Viernes 1 de abril de 2022
El Parlamento Vasco celebró este miércoles un homenaje a su primer presidente, Juan José Pujana, que falleció el pasado 2 de febrero, un acto que ha contado con la participación de la familia Pujana, que ha recibido la medalla del Parlamento Vasco de manos de la presidenta Bakartxo Tejeria.
El homenaje ha comenzado con la proyección de un video con momentos protagonizados por el presidente Pujana a lo largo de los más de cuarenta años de la historia de la Cámara vasca. A continuación, la presidenta, Bakartxo Tejeria, ha destacado la «entrega y el compromiso» de Juan José Pujana y de su generación, «paradigma de la política entendida como servicio a la ciudadanía».
«Pusieron en pie Euskadi y los cimientos de nuestro autogobierno; trabajaron para vertebrar el país y hacer realidad el Parlamento Vasco», remarcó.
Tras subrayar que «Juan José Pujana está en la génesis del Parlamento de Euskadi», Tejeria ha apuntado que «esta casa es muestra de ese legado, desde el diseño del salón de plenos, para legislar a ras del suelo», hasta su símbolo -Izaro-, pasando por las obras de arte o el fondo de patrimonio histórico de la biblioteca.
No critico este acto que me parece justo y necesario. Lo aplaudo. Pujana está en la génesis del Parlamento de Euskadi junto a otras 59 personas, con cara y ojos. Lo elegimos en Gernika. Personalmente tenía la costumbre de llamarle cada quince días y siempre me decía que vivía en soledad. Sus últimos años han sido duros.
El Parlamento Vasco cumplió cuarenta años en 2020 años en el que estalló la pandemia y no se pudo conmemorar nada. Pero la pandemia, si no desaparecida, está controlada y se hacen recitales, partidos de fútbol, conciertos, conferencias, reuniones de empresarios y hasta debates de todo tipo pero la Mesa del Parlamento no ha tenido a bien organizar un acto con todos los parlamentarios elegidos en 1980, que ya empiezan a faltar y hacer un acto de reconocimiento a la gesta de poner en marcha un Parlamento de la nada, el primero en la historia, así como a la figura de su primer presidente. ¿Qué mejor ocasión?.
En este país a las nuevas generaciones les está faltando sentido de la historia, empatía con el pasado y una gota de generosidad. Una pena.
Hay una expresión gráfica que dice que “quien le pega a su familia, se arruina”. Es cuestión de tiempo.
Pues eso.
Mientras quede gente como Iñaki con ganas y sin miedo a molestar, con razonamientos validos, hay esperanza. Espero que la época de los tecnócratas fríos de pantalón pitillo y zapato marrón inglés o modelitos chachis pasen de moda y vuelva el espíritu de 1980, incluso con sus defectos porque la excelencia es humo y palabrería. Y además no existe.
me adhiero a la propuesta de iñaki,, de organizar un gran acto con los parlamentarios que lo fueron en 1980.
que se puede ampliar a los que fueron diputados y senadores vascos en las cortes constituyentes de 1977.
y porque no, tambien ampliar a los que eran secretarios generales de los sindicatos en su legalizacion…
permitaseme un recuerdo especial a tomas tueros, dirigente de las ccoo (y del epk pce) en los años anteriores a la legalizacio cuya muerte paso desarpecibida.