Nos vamos a dejar llevar por la corriente del esplendoroso Danubio. Este río muestra orgulloso a cada paso que es el segundo más largo del continente europeo tras el Volga. En lo que sí le gana al ruso es en que es el más internacional, ya que cruza Europa de oeste a este. Nace en la Selva Negra de Alemania, cruza una infinidad de países; Austria, Eslovaquia, Hungría, Croacia, Serbia ,Bulgaria, Moldavia y Ucrania, donde va dejando su impronta hasta que llega a Rumanía. Aquí se expande en un gran delta para finalmente morir en el Mar Negro.
Este magnífico río de casi 2.900 kilómetros de largo, es navegable prácticamente en su totalidad, lo que le ha llevado a que en sus orillas se hayan asentado infinidad de pueblos desde hace miles de años. A su paso podemos encontrar ciudades muy bellas e importantes como Budapest. Quizás sea en esta ciudad donde a este gran río más bonito se le ve. No en vano a la capital húngara se la conoce también como la joya del Danubio.
Sus aguas separan la ciudad en dos partes muy bien diferenciadas, Buda y Pest. Pero están estrechamente unidas por ocho majestuosos puentes como el más famoso, el de las Cadenas. Es el más antiguo y se ha convertido en todo un símbolo de la ciudad.
La orilla más pintoresca es, sin duda, la de Buda. En sus colinas exuberantes de vegetación se encuentra el Castillo Real, la ciudadela, la fortaleza y además es un lugar con una panorámica estupenda.
Si venís hasta aquí no podéis dejar de pasear por sus callejuelas, plazas adoquinadas y patios medievales. Si os encontráis la puerta abierta de alguna de sus casas, no dudéis en echar un ojo disimuladamente, algunos edificios esconden jardines muy bonitos. Una maravilla de barrio, y es que miremos donde miremos nos encontramos arte y monumentos.
El centro de Buda es la plaza de la Santísima Trinidad. Su mayor valor es simbólico ya que fue edificada por los supervivientes de la peste que asoló la ciudad entre los años 1712-13 para agradecer que seguían vivos. Aquí se encuentra la impresionante iglesia de San Matías. Aunque es del siglo XI poco queda de la antigua edificación. Adquirió su forma actual durante la restauración de finales de siglo XIX.
La estatua que se encuentra muy cerca, es la de San Esteban o István, el primer rey que tuvo Hungría. La cierto es que la historia del pueblo húngaro bien merece unos párrafos. Los húngaros, también conocidos como los magiares, están muy orgullosos de sus raíces. En la Plaza de los Héroes están representadas las siete tribus de las que se dice proviene el pueblo húngaro. Se asentaron en esta región hace mil años.
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La forma y detalle de las esculturas es impresionante!
Se trataban de tribus ugrofinesas que vinieron atraídas por la geografía húngara, muy parecida a las estepas que se extienden entre los ríos Volga y Kama, de donde provenían. Los magiares, actuales húngaros, ocuparon el vacío que los ávaros (un pueblo de lengua túrquica) dejaron en los territorios de las actuales Eslovaquia y Hungría. Son muy distintos a sus vecinos de origen eslavo asentados en República Checa, Eslovaquia o incluso Rusia. Tanto es así que su idioma es una isla en Europa Central, ya que es pre-indoeuropeo como el euskera. Allí es bien conocida la peculiaridad de nuestro idioma y nuestra cultura.
Al otro lado de la orilla nos espera el barrio de Pest. Aquí la capital muestra su cara más esteparia, moderna y bulliciosa. Con aire algo más decadente, esta zona de Budapest también merece una visita, aunque solo sea para tomar un café en la que dicen es la cafetería más bonita del mundo. Es el Café Nueva York. Se hizo muy popular cuando Budapest era la capital más importante de Europa Central, en la Belle Epoque. El día de su inauguración, el 23 de octubre de 1894, el escritor Ferenc Molnar arrojó las llaves del café al Danubio para que permaneciera siempre abierto.
Aunque sin duda, la cara más bonita y poética de Budapest, es la de la noche. No hay nada más romántico que coger uno de los pequeños barcos de excursión que hay a las orillas y surcar las aguas del Danubio. El Parlamento húngaro de noche y totalmente iluminado es una de las más bellas estampas que podréis encontrar en toda Europa Central.
Más info: http://es.gotohungary.com/
Pero este impresionante río aún nos guarda muchas sorpresas. Próximo destino, Bratislava (Eslovaquia). Otra ciudad regada por el majestuoso Danubio azul.