Un libro recomendable

Sábado 3 de junio de 2023

Este viernes, estuvimos en la presentación del libro de Iñaki Martínez “Lo que dejan ver las sombras”. Un libro que atrapa y que se desarrolla en La Habana siendo dictador Fulgencio Batista. Describe muy bien la ciudad, el ambiente pre Fidel, la acción de los mafiosos, la vida de un ex cura vasco, los espías estadounidenses, la guionista de Casablanca, la dueña de un burdel y las intrigas y vidas entrelazadas en una ciudad que como el mismo Iñaki describió iba a vivir una revolución fracasada. Casi como el canto del cisne de toda una época fotografiada con pluma certera antes de morir.

Iñaki nació en Guatemala hijo de un gudari de la Brigada Vasca y de una poetisa panameña. Abogado por Deusto, fue miembro fundador de Euskadiko Eskerra. Formó parte de  la comisión de relaciones internacionales de la guerrilla salvadoreña habiendo sido Delegado del Gobierno Vasco, bajo la presidencia de Patxi López, en Colombia, Venezuela y América Central.

Escribe muy bien, ha recibido numerosos premios, el más sonado el de finalista del Premio Nadal en 2015 por La Ciudad de la Mentira. Fue el tercero de esa saga el que presentó en la Feria del Libro en El Arenal de Bilbao este viernes a carpa llena. La obra completa es una trilogía con los mismos personajes que de Tánger habían pasado a La Habana.

La presentación estuvo muy bien y se hizo corta a pesar del calor. Me gustaron las intervenciones de todos los miembros de la mesa, la editora Beatriz Celaya, la presidenta de la Asociación María Eugenia Salaverri, y Francisco Lladó, que había sido en Deusto profesor del autor, que la hizo muy amena. Y como abrió el micrófono al público, pedí la palabra y conté una vivencia que tuve con él en Panamá hace exactamente cuarenta años.

Conocía a Iñaki de su época de activista de EIA y EE, sin mayor relación pero la suficiente para que me contactara en Panamá. En 1983 el Lehendakari Garaikoetxea me encarga le sugiera un viaje para visitar a los vascos de América. Y le propongo ir a Panamá a agradecer la ayuda que le había prestado al lehendakari Agirre el cónsul de Panamá Germán Gil de Guardia  Jaen, a Caracas y a Bogotá. Y llego a Panamá con la dirección del Nuncio del Papa, José Sebastian Laboa, de Pasaia, un tipo activo, listo, singular, sin engolamientos y que iba al grano. Fue el factótum del éxito de  aquel viaje junto a Iñaki Martínez que nos organizó una cena con Berta Torrijos, hermana de Omar Torrijos que había sido Presidente de Panamá hasta 1981 y logrado la devolución del canal en negociación con el presidente Carter. Nada más llegar me dijo: ”Como sabes no soy del PNV, pero Garaikoetxea es mi Lehendakari y tenemos que apoyar a las Instituciones. Soy vasco”.

Los dos Iñakis trabajamos en un programa que tuvo mucho éxito y que se clausuró con la cena de la colectividad donde estaban presentes, la viuda del cónsul Guardia Jaén, la esposa del Consejero comunista de Agirre, Juan Astigarrabia y la viuda del primer Delegado del Gobierno Vasco en Panamá, Juan Mendoza Garaialde que agradecieron muchísimo el gesto y reconocimiento que se hizo con  ellas. No entiendo como hoy en Panamá no hay una delegación para los países centroamericanos. México la posee  y al frente de ella está el ex alcalde y ex senador Kazalis.

Habida cuenta de la facilidad que tiene para novelar la historia Iñaki me atreví a sugerirle lo hiciera con los servicio de espionaje que tuvo el Gobierno Vasco durante la guerra mundial y sobre todo rescatar la historia en Paris con una Gestapo que se apodera de la Delegación Vasca, un policía como Pedro Urraca detrás de los líderes  republicanos derrotados, un Lequerica, ex alcalde de Bilbao y embajador ante el gobierno colaboracionista de Vichy. Valdría la pena lo hiciera. Tiene todos los elementos.

Recomiendo el libro de Iñaki Martínez para leer estas vacaciones, en un chinchorro, con una limonada al lado y viendo la maravilla del Golfo de Bizkaia.

¿Qué  hace Sabino en el Balcón del txakoli?

Viernes 2 de junio de 2023

La aclaración a esta pregunta  me la dio uno de los descendientes de la familia que regentó  el Txakoli de Larrazabal  hasta el final ya que fue derruido. En una sociedad europea normal, ese Txakoli  sería una de las referencias históricas intocables, pero estamos hablando del franquismo, aunque en democracia se derruyó la casa donde se izó por primera vez la ikurriña en la calle Correo. Y me dijo que Sabino Arana les había hablado a sus contertulios desde el balcón. Era lo que le habían transmitido. A Luis Gezala este dato le interesó.

No me extraña que cunda la indiferencia pues este jueves, la Fundación Sabino Arana organizó una conferencia sobre la figura de Sabino Arana recordando que en noviembre se cumplen 120 años de su fallecimiento. La  sala estaba llena pero no había  ningún juntero, ningún parlamentario, ningún diputado, ningún senador, ningún burukide salvo la presidenta de la de la Fundación Mireia Zarate, ningún concejal, ningún diputado territorial. Parecería que no va con ellos. Al parecer se organizan estos actos para la fiel  infantería, pero no para gentes encumbradas que nos han pedido el voto y en julio nos volverán a pedir el voto. Y lo malo es que si  rascas un poco, el conocimiento que tienen del fundador de su partido es entre poco y nada. Es la impura realidad. Luego son los que se preguntan qué es lo que está pasando, sin mirarse ellos a la conducta  que ejercen y tienen hacia lo colectivo. El acto fue publicitado en Deia y en todos los medios digitales.

Luis Gezala, historiador e investigador de la propia Fundación nos ofreció una amena y didáctica conferencia apoyada en un power point. Al final contestó a las preguntas que se le hicieron. Estuvo pues todo, muy bien.

Lógicamente en una hora no pudo narrar toda una vida sino escogió datos de interés. Habló de la pérdida foral, de la familia de Sabino y de su padre, de la conversación con su hermano Luis, de la ikurriña, de la apari merienda del Txakolí Larrazabal, de su evolución final, y de los mitos de su libro “Cuatro Glorias Patrias”. Una pregunta versó sobre este asunto ya que hay un programa en ETB dedicado a acabar con los mitos. Gezala se mostró irritado contra la superficialidad que difunden y puso el ejemplo de una falsedad repetida como es  decir que lola la hidalguía universal vasca es un mito  cuando está demostrado y avalado por Resoluciones de la Chancilleria de Valladolid. Fue rotundo al afirmar que esa manía destructiva contra los mitos  vascos es grave pues todos los pueblos del mundo los tienen y forman parte del acervo histórico de los mismos. ”Todos los pueblos tienen  todo derecho  a mantener su  mitología y sus sueños”.

También habló de las acusaciones sobre el racismo  destacando declaraciones racistas de Cánovas del Castillo, contemporáneo de Sabino y no tenido por racista, porque era el lenguaje de la época pareciendo que el único que se defendía de esa manera era Sabino Arana. Uno de los asistentes recordó el racismo nada menos que de Engels.

Asimismo en este mes de aniversarios redondos sabinianos el próximo vienes 9, Betiko Lagunak ha organizado una comida en el Palacio Euskalduna para recordar el 130 aniversario de aquella irrupción de Sabino Arana en la política vasca  en el Txakolí de Larrazabal con 28 años preguntando a los asistentes  sobre quien se ocupaba de los intereses de Bizkaia que fue el inicio de su prédica, posteriormente nacional vasca, a la que llamó Euzkadi. No le comprendieron pero, persona constante como era, a los cinco días sacó su periódico Bizkaitarra, periódico que fue clausurado y dio con sus  huesos en la cárcel de Larrinaga .

En esa comida del viernes 9 va a intervenir Edorta Jiménez, historiador de Mundaka, que escribió un libro titulado NIKOLE sobre la viuda de Sabino Arana y la sucia campaña que se abrió en su contra. Creo que en este año de la Mujer, reivindicar a Nikolase  Atxikallende vale la pena y se hace por primera vez. Hemos invitado a Emakunde, pero todavía no ha contestado. Confiemos que el tema le parezca de interés, aunque nunca se sabe. Esto también es feminismo  y del bueno.

Estuve el miércoles en la sala de Cultura de Romo. Nos reunimos cuatro gatos  para ver el documental que Alex García de Bikuña ha hecho sobre la figura del algorteño Vicente Amezaga. Muy buen trabajo. Amezaga fue el primero que abrió una ikastola en Plentzia, fue Director de Educación del primer Gobierno Vasco, vivió una aventura increíble en el vapor El Alsina antes de llegar exiliado  a Buenos Aires, vivió como Delegado en Uruguay, fue animador de Galeuzka, tradujo al euskera varias de las obras de Shakespeare, sacó a flote y a la historia toda la vida de la Compañía Guipuzcoana de Caracas, escribió El Hombre Vasco y fue un gran erudito falleciendo en 1969 en Caracas. Es el padre de una saga, una de sus hijas es la escritora Arantza Amezaga. Su hijo, el cardiólogo Bingen nos narró tan rica vida hacia un hombre que incluso tiene un busto en el Puerto de Bilbao.

Con dolor destaco que son actos que no interesan a casi nadie. A ETB, televisión pública, le sacas del fútbol, de las manifestaciones y de programas de cocina y del Conquis y el resto le importa e interesa un comino.

Con mucha ingenuidad y buena voluntad me preguntaba Bingen si iba a acudir el consejero de Cultura Bingen Zupiria ya que su aita estuvo con Leizaola en el primer Departamento de cultura del Gobierno Vasco  y su labor por un euskera del que decía que si no se conocía su origen, nadie le iba a conocer su fin.

No reproduzco lo que le contesté.

¿Qué es  lo que está pasando?. Se  preguntan ingenuamente algunos.

 Pues esto.

Como decía Agatha Christie: “La gente inteligente no se ofende, saca conclusiones”

Reflexiones de un votante sobre los resultados del 28 de mayo.

Jueves 1 de junio de 2023

Ayer publiqué la reflexión de Esnepel y hoy lo hago con la de Zaldiaran. Es bueno escuchar al votante  y, como decía Agatha Christie, ”la gente inteligente no se ofende, saca conclusiones”. Dicho de otra manera, “Quien no es inteligente se ofende y no saca conclusiones”.

Y Zaldiaran nos escribe:

“Comienzan a hacerse tantos análisis sobre las elecciones, que probablemente, quedarán a medias porque empezarán a hacerse las  encuestas para las generales.

En Euskadi, hay un partido que ha ganado en votos, el PNV, pero que ha perdido apoyos.

Hay un partido que ha subido apoyos y es segundo, Bildu, que entiendo estarán contentos, aunque no vayan a poder gobernar en varios sitios clave que han ganado, como Gipuzkoa o Vitoria, sin olvidarnos de que va a ser difícil que le dejen gobernar en Iruña. Aunque aquí ha ganado UPN, nos guste o no.

El PSOE, se ha mantenido, lo cual visto el desastre en España, tanto en Euskadi como en Catalunya, las cosas no les han salido mal, pero ojo, son terceros y no han tenido una subida importante, porque así como van a gobernar en Vitoria, han bajado junteros, han aguantado en casi todos los ayuntamientos, Pasaia perderán, pero no han ganado ayuntamientos nuevos.

El PP ha subido, lo que pasa es que subir de tan poco, es como tener un salario de 300€ y que te lo suban a 330€, sí te suben un 10% pero no pagas ni el seguro del coche cuando te toca. Además han perdido Navaridas y a no ser que arreglen en Laguardia o Labastida algo, pasarán de 2 ayuntamientos gobernados en Euskadi a 1. Baños de Ebro.

Podemos, creo firmemente, que es el que más ha perdido, seguramente condicionado porque a la izquierda del PSOE hay un lio, que ni los hermanos Marx lo harían peor, al final cuando tienes ministras como Belarra y Montero, que no se han creído su papel de ministras, de gente seria sino que parecen líderes de barrio, mal vas. Puede que una minoría muy minoría esté encantada de tener líderes vecinales como ministras, pero el común de los mortales, como se ha visto, prefieren algo más serio.

A mí, que me gusta esto de la política, veo desde fuera con interés el desarrollo de todos los partidos, pero el que más me interesa es el que yo apoyo. Y ahí es donde esa prometida reflexión del presidente del EBB, vendrá bien si se hacen correctamente los deberes. Yo pongo una serie de cosas y el que sepa leer entre líneas o sobre líneas, estará de acuerdo, que hay que hacer algo.

1.- Osakidetza, no es un problema económico, pero está claro que hay un problema, probablemente menor del que se protesta, pero es demasiada gente protestando.

2.- Ideología, cuando tu mayor atracción de voto, para que sigas gobernando, es que no salgan los de Bildu, al final, esa gente irá volviendo a su origen y no te votará. Se tendrá que analizar porque hace 20 años con Ibarretxe, el militante tenía ilusión y ahora no tiene ilusión.

3.- Problemas sindicales. ELA, Ertzaintza. Aunque a mí me parezcan algunas peticiones desfasadas como el aumento de salario en la Ertzaintza de 1100€, si que veo una desprotección hacia nuestra policía (la vasca), aunque también en otras policías. Si no se legisla para que alguien no siga en la calle, robando una y otra vez, hasta en 30 ocasiones. Es muy desmotivador para el que detiene a los malos, esto lo incluyo en el buenismo, que es el siguiente punto.

4.- Buenismo.¿ Por qué tenemos que hacer seguidismo del buenismo de algunos cuando los militantes y votantes de base pensamos que sin perder la esencia social, de ayuda al que no le salen bien las cosas, no podemos dejar actuar a cierta gente con total impunidad?. Alguien cree que al votante del PNV le parece bien la Okupación de casas? que le parece bien que un ladrón entre en 20 caseríos y 10 fábricas a robar, y hasta que no le pillan dando una paliza, se presenta ante el juez detenido y sale a la hora con una sonrisa de oreja a oreja? que la RGI no tenga más control? no digo que desaparezca, pero que problema hay con la huella digital, si ya la tenemos en los DNI? Que haya gente que viva por el morro sin trabajar, sin plazo para cortarle el grifo?

5.- Alguien en el PNV, no se entera que hay cargos públicos e incluso internos o en sociedades públicas, que no se creen ni saben a que debe jugar el PNV. Y esto ocurre en todos los territorios. Y veo mucha gente por ahí, que ha mamado la galleta olvidada. Pero que serán cuando la estampida vacíe los puestos a ocupar, los que trabajen de nuevo para el Partido.

En fin voté por fidelidad, por obligación al adquirir un compromiso hace ya más de 30 años y porque no hay nada mejor, pero ilusionarme poquito, que os voy a contar.“