Ninguna Conferencia Episcopal de ningún país serio que se precie puede consentir que se le asocie a un partido político porque la religión católica basa su doctrina en la universalidad, el amor, en el perdón y en pasajes como aquel de Cristo echando del templo a los mercaderes.
No ha sido éste el cometido de la Conferencia Episcopal española presidida por uno de los hombres más sectarios, de secta, que hayamos conocido: el cardenal Antonio María Rouco Varela, que afortunadamente cumple hoy 75 años y teóricamente ha de retirarse. Ya veremos.
Para mí el viaje del Papa, en lo político, no en lo pastoral, ha tenido la impronta total del PP, no de la pluralidad política de un estado no unitario. Solo ha faltado que en la sotana del Papa hubiera sponsorizado y puesto el Banco de Santander VOTAD HERMANOS A MARIANO RAJOY.
¿Por qué lo digo?.
Bien es verdad que el presidente Zapatero ha estado en la recepción y en la Nunciatura. Faltaría más. Pero la presencia del PP ha sido abusiva. ¿Por qué diablos tenía que saludarle como figura institucional Soraya Sáenz de Santamaría al Papa y no los demás portavoces que nunca fueron invitados?. ¿Por qué el Papa se reunió en privado con Mariano Rajoy con cubrimiento y con una obsequiosidad infantil por parte de TVE y no con otros líderes políticos si de verdad el estado español, que no lo es, se tratara de un estado plural, plurilingüe y plurinacional?. ¿Donde ha estado esa Conferencia Episcopal silente para corregir estos excesos del españolismo del cardenal de extrema derecha?. Pues todos callados, como ovejas negras.
Lo peor que le puede ocurrir a la Iglesia católica en un estado no confesional es que el catolicismo se resuma en una religión para gentes del PP en lugar de ser una religión universa ,abierta y de todos.
Recuerdo como en setiembre de 1995 en una entrevista que le hicieron en Radio Nacional a Xabier Arzalluz éste denuncio como la Jerarquía eclesiástica estaba trabajando para lograr el ascenso de la derecha en España, añadiendo que su temor se basaba en que hubiera una derecha cavernícola. Le contestó el secretario general de la Conferencia Episcopal monseñor José Sánchez negando que la Iglesia estuviera haciéndole la campaña al PP. «Tengo la impresión de que el señor Arzalluz está muy mal informado. La Iglesia no está haciendo ninguna gestión al respecto, por lo que pueda conocer la Conferencia Episcopal y el obispado del que soy obispo. Si él tiene más datos, que lo diga».Lo dijo. No sirvió de nada.
Pues sí. La Jerarquía vota al PP y ha hecho de este viaje un acto asociado al PP y una especie de plataforma electoral del PP al calor de las Jornadas Mundiales de la Juventud. Y lo seguiré creyendo mientras nadie de la organización no nos digan lo contrario y nos demuestren que sí han contemplado a otras fuerzas del arco parlamentario y nos digan que la españolidad es algo que une hoy a la Jerarquía Eclesiástica con el PP. Y en eso están. A los hechos y a las pruebas me remito. El próximo 20 N no se elegirá un presidente de gobierno, a ver si se enteran, se elige un congreso y un senado, y ahí juegan todas las fuerzas no solo el PP y el PSOE. Y aquí no hay líder de la oposición que valga. Rajoy no lo es.
Por lo demás, nada nuevo para el PNV. En 1935 una delegación del PNV viajó al Vaticano a pedirle al Papa Pío XI que los obispos no actuaran como gobernadores civiles. ¿Y qué pasó?. Pues que a José Antonio Aguirre, a Manuel de Irujo, al presidente del EBB y a toda la delegación les dijeron que el Papa les recibiría si el PNV en las elecciones de febrero de 1936 se unía a la CEDA (Confederación Española de Derechas Autónomas). Nuestros diputados muy dignos le contestaron al cardenal Pizzardo que ellos no habían viajado a Roma para recibir instrucciones políticas y que el PNV iría solo a la contienda, como así fue. Y luego vino todo lo demás. Una jerarquía con una Carta Colectiva llamando Cruzada a la sublevación militar de Franco…l6 curas asesinados por la Santa Cruzada y setenta años de silencio.
Por eso la Conferencia Episcopal debería haber sido mucho más cuidadosa y sensible en la escenografía que ha montado y no haber excluido a todas las fuerzas políticas del arco parlamentario como lo ha hecho con premeditación y alevosía como lo ha hecho con todos salvo con el PP. Pero eso sería como pedir peras al olmo. O higos a la higuera evangélica.
Lo denuncio porque este aspecto del viaje, me ha parecido una vergüenza.
En resumen:
1) Este Papa no se entera. O no quiere enterarse. Se preocupa más por sus zapatos rojos que por hechos políticos de calado.
2) España sigue sin admitir que es un estado autonómico, plurinacional y plurilingüe.
3) Rouco Varela y los organizadores han querido mostrar la España del 18 de julio, con un partido único que represente las esencias profundas de una españolidad más rancia que Doña Rogelia.
4) Si el viaje era Pastoral a que viene recibir a Rajoy y a Saenz de Santamaría y a la familia del rey que no está ni en la Constitución.
5) La mejor manera de identificar Iglesia con posturas de derecha es organizar un viaje como éste.
Amén.