Parece increíble. Tenemos gente que sigue apoyando la muerte

Jueves 7 de abril de 2022

En toda sociedad hay un sector negacionista que nunca dará la razón a nada y que aunque le demuestres que es de día te dirán que es de noche. Pierdes el tiempo tratando de convencerles. Lo hemos visto con la Pandemia, aunque, por si acaso, la mayoría de ellos se ha vacunado y cuando han caído enfermos, solo algunos han pedido perdón por su irracionalidad..

Y pasa ahora con la invasión rusa a Ucrania. Se han inventado una historia que justifica todo tipo de masacres, de invasiones y destrucción. Lo malo es que no les importa nada mezclarlo todo como en este caso con la Korrika que haría bien en sacar un comunicado rechazando esta basura, porque perjudica al euskera y a la convivencia y a la magnífica receptividad de nuestra sociedad  de una iniciativa tan exitosa, positiva y alegre como la Korrika ante el que sufre en Ucrania. En esta foto vemos como en Portugalete, de madrugada, sacaron esta bandera de la URSS con la Z, tratando de instrumentalizar el euskera. Expertos en pancartas, siguen estando en contra de todo y para el colmo de los colmos resulta que ahora están con Putin  y tratan de dañar una manifestación popular exitosa y genuina.

En otro orden de cosas, el martes en el Congreso de los Diputados, Zelenski comparó la guerra en Ucrania con el bombardeo de Gernika,”Parece que estamos en abril de 1937”. Esto no ha gustado nada a la derecha y ultraderecha. Hermannn Tetsch twiteaba. ”Era de esperar que Zelensky trajera iconografía soviética habiendo sido educado en la URSS. No se le puede culpar. Peor lo tenemos aquí que tenemos varias generaciones con esa mentirosa iconografía y mitología soviéticas paridas en democracia”. En Tele 5 María Jamardo en la tertulia de la tarde decía: ”Ni los que bombardearon eran tan malos ni los bombardeados serían tan buenos”.

Es lo que hay y eso hay que combatirlo como se combate el negar el Holocausto. He sido siempre muy crítico con el museo de Gernika que tiene una sala dedicada al bombardeo cuando todo él debería haber sido dedicado a ello, con lo que fue, con lo que se dijo y con lo que se manipuló. Y estar siempre al quite y mantener la llama de la reivindicación de aquella barbarie y la manipulación posterior. La gente joven tiene que ver lo que fue aquel horror. Y el Museo de Gernika, a mi entender, no cumple con esta función. Fue muy mal concebido. Ojalá, ante las palabras de Zelenski y el aluvión de visitantes que va a tener  rehagan toda la muestra.

Y, finalmente, lamento que Gara y Berria ante la alusión de Zelenski, alusión que tanto daño ha hecho a los que siguen considerando que a Gernika la destruyeron los propios vascos, los directores de estos periódicos no hicieran la menor alusión en sus portadas, a diferencia del resto de los periódicos vascos.  De los españoles, todos lo hicieron, salvo ABC y La Razón. Para Gara y Berria lo de Gernika y Zelenski no tuvo la menor importancia. Lo ignoraron. ¿Les pareció una minucia?. ¿Siguen sin condenar la guerra de Putin?. Parece que si, y, recordemos que Berria vive de las ayudas de las instituciones vascas e incluso europeas.

¿Es esto normal en una sociedad con valores?. ¿Alguien se extraña que ETA durara hasta el 2011?.

El proyecto europeo tiene muchas fallas pero es lo único serio que se ha ido haciendo estas décadas para evitar, entre otras cosas, las guerras y se está haciendo además, a trancas y barrancas,  con un criterio de subsidiariedad. Ante la bandera de la URSS esta madrugada en Portugalete, las declaraciones contra Gernika como en 1937 y la insensibilidad de Gara y Berria me da que  el europeísmo y la condición humana de la extrema derecha y de la extrema izquierda se siguen dando la mano, mientras piden unos derechos que niegan a los demás, entre ellos, la vida y los derechos humanos, mientras siguen matando gente.

Me parece increíble.

Elena, la polisaria

Miércoles 6 de abril de 2022

Cuando en marzo de 2022, Mohamed VI anunció la nueva política española ante el Sáhara, entregando toda una política de defensa de los derechos saharauis a Marruecos me acordé de una sesión protagonizada por la senadora Etxegoyen.

Nosotros, como Grupo Vasco en el Senado, teníamos  derecho a una interpelación por período de sesiones (enero a junio). La interpelación plantea un asunto que en el pleno siguiente se convierte en Moción y es ahí donde los grupos de la Cámara intervienen y fijan postura.

Aquel  martes teníamos la Moción relativa a  la situación del Sahara en momentos en los que las Naciones Unidas no sabían qué hacer con semejante patata caliente. Y China y Estados Unidos metían  sus  sospechosas narices ya  que no solo hay fosfatos y pesca en dicho territorio irredento  sino  asimismo petróleo, mientras la situación del pueblo saharaui era  cada vez más precaria y su destino solo era  el de sobrevivir en el desierto, y en verano que sus niños se acogieran a la amistad de las familias sensibles ante una penosa situación.

Elena Etxegoyen, senadora por Gipuzkoa, concejal y cabeza de lista del PNV en el ayuntamiento de Irún llevaba varios años trabajando en este asunto y viajado a Tinduff. Se unía en sus afanes y éste trabajo al desarrollado por el parlamentario Txomin Aurrekoetxea al que el presidente Abdelaziz prometió una calle cuando fueran independientes  habida cuenta de su dedicación.

En ese momento la senadora Etxegoyen fue  la redactora y defensora de su propuesta pidiendo que de una vez se cumpliera y ejerciera  el  derecho de autodeterminación para un pueblo que clamaba en el desierto. Nunca mejor dicho.

Aquel   martes, con su pañuelo palestino, bajó a la tribuna y defendió con convicción, argumentos y pasión una demanda muy interiorizada por la sociedad vasca y española, logrando con algún añadido, la unanimidad. Todo un éxito. Elena, inteligente, guapa, con sus grandes ojos negros y verbo encendido se llevó la Cámara a su Moción..

La senadora para la defensa de la moción, se basó en los principios que sustentaban la doctrina de Naciones Unidas para la resolución de este conflicto: el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación y a su ejercicio a través de un referéndum libre y democrático. La senadora  del PNV, se refirió también al último informe que había publicado  Koffi Annan ,secretario general de la ONU, en relación al contencioso del Sahara Occidental, denunciando sus contradicciones pero subrayando lo que tenía de positivo. Según las palabras del Secretario General, la ONU no se podía invitar a las partes a negociar un Plan de Autonomía en los términos que defendía Marruecos, pues aquello conllevaría el reconocimiento de la soberanía marroquí sobre el Sáhara y no procedía.. Asimismo, Annan anunció el envío de una Delegación del Alto Comisionado de los Derechos Humanos de Ginebra a los territorios del Sahara Occidental, bajo ocupación marroquí.

Recordemos que la senadora Etxegoyen ya había presentado  una interpelación relativa a esta cuestión en el Pleno que se celebró el  5 de abril. Entonces, Elena exigió al Gobierno un compromiso activo a favor de la causa saharaui; asimismo, expresó la necesidad de que el Intergrupo parlamentario constituido al efecto en el Senado «se pusiera  a trabajar».

Recuerdo este hecho porque tras la reivindicación saharaui hay decenas de iniciativas de todo tipo por parte del PNV, en el Congreso y en el Senado, que siempre chocaban con el frontón de la “razón de estado”, es decir, no dar patadas al avispero de Ceuta y Melilla.

Pero tras aquella aparente pasividad  ha habido una culpable estrategia de los diversos ministerios y ministros de exteriores de la UCD, PSOE y PP. Dejar morir el problema por inanición, no molestar a los sátrapas de Marruecos, lograr que sea imposible poner al día el censo y seguir tirando millas.

Una auténtica vergüenza humana y política.

Larga vida a Iturgaiz en un país con sindicatos que solo ofrecen huelgas

Martes 5 de abril de 2022

Este pasado lunes ha sido impagable en cuestión de manifestaciones de todo tipo. Entresaco algunas y me quedo con las dos primeras y las tres últimas las tiro a la basura.

Por ejemplo con el anuncio del gobierno vasco que ha  incrementado este año hasta los casi 2,8 millones las ayudas a las pymes para iniciarse en materia de innovación, en el marco del programa Hazinnova que consiste en un asesoramiento especializado a pymes en la ejecución de microproyectos de innovación en producto y en proceso de negocio.

También con su afirmación de que marzo ha sido un mes «especialmente complicado» con un incremento del paro mayor en el sector industrial, entre hombres, entre jóvenes y en Gipuzkoa, «exactamente en los ámbitos y sectores de población donde la recuperación se había mostrado más sólida hasta ahora», pero se ha destacado que se ha logrado el «máximo histórico» en contratación indefinida, que alcanza el 21,49% del total de 71.669 contratos firmados el pasado mes, frente al 9,9% con el que se cerró 2021, cuando no se había aprobado la vigente reforma laboral.

Me han llamado la atención dos mensajes políticos en las antípodas sobre los impuestos. La coordinadora de Podemos  Pilar Garrido, ha pedido al Lehendakari, Iñigo Urkullu, un pacto fiscal y de rentas para que las grandes empresas se hagan «corresponsables» en la salida de la crisis económica actual y se «proteja a los trabajadores, familias, autónomos y pymes».  Es decir, subir impuestos.

En el extremo opuesto el impagable Iturgaiz, que se entrevistó en Ajuria Enea con el Lehendakari ha acusado al PNV de estar «enganchado como una garrapata» al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mientras que en Euskadi «apuesta por la radicalidad mirando por el retrovisor a ver lo que hace Bildu». Su solución, como un mantra es bajar impuestos sin decirnos de que partidas detraerían el dinero. Pero eso a él no le importa.

Para colmo de metepatas, algo habrá oído, y como un meritorio bisoño  el  presidente del PP vasco,  afirmó, este antiguo admirador de Casado al que le costó cambiar de caballo, que al Partido Popular le ha «tocado la lotería» con la llegada de Alberto Núñez Feijoo a la Presidencia y se ha puesto a su disposición para presentarse a la reelección en el próximo Congreso de los populares de Euskadi, aún sin fecha.

No nos caerá esa breva!!!. Ojalá siga de presidente del PP cien años.

En la otra esquina, su compañero de partido el presidente del PP de Álava, Iñaki Oyarzabal, ha pedido que se «rebajen» los requisitos sobre el conocimiento del euskera para el acceso a un empleo público en Euskadi, donde el castellano y el euskera son lenguas oficiales. No sé si este caballero sabe que el euskera está en debilidad en base a muchos factores, entre ellos su persecución y si sigue este razonamiento debería castellanizar su apellido para dar ejemplo de coherencia. Es increible que Núñez Feijoo les hable de moderación y el uno sale con la garrapata y el otro que hay que dejar al euskera en la debilidad. O son muy tontos o todo el discurso de Feijoo es falso.

Y en este clima, los sindicatos antisistema que padecemos y que no hay otros como ellos en ningún país democrático del mundo, en lugar de presentar iniciativas para salir de la crisis, lo de ellos es la huelga por la huelga, como la que tuvieron que anular contra  el proyecto de ley educativa cuando todavía no había sido ni presentada. Pero ahora, vuelven a la carga.  

ELA ha mostrado su disposición a colaborar con los agentes que están «dispuestos» para impulsar las movilizaciones y huelgas necesarias con el objetivo de que la futura Ley de Educación vasca tenga en cuenta las condiciones laborales del personal del sistema educativo, así como para «condicionar y mejorar sus contenido».

Yo me pregunto. Sin empezar a andar la ley educativa y existiendo la mayoría de partidos en ello, así como los padres, ¿quiénes son estos iluminados  para vivir en la amenaza continua contra  una audiencia cautiva tan sensible?. ¿No hay cuajo para decirles a estos populistas profesionales y sindicalistas de tres al cuarto que esto no tiene nada que ver con el sindicalismo sino más bien con los piquetes?.

Entre las garrapatas de Iturgaiz, la bajada de impuestos y la subida de los mismos, la anulación del euskera por Oyarzabal y los anuncios de huelga de ELA, afortunadamente hay gente sensata, la mayoría, que no sigue estas tremebundeces apocalípticas y sigue y seguirá apostando por el sentido común y el hacer cosas de las cuales ellos se aprovechan.

Menos mal.