El problema no es solo un machista como Erdogan sino un patán como Michel.

Viernes 9 de abril de 2021

La imagen es patética. La presidenta de  la Comisión Europea en un sillón y Erdogan y el presidente del Consejo Europeo Charles Michel en sendas butacas que parecían tronos. Y los dos sonriendo y Doña Ursula tensa y triste. Impresentable.

Conozco a Erdogan, dictador de Turquia, machista, maleducado, centralista, antikurdo. Mala persona. Vino a un almuerzo oficial en el Senado y nos pusieron a los portavoces de CIU y PNV a su derecha e izquierda. Cuando se enteró quienes éramos no nos dirigió la palabra en toda la comida, no llegó al postre y se fue antes de tiempo y sin despedirse. Un indeseable.

Lo malo es que algunos personajes con poder ante tipos como estos se arrugan y Charles Michel se arrugó a cuenta de que se podía estropear todo lo que se había negociado. No es verdad. A Turquía le interesa más la UE y sus euros que aguantar  conductas machistas como las del presidente turco Erdogan.

Lo que tenía que haber hecho este patán que es el presidente del Consejo, Charles Michel, es haber  dejado su trono a Ursula Von  der Leyen y haberse ido al sillón él. Le faltaron reflejos a pesar de que ahora nos diga que tiene una abuela a la que quiere mucho. Repito, un patán.

 Ahora, y ante la crítica pública a su falta de reflejos dijo este jueves lamentar «profundamente» el trato recibido por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Vor der Leyen, en Ankara, donde fue relegada a un sofá lateral durante una reunión con el jefe del Estado turco, Recep Tayyip Erdogan. «Lamento profundamente» esa imagen «desastrosa» en Ankara y la impresión generada de «desprecio» hacia Von der Leyen y «a las mujeres en general», afirmó Michel durante una entrevista en la emisión «50 minutos con» del canal LN24. Este tipo solo ha reaccionado cuando ha visto que la crítica subía de decibelios. Por lo menos el primer ministro italiano ha descrito a Erdogan como lo que es, un dictador.

Bautizado como «sofagate», el asunto no solo ha provocado una ola de indignación entre los principales grupos de la Eurocámara, que han pedido hoy que ambos mandatarios comparezcan ante el plenario para aclarar lo sucedido, sino también una gran cantidad de críticas en la prensa, lo que ha obligado a Michel a dar explicaciones anoche en una publicación en su página de Facebook y este jueves en la citada emisión en directo. Visiblemente afectado por la polémica, Michel aseguró que no intervino en aquel criticado momento porque podría haberse interpretado como un gesto «paternalista» por su parte y porque tuvo la «intuición» de que podría haber provocado «un incidente aún más grave» y arruinar los esfuerzos diplomáticos llevados a cabo durante meses para encauzar las relaciones con Turquía.

Mantuvo que había rebobinado la controvertida escena cientos de veces en su cabeza y que si pudiera volver atrás habría cambiado la disposición de las sillas y añadido una más para que Von der Leyen se hubiese sentado con él y Erdogan al mismo nivel. El ex primer ministro belga aseguró que las autoridades turcas aplicaron el protocolo de forma estricta y que no informaron de todos los detalles a su equipo, que según dijo no tuvo acceso previamente a la sala en la que se desarrolló la reunión. En este sentido, el jefe de protocolo del Consejo, Dominique Marro, explicó esta tarde en una nota que, según el Tratado de Lisboa, el presidente del Consejo recibe el estatus de jefe de Estado, mientras que el de la CE, el de primer ministro. Marro aseguró que su equipo no tuvo acceso previo a la sala donde se celebró la reunión y que, de haber sido así, habría «sugerido» que, «como cortesía, reemplazaran el sofá por dos butacas». 

«Soy consciente -remarcó Michel- de que esas imágenes que duran unos segundos son brutales, chocantes, pero no reflejan la importancia real de las tres horas de reunión» de él y Von der Leyen con el presidente turco. Según Michel, tras el gesto de sorpresa de la presidenta del Ejecutivo comunitario al ver que no había silla para ella y que ha dado la vuelta al mundo, Von der Leyen y él tuvieron un «intercambio de miradas en unos segundos» y «de mutuo acuerdo» decidieron continuar la reunión cada uno en el sitio que le había sido asignado por las autoridades turcas. Era, subrayó, «un momento importante para la Unión Europea», para tratar de reconducir las relaciones con Turquía que han estado dominadas en el pasado reciente por la «imprevisibilidad» con efectos «muy directos» en la UE, por ejemplo, en materia migratoria. Manifestó sentirse «terriblemente afectado y triste» por la imagen que se ha proyectado de él, que aseguró no se corresponde con la realidad ni en su vida privada ni en la política, en la que «siempre» ha mostrado «respeto por las mujeres», subrayó al recordar que es padre de dos niñas y que su abuela, hacia la que siente una «gran estima», tuvo una gran influencia en su educación. Desveló que tras el incidente en Ankara Von der Leyen y él hablaron «brevemente», ya que la presidenta de la Comisión prosiguió viaje en solitario a Jordania, y que esperaba poder conversar con ella a partir de esta noche cuando regrese a Bruselas. 

Toda esa palabrería barata para terminar sin admitir que le faltó sensibilidad, reflejos, carácter y mano izquierda para poner a un machista como Erdogan en su sitio. Ojalá esa imagen le persiga hasta que haga en realidad su mea culpa.

Nueve preguntas interesantes a Ortuzar

Jueves 8 de abril de 2021

El pasado domingo Miriam Vázquez le hizo para Deia una entrevista de dos páginas a Andoni Ortuzar con fotografía de Pablo Viñas. De ese cuestionario he sacado nueve preguntas con sus consabidas respuestas del presidente del EBB, que me han parecido de mayor interés. Son éstas:

¿El PNV no renuncia al derecho a decidir aunque haya quedado eclipsado por la gestión del coronavirus?

—Es consustancial a un partido nacionalista y soberanista. Ni le damos un valor totémico, ni aceptamos que se le meta al cuarto oscuro argumentando que rompe la convivencia. Es un derecho democrático y un mecanismo, no un fin en sí mismo. En Europa hay que buscar un modo de garantizar a los pueblos sin Estado que tengan capacidad de decidir su futuro.

¿Al PNV le alivia la salida de Pablo Iglesias? Ha intentado desplazar el eje de las alianzas hacia Bildu.

—Iglesias es un vendehumos. Ha querido traslucir que es el nexo de las izquierdas cuando no era verdad, utilizando a ERC, que no se ha dejado tanto, y a Bildu, que se ha entregado a esa estrategia porque es menos vergonzante explicar a su gente su sumisión en Madrid porque tiene un acuerdo con Iglesias, que porque se tiene que comer crudos los apoyos a Sánchez de manera acrítica para que pasen cosas en política penitenciaria.

El PNV ha dado un toque de atención a Sánchez pidiendo que cumpla compromisos antes del verano. ¿Dónde está el mínimo para el PNV?

—Hay un paquete de cinco o seis transferencias que tendrían que estar para verano. Tendrían que haber estado para Semana Santa, pero vamos a dar por bueno que la vacunación haya generado unos retrasos. Para verano tenemos que tener también la certeza del cronograma del Tren de Alta Velocidad, la entrada a las capitales… Puede pasar que hasta 2027 no se termine al 100% la obra, pero para el año 2024 puede haber ciertos tramos. También hay un paquete fiscal: concertar las tasas Google y Tobin. Esos tres paquetes son importantes.

¿El PNV no toma en consideración la oferta de Bildu para ir a Madrid a defender los proyectos europeos?

—Si dependiera de la sarta de generalidades y falta de concreción del documento de Bildu, a Euskadi no iba a llegar ni un millón de euros. Demuestra la incompetencia de Bildu para gestionar cualquier cosa. Pero es que, además, no quieren hacer nada con el PNV. Tienen una peneuvitis degenerativa. Y quienes tienen que negociar son las instituciones vascas. Nosotros estamos para apoyar. Si Bildu tiene tantas ganas de que las cosas vayan bien, que se lea el documento Next y decida qué proyectos apoya y le diga a Madrid que esos tienen su apoyo.

¿Puede ser que la legislatura estatal se rompa por el lado catalán?

—El tema catalán necesita una clarificación catalana, y ojalá se produzca rápido. Eso daría con un Govern, y ese Govern sería el que tendría la posición política negociadora con Madrid.

¿Puigdemont debe controlar el Govern desde Waterloo?

—No. Yo no veo ninguna estructura ni ninguna célula dictando la capacidad de actuación de una institución. Yo no querría esto para el Gobierno vasco y el lehendakari. Otra cosa es que el Govern resultante sea lo suficientemente generoso para incorporar otros programas. Pero, tener fuera de las instituciones un guardián de las esencias, no. Tampoco creo que sea la pretensión. Yo creo que la reivindicación del Consell per la República es que nadie tenga la tentación de decir que todo empieza hoy.

¿La convulsión del PP también en Euskadi complica el deshielo?

—Pero con el PP ya hemos hecho lo que teníamos que hacer… No hay que buscar más vueltas a lo que ha sucedido (el acercamiento para renovar el Consejo General del Poder Judicial). Teníamos una ruptura de relaciones y la hemos superado. Yo no veo al PP con las ideas claras. En el Estado está en su pelea, y aquí tiene una ensalada de confusión tremenda.

¿Hay algo sobre los movimientos en Euskaltel que no le guste al PNV?

—No es tanto que guste o no, sino si responde a la lógica de los tiempos o no. En Estados Unidos, un mercado de 300 millones de personas, hay tres operadores de telefonía. En China, con 1.400 millones, hay unos cinco operadores. En Europa hay ciento y pico, para un mercado de 500 millones. El mundo no va por donde va Europa. Lo que está pasando con Euskaltel (la OPA pactada de Más Móvil), desde el punto de vista del cliente, es que va a tener una oferta más potente. Necesitas un músculo financiero y tecnológico y, si no lo tienes, o te alías, o terminas absorbido. Ya vale de que Bildu nos engañe. Soy cliente de Euskaltel. Por no hacer esto, ¿tendríamos que estar condenados a no tener 5G? Tenemos que retener los centros de decisión, pero para dar el mejor servicio. Podemos dar un servicio muy soberano, pero de txalaparta, y seremos un país atrasado.

¿Cómo se encuentra el PNV en Nafarroa, ahora que denuncia que UPN está torpedeando su labor con casos como el de Manu Ayerdi?

—Navarra tiene que caminar hacia una normalización política en la que UPN se quede como lo que es: una fuerza importante, con tirón electoral, pero que tiene una incapacidad absoluta para llegar a acuerdos, y tics difícilmente compatibles con el sistema democrático. Una de las asignaturas pendientes que tenemos todas las fuerzas navarras es marcarle más el territorio. Hay cierto miedo reverencial a UPN, y el resto le tenemos que poner más en su sitio.

«EH Bildu no quiere hacer nada con el PNV porque tiene una ‘peneuvitis’ degenerativa»

«Soy cliente de Euskaltel; y podría dar un servicio muy soberano, pero de txalaparta, y seríamos un país atrasado»

Julen Madariaga. Tragedia y fracaso

Miércoles 7 de abril de 2021

Ha fallecido a los 88 años Julen Madariaga, uno de los fundadores de ETA. Su abuelo republicano fue contendiente con José Antonio Agirre cuando a éste le eligieron Lehendakari los concejales en Gernika. Hubo dos candidaturas y una de ellas fue la de Ramón de Madariaga. Julen, hijo  de militante de ANV no venía pues de estirpe jelkide por lo que puede ser entendible que junto a un grupo de estudiantes vascos  fundara EKIN y pusiera en marcha el trasvase de jóvenes inquietos de Euzko Gaztedi hacía la nueva marca. Nada de lo que podría sentirse orgulloso.

Ante el fallecimiento, respeto, sobre todo cuando tuvo el coraje con Patxi Zabaleta de fundar Aralar y tras los asesinatos de Joseba Goikoetxea y de Gregorio Ordóñez denunciar estos crímenes cosa que la actual Sortu sigue sin hacer. Si ahora tanto le ennoblecen deberían hacer por lo menos lo que hizo él. Ya, ya.

Hoy en Gara, Iñaki Iriondo le dedica dos páginas y pone un titular que es todo un  editorial  al reproducir  una de sus reflexiones “Estoy orgulloso de haber creado ETA”. Pues vaya.

Una de las causas que aducía para crearla en los años sesenta fue que el EAJ-PNV no hacía nada. Un día le pregunté a Juan Ajuriaguerra por esta afirmación y me contestó “Si hacer algo consistía en matar, secuestrar, extorsionar, evidentemente no hacíamos nada, pero si hacer algo era mantener la resistencia, enarbolar la legitimidad de un gobierno en el exilio, emisoras clandestinas, trabajar en el mantenimiento del euskera, pasar el testigo de una generación a otra, organizar clandestinamente los Aberri Egunas y mil cosas que se hicieron en política internacional y con la democracia cristiana la respuesta fue la que dio el pueblo en las elecciones de junio de 1977. Ganamos. Funcionó la Memoria histórica. ETA ha sido una tragedia y ha sido un gran fracaso. No sabemos cómo sería hoy la historia vasca de no haber existido ETA”.

Lo decía alguien que había estado condenado a muerte,hecho una huelga de hambrea ante el incumoplimiento del pacto con los italianos,seis años de prisión , cinco detenciones y una vida de clandestinidad.Y encima que no había hecho nada.

Y la pregunta, a pesar de Iñaki Iriondo y de la dirección de Gara es sencilla ante esa obsesión cobarde que tienen de justificar esta existencia. Nunca contestarán a esta cuestión: ¿para qué sirvió ETA además para matar y extorsionar, robar la representación de una causa, enviar la peor de las imágenes al mundo?. Que nos diga ese mundo que logró ETA. Lo único que pueden argumentar es que fue un inmenso fracaso. Jóvenes muertos, torturados, rotas sus vidas por la obcecación de un grupo de iluminados dogmáticos, algunos muy generosos,  que nos iban a liberar de una dictadura y de España matando gente. Franco murió en la cama y Euzkadi es una autonomía, perdón Euskal Herria  que es lo único que han cambiado por puro antisabinianismo.

Ya lo hemos visto con el décimo aniversario de Bildu.

No quieren hablar de ello y nos argumentan que Bildu cumple diez años como la gran noticia. Si tan orgullosos están de la historia de sangre, muerte y sacrificio de ETA pondrían como la fecha de nacimiento de la Izquierda Abertzale en 1960 o cuando mataron a Etxebarrieta o a Melitón Manzanas o trataron de descarrilar un tren de excombatientes. Pero no lo ponen ni lo dicen. Son más sutiles, como Iñaki Iriondo que nos colocan de manera desafiante  ese  titular  que es lo que piensa él y su periódico no vaya a ser que les llamen traidores los que todavía siguen creyendo que ETA fue de verdad un Movimiento de Liberación Nacional de los vascos.

De eso nada.

Fue una tragedia y un inmenso fracaso.