Jueves 13 de junio de 2019
Sé que la noticia principal de todo lo que ocurre se la llevan los pactos, lo demás es calderilla. No debería ser así. Hay hitos que convienen convertirlos en enseñanzas para las nuevas generaciones. El que nuestra generación viera en su día la película “El día más largo” y el que nuestros padres vivieran en propia carne la esperanza del desembarco de Normandía no significa que nuestros hijos y nietos sientan el menor interés por una de las fechas fundamentales de Europa que explican 80 años sin guerras, la construcción dificultosa de la UE, lo que es el fascismo y la maldad del régimen franquista que estaba en ese momento apoyando a Hitler y Mussolini, los dictadores directamente señalados en acabar con ellos por las democracias.
Y eso ocurrió en junio de 1944.
Como era de esperar ni Felipe VI ,que no tiene nada que hacer en todo el día, ni Pedro Sánchez, a quien le encantan estos saraos, ni estuvieron presentes ni explicaron el por qué no estuvieron en los actos en los que los llamados aliados invadieron la Francia ocupada por los alemanes con el fin de liberarlos del yugo nazi que anunció en su día un Reich de mil años.
No hubiera estado mal para esa nueva España de la que alardean un mensaje democrático con los aliados en aquel momento boreal de Europa. Pero son así.
Afortunadamente fueron vencidos y de ahí que sea importante recordar que España y su régimen estaban con los perdedores de aquella invasión. Afortunadamente aunque la canallada de Churchill nos condenó a treinta años más de dictadura, junio de 1944 fue el inicio de la liberación de una Europa que quedaba destrozada.
Caustico nos ha recordado asimismo aquella fecha:
Se ha celebrado hace pocos días el aniversario del Día D, el desembarco en Normandía de las tropas que iban a intentar acabar con la bestia nazi. Si en la Europa democrática el hecho ha sido objeto de gran atención, en el estado español ha pasado prácticamente desapercibido. Puede ser porque en esa guerrra contra el terror, España ayudó encubiertamente a Hitler e incluso le envió voluntarios al frente ruso y acogió y amparó tras la guerra a criminales nazis en su territorio. Ni relato, ni tonterías, eso es la Historia y ahí queda para siempre.
De ahí quizás la frialdad española respecto a la conmemoración, a la que por cierto nunca es invitada. National Geographic ha emitido un documental de aquel histórico día, con los fotogramas coloreados por ordenador, lo que le daba un plus de realismo y de actualidad. Ver las caras sonrientes y atemorizadas al tiempo de aquellos miles de chavales norteamericanos que venían a dejar su vida por la libertad de una tierra que les era ajena, pone los pelos de punta y devuelve la confianza en el género humano.
Si aquellos críos que murieron durante la batalla y en las semanas posteriores pudieran comprobar lo que ha hecho después Europa, dejando volver e incluso protagonizar la política actual a los neonazis, neofascistas y neofranquistas, sufrirían una trágica frustración. Quienes legalizan y consienten la existencia de estos revisionistas que se sirven de la democracia para intentar destruirla son tan culpables como ellos. Quienes pactan con ellos son colaboradores del delito de intentar devolvernos al horror fascista, nazi o franquista. Las guerras por principios ya no existen. Priman los intereses económicos o estratégicos y en una sociedad sin valores, los peores tienen más oportunidades
Quizás por eso España siempre está ausente de estas conmemoraciones democráticas.
La representación política española ni estuvo presente ni se le esperaba…a pesar de que la UE está en manos de los descendientes de los nazis, fascistas y franquistas, que anteponen los intereses estratégicos y económicos a los “DERECHOS de los PUEBLOS minoritarios existentes que son “SOMETIDOS” por la fuerza de las armas y los tribunales apéndices en estados poco democráticos…es por ello que la labor fundamental de nuestros “DIPUTADOS” debiera ser unirse en una sola voz a otros pueblos con problemas similares para luchar por los derechos que nos corresponden.
Esta ausencia española lo confirma y evidencia, como Estado no deseable, por los organizadores de dicha efeméride, de alcance vital, para el mundo democrático terrenal.
Los estados perdedores del Eje-Nazi fascista, Berlín-Roma-Tokio no deberían estar en la conmemoración de esta victoria, aunque Italia se redimió antes de su final.
Lógicamente España era el estado colaborador de dicho eje, que incluso envió a su División Azul para ayudar a Hitler, cuando estaba acorralado en sus últimos meses de caudillo criminal invasor del mundo.
Tranquilo Iñaki que aunque España esté ausente en Normandía, la selección española y Felipe VI, gracias al PNV, si estarán en San Mamés.
Eso si que es un triunfo para la España franquista, aliada de los Nazis y se lo deberán a los de la Casa de Sabino.
Que buenos vasallos serían si hubiesen tenido buen señor.
Gracias Sr. Anasagasti por este artículo pues se ha superado. Reciba
de este humilde lector suyo mi mas sincera enhorabuena.
Valentín
Pues es que a España, no está ni se la espera, por que no tiene NADA QUE HACER en esta historia, mas que meterse en el agujero mas profundo que propició la verguenza franquista con su División Azul, su colaboracionismo y agradecimiento a las fuerza fascistas que arrasaron nuestro pais en la sublevación militar y le hicieron SANTO a Franco y sus generales. ¿Que puede pintar España en esa celebración…Esta acaso Alemania e Italia, que fueron los vencidos?
Por otra parte, uno esta harto de que se mezclen las churras y las Meninas. Digo esto por que al margen de mi opinión.. no acabo de saber lo que tiene que ver que la Selección española juegue partidos en San Mames… ¿A quien se traiciona?… este tipo de afirmaciones relacionando a la seleccion española con Franco y los nazis me da dolor de barria por su estupidez. ¿Acaso no juegan desde hace mucho tiempo, cantidad de jugadores vascos en esa selección?… Los llamais traidores y chaqueteros cuando juegan en la selección y se os cae la baba cuando juegan con el Athletic en San Mames… No me jodais… por favor un poquito de sentido común…
El gusto del nacionalismo vasco por generar confusión y echar la caña por ver si pesca en el barullo, es conocido de sobras.
Y este artículo se mantiene en esa línea.
El desembarco de Normandia de 1944 les sirve de excusa, también, para no explicar de modo convincente y documentado el episodio de aquel Aguirre en la Alemania nazi.
Y si, la historia fue la que fue.
En el desembarco aliado de Normadia nadie va a encontrar soldados del Ejercito franquista, ni que los busque con lupa. Pero esa ausencia no extraña más que a quienes desconocen los hechos reales vividos en la Europa de aquellas décadas.
La División Azul respondió a la lógica desarrollada en la Guerra Civil española en el bando ganador y en las deudas contraídas por los sublevados frente a sus apoyos internacionales, especialmente frente al III Reich alemán.
El artículo no me gusta, los comentarios cosechados hasta ahora un me gustan menos.
Y en cuanto a lo de mezclar, Sr. Anasagasti, bueno es no mezclar churras con merinas, refiriéndose a ovejas, pero meter a las Meninas por medio… ¿seguro que no ha sido un gazapo que quiera rectificar?