Santiago Aznar y el Capitán Potato

Domingo 11 de febrero de 2024

En el puente del ayuntamiento de Bilbao han puesto esta furgoneta  que como se ve la llaman MR POTATO. ¡Porque esta vida nos la comemos con patatas! dice abajo. Y tiene mucho éxito.

Seguramente pocos recuerdan lo que ocurrió en plena guerra civil como consecuencia del bloqueo naval que impedía llegaran de Inglaterra suministros y alimentos. Ese cerco lo rompió Davey “Potato” Jones, un galés capitán de la marina mercante que esquivando no solo los barcos de los rebeldes sino los propios, a cuenta del asqueroso acuerdo del “Comité de No Intervención” de Francia e Inglaterra, para  no molestar a Hitler y Mussolini, a pesar de que éstos suministraban de todo lo suministrable a Franco y su sublevación, pero nuestro galés alivió el hambre de Bilbao durante un tiempo. Y el pueblo lo llamó Capitán Potato.

Creo debería tener una calle en Bilbao para que se recordase su hazaña y no a Federico Moyua, puesto su nombre ahí por el alcalde fascista de Bilbao, José María de Areilza en 1937.

María Esther le preguntó a su abuelo por aquel  hecho, el consejero Santiago Aznar, y éste le contó lo siguiente:

“Como consecuencia de la guerra, Bizkaia y Bilbao habían recibido un gran número de refugiados, sobre todo de Gipuzkoa y había que darles de comer a un ejército, familias enteras, teniendo en cuenta el bloqueo producto del acuerdo de no intervención.

Contaba como fue enviado a Londres por el Gobierno Vasco, sin saber absolutamente nada de inglés porque lo suyo era el esperanto, para establecer relación con la Trade Union el sindicato laborista inglés.  Se entrevistó con el Secretario General de aquel tiempo Walter Sitrina que no hablaba ni palabra de castellano y menos esperanto y se tuvieron que entender a través de intérpretes. 

Mi Aitite comentaba que la petición que le hacía como correligionario sindical era que no permitiera el bloqueo a Bilbao por parte de los barcos del comité de no intervención y pudieran tener ayuda humanitaria porque sino se acaba la guerra y ganaban  los militares sublevados. 

Santiago Aznar se dio cuenta que Walter Sitrina le escuchaba pero no le oía y como tenía mucho carácter le montó allí mismo una escena, a grito pelado, diciéndole de todo, acusándole de insolidaridad e inhumanidad y sobre todo de ser responsable de que la guerra se perdiese.

El hombre se debió quedar tan impresionado por la bronca que le montó, que con las mismas le dijo al Consejero le acompañase al Palacio de Westminster donde el Parlamento Inglés celebraba su sesión y estaba el primer ministro al que le exigió el levantamiento del bloqueo para Bilbao en base a la tradición de relación que había con esta Villa por parte de los ingleses, de que muchos de los edificios de Londres se habían hecho con el hierro de Bizkaia y que el club de futbol de Bilbao había tenido un entrenador Mr Pentland que era inglés.  Que no se podía bajo ningún concepto dejar caer de mala manera a gente amiga por un bloqueo.

Como consecuencia de esta actuación, que él siempre contaba con mucho orgullo, se produjo la llegada de avituallamiento al puerto de Santurtzi y hasta un capitán galés rompió el cerco e inundó Bilbao de patatas y por eso le pusieron de nombre el Capitán Potato.”

El domingo 18 en Castejón

Sábado 10 de febrero de 2024

David Salinas Armendáriz

Este próximo 18 de febrero no va a ser un día cualquiera para Castejón. En esta fecha se van a conmemorar los 130 años de una jornada histórica, indeleble, para la localidad ribera. Aquélla en la que en su estación ferroviaria una gran multitud recibió y aclamó a los representantes políticos que en Madrid se plantaron ante el intento del Gobierno de España de la época de vulnerar el Fuero de Navarra, imponiendo unilateralmente un desorbitado pago de impuestos ajeno al régimen paccionado. El contrafuero fue urdido por el ministro de Hacienda Germán Gamazo, por lo que la general matxinada que movilizó a toda Navarra y al resto de los territorios forales, incluso con el apoyo de organizaciones catalanistas, ha quedado inmortalizada como La Gamazada. Pero es que esa mañana del 18 de febrero de 1894, en Castejón, además de la propia y multitudinaria reivindicación foral, pasó algo más: se asistió a un hecho que resultaría fundamental para el nacimiento de un nuevo movimiento político, que se iba a conformar decisivamente al calor de la solidaridad interterritorial mostrada en defensa común del residuo de libertades subsistente a las guerras carlistas, en peligro entonces de definitiva supresión.

Y ese sucedido digno también de recordar no fue otro que la destacada presencia en el acto de Castejón de los hermanos Arana Goiri, bizkaitarras para los que la Gamazada supondría el definitivo empuje a la creación del ideario nacionalista vasco, que poco después se concretaría en la fundación del PNV por Sabino Arana. Porque puede afirmarse que lo vivido en la Ribera, como demostración de la hermandad cultural y política entre territorios en la defensa conjunta de sus Fueros y Libertades, devino en esencial para la formulación del pensamiento de Arana, que exhibió, además, en tierra navarra un primer esbozo del que sería emblema común eúskaro, por él poco después ideado, como la proclama revolucionaria del “Euzkadi, patria de los vascos”. En Castejón comenzó todo. Eso también merece ser recordado por los abertzales.

Como escribía Iñaki Anasagasti hace unos días, es esclarecedor del significado de la Gamazada y del episodio de Castejón el que el general Martínez Campos aconsejara a la regente María Cristina que no se actuara militarmente frente a Navarra y los territorios vascongados que la apoyaban. Fue por tanto una batalla incruenta, ganada por el pueblo y por sus instituciones privativas. Porque el uso de la fuerza frente a la libre determinación popular a nada conduce ni cierra heridas, sino que las profundiza. Entonces y hoy. Otra lección de la historia.

En Castejón se escenificó un acto pacífico de defensa y de reivindicación de lo que es propio, y de la perentoriedad del pacto como herramienta de convivencia. Y no es mal momento para recordarlo, en un tiempo en el que a la singularidad, nacida de una historia que hay que conocer y respetar, se la quiere disfrazar absurdamente de privilegio y de desigualdad. Dejémoslo en mera ignorancia del origen de las cosas por parte de algunos políticos actuales, más preocupados en zaherir que de comprender al otro, de desunir que de construir bajo la idea del previo pacto, bilateral por definición. Nada ha cambiado en estos 130 años. La enseñanza de la historia sigue imperecedera.

En estas mismas páginas, el 8 de agosto de 2022, tuve ocasión de recordar mi personal relación con Castejón, por ser el pueblo natal de mi aita, el lugar al que quise que volviera a descansar cuando nos dejó, porque él que viajó por el mundo siempre expresó su sentimiento castejonés, navarro y vasco. En la visita familiar pudimos constatar la ausencia de un expreso reflejo de aquel hecho histórico del que él siempre nos hablaba. Nunca es tarde, decíamos, y este 18 de febrero de 2024, por fin, va a ser posible, y lo va a ser gracias a la fraterna colaboración entre las asociaciones Laubide, Nabarralde y Betiko Lagunak. Estoy seguro de que mi aita hoy se sentiría más orgulloso, si ello fuera posible, de su Castejón y de su Navarra del alma.

El autor es miembro de la Asociación Betiko Lagunak

Andueza, muy bronco – Podemos y Sumar no dicen la verdad – Buena Ley pero muy adanista

Viernes 9 de febrero de 2024

1.- En el análisis que hemos hecho sobre la campaña electoral el adjetivo utilizado para describir a Eneko Andueza ha sido “bronco”. No se entiende que formando parte del gobierno vasco el PSE su descalificación se centre en el PNV en lugar de vender sus evidentes logros. Es algo suicida. Yo he añadido una falta de estilo y lealtad y he puesto el ejemplo que tras la desgracia del vertedero de Zaldibar, el Lehendakari y el PNV no se cebaron en el consejero socialista responsable de medio ambiente, como sin duda hubiera hecho Andueza. Si ahora alguien pregunta por aquella desgracia la culpa se la achacarán al PNV. En ningún momento el PSE echó un capote, cuando de ellos era la responsabilidad directa. Si a eso se le añade su coqueteo con la IA, cuando Sánchez depende asimismo de los votos del Grupo Vasco en el Congreso y a que él dice que no pactará con Bildu, no se entiende ni su cuadratura del círculo ni su papel de lija del siete para el PNV. Es incomprensible.

2.- Era evidente que ni Podemos ni Sumar iban a hacer una coalición. No se soportan personalmente, y la política son relaciones personales, pero no lo dicen. Y todo porque Gorrotxategi tiene más notoriedad que la candidata de Sumar que hasta anteayer era de Podemos. De todas maneras yo tampoco pactaría nada con la Sra. Garrido que a tenor de lo que dicen en Sumar es una señora insoportable que ha perdido pie en todas partes, a lo que se suma que Lander Martínez y ella no se pueden ver ni en pintura. Han estado engañando al personal y al final ha salido lo que ha salido. Vinieron contra la Casta y la vieja política y ellos son ahora  la Casta y la vieja política.

3.- La ley aprobada este jueves en el Parlamento Vasco sobre Transición Energética y Cambio Climático es una buena ley. Zorionak!. Del portavoz de Bildu no esperaba que loase lo mucho que se ha hecho en este campo, porque siempre han estado en contra de todo, pero sí de la Consejera Tapia. No se puede ocultar que para llegar a lo aprobado, durante los últimos 43 años se han aprobado, entre otras leyes medioambientales, algunas tan importantes como la de Urdaibai; Medio Ambiente; Aguas; Evaluación Ambiental; Administración Ambiental; sin olvidar el Plan Integral de Gestión de los Residuos Sólidos Urbanos de Bizkaia que ha cumplido 27 años y resolvió un grave problema medioambiental en este territorio; así como la puesta en marcha de la Declaración de Bizkaia sobre el derecho humano al medio ambiente presentada en UNESCO en 1999, que debería haber sido aprobada por el Parlamento Vasco. Solo aciertan cuando rectifican y la de ayer lo fue.