Miércoles 2 de marzo de 2016
Este día de debate, ha sido para mí muy especial. He estado en el programa EN JAKE frente al Congreso de los Diputados. Tras haber protagonizado 18 debates de este tipo, dentro del Congreso, me ha tocado estar en el plató de ETB tres horas fuera, a veinte agradables grados, mientras en el hemiciclo se desarrollaba la mañana parlamentaria.
Y junto a nosotros dos manifestaciones. La de Afinsa y la de un grupo de rapados de la extrema derecha que no quieren se ayude a los emigrantes que llegan a suelo español. La policía les ha tratado exquisitamente. Había muchas cámaras. Iban de negro con máscaras azules.
Y les he comentado a mis compañeros lo que hubieran pensado Aguirre, Monzón, Leizaola, Irazusta y aquellos diputados del 36 que una televisión vasca estuviese trasmitiendo en directo para Euzkadi, frente a los leones, en el mejor lugar de la carrera de San Jerónimo, todo el debate y nosotros comentándolo. Yo flipaba.
Junto a nosotros y ladeados, TVE y una Antena 3 que parecía un monstruo, pero allí hemos estado con Lapitz de gran maestro, Alberto el corresponsal de Gara, Azpiolea de El País, la escritora Marisa investigadora y autora del libro sobre Bárcenas y yo. Y hemos seguido el debate tan en directo que parecía que estábamos en la tribuna.
Me ha gustado la oratoria parlamentaria de Rajoy, de Iglesias, de Rivera, de Tardá y la postura bien explicada de Esteban. Me han parecido lamentable los exordios de Patxi López al que casi se le va de las manos el debate en cuatro oportunidades. Este hombre nos va a dar motivos de gloria. De momento le conocíamos aquí. Ahora España empieza a conocerle.
Ha dicho que el parlamentarismo es el dominio de la palabra y es verdad en teoría, pero nadie ha convencido a nadie. Todos han salido de la sala como habían entrado. Ratificándose en sus argumentos. Nadie ha convencido a nadie. Todo lo contrario. Parecía más que una sesión parlamentaria una sesión de pugilato parlamentario.
Me ha parecido lamentable la falta de respeto de los diputados de los grupos mayoritarios cuando hablaban los responsables de los grupos considerados periféricos o menores. Si el mayor problema que tiene España en este momento es la cuestión catalana es de una torpeza supina salir a fumar un cigarro o hacer pasillos o montar corrillos fuera del hemiciclo. Es una vergüenza y denota la superficialidad de la política española.
He echado en falta aquellos oradores y grupos del pasado. Ya no existe CIU, ni casi Unió, ni aquella IU de Anguita, ni el pedaleo plano de Aznar, ni los florilegios de González… pero el nivel actual es bueno. Cada uno ha defendido lo suyo con argumentos y pasión y ha salido hoy al ruedo el mejor Rajoy, como ha salido el mejor Iglesias acordándose del Gal y de Puig Antich o un Tardá recordándole al PP que su partido lo fundaron los «siete magníficos» que todos ellos habían sido ministros de Franco.
Sigo siendo de la opinión que debe gobernar quien gana las elecciones y que el mejor escenario para Euzkadi es un Rajoy debilitado, necesitado de apoyos, con una legislatura corta, con siete cambios constitucionales, con compromisos claros sobre la justicia, el combate contra la corrupción, el blindaje autonómico para las comunidades singulares, y así hasta llegar a una justicia de verdad independiente.
Sánchez y Rivera pierden. Iglesias y Rajoy ganan. El PNV ha asumido la mejor postura y la ha sabido explicar. La pelea continúa.
Ésto no va tan mal como dicen.
a Paco Lopez le quedan tres teleberris hasta las nuevas elecciones, otra vez, en España.
Iglesias creo que ha ganado el debate porque se le ve coherente con sus ideas y no desdeña un pacto a futuro con PNV y EH BILDU. Es lo que intuyo entre lineas.
Rajoy sigue enrocado.
Sánchez pasará a la historia como Pipino el breve y nadie se acordará de él el próximo verano.