Yoko Garamendi y John Casado

Martes 18 de enero de 2022

Esta foto ha circulado por las redes estos días. Tenía un pie interesante denunciando la hipocresía de este mundo. Decía así.

“Los artistas John Lennon y Yoko Ono esperando que la sirvienta los arregle la cama, para poder realizar su sesión fotográfica por un mundo pacífico y sin clases sociales”.

No me cabe la menor duda de que esta foto llegó al móvil de Antonio Garamendi, presidente de la patronal española CEOE y de ahí la bobalicona explicación que dio este lunes junto a Pablo Casado presumiendo de excelente relación con el líder del PP. ”Tendríamos que hacer como Lennon y Yoko Ono, subir a una habitación de hotel y recibir a la prensa para que vieran que es así”. Y todo eso después de darse varios abrazos. Nada nuevo por cierto.

Me imagino que vio la foto, omitió su pie reivindicativo y dijo esa bobada. No hacía falta. Cuando en 1996 negociamos con el PP la transferencia de Puertos había que elegir a su Autoridad Portuaria y Mayor Oreja nos quiso imponer a Antonio Garamendi. Nos opusimos y fue José Ángel Corres quien presidió el Puerto de Bilbao. No debe tenernos mucha simpatía. Para mayor gloria nos ganamos el principio de las hostilidades con Mayor Oreja al acuerdo ya que era su candidato.

Garamendi es el típico representante de la derecha negurítica que puede haber engañado a alguien por sus buenas formas  y su percha pero obsérvese lo que dijo cuando tras haber llegado a un acuerdo con los sindicatos y el gobierno sobre la reforma laboral y el PNV dijo que en Euzkadi la prevalencia debía ser el marco autonómico como dice la ley. Con altanería salió destempladamente diciendo que si se movía una sola coma, dejaban de apoyar la reforma. Muy vasco y muy del Athletic pero más español de caja única que el Cid Campeador.

Por eso le ha gustado la foto de Yoko y John  sin el pie de la denuncia social. Él es de los Garamendi del PP de toda la vida. Que nadie se engañe.

¿Cuándo le quitan el título de Rey Emérito como a Andrés Windsor?

Lunes 17 de enero de 2022

Los defensores de la monarquía como sistema simbólico de representación argumentan que su prestigio se basa en la utilidad y en la ejemplaridad, dos de las condiciones que Juan Carlos de Borbón no ha puesto en valor. No creo que haya que aplaudir a nadie por pasar de una dictadura a una democracia y si esto se logra rodeando al sujeto de una burbuja  con un pacto de silencio de hierro, el invento tiene pies de barro.

El hijo de la reina de Inglaterra acaba de enterarse de que va la cosa. La reina Isabel II ha decidido retirar todos sus títulos militares al príncipe Andrés que será juzgado en EE.UU por su presunta implicación en un escándalo de abuso sexual a una menor. En un escueto comunicado, la Casa Real inglesa indicó que “con la aprobación de la reina  y su acuerdo, los títulos militares del duque de York y sus patronatos reales han sido devueltos a la reina”.

Aquí la casa Real no dice nada, al Parlamento no le dejan investigar, el gobierno mira para otro lado y el Emérito le dice a la Fiscal general que se tome prisa porque quiere volver a su antiguo reino cuanto antes.

Que vuelva pero sin ser Rey Emérito porque él, como Andrés, han sido acusado presuntamente por acoso sexual, uno en EE.UU y Juan Carlos en Londres.

De esto no se puede hablar pero ¿a que todo esto es una gran vergüenza y  solo demuestra  que el sistema español es de todo a cien?.

¿Qué implicaría un eventual despliegue militar de Rusia en Venezuela?

Domingo 16 de enero 2022

En la fotografía se ven las banderas rusa y estadounidense mostrándose  antes de las conversaciones entre el viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Ryabkov, y la subsecretaria de Estado de Estados Unidos, Wendy Sherman, en Ginebra, Suiza, el 10 de enero de 2022.

¿Por qué?

Especialistas coinciden en que un despliegue de activos militares rusos en Venezuela atropellaría “todo el marco jurídico, el Estado de derecho venezolano”, si se puede hablar de estado de derecho bajo el régimen de Maduro.

¡Imagínense ustedes que esas declaraciones las hubiera hecho Biden! Si, sabemos que en la historia USA ha tenido bases en Panamá, Guantánamo y otros países, pero hoy hablar de bases, como las tuvo España durante la dictadura de Franco significaría volver a la “guerra fría”.

Se reaviva pues  la preocupación en Venezuela tras las declaraciones del vicecanciller de Rusia, Sergei Ryabkov, quien asomó la posibilidad de enviar activos militares a Cuba y Venezuela si aumentan las tensiones con Estados Unidos por la presencia de tropas rusas en Ucrania.

Desde hace varios años, la oposición, académicos y diversas organizaciones, especialmente aquellas dedicadas a temas de seguridad y derechos humanos, han cuestionado la alianza geopolítica entre Caracas y Moscú.

Rocío San Miguel, presidente de Control Ciudadano para la Seguridad, la Defensa y la Fuerza Armada Nacional, considera “lamentables” las declaraciones de Ryabkov y afirma que el funcionario “desconoce” las prohibiciones constitucionales que impiden establecer bases militares extranjeras en territorio venezolano.

Sostiene que utilizar a Venezuela y Cuba como “herramientas de amenaza geopolítica” reedita una “postura imperial” históricamente condenada por Latinoamérica y espera que la declaración solo se trate de “una política de micrófonos como estrategia entre Washington y Moscú para dividir sus diferencias”.

“Puede implicar cualquier cosa para Venezuela, desde tropas rusas hasta la presencia de mercenarios. En Venezuela no queremos el experimento que está realizando Rusia en África, dando carta blanca a agentes independientes de política exterior como el grupo Warner, una compañía privada militar rusa”, dijo al ser consultada.

Preguntado sobre el mismo aspecto, Andrei Serbin, analista internacional y director de CRIES, explica que, ante la ausencia de detalles, aún es “difícil” determinarlo, pero recuerda que ya hay presencia militar rusa en el país, mucha orientada al soporte técnico de equipamiento militar adquirido por el Gobierno durante el chavismo.

“También hay presencia en la parte de capacitación, en forma de unidades de fuerzas especiales como de contratistas militares de capacitación tanto a la Fuerza Armada como a elementos de la Policía Nacional. Cómo podría ser esa presencia a futuro, capaz implica el despliegue de unidades militares convencionales rusas en territorio venezolano, ahí habría que ver qué características tienen esas unidades”, manifiesta.

“Es probable que ante un aumento de la presencia militar rusa en Venezuela y en Cuba, Estados Unidos empiece a reconsiderar su estrategia para la región y que esa estrategia pueda incluir un mayor despliegue o mayor énfasis sobre capacidades defensivas en América Latina, en especial con sus aliados más cercanos”, opina.

A juicio del profesor de derecho constitucional, Oscar Arnal, vuelven los “vientos” de la Guerra Fría y la situación implicaría una “violación de la soberanía nacional” y un “terrible” precedente.

Juan Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por decenas de países calificó como un “exabrupto” vincular a un tercer país en un conflicto militar que no tiene que ver con la región y dijo esperar que “la dictadura deje el cinismo y rechace este tipo de declaraciones injerencistas que buscan un conflicto de marca mundial”.