Un Gobierno con dos enemigos, la pandemia y una oposición destructiva

Jueves 15 de julio de 2021


Nos repetía D. Manuel de Irujo que “uno cuenta la feria según le va”. Es un viejo refrán que se puede aplicar al primer año de gestión del actual gobierno vasco nacido tras unas elecciones que la oposición no quería.
Según ésta a las Siete Plagas de Egipto había que añadirle una más, la simbiosis entre la pandemia y el modo de hacer del gobierno Urkullu, gobierno de coalición entre el PNV y el PSE. Si hace un año no querían elecciones y éstas se hicieron a pesar de sus augurios, que se demostraron errados, Urkullu aprovechando un claro entre rebrotes que él vio, nadie puede esperar que una oposición tan corta de vista y argumentos reconociera o alabase ni tan solo uno de los aciertos de un ejecutivo obligado a navegar en aguas turbulentas y desconocidas.
Si la democracia es un régimen de opinión pública el Gobierno Urkullu no ha tenido el beneplácito del Grupo Vocento aquejado de tan fortísima crisis que cree que para vender un periódico ha de apostar por la radicalidad. En el día de hoy, en portada y como titular principal nos decían que “La explosión de contagios tumba en solo cinco días las previsiones de Urkullu ”. Parecería que se alegran de ello y que fuera Urkullu el responsable de esta situación cuando el Lehendakari lo ha venido advirtiendo continuamente. Con la manipulación informativa de Vocento ha tenido este gobierno que tratar de llegar al ciudadano en sus reflexiones, medidas y peticiones. Este también es uno de los datos que se han dado este año.
No se dan cuenta que todo lo exagerado no es creíble y siguen en ello en una especie de pinza que también comprende no solo a Bildu y Elkarrekin Podemos sino al PP y Vox. Cuatro y medio cabalgando juntos con la fusta pegando a un caballo herido.
De ahí que cuando se unen el hambre con las ganas de comer el resultado es tan distorsionado que le da a Urkullu alas para seguir volando, sobrevolando, aterrizando y afincándose en todos y cada uno de los espacios que la concertación de fuerzas opositoras considera un lodazal. Como el asunto del vertedero de Zaldibar, no penalizado electoralmente hace un año, veremos que dice la justicia, con un gobierno que mantuvo su búsqueda quince meses a un costo de 22 millones de euros, cuando en Tenerife no ha llegado al mes la búsqueda del asesino de las dos niñas, de él y de una de sus hijas. No se ha hecho la menor reflexión al respecto. Zaldibar pues como diario ariete de desgaste.
Para mí, este actuar de la oposición ha sido una de las señas de este año de pandemia en Euskadi y no porque crea que la misma ha de llevar el botafumeiro a todas partes sino por la falta de perspicacia, sutileza, y cultura democrática que vivimos en Euskadi frente a lo que acontece en otras partes de Europa. Se critica lo criticable, como con las vacunas de dos responsables pero se ayuda y reconoce lo lógico y lo asumible. Ha sido pues lo llevado a cabo este año por parte de la pinza antigubernamental una de las señas de este período. Y no la menor.
Otra ha sido la relación con el gobierno Sánchez, un táctico, que funciona en base a encuestas, presiones, marketing, caprichos y a veces distorsionando la realidad. Parecería que si se llega a una cogobernanza seria y de socio prioritario y a un acuerdo de desarrollo estatutario, de obligado cumplimiento, por más que la Alta Administración del estado ponga palos en la rueda de los acuerdos, estos han de cumplirse. Confiarlo todo a que el PNV “no va a hacer caer un gobierno progresista” es una manera errada de hacer política que lógicamente ha condicionado la fluidez de relación con el gobierno central este año pandémico y por tanto un inmenso error que denota que el Gobierno Vasco opera frente a un gobierno poco serio y gran improvisador a pesar de haberse logrado la vieja competencia de prisiones y el acercamiento de presos, algo caro para una Bildu, que sigue hipotecado a sus presos y al pasado algo que también denota que en este año que Urkullu ha tenido frente a si a un ejecutivo central poco serio que ha cambiado a cuatro ministros de Administraciones Públicas en su corto mandato y otros imponderables que en situaciones normales no se dan. Meritxel Batet, Carolina Darias, Miquel Iceta y ahora Isabel Rodríguez nos dan una foto de situación muy compleja que obliga a la crítica y a veces a la improvisación.
Torpe manera de hacer política que desacredita a quien la lleva a cabo, independientemente que se siga desde Madrid jugando con cartas marcadas.
Ojeando la prensa veía dos titulares que reflejan una realidad. ”El turismo crecerá hasta un 85% en Euskadi”. En el 2019 fue del 69%. En relación al turismo rural el sector transmite que hay alojamientos que ya tienen cubiertos los meses de julio y agosto. Datos que expresan que se toca la normalidad con la punta de los dedos en un sector fortísimamente golpeado por la crisis. El otro sector, que ha aprobado sus asignaturas académicas a pesar de los inmensos nubarrones que se cernían sobre ella y que era el educativo, jaleado en la calle sindicalmente, su problema ya no será el Covid, que terminará superándose con el actual ritmo de crucero de la vacunación, sino con algo tan importante como la brutal caída de la natalidad que pone en jaque a la escuela vasca. A la escuela y al inmediato futuro. Ese si es uno de los problemas de este país que la crisis ha tapado.
¿Qué se podían haber hecho las cosas mejor en un año?.
Sin lugar a dudas. El jurista Juanjo Álvarez nos decía que le costaba entender que en año y medio no se hubieran aprobado leyes para luchar contra la pandemia teniendo aseguradas las votaciones en el Parlamento. Pues sí. Alguien ha fallado ahí permitiendo que jueces ataran las manos al ejecutivo para ir evitando los rebrotes al no haber legislación para llevarlo a cabo. Ahora se ve claro, aunque es verdad que nadie en sus inicios hubiera pensado que esta crisis sanitaria iba a durar casi dos años.
Un año muy complicado que a pesar de los pesares y según dicen las encuestas no ha desgastado al gobierno de coalición. Veremos si se han sentado las bases para que dentro de un año la percepción mejore y la oposición aprenda a plantear seriamente alternativas argumentadas y posibles.


CUBA LIBRE EN EL ARENAL Y LA IA SIN ENTERARSE

Miércoles 14 de julio de 2021

No, no se trata de una Coca Cola con ron, sino de un grito salido de las gargantas de unos 200 jóvenes cubanos ayer martes a la tarde en el Arenal bilbaíno. ¡Viva Cuba Libre!.

Al calor de los acontecimientos en su país, los cubanos de Euzkadi se manifestaron con ese grito y el reiterado de ¡Libertad, Libertad!, algo al parecer revolucionario en aquella Isla tan golpeada por el castrismo. Estuve allí con ellos.

Sospechosamente fue ETB que sacó una buena información, pero lógicamente esto no podía quedar así. Se fueron a la plaza Unamuno y sin que viniera a cuento le entrevistaron al responsable de Cuba-Euskadi, una plataforma de la IA y el Sr. Manzanedo no solo criticó a los Estados Unidos sino que hizo un spot diciendo que ellos van a organizar una manifestación dando el día, el lugar y la consigna. Ya me parecía a mi sospechoso que los responsables de ETB iban a dar una buena información al respecto. La tenían que aguar con este camarada, que no era noticia y que le debieron llamar, como si en tiempos de Franco la BBC entrevistara a la oposición y contrarrestara lo dicho  preguntando al régimen franquista que opinaba de lo que hacía la oposición. El nuevo director, Iparragirre, no se ha enterado de los valores que ha de defender un Ente público y concretamente ETB. Leí su reciente entrevista y me parecía que un paracaidista  había aterrizado en Capuchinos.

Me comentaban los cubanos que se manifestaban en el Arenal que me fijara en la concentración. Gente joven, trabajadora y representativa de una juventud que ve a los Castros como Dinosaurios. Lógico. Implantaron su dictadura personal hace 62 años. Y no han soltado la silla sino se la han pasado de unos a otros.

Comentaban que el actual presidente Díaz Canel es un tipo soso y sin carisma  que ha necesitado llamar a Raúl Castro quien con su taca taca ha tenido que salir en televisión para recordar que viven las mieles de una revolución, sobre todo ellos, y que la culpa es de los malditos yanquis, como si esa juventud fuera idiota y la mayoría de ellos no soñara con  vivir en Miami, al parecer la leprosería de América, frente al paraíso de la revolución castrista que ya no aguanta más sino con represión. Pero también decían que solo con violencia, apagar internet, controlar la información pueden mantenerse mientras la gente se muere de hambre. Esos son los éxitos de la Robolución. Sesenta y dos años sin elecciones libres y contrastables. Y con el mismo rollo antiyanki. Por eso  la gente ha perdido el miedo.

Me comentaban su cabreo con los periodistas vascos que hablan del Bloqueo norteamericano, plegándose a las consignas castristas, cuando se trata de un Embargo y de medidas especiales contra empresas que no pueden comerciar con un régimen que necesita vitalmente divisas. Ya de por hecho utilizan el dólar para todo. Mucho grito “¡Revolución o muerte!, ¡Patria o Muerte!,”, aquello de “Iraultza ala Hil” de Herri Batasuna pero sus intercambios han de hacerlos en dólares. Por lo menos en tiempos de Batista tenían su Peso como moneda  en circulación. Ahora ni eso.

En esto han quedado los combates de Sierra Maestra. Comentaban también que la obsesión anti “imperialismo yanqui” no es más que un subterfugio para tener al país controlado, porque comerciar pueden hacerlo con todo el mundo, pero no lo hacen pues no producen absolutamente nada. Viven del Turismo y de sus playas como en tiempos de un Batista que había convertido la Isla en el Burdel del Caribe, pero que a diferencia de ellos  tenía a la Isla como una tacita de plata y hoy es un estercolero, con los hospitales que se caen, sus casas destartaladas, sus coches de antes de la Revolución. Los de Sortu en vacaciones solo van a los hoteles de cinco estrellas y a sus paradisíacas playas con billete de ida pero, lo más importante, con el billete de vuelta. Mucha Revolución pero como en la burguesa Euzkadi, en ningún sitio.

Hoy en la tertulia de Radio Euskadi le han preguntado a Iñaki Iriondo, gran pope de Gara, el Granma vasco, sobre una Cuba de la que ellos apenas hablan, quizás por vergüenza, en su periódico. ¿Saben que ha dicho?. Pues lo de siempre. Que en la rueda de prensa de ayer en La Moncloa a la nueva ministra portavoz no le preguntaron por Marruecos. ¿A dónde vas?. Manzanas traigo. Típico de gentes que se dan cuenta de la aberración que supone mantener una dictadura de 62 años, pero son incapaces de reconocer absolutamente nada en público. Lo consideran una traición y una debilidad. Como condenar las acciones de ETA.

¿Cómo este mundo de Sortu puede tener la mínima credibilidad en Euzkadi?. Se condena Marruecos, se condena el juicio 13/13, se condenan las dictaduras de Cuba, Venezuela y Nicaragua si es que se tiene una mínima de ética, decencia y se es demócrata.

Definitivamente, no lo son. Su referencia como se ve es Cuba y su asquerosa dictadura.

En Euzkadi hay cubanos exiliados y emigrantes y es preciso manifestarles nuestra solidaridad a pesar de que los llamen “gusanos” como el chavismo llama a la oposición  “escuálidos”. Como informaba  el camarada Manzaneda un millón de colectivos, de esos que surgen como champiñones, junto a la  gente de Sortu y de ELA-LAB van a organizar una manifestación de apoyo a lo que llaman Revolución cubana con la gran diferencia de que en el Arenal éste martes todos eran cubanos  los que allí estaban y que en la que organiza Sortu  habrá cuatro  cubanos y lo demás es Ernai, Sortu, Ela, Lab  y Podemos. Una pequeña gran diferencia. Hablan en nombre del pueblo cubano cuando solo representan a su dictadura.

Y con el grito de ¡Libertad, Patria y Vida!, ¡Viva Cuba Libre!, les dejé entusiasmados de sentirse esperanzados y de  que puede haber una cierta luz en la oscuridad al ritmo de sus bailes tropicales, muy marchosos por cierto.

¡Viva Cuba Libre!. ¡Paz y Vida!.

El modelo cubano de Sortu fracasa estrepitosamente

Martes 13 de julio de 2021

Acerquemos el foco. Arnaldo Otegi no pudo llegar al funeral de Castro en La Habana y Arkaitz Rodríguez le organizó uno en el Puerto de Donostia cuando falleció. ”Patria o Muerte”, puño cerrado, gritaban. Es su modelo social.

Pero la gente se cansa, se hastía de una dictadura de 62 años en la que un hermano, Fidel, le pasa el poder a otro hermano, Raúl, sin someter esta decisión al voto popular. Y Sortu al parecer, aprueba esta forma tan  DEMOCRÁTICA  de proceder y grita en las calles no el demagógico grito de guerra de “Patria o Muerte” sino “Patria y Vida”. Parece pues más sensato, algo que ni ETA en su día, ni Sortu en la actualidad, ni el Granma vasco, terminan por asumir. Lo de ellos sigue siendo la dictadura del proletariado y la economía planificada desde arriba que da como consecuencia hambre, cortes de electricidad y agua, miseria y persecución.

Escuchaba hoy la tertulia de Radio Euskadi en la que Irantzu Valera de la IA hacía suyas las palabras de Díaz Canel, el mayordomo de Raúl Castro diciendo que la responsabilidad, toda ella, era de los Estados Unidos. Una señora al poco ha intervenido diciendo que viaja a Cuba dos veces al año para ayudar a unos amigos médicos, con tres maletas arrastrándolas a pesar de su edad con ropa y comida junto a medicinas pues no tienen nada. Incluso cuando está allí hace cola para  poder alimentar a tres familias que a veces solo tienen un mango para comer. Otro decía que el paraíso de las libertades cubanas  persigue a los homosexuales, Varela no ha dicho nada, y la señora se lamentaba de haber visto a un Sr. con una suela atada con cuerdas como zapato.

Es fácil criticar a los USA pero es preciso aclarar que no se trata de un bloqueo sino de un embargo y que Obama viajó a La Habana en 2016 y llegó a acuerdos que la dictadura cubana nunca cumplió. Pero además de los Estados  Unidos ¿no hay cientos de países con los que Cuba puede comercializar  o recibir ayuda?. ¿Por qué esa obsesión con los yanquis si son tan malos?.

Lo del embargo es la excusa del enemigo exterior que aglutina un país en tiempos de crisis, pero ahora el régimen ha de vivir con la novedad de internet y las redes sociales, aunque las persigue. El pueblo cubano ya no puede más. Ha perdido su alimentación, su medicina, su ocio pero también el miedo. No tienen nada que perder, salvo sus cadenas, y se van a las calles a pedir libertad, mientras Sortu y Gara siguen dando la matraca  con  la conspiración internacional y no admitiendo la mínima crítica ni ejerciendo la menor autocrítica. La culpa toda es de Biden.

En Euskadi tenemos muchos ingenuos de la IA que creen en las recetas mágicas que nos imparten a todas horas  todos los parlamentarios y junteros  de esta organización “comunista de las tierras vascas”. Están en su derecho pero  sigan y  vean que el modelo Sortu es un modelo de fracaso, de hambre, de persecución, de tutelaje, de miseria. Como lo fue ETA.

Y que aprendan en cabeza ajena.