Jueves 18 de julio de 2019
El pleno del Parlamento Europeo (PE) se mantiene dividido respecto a cuál debe ser la respuesta europea ante la situación en Venezuela, y mientras grupos Reformistas piden una «amenaza creíble de sanciones», la Izquierda Unitaria, comunistas y Podemos, continúa reclamando no interferir.
En un debate a última hora de hoy, la alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini, recordó que la UE respaldó oficialmente el informe de la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, sobre las violaciones de las libertades fundamentales en Venezuela. Además, la UE se mostró dispuesta a comenzar el trabajo para aplicar sanciones selectivas a los miembros de las fuerzas de seguridad implicados en torturas y otras graves violaciones de los derechos humanos. «La situación es crítica y empeora cada día», advirtió Mogherini ante el pleno, en el que calificó de «chocante» la muerte del capitán de corbeta Rafael Acosta Arévalo cuando estaba bajo custodia de las fuerzas de seguridad venezolanas y recordó que han pedido una investigación que lleve a los responsables ante la justicia. «La situación es cada vez peor, la UE debe trabajar para poner fin a esta pesadilla», reclamó el eurodiputado del PP Francisco Millá Món, que afirmó que la muerte de Acosta ha demostrado que «eran necesarias sanciones para los responsables de las violaciones de derechos humanos». También el eurodiputado Leopoldo López Gil, padre del opositor venezolano Leopoldo López, pidió hoy al resto de grupos que apoyen este jueves la resolución sobre la situación en Venezuela y contribuir así a que «cesen la represión, la violencia y las violaciones a los derechos humanos» en el país sudamericano.
El eurodiputado socialista Javier López, por su parte, recalcó la solidaridad con el pueblo venezolano y, de cara a la nueva legislatura europea, reivindicó de nuevo que «la única salida posible es pacifica, política y negociada» y con «elecciones libres y justas monitorizadas por comunidad internacional».
Por su parte, la eurodiputada del PNV Izaskun Bilbao subrayó que el informe de la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos hace «más urgente que nunca» el envío de ayuda humanitaria a la altura de la crisis que vive el país y un proceso de transición a la democracia. «Las cifras de represaliados, asesinados y desplazados forzosos (…) justifican una investigación de la Corte Penal Internacional contra los jerarcas del régimen y sanciones para bloquear su patrimonio», afirmó Bilbao.
Asimismo se afeó a Mogherini que represente la «pasividad» con la que se ha tratado la crisis venezolana en los últimos años. «No hablamos de políticos al uso, hablamos de una banda de criminales». Entre los eurodiputados españoles, la opinión disonante la encabezó el eurodiputado comunista de IU Manu Pineda, que dijo que la Eurocámara hará «el ridículo» si aprueba este jueves una nueva resolución sobre Venezuela. «La UE debe respetar el derecho internacional, la no injerencia en las decisiones soberanas de los pueblos y levantar las sanciones. Se dicen preocupados por el pueblo venezolano, pero exigen medidas que generan más sufrimiento», alertó Pineda, que pidió a Mogherini que «deje de amenazar con sanciones y siga reclamando diálogo y moderación».
Muy bonito desde un escaño calentito mientras la los venezolanos se mueren de hambre o tienen que emigrar. Eso es sencillamente el comunismo en estado puro. Lean el informe de Bachelet que es horroroso y opinen.