Despertando a la tierra en Santa Águeda

En los pueblos y ciudades vascas la víspera del 5 de febrero, día de la muerte de Santa Águeda, una joven cristiana que vivió en el siglo III en Catania (Sicilia) que fue, según la tradición católica, martirizada durante las persecuciones del emperador Decio, es habitual escuchar coros y cuadrillas cantando de plaza en plaza y de barrio en barrio su canción. A cambio, los vecinos donan dinero que luego será utilizado para distintas causas. En la zona de Arrasate, la recaudación servía para ayudar al Hospital que lleva el nombre de la Santa siciliana, el de Santa Águeda. Lo cierto es que está tradición seguramente poco o nada tiene que ver con la joven Santa siciliana. Muchas tradiciones vascas tuvieron que tomar forma cristiana para que fueran preservadas. Algo por el estilo le debió de suceder a la víspera de Santa Águeda o Agate Deunaren Bezpera.

La canción se suele acompañar de bastones o makilas con los que se golpea el suelo rítmicamente. Y es precisamente estos golpes rítmicos y al unísono lo que a los antropólogos les ha llevado a pensar que puede tratarse de una llamada a la tierra.

Naturaleza antes de la primavera. Foto: Pixabay

La naturaleza ha permanecido dormida durante semanas, semanas que se hacen eternas con tan poca luz y frío. Los antiguos habitantes del hemisferio norte a estas alturas del invierno se sentían cansados de los largos días de poca luz y del frío, por lo que seguramente pensaron que unos golpes fuertes en el suelo irían desperezando a la tierra para que así la naturaleza fuese abandonando su larga letargo y dar comienzo pronto a la primavera. Estos barnices precristinanos están presentes en muchas tradiciones. Por ejemplo, en el caso que nos ocupa, el de Santa Águeda, se representa a menudo como un animal en forma de una cabra o gata. En Ablitas, Navarra, se pensaba que en esta víspera se decidía el reparto de tormentas para el próximo año.

Coro de Santa Ágeda. Foto: Agroviajeros

Resurrección María de Azcue recogió en Barcus (Zuberoa) la siguiente leyenda: «A pesar de ser día de Santa Águeda, el ama de casa se puso a hacer una hornada. Un gato le cogió y comió un pedazo de masa de pan.

– Quita de ahí, gato -dijo ella-, y entonces Santa Águeda dio por respuesta:

– No soy Gata, pero sí Santa Ágata (Águeda), y mira hacia atrás y vio luego que la casa ardía. Por eso aquí en el día de Santa Águeda no solían hacerse trabajos ni de horno, ni de lavado«. (Fuente: http://www.euskomedia.org)

Son tradiciones milenarias que han llegado a nuestros días algunas en forma de canción. No sé vosotros pero yo le daré bien fuerte al suelo el día de su víspera, estoy deseando que despierte la naturaleza. ¡Feliz comienzo del fin del invierno! ¡EUP!

Y recordad que cada rincón de nuestras calles y barrios se llenaran de cánticos y makilas. Yo no me lo pienso perder.

Una de las canciones más cantadas es la siguiente:

«Aintzaldu daigun Agate Deuna
bihar da ba Deun Agate,
etxe honetan zorion hutsa
betiko euko al dabe.
Deun Agatena batzeko gatoz
aurten be igazko berberak,
igaz lez hartu gagizuez ta
zabaldu zuen sakelak…
Aintzaldu daigun Agate Deuna
bihar da ba Deun Agate,
etxe honetan zorion hutsa
betiko euko al dabe.
Zorion etxe hontako denoi
oles egitera gatoz,
aterik ate ohitura zaharra
aurten berritzeko asmoz
Aintzaldu daigun Agate Deuna
bihar da ba Deun Agate,
etxe honetan zorion hutsa
betiko euko al dabe.
Ez gagoz oso aberats diruz
ezta ere oinetakoz,
baina eztarriz sano gabiltza
ta kanta nahi degu gogoz
.
Aintzaldu daigun Agate Deuna
bihar da ba Deun Agate,
etxe honetan zorion hutsa
betiko euko al dabe.
Santa Ageda bezpera dogu
Euskal Herriko eguna,
etxe guztiak kantuz pozteko
aukeratua doguna.
Aintzaldu daigun Agate Deuna
bihar da ba Deun Agate,
etxe honetan zorion hutsa
betiko euko al dabe.
Orain bagoaz alde egitera
agur dautsugu gogotik;
Agate Deuna bitarte dala
ez eizue izan kalterik… IEUP!!