Mitterrand organizó el lanzamiento televisivo de Le Pen

Miércoles 20 de abril de 2022

En política y en la vida no vale todo. Sin embargo, aquel Maquiavelo con pocos principios llamado Francois Mitterrand  no era  eso lo que pensaba. Creía más bien que el fin justifica cualquier tipo de medio y decidió dar aire a Jean Marie Le Pen, para dividir a la derecha francesa.

En 1981-82, la extrema derecha apenas contaba en Francia con el 0,2 por ciento de los votos de Francia. A partir de la primera campaña audiovisual de Le Pen, orquestada originalmente desde el Eliseo y en la que se exigía directamente  la presencia del dirigente de extrema derecha en los informativos de máxima audiencia, no teniendo porcentaje para ello, la extrema derecha comenzó una escalada en torno al 10 por ciento  del electorado francés. Solo existe lo que sale en TV. Y la gente le votó. Que vote el ciudadano no es delito, que se haga trampa, si. Y es lo que hizo aquel político dispuesto a todo para repetir presidencia, algo que logró.

Las relaciones de la extrema derecha  con Francois Mitterrand, desde los años treinta, hasta su presidencia motivó un ensayo “Une jeunesse française” de Pierre Pean revelando una documentación excepcional sobre las relaciones del joven Mitterrand y la extrema derecha de los años treinta, culminando su estrecha colaboración con el gobierno del mariscal Petain hasta 1943. No nos olvidemos que siendo Mitterrand ministro del interior francés, cerró la Radio Euzkadi que transmitía desde Bayona a petición del gobierno franquista en 1952.

Posteriormente el estudio de tres periodistas Faux, Legrand y Gilles Perez  probó en su día con documentos y declaraciones, fechas y revelaciones, como el entonces presidente de la República francesa, sus ministros y su partido, contribuyeron prácticamente al lanzamiento audiovisual  de la extrema derecha, llegando a financiar algunas de sus campañas electorales en algunas ciudades y regiones de Francia.

Faux, Legrand y Perez demostraron con pruebas como el PSF y Mitterrand  utilizaron, jalearon, negociaron, y pactaron con Le Pen padre, durante toda una década, para lograr enquistarlo en los resortes del poder del estado francés.

Fallecido Mitterrand, el PSF ha obtenido en las últimas elecciones un resultado que le coloca al borde de la extinción mientras la hija de aquel promocionado padre para dividir el gaullismo  puede resultar ganadora el próximo domingo.

Es un interesante dato para aprender cómo no puede haber aprendices de brujo, maquiavelos de salón y gentes que creen que vale todo en política para hacer lo que les viene en gana. Así como en la guerra no vale todo, aunque de hecho Putin se ría a carcajadas de este aserto en política tampoco.

Este martes en Valladolid, tomó posesión Mañueco de un gobierno juntamente con Vox. Feijóo hipócritamente no acudió a la ceremonia argumentando unas excusas para  que se la creyeran niños de baba tomándonos por tontos. Les quema el pacto con VOX, pero, como Miterrand, para ellos por el poder venden a su madre, cosa que como estamos viendo en Francia en esta segunda vuelta, no ocurre.

Mitterrand en 1981 y Feijóo en 2022, han abierto la puerta a un nuevo Covid político. Veremos como acaba esto.

El chavismo destruye en Caracas el patrimonio vasco

Martes 19 de abril de 2022

Caracas ya no es la que era. Cuando mi aita llegó en 1939, no llegaba a los 350.000 habitantes. Hoy debe superar los cinco millones. Pero la Caracas de hoy no es la Caracas  amable, pujante, acogedora y moderna de otros tiempos.

Los refugiados vascos dejaron su impronta en casa, edificios y chalets preciosos que en un país serio y respetuoso de su patrimonio estarían catalogados y protegidos. Se hizo en tiempos democráticos pero viven bajo una dictadura feroz que no tienen en cuenta estas cuestiones a las que considera propia de gustos burgueses.  Entre la falta absoluta de sensibilidad, la voracidad por construir edificios impersonales, el caso es que el trabajo de  aquellos  maestros de obra, diseñadores, herreros, carpinteros, aparejadores, constructores vascos, la mayoría exiliados toda esa belleza está desapareciendo.

Traigo aquí  este ejemplo  pero no hay mes que no se carguen parte de la fisonomía de la propia Caracas. Y es que las dictaduras son así. Garbanceras, adocenadas, sin gusto por la cultura y la estética, por el carácter de una ciudad, horteras. Esto también es el chavismo para que se enteren esta gente insensible  y que siguen apoyando una falsa revolución que no condena a Putin ni condena esto. Dirán que es propio de una mentalidad burguesa, el caso es que la huella vasca de Caracas está desapareciendo.

En el barrio de Las Mercedes, muy conocido en Caracas, han iniciado la demolición del edificio Aralar en la Avda. Orinoco, construido en 1950 y que había sido declarado Bien de Interés  Cultural por los gobiernos democráticos. Parte de la herencia de nuestros mayores en la zona desaparece. Es la mentalidad de Atila. No hay que buscar más explicaciones. Y pensar que el secretario general de Sortu estuvo en la toma de posesión fraudulenta de Maduro!!!!

El Gobierno Vasco, los periodistas vascos en Venezuela, el Centro Vasco de Caracas  y el Colegio de Arquitectos deberían protestar por ello.

Urgente necesidad de un Museo Nacional Vasco

Domingo 17 de abril de 2022

Erkoreka, Beloki y yo publicamos en 2005 un libro de entrevistas titulado “Somos Vascos”. Una de ellas se la hicimos a Antón Borde Asua, Dibujante, aparejador, funcionario del Ayuntamiento de Bilbao, y ayudante del arquitecto municipal Pedro Ispizua. Como todo el personal desafecto al régimen lo depuraron al caer la Vila en 1937. Durante la guerra fue teniente de zapadores, capitán de la segunda compañía de ingenieros, capitán del Estado Mayor y jefe de la sección de la 49 división del Ejército Norte. Exiliado en Venezuela trabajó en la construcción  y en el diseño de plazas y monumentos varios. Pocos saben que el obelisco tan representativo de Caracas en la Plaza Altamira, lo diseñó él.

La entrevista, a sus 98 años, fue una delicia. Comenzamos preguntándole si le habían bautizado con vinagre pues tenía fama de cascarrabias. Se rio con ganas. Y explicó lo del vinagre diciéndonos  que era una coraza  que se ponía pues al estar destinado en la Sexta Brigada estuvo rodeado de comunistas, socialistas y anarquistas de todo pelo y él era el único del PNV por lo que sacaba su fiereza para defenderse. Había diseñado el título de la revista mensual EUZKADI en Caracas  y nos contó algo significativo que tiene que ver con la foto que ilustra este artículo.

“Si no hubiera habido un Comité de No intervención que Francia e Inglaterra llevaron a rajatabla mientras Alemania e Italia suministraban bombarderos y municiones, tanques y cañones a los sublevados, otro gallo nos hubiera cantado. No teníamos ni balas y menos aviones, pero logramos un hito que han de conocer todas las generaciones. Nos iban a derrotar en una semana y lo iban a lograr  con  Mola bombardeando continuamente  diciendo aquello de que si no nos rendíamos arrasaría Bizkaia, apoyados con todo el aparato de la conjunción nazi-fascista-franquista que tenía de todo pero ¡0h sorpresa! tardaron tres meses. Cada palmo fue defendido con mucha sangre y muchos muertos y ese detalle de la  guerra  se me quedó muy grabado. Cuando fui a Venezuela, con un grupo de gudaris, lo quisimos hacer notar y diseñé un mojón  en el Centro Vasco de Caracas que tenía escrita la siguiente frase: ”A Bilbao 45 kilómetros”. La gente preguntaba que quería decir  aquello. Y les respondíamos que cuando se estabilizó la ofensiva fascista, tardaron en conquistar Bilbao nada menos que noventa días, lo que significaba que solo habían sido capaces  de avanzar cuarenta y cinco metros al día, disponiendo ellos de armamento, intendencia y aparato militar, mientras nosotros  teníamos solo una fe lejana en la victoria y una moral de lucha tremenda. Cada vez que recuerdo a tantos jóvenes muertos para que aquí no cayera una larga noche de cuarenta años….¿Violencia dicen?. ¡Violencia la de ellos!. Si algún día tenemos un Museo Nacional  aquel  mojón hay que ponerlo para que la gente pregunte”.

Preciosa historia llevada a la práctica. Ucrania iba a ser vencida en una semana y sigue ahí luchando, aunque con una ayuda militar que el Gobierno Vasco no tuvo. Y esa guerra sigue teniendo actualidad. El presidente Zelenski, cuando intervino en el Congreso de los Diputados comparó la guerra en su país con el bombardeo de Gernika diciendo, ”parece que estamos en abril de 1937”. Fue un puntazo. Nos trajo el ayer al hoy y lo dijo en un hemiciclo donde nuestro Grupo, no solo ha reivindicado el cuadro de Picasso, sino solicitar al gobierno español reconocer aquella barbaridad como hizo el presidente alemán Román Herzog.

Tras la alusión de Zelenski quedó demostrado con el debate posterior que sigue habiendo un enorme desconocimiento de aquel hecho así como continúa manteniéndose viva aquella mentira que fueron los propios vascos quienes destruyeron su Villa. Hermann Tertsch twiteaba.”Era de esperar  que Zelensky trajera iconografía soviética habiendo sido educado en la URSS. No se le puede culpar. Peor lo tenemos aquí que tenemos a varias generaciones con esa mentirosa iconografía y mitología soviéticas paridas en democracia”. En Tele 5 María Jamardo en la tertulia de la tarde decía, ”ni el que bombardeaba era tan malo, ni los bombardeados eran tan buenos”. Ante esto, ¿alguien duda que, a pesar de que se nos pueda criticar de mirar al pasado, no hay que seguir y seguir haciendo pedagogía sobre esta historia manipulada como hacía Antón Borde y sus gudaris con el mojón?.

Decía Dulce Chacón: ”Somos hijos del silencio de nuestros padres y culpables de la ignorancia de nuestros hijos”. Es verdad. La generación de la guerra, ha desaparecido; la de la dictadura, lo hará en pocos años, pero siempre quedarán los miles de  Tertsch y Jamardos negándolo todo. ¿Vamos a seguir satisfechos con  un mini  Museo incompleto como el actual  de Gernika que no cumple ni de lejos con las mínimas expectativas en relación a lo que fue aquel banco de pruebas mundial para la destrucción?. Recuerdo haber hecho gestiones en el aeropuerto de Cuatro Vientos para que el ayuntamiento de Gernika, con Eduardo Vallejo al frente, comprara un  avión Junker, el mismo modelo de los que habían bombardeado la Villa, lo mismo que la erección de un monumento al gudari con todos los batallones escritos en mármol y una llama votiva. No pudo ser. Lo único que el bueno de Eduardo pudo dejar fue la copia en mosaico del Gernika de Picasso que pese a las críticas iniciales es hoy punto de referencia en la visita a la Villa. Del resto, salvo el busto de Steer hay muy poco, pero cuando hasta Zelenski se acuerda de Gernika creo se impone una apuesta en serio que estoy seguro que hasta Europa contribuiría a ella habida cuenta que copia en tapiz del  propio cuadro está en la sede de Naciones Unidas y es un grito contra todas las guerras. ¿Por qué dejar en servicios mínimos todo este magnífico patrimonio universal?. Recuerdo asimismo  que en las Memorias de Clinton se lee como la  pareja había estado en Gernika en viaje de novios habida cuenta de la fuerza  que tiene aquella historia en el reportaje de Steer pero que viendo in situ la población reconstruida y sin referencias mayores les había desengañado por no estar a la altura de las expectativas que se habían creado.

En la primera legislatura del Parlamento Vasco aprobamos el abordar ir creando instituciones comunes tratando de darle mucha importancia a Gernika  como lugar simbólico por excelencia. Villa de donde tomaba nombre el propio estatuto y donde se había elegido al primer Lehendakari. Desgraciadamente todo  fue muy conflictivo en este país tan tribal, comenzando por la ubicación de EITB y siguiendo por las orquestas, palacios de congresos y demás, quedando  en el tintero  un Museo Nacional Vasco muy moderno, pedagógico y omnicomprensivo. No viene al caso contar el por qué no se hizo pero es la gran institución que nos falta. Y no solo como almacén visual de piezas históricas sino como faro proyector y muy activo de ese inmediato pasado tan manipulado. Creo modestamente que va siendo hora se haga ese extraordinario museo nacional vasco como foco de irradiación de cultura, de historia y casi como contestador automático ante manipulaciones como las que vivimos la semana pasada, con un equipo de historiadores siempre presto a puntualizar  y poner las cosas en su sitio.

Siempre animo a visitar en Barcelona el Museo de Historia de Catalunya  que explica la evolución política, social, económica y cultural desde sus comienzos a la actualidad. Abrió sus puertas en 1996 por decisión del Gobierno de Pujol  con el criterio de convertirse en un centro de referencia en la divulgación de la historia y del patrimonio catalán. El museo está ubicado en el único edificio conservado del viejo puerto industrial de Barcelona y si entras allí y no sales cantando Els Segadors, es que has tenido los ojos cerrados, porque está concebido con una mentalidad de ser referencia continua en todo.

En Euzkadi nos falta algo así. Tenemos museos importantes, pero nos falta un Museo Nacional Vasco  que cuente con criterio muy pedagógico, por ejemplo, la historia de los siglos XIX y XX que sigue condicionando nuestro día a día. En Berango tenemos el muy meritorio Museo del Cinturón de Hierro, que invito a conocerlo en esta semana de Pascua y que Aitor Miñambres mantiene y amplía con presupuestos mínimos, mucho trabajo vocacional, uñas y dientes, pero necesitamos, como el comer, ese museo Nacional que los catalanes tienen ya desde 1996.

Estuve el martes en la presentación del libro del alemán Ingo Niebel sobre la caza que se organizó para detener y fusilar al Lehendakari Agirre. Es un libro fantástico que todo curioso por la historia y todo abertzale tiene que leer, ojalá en esta semana de Pascua. Ingo nos decía que la puesta en marcha en Gernika el 7 de octubre de 1936 fue la salida al mundo de un pequeño pueblo con lengua propia  con sus instituciones e incluso con su ejército y que eso fue extraordinario.

¿Por qué no tenemos un lugar para verlo y para decirle a las nuevas generaciones que, como en Ucrania, pero 85 años antes, ocurrió exactamente lo mismo pero tardaron tres meses, como dice la piedra miliar, en ganar aquella primera batalla?. Feliz Aberri Eguna, día de la Patria Vasca.