Mario Onaindia salvó la vida gracias a Leizaola y Rezola

Martes 1 de diciembre de 2020

A Mario Onaindia, uno de los condenados a muerte en el conocido como Juicio de Burgos le conocí en el Parlamento Vasco en 1980. Representaba a Euzkadiko Ezkerra y nos llamaba la atención la obsesión que tenía contra los jesuitas, contra Xabier Arzalluz y  contra todo lo religioso en general. No había debate donde no les aludiera como el poder en la sombra de absolutamente  todo. Posteriormente fue senador por Gipuzkoa en las legislaturas de 1993 y 1996 cuando ya su partido se había adscrito al PSE. Escritor y parlamentario, en  Madrid caía muy bien su “arrepentimiento” y sobre todo su beligerancia contra el nacionalismo vasco en el que había militado. La Villa y Corte trata muy bien a los conversos.

Una noche, por coincidir en las Cortes con él, Joxe Joan Gonzalez de Txabarri y yo le invitamos a cenar al hotel Palace. Queríamos hablar de política e informarle de un dato que quizás él no sabía pero que fue fundamental para que salvara su vida y recuerdo de aquella cena el buen apetito que tenía y que no nos rebatiera cuando le dijimos que gracias al Lehendakari Leizaola y al vicepresidente del Gobierno Vasco en el exilio Joseba Rezola  y a los obispos Argaya y Cirarda estaba cenando allí con nosotros. Tanto meterse con los curas y con el PNV, para eso.

“¿Por qué decís esto?” nos preguntó. Y le contamos como al haber dos sacerdotes encausados, Kalzada y Etxabe, el juicio debería celebrarse a puerta cerrada, por así  regularlo el Concordato entre Franco y la Santa Sede. Era un acuerdo  que le venía bien al régimen ya que había planificado un juicio militar rápido, sin el ojo público encima y con unas sentencias condenatorias que se iban a llevar a cabo inmediatamente.

Pero no contó con nuestros dos ancianos que se presentaron en Roma y a través de los contactos históricos con la democracia cristiana italiana y con dos sacerdotes vascos que trabajaban en la Curia, junto a la petición de los obispos, lograron que aquel Juicio fuera a puerta abierta  con lo que el mundo pudo ver la verdadera cara de un régimen terrible, vengativo, y cruel. Aquello fue el detonante de una movilización mundial porque de ser juzgados aquellos jóvenes por una dictadura, fue la dictadura la que se sentó en el banquillo de los acusados. La Santa Sede agradeció que el juicio fuera público e intercedió ante el gobierno español para pedir una actitud de clemencia en el caso de condenas a muerte para que las mismas no fueran ejecutadas.

Esto sucedió el 3 de diciembre de 1970 en la ciudad de Burgos. Fue un juicio sumarísimo contra dieciséis miembros de ETA acusados de los asesinatos de tres personas durante la dictadura. Fueron éstos: Eduardo Uriarte, Jokin Gorostidi, Xabier Izko de la Iglesia, Mario Onaindia, Xabier Larena, Unai Dorronsoro, Bittor Arana, Josu Abrisketa, Ione Dorronsoro, Enrique Gesalaga, Jon Etxabe, Gregorio López Irasuegui, Itziar Aizpurua, Julen Kalzada, Antton Karrera y Arantza Arruti.

El mejor champú anticaspa

Lunes 30 de noviembre de 2020

El mejor champú anticaspa es el voto ciudadano. En las últimas elecciones el ciudadano vasco se lavó las manos con ese detergente y Elkarrekin Podemos pasó de  once a seis parlamentarios. Ya se sabe. El hombre y el mono, cuanto más suben, más se les ve el trasero. Y Podemos sigue  en ello subiendo por la cucaña y enseñando su vergüenzas. La última oferta de  la Sra. Garrido y de la Sra. Salud es “acabar con la hegemonía casposa del PNV”. Hegemonía casposa dada por los ciudadanos con su voto, hegemonía casposa que le ha hecho Vicepresidente a Pablo Iglesias. ¿Se equivocó el PNV Sra. Garrido?.

¿Se acuerda usted Sra Garrido que Podemos tiene un puesto en la Mesa del Parlamento Vasco gracias al PNV y  a pesar del berrinche de EHBildu?. ¿Paga usted de esa manera el fair plair del PNV?.

¿Cómo una política como usted plantea que Podemos negocie solo con el PSE los presupuestos vascos cuando quien negocia es el Consejero de Economía del Gobierno Vasco por acuerdo entre el PNV y el PSE?. ¿Está usted en su sano juicio pensando que el PSE va a romper ese modus operandi?. ¿Usted hace política o politiquería?.

Comentaba hoy Iñaki Errazkin que “además de la declaración de bienes  los políticos deberían hacer público su coeficiente intelectual”. No le falta razón. Creer que hacer oposición es insultar al ciudadano no deja de ser no solo impropio sino muestra de paletismo político, de muy escasas luces, y poco recorrido pero allá ellas.

Están muy contentos con el acuerdo con  Santano en Irún. Que lo celebren. Ahí  no ha estado muy fino el PSE por permitirlo. No es algo puntual. Puntual y pequeño es un dolor de muelas, pero si lo tienes no vives. Y mira si una muela no es algo  pequeño. Ha abierto la posibilidad de otros pactos sin ellos, sin el PSE, cuando en este momento la fórmula  de la Coca Cola, de la estabilidad en tiempos de zozobra es la del acuerdo PNV-PSE. Veremos qué pasa con Podemos cuando toque hablar del Alarde irundarra. Igual nada porque como buen partido comunista” el fin justifica los medios”.

Pactar a la contra tras convertir al partido mayoritario del país en un ectoplasma casposo ilustra sobre el programa de gentes que vienen solo con el cuchillo entre los dientes. Mala cosa. Pero esto es como la vacuna. Te previene  y hace que te defiendas de virus tóxicos.

Este jueves también nos ha mostrado a la Sra. Mertxe Aipurua, socia preferente de Podemos, en el acto del Congreso en homenaje a Ernest Lluch. Me parece bien y solo cabe decir, ¡ya era hora!. Lo malo de estas presencias y estos gestos es que no los explican. La misma Sra. Aizpurua se negó a condenar en mayo, no hace tanto, las  pintadas en el portal de Idoia Mendia a cuenta de la situación del preso Patxi Ruiz, uno de los asesinos  del concejal de UPN, Tomás Caballero. Me llama la atención el curioso filtro de la Sra. Aizpurua en el procesamiento de unas pintadas que se quitan con acetona a un asesinato de un ser humano que además era amigo de los vascos como Ernest Lluch. Algún día puede que lo aclaren.

¿También aclararán el último “ongi etorri” de ayer a Asier Ormazabal en Herrnani?. Parece que no. Van al acto de LLuch pero esto de los recibimientos, que las víctimas denuncian, les parece normal. ¿Y si fuera al revés?. Que la extrema derecha  celebrara  el recibimiento del asesino de uno de los suyos?.

También llama la atención que en los letreros que colocan a los intervinientes en las noticias  en ETB le hayan puesto hoy a Amaia Arregi como tenienta Alcalde del Ayuntamiento de Bilbao y no Tenienta Alcalda o Alcaldesa del Ayuntamiento de Bilbao. ¿Será la misma persona la que ha escrito lo de alcalda que tuvo la iniciativa, el día en contra del maltrato a la mujer, la que decidió abrir como un cañón todos los informativos con Maradona, modelo y ejemplar esposo y gran respetuoso del trato hacia las mujeres?. Igual sí.

Decía con acierto Izaro una joven de Mallabia al recoger su premio en Gaztea que “no tenemos nada que hacer si quien nos pega o viola es un futbolista famoso”.

En fin, que a lo dicho. La caspa solo se cura con un buen champú y la caspa política con el voto ciudadano. No hay otro. U otra.

Pues eso.

Lo resumo. El mejor champú es el voto ciudadano. Con el tiempo deja al país sin caspa.

30 Años mendigando y negociando lentejas

Domingo 29 de noviembre de 2020

Antonio Maestre es un periodista de izquierda. La semana pasada escribió: ”La izquierda tiene que aceptar que es una crítica legítima a Bildu recordarles sus orígenes y las pocas concesiones que han hecho a la memoria de las víctimas de ETA. Sobre todo en una cultura política como la progresista que tiene impregnado el recuerdo lógico y legítimo a la derecha española de sus orígenes franquistas y el nulo recorrido que han hecho en el reconocimiento de las víctimas del franquismo y la condena de sus crímenes. No hay diferencia entre la crítica que hay que hacer desde la izquierda a la memoria y la historia de Manuel Fraga y Arnaldo Otegi. Tanto en la crítica a su pasado como en el reconocimiento de su posterior desarrollo político. Sin adorar, ni mitificar, sin criminalizar y sin abjurar de la importancia de ambos en el reconocimiento de los medios democráticos como el elemento troncal en el que desarrollar su acción política”.

El día en el que Arnaldo Otegi anunció el apoyo de Bildu a los presupuestos Ander Arzac en Radio Euskadi le  preguntó  asimismo  sobre los recibimientos, los conocidos como “ongi etorris”, actos que generan gran tensión. El propio Otegi había dicho en agosto del año pasado que había 250 presos y por lo tanto habría 250 recibimientos. No mostró la menor empatía y llegó a decir que un amigo le había dicho que “el dolor de unos es nuestra alegría”. Con semejante carta de presentación no sé cómo se extrañan se les critique. La manera como han comenzado en serio a hacer política es un auténtico disparate. No solo por aquel telegrama a Trump contra Hillary sino por su tono jactancioso y desafiante y por no abordar en serio esta asignatura pendiente que se niegan a asumir confiando en la ley de la amnesia colectiva, como con las pintadas que se limpian con acetona. Pero políticamente siguen  manchando. No me refiero a los diputados y senadores de Bildu que merecen respeto. Me refiero a su sigla. Sigla que teóricamente abarcaba a EA, Alternatiba y Aralar. Era un buen señuelo, que hoy no existe. Típico de los  partidos comunistas que una vez que sacan el jugo a sus compañeros de viaje, acaban con ellos. Bildu, más bien Sortu, sin pistolas, es el heredero directo de ETA y de aquella HB. Es la misma matríz, con métodos diferentes. Les guste o no así les ven en Euzkadi y en España, y no solo en la derecha y ultraderecha, sino también en Europa. De hecho el Parlamento Europeo les ha pedido tengan un mínimo de decoro con las víctimas. Producen calambre salvo en ese espacio minoritario del mundo de Podemos con quien coincide en el apoyo de todas las dictaduras de izquierda no democrática que hay en el mundo junto a ELA y LAB. Y es en España donde pretenden hacer política dándonos clases a los demás sin que sus Comisarios quieran asumir que no pueden meter bajo la alfombra cuarenta años de muertes, secuestros, impuestos revolucionarios y extorsiones de todo tipo hablando en nombre de un pueblo vasco en su totalidad que jamás les dio su representación. No asumen su fracaso, no son creíbles. Tienen que soportar la vieja mochila de los presos como un dogal y pretenden acudir al Congreso como si esa historia de horror no existiera. Y, les guste o no, contaminan todo lo que tocan. Crean tensión en la sociedad, en el PSOE, en los medios. Tienen iniciativas interesantes, abstenciones incomprensibles, propuestas muy demagógicas, pero ingenuamente o calculadamente pretenden hacernos creer que la oportunidad que se les dio con la ley de Amnistía en 1977, cuando vaciamos todas las cárceles y ellos se ocuparon de llenarlas, es un accionar propio de lo que llaman con desprecio el “régimen del 78” cuyo fracaso nos lo atribuyen tratando ahora de ser un PNV bis y actuando con frases ridículamente revolucionarias como las empleadas por Arkaitz Rodríguez (¡¡vaya nivel!!) en la tribuna del Parlamento Vasco como si fuera una barricada.

“Vosotros vais a Madrid a mendigar vacaciones fiscales y nosotros a arrancar derechos sociales y laborales. Os habéis pasado décadas participando en la política española a través del Congreso de los Diputados para sostener el régimen en beneficio de los vuestros. Por el contrario EHBildu va a Madrid a tumbar definitivamente ese régimen en beneficio de las mayorías y de los pueblos”. Ante esta sarta de sandeces impropias de un secretario  general de un partido serio, un compañero diputado me decía: ”se arrastran por las alfombras. Lo suyo es la claudicación en toda regla. Una rendición vergonzante. Apoyar a la Casa Real, el ejército, la guardia civil, los fondos reservados,….a  cambio de qué?. De resolver un problema que han creado ellos: los presos. Ni inversiones, ni competencias, ni nada para Euzkadi. Es que el balance es pavoroso”. “Te cortan las piernas, te dan unas muletas y luego te obligan a agradecerles esas muletas que te dieron”. “Casi vuelan todo el edificio de EITB y ahora acusan de decisiones en despachos oscuros”. Otro me decía: ”Bildu no pretende matar al “padre” al que ni tan siquiera reconoce como tal. Pretende sustituirlo”. Al final lo de “independentzia eta socialismo” se va a quedar en un “quítate tú para que me ponga yo”. Pues sí. Y en acusarnos de envidiosos, celosos, enfermos de cuernitis y cosas parecidas.

Ir a Madrid, además de un vivir yendo y viniendo, también tenía su riesgo. Finalizaban los noventa. Me llama el Consejero de Interior Txabi Balza. Le visito en su despacho de Lakua. ”Iñaki, tenemos información de un comando que te ha seguido a ti y a tu familia durante tres meses. Lo tienen todo. Eres un objetivo fácil, con repercusión y te han puesto en lista de espera. En el momento en que decidan atentar contra alguien del PNV, te toca. Te vamos a poner escolta”. Y la tuve treces años. También coche blindado en Madrid, un horror. Cambió mi vida diaria. No tengo más que palabras de agradecimiento hacia el Departamento y los muchos magníficos  profesionales que tuve. No me quejo. A mi amigo Joseba Goikotxea, con quien estuve detenido tres días en 1976, lo mataron cerca de casa. A Juan Mari Atutxa lo condenaron a muerte. Y así hasta 853. Oírle pues a Arkaitz Rodríguez me subleva.

No se puede vencer a quien no se rinde. El Grupo Vasco negoció la Constitución, el estatuto, la devolución del Concierto, le pidió al Lehendakari Leizaola que volviera del exilio, puso en marcha este pais, pactó con quien había que pactar para reforzar el autogobierno, logró junto con otros se eliminara el servicio militar obligatorio, los gobernadores civiles, inversiones, reconocimientos, apuestas para la industria, la máquina herramienta, la Alta Velocidad, denunciar  al rey cuando absolutamente nadie lo hacía, lograr una comisión de investigación para el Gal, trabajar la memoria histórica, denunciar reiteradamente la situación del  Valle de los Caidos. Lo que nos decía Juan de Ajuriaguerra: ”el pequeño tiene que ser inteligente, tenemos que tener amigos hasta en el infierno, trabajar, trabajar, trabajar, trabajar y trabajar”. Lo que Arkaitz Rodríguez  llama lentejas, mientras ellos obligaban a los demás a ir al cementerio en su socialización del sufrimiento. Con mi viejo partido y mis compañeros, ”folkóricamente “, apoyados por los viejillos, jóvenes  y emakumes que “equivocadamente” nos votaban me pasé treinta años, ilusionadamente, buscando lentejas. Siendo un traidorzuelo vascongado  frente a la vanguardia revolucionaria que ahora nos da clases sobre cómo hacer política en Madrid de la mano de una organización antisistema nacida contra  la Casta cuyo máximo dirigente, Pablo Iglesias, lo primero que hizo fue adquirir una dacha en Galapagar y es ahora su manager madrileño.

De todas formas hay que poner en valor la intervención de Iñarritu condenado los asesinatos de Salvá, LLuch y Muguruza. Iñarritu viene de Aralar. Tiene otra fibra moral. Mertxe Aizpurua se negó hace poco a condenar las pintadas en el portal de Idoia Mendia. Es de Sortu.

La Izquierda Abertzale se define hoy como  Izquierda Independentista. Igual pronto recuperan aquello de Partido Comunista de las Tierras Vascas. También les gusta llamarse Izquierda Transformadora. ¿Transformada de qué?. Van  a Madrid de la mano de Podemos llevando en su frontispicio que el  régimen del 78 es culpable de todo sin decirnos que paraíso proponen siendo el PNV  parte del régimen del 78. Menudo  programa. La prudencia, el tacto, la equidad no las tienen en sus prioridades hacia una sociedad que no necesita más ideología y dogmas sino buenas soluciones, aunque de momento apoyarán los presupuestos en curioso acto de adhesión. Vamos bien.