta situación clama al cielo por lo zafia y muestra de la mala gente que es. Ojalá la Izquierda Abertzale no siga pagando traidores de esta calaña y Radio Euzkadi no siga contratando a un señor tan traidor a su causa por partida doble. De llevar un tertuliano que lleve uno de verdad representativo de la IA y no éste sucedáneo anti PNV que cada vez que abre la boca solo tiene como misión mentir, atacar, minusvalorar y ofender al partido que tan erróneamente creyó en él. ¡Menudo bicho!.