Yo sí me acuerdo. Al día siguiente, la noticia principal en la demarcación autonómica —y en especial, en Gipuzkoa y Bizkaia— no fue el derrumbe sino la posibilidad de una final vasca de Copa. Aquella noche, mientras los equipos de rescate se afanaban entre los escombros sin saber aún que eran altamente tóxicos, la Real y el Athletic se deshicieron, respectivamente, del Real Madrid y el Barça en cuartos. Queda como testimonio para no olvidar la imagen de alguno de los líderes políticos que más se echaría las manos a la cabeza después enfundado en la camiseta del club de sus amores con una sonrisa Profidén. Eso, insisto, cuando desde las cuatro y pico de la tarde conocíamos que dos personas habían quedado sepultadas bajo miles de metros cúbicos de tierra y residuos venenosos.
De alguna manera, semejante festival de hipocresía fue el presagio de lo que vino a continuación. Siguiendo un libreto archiconocido, repetido hasta la saciedad en nuestra triste historia, una brutal tragedia humana y un notable desastre medioambiental se convirtieron en munición para el aprovechamiento politiquero más vil. Transversal, por demás, pues se moría uno del asco y de la pena al escuchar diatribas idénticas en labios españolistas del copón o soberanistas del nueve largo. Lo de menos, las dos vidas perdidas.
Lo que dices es cierto. A partir de ahí ¿no existe la menor responsabilidad política? ¿Un desastre de este calibre se puede despachar simplemente diciendo que “todo estaba BUROCRÁTICAMENTE en regla”? Una cosa es que el funcionario de turno comprobase que todos los sellos de rigor estaban correctamente estampillados y otra muy diferente una vez comprobado que las cosas se estaban haciendo rematadamente mal a todos los niveles, todo se sustancié, ya lo digo, en el plano político, con un encogimiento de hombros.
DIMITIR NO ES UNA PALABRA RUSA.
Maloliente asunto. Yo también recuerdo a Iturgaiz y medios asociados removiendo basuras, al señor Arriola desapareciendo del escenario y a algunos justicieros llamando asesino al Lehendakari.
El soufflé se vino abajo tras los resultados electorales y continuaron las eternas investigaciones tecnicas y judiciales, estas últimas tan eternas como interese prolongar el asunto abierto.
Conclusiones a las que se ha tenido acceso a través de los medios:
Que la UE dictaminó que el G.V. había cumplido con los controles establecidos legalmente.
Que el G.V. declara a VERTER RECYCLING responsable de los daños medioambientales significativos y que debe presentar en un plazo de un mes, del que ya han transcurrido algunas semanas, un plan de recuperación ecológica.
En lo que respecta a la causa judicial, el juzgado de Durango ha iniciado la instrucción en Enero de este año figurando como investigados la empresa y tres empleados de la misma.
Supongo que para quien tenga más información y pruebas es el momento de acudir al juzgado de Durango.
Que la UE cumplia todo y que el G.V. responsabilizaba a Verter recycling lo sabemos todo pero los carroñeros no lo quieren saber.
Una desgracia si, pero de este tipo y similares las hay a tuttiplato o no?
Tu Javier que eres Santurtziarra, por poner un ejemplo, podras hablar de los marinos que se han muerto en sus labores de trabajo y a los que se les conmemora el dia del Carmen con unas coronas de flores tiradas al mar.
Qué pena que seamos tan torpes cuando votamos.
Y es que parece que damos mayoría a los más torpes, para que nos gobiernen.
En cambio dejamos en la opinión a los listos, a los que saben, como nadie, lo que hay que hacer en cada caso, por muy imprevisto, sorprendente y extraordinario que sea.
¿VERDAD QUE NO ES ASÍ?
!!Claro que no!!
Lo que pasa es que quienes salen elegidos para gobernar, al día siguiente se ponen a trabajar, con mayor o menor acierto (son humanos como el resto de la ciudadana), por el bien común, mientras que los otros, lo que quedan en la opinión , también se ponen a trabajar, pero para ver como ganan las próximas elecciones, y la única forma que se les ocurre hacerlo, es atacando a quien gobierna, y esa es toda su tarea de oposición…. lamentable.
Javier, te puedes quedar con la anécdota de la camiseta y exorimirla al máximo. Esta bien.
Pero la pregunta es, ¿de verdad solamente es responsabilidad de la empresa lo ocurrido?
Lo de menos, dos vidas perdidas dices, pues nada, empieza a investigar porque se perdieron esas vidas y reparte responsabilidades
Escucho que «zaldibar argitu» quiere que se escuche «la voz del pueblo». Estamos acostumbrados en esta parcelita del mundo a que nos la intenten colar y que cuando dicen «pueblo» se refieran, en realidad, a los suyos, que ni son «el pueblo» ni siquiera son la mayoría.
En realidad, a los de «Zaldibar argitu» se la trae al pairo que se aclare nada si en ese «aclarar» no está involucrado el PNV, el gobierno vasco, Tapia o Urkullu. Que sigan con la matraca y que les vayan dando.
Lo de menos, las dos vidas perdidas, señor Aitor, para los hipócritas que montan bulla. Lea bien por favor.
Don Javier, no es cuestión de montar bulla, sino de investigar lo sucedido, depurar responsabilidades y evitar que pase otra vez
Aitor perdona que me entrometa, pero para que estan los tribunales y las instituciones ad hoc, o le dejamos a Maialen Iriarte que cuente el relato.
Mesedez