Sábado 27 de junio de 2015
En mi larga estancia en Madrid jamás vi un trabajo de hormiga parlamentaria más intenso que el del senador de IU por Asturias, Jesús Iglesias. No ha habido moción, proyecto, pregunta en la que no haya intervenido con ponderación, datos, sólidos argumentos y respeto al adversario. Ubicado en la última fila de la Cámara, pequeño de estatura, mirando por encima de las gafas y con una libreta donde lo apuntaba todo, ha sido el llanero solitario de la décima legislatura. Su compañero andaluz, Mariscal, que cada vez que intervenía parecía que iba a tomar el Palacio de Invierno, dejó de venir hace ocho meses. Y él ha estado allí, solo, en el Grupo Mixto, y trabajando como una hormiga diesel y ganándose cada día el respeto de la Cámara. No habrá hoy senador, de ningún partido, que diga una palabra de más, salvo elogios, sobre este representante de la ciudadanía que rompe todos los tópicos sobre el Senado, sobre la representación ciudadana y sobre lo que tiene que ser un parlamentario. Nada de lo que se dice por ahí. Y la pena es que estos ejemplos se desconozcan y solo sea noticia lo estridente.
Solo nos equivocamos en una cosa. Siempre creímos que los periodistas Parlamentarios le premiarían. Nos equivocamos. Esta APP solo premia a los suyos. Y si hay algún premio que alguien ha merecido ha sido Jesús Iglesias. Como siempre, se han cubierto de gloria.
El caso es que Jesús Iglesias se va de la Cámara y creo que de la política activa teniendo solo 53 años. Pero debe tener un crío pequeño al que atender más de cerca. Y el viernes fue la sesión de despedida. Aprovechó el último punto, había intervenido en todos los demás, y esa última iniciativa la presentábamos todos los Grupos de la Cámara excepto el PP para que se creara una Comisión especial sobre la Memoria Histórica. Y nos dijo que se iba agradeciendo a todos los trabajadores de la Cámara y a todos los senadores. Un larguísimo aplauso coronaron sus palabras. Nos pusimos en pie. Y el presidente Pio García Escudero, del PP, hizo una semblanza de él, como nadie del PP habrá hecho en su vida a nadie de IU.
Y me tocó intervenir después y aproveché el momento emocional para recalcar su trabajo y decir que en 29 años de acción política no había visto a nadie trabajar como a Jesús Iglesias que siendo comunista se llama Jesús y se apellida Iglesias. La Cámara celebró la boutade y relajó la emoción con una gran carcajada que él celebró.
En un periódico de Asturias aparecía esta reseña:
«Ha sido un ejemplo por su trabajo, rigor, solvencia y ponderación, todo lo que debe reunir un parlamentario», ha dicho Pío García Escudero
El senador de IU Jesús Enrique Iglesias ha concluido hoy su intervención en el pleno de la Cámara alta con el aplauso y homenaje de los parlamentarios, de los que se ha despedido así: «Si algún día traspasan los Picos de Europa para ir al lejano norte, allá me tendrán como anfitrión».
El presidente del Senado, Pío García Escudero le ha respondido en nombre de toda la cámara para decirle que ha sido «un ejemplo» por su «trabajo, rigor, solvencia y ponderación, todo lo que debe reunir un parlamentario».
«Y si esta cámara fuera más conocida, sería un ejemplo para la otra cámara, y para alguna otra más», ha añadido el presidente del Senado dirigiéndose a Iglesias al que, ha dicho, no le importa volver a homenajear en julio, si finalmente es reelegido senador autonómico.
También el senador del PNV, Iñaki Anasagasti, que ha tomado la palabra a continuación y que ha hecho gala de ser el parlamentario más veterano -precisamente hoy cumple 29 años como parlamentario- ha dicho que en todo ese tiempo no ha visto un trabajo, dedicación y respeto como los que ha demostrado Iglesias.
«Un senador comunista que se llama Jesús y se apellida Iglesias llama la atención, pero es que lo ha hecho por su trabajo», ha dicho Anasagasti entre los aplausos y las risas de los senadores.
Iglesias es senador autonómico por Asturias y el nuevo parlamento autonómico surgido de las urnas el pasado 24 de mayo tiene que decidir su reelección o su sustitución por otro representante.
El senador ha aludido hoy a esta circunstancia al terminar su intervención -«no es seguro que en el próximo pleno esté ya y no quiero despedirme a la francesa», ha señalado- y dar un cariñoso agradecimiento a todos los trabajadores del Senado, los letrados y sus compañeros en el hemiciclo.
«De todos he aprendido algo, he aprendido mucho en estos años», ha señalado Iglesias, quien ha hecho una mención especial al Grupo Mixto, donde se encuadran los dos senadores de IU, «un espacio muy inteligente de convivencia de posiciones políticas muy dispares» y «un ejemplo democrático como hay pocos».
La despedida de Iglesias ha tenido lugar durante el debate del último punto del orden del día, para la creación de una comisión especial sobre la Memoria Histórica, en el que el senador del PP Alejandro Muñoz Alonso ha elogiado también la capacidad de trabajo que ha demostrado el representante de IU desde su escaño.
