Fujimori reconoce su derrota, pero Maduro y Castro, no

Miércoles 21 de julio de 2021
No seré yo quien defienda el mandato autoritario del presidente del Perú, Alberto Fujimori quien con su siniestro policía Montesinos conculcó derechos fundamentales de los peruanos. Su entrada en la embajada tras aquel largo secuestro, su manejo del poder, su huida al Japón y su actitud dictatorial frenó el desarrollo democrático peruano. Su hija Keiko quiere borrar el pésimo recuerdo de su padre pero sigue sin poder remontar losa tan pesada y se ha resistido, como gato panza arriba, antes de reconocer el triunfo electoral del nuevo presidente Castillo, representante de la izquierda de aquel país que ha ganado por poco, pero ha ganado y ayer tanto el Consejo electoral como Keiko Fujimori han reconocido el triunfo y Castillo gobernará durante cinco años el Perú.
No fue el caso de Bolivia que ganó la izquierda, el partido de Evo Morales, y lo primero que hicieron los vencedores fue encarcelar a la presidenta que había convocado unas elecciones tan democráticas que ganó la oposición.
Todo ésto es impensable en Venezuela, Cuba o Nicaragua porque no hay elecciones democráticas, el Consejo Electoral es correa de transmisión del ejecutivo, no hay separación de poderes, se persigue la disidencia, se la encarcela y no hay forma democrática de que dejen el poder tras haber perdido.
La democracia peruana y la colombiana no son perfectas pero la alternancia es posible, algo que en los regímenes como los dictatoriales enunciados es imposible.
A ver si de una puñetera vez los votantes de Sortu y los periodistas vascos fascinados por las dictaduras latinoamericanas las comparen y lleguen a la conclusión que votar a un comunista es votar a alguien que jamás vas a sacarlo de su silla ni con agua hirviendo.
Comparen Perú y Colombia con Cuba o Venezuela y sean honestos en reconocer la realidad.
Sé que no lo harán porque todos ellos al profesar una ideología totalitaria jamás podrán entender que en democracia nadie tiene toda la razón y que amarrarse a la silla o pasar la vara de mando de un hermano a otro tiene el feo nombre de dictadura.

Mano dura, pide Bildu

Martes 20 de julio de 2021


El epidemiólogo en jefe, Arnaldo Otegi, el mismo que el año pasado no quería elecciones y su propuesta era mantener el confinamiento, tiene recetas mágicas para combatir el maldito virus.
Este lunes fue entrevistado en radio Euskadi y al parecer tiene la fórmula mágica para traer nuestra felicidad este verano y una de ellas pasa por tergiversar las palabras del Lehendakari sobre la mascarilla y otra sobre la actuación de las policías municipales.
Facilito. Si te atribuyo cosas que no has dicho y las rectifico con rotundidad pareces alguien lógico y con razón cuando el comportamiento de Bildu en toda la pandemia ha sido deplorable. Con objeto de desgastar al Lehendakari y culpar al Gobierno Vasco y al PNV de todo han creído que esa era la mejor manera de combatir un virus tan tóxico como su conducta.
Fue ayer lunes. El coordinador de EH Bildu, Arnaldo Otegi, afirmó que los ayuntamientos de EH Bildu han trasladado al Lehendakari, Iñigo Urkullu, que «no tienen capacidad para evitar los botellones», y ha asegurado que es una «utopía» creer que con la Policía se va a resolver este problema.
En declaraciones a Radio Euskadi, Otegi ha contestado a la pregunta de si los consistorios gobernados por la formación soberanista han seguido las indicaciones del Gobierno Vasco para recordar a los ciudadanos que no se puede hacer botellón.
Al respecto, el líder de EH Bildu ha indicado que estos ayuntamientos «lo que le han dicho al Lehendakari es que no tienen capacidad para evitar los botellones».
El Lehendakari no había dicho nada de ésto pero como hay que hacer oposición de todo se tergiversa la realidad.
A su juicio, en Euskadi hay un Gobierno que «no es responsable nunca de nada», le ha faltado decir que como ellos con ETA, y ha recordado su iniciativa de Ley antipandemia que ya se ha visto» que ha servido de nada» porque están «más en la publicidad que en la política». El NO por delante sobre todo. Pero gracias a esa ley se han podido evitar decenas de botellones.
«Cuando no se pueden tomar medidas, la culpa es de Sánchez; cuando no se controlan los botellones, la culpa es de los ayuntamientos y, si son de EH Bildu, tienen culpa doble. En cualquier caso, la culpa de lo que pasa es de EH Bildu, esta es la tesis de este Gobierno, que habla consigo mismo, se mira al espejo y toma decisiones en solitario», ha manifestado. Olvida que a la hora de eludir responsabilidades la IA es maestra.
Arnaldo Otegi ha recordado que, al inicio de la pandemia, pidieron medidas estrictas porque «los líderes se tienen que dirigir a sus países y, a veces, tienen que decir cosas que no gustan a la gente». «Si no, dedícate a otra cosa, dedícate al cine, a la literatura, pero un líder político tiene que ser capaz de decir a la gente, estamos en esta situación y hay que tomar esta medidas», ha manifestado. Por eso el Lehendakari convocó elecciones y por eso se formó un gobierno estable que es lo que a Otegi le llevan los demonios.
Sin embargo, cree que al Gobierno vasco «le da miedo tomar decisiones, le da miedo hablar del toque de queda y utiliza subterfugios y el lenguaje para decir cosas raras». Por ello, le ha pedido que «hable a la gente claro».
«Bizi Berri I, Bizi Berri II, le ponen nombre a todo, pero el problema que hay es grave. ¿Cómo se van a evitar los botellones? ¿con más policía?», ha manifestado Otegi, que ha destacado la importancia de que la gente tenga «la cultura y la educación suficiente como para entender que hay cosas que no se pueden hacer».

¿El ex Ministro López Aguilar indemnizará a la Familia Couso?

Lunes 19 de julio de 2021

El Tribunal Supremo acaba de confirmar la sentencia de la Audiencia Nacional  que declaraba la responsabilidad patrimonial del estado español por los perjuicios ocasionados a la viuda y a los dos hijos del cámara de Telecinco José Couso asesinado hace 16 años en Bagdad por munición estadounidense.

El magistrado ponente dice que “los ciudadanos españoles tienen derecho a la protección diplomática por parte de la Administración nacional, para el resarcimiento de los perjuicios ocasionados por un hecho ilícito, conforme al derecho Internacional, ocasionado directamente por otro estado”, en este caso Estados Unidos..

La sentencia señala que el estado español estaba obligado a hacer gestiones en pro de una investigación objetiva de los hechos y, en su caso, ”utilizar los medios que estimara procedente que pudiera dar como resultado la reparación del daño causado”. Por eso la sala critica que el estado optase por dar la  callada por respuesta.

Es que  fue así. El entonces gobierno de Zapatero a través del ministro de justicia Juan Fernando López Aguilar no dio la callada por respuesta ya que fue uno de los máximos responsables de que los Estados Unidos se llamaran andanas y se quedara tan contento de la mudez de López Aguilar y Moratinos.

López Aguilar, este muy vidrioso personaje a la que Canarias se le quedó pequeña, según los papeles de Wikileaks y publicados por El País  trabajó ,junto a Moratinos, para que no prosperasen las órdenes de detención internacional contra tres soldado  estadounidense involucrados en el asesinato del cámara José Couso en Bagdad y así lo aseguró el ex embajador de EE.UU en Madrid Eduardo Aguirre.

Sobre este asunto el embajador dirigió un cable a la secretaria de Estado de EE.UU, Condoleezza Rice, en el que aseguraba que el gobierno español había “ayudado entre bastidores” a que la fiscalía apelara las decisiones del juez. Tras la resolución judicial los entonces ministros de Justicia, Juan Fernando López  Aguilar y de Exteriores Miguel Ángel Moratinos se pusieron en contacto con el embajador para tranquilizarlo. López Aguilar le transmitió que el gobierno “pondría todo su empeño en cuestionar la decisión del juez basándose en argumentos técnicos”, mientras que Moratinos le aseguró que “si el magistrado arreglaba las cuestiones técnicas, el ejecutivo pasaría a apelar la resolución”.

Con esta información, el embajador envió un telegrama confidencial en el que señalaba que “los ministros españoles están trabajando para que no prosperen las órdenes  de detención”.

Como se ve una sinvergonzonería ocultada al Congreso que afortunadamente Wikileaks sacó a la luz. Personalmente denuncié el caradurismo de este falso progre de López Aguilar, sin la menor respuesta y ahora, con esta sentencia creo que la misma la deberían pagar Moratinos y López Aguilar.

Lo que me extraña es que el hermano David Couso no los haya denunciado porque mejor prueba que la información de El País no va a encontrar en ningún sitio. Todo como se ve muy sucio y muy evidente de la doble moral y del doble discurso de ciertos personajes que a pesar de todo ahí siguen. En el caso de López Aguilar, a pesar de su peripecia personal, de eurodiputado y de gran emisor de frases rotundas en defensa de los derechos humanos. Todo un asco.