Lunes 30 de agosto de 2021
El coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, ha estado sembrado este lunes tras la reunión de la Mesa de Bildu. Se ha negado a caer en «debates de trincheras» sobre los incidentes registrados en los últimos días en Euskadi, que al parecer y con la boca pequeña, la coalición soberanista rechaza y que ha enmarcado en el «modelo de ocio impuesto por el neoliberalismo», y ha abogado por abordar una reflexión «profunda» al respecto. Seguramente se hará alrededor de un buen vaso de kalimotxo.Solo le ha faltado proponer con sentido puritano, cuáquero, seudoprofundo y evangelizador proponer vigilantes del pensamiento, tipo los vigilantes de la playa en búsqueda científica del virus destructor neoliberal como si fueran experimentos sobre el genoma humano.
No me digan que no es un descubrimiento. Que unos jóvenes echen piedras a la ertzaintza y a la policía municipal o roben zapatos del pie derecho y rompan cristales de tiendas y se droguen o emborrachen, es culpa del neoliberalismo que tiene al parecer en California una fábrica de crear descerebrados violentos.
Si ETA mataba a diestra y siniestra por culpa del «conflicto», la culpa de los macrobotellones violentos la tiene alguien moviendo hilos como loco para que la minoría de un lumpen agresivo se divierta rompiendo cosas.
Sinceramente, se trata de un inmenso descubrimiento, más importante que la vacuna del Covid19. Menudo plan tendríamos si gobiernan algún día. Estos imponen la ley seca como en Chicago. Nada de licor, todos con la Casera pero con botellas desechables.
Preguntado por los periodistas sobre esta cuestión en la rueda de prensa, Otegi ha abogado por acometer «debates constructivos» sobre estos sucesos y por «buscar soluciones, no culpables».
«Es una herencia muy católica, pero nosotros no tenemos interés en buscar culpables», ha añadido. Además, ha señalado que «no solo se producen aquí incidentes, sino en todo el planeta».
A su juicio, es «un problema complejo que a veces queremos resolver con receta simple», a lo que ha añadido que «hablar de incidentes es hablar del modelo de ocio que el neoliberalismo ha impuesto en el planeta, y que no puede vivir al margen de determinadas sustancias y bebidas». Al parecer los virtuosos de Bildu ni toman chiquitos ni se fuman un canuto.
«Ese es el modelo de ocio que hemos impulsado y tenemos que hablar de cuál es el modelo de ocio que estamos planteando», así como de «un sector de la población importante como son los jóvenes sin futuro, con unos niveles de precariedad laboral muy alarmantes». Afortunadamente, como se ve, ya no se divierten con pintadas, quemando contenedores o llamando txakurra al personal.
«Todo esto no lo hemos impulsado nosotros, lo impulsa el neoliberalismo», ha incidido, para añadir que también hay que hablar de «un modelo policial que hasta algunos de los sindicatos de la Ertzaintza han dicho que no se puede hacer frente a estos hechos con ese modelo», porque «no puedes tener a la gente en ese modelo de ocio hasta a la una de la mañana y, luego, decirle que se vaya a casa, no va a pasar». Tampoco se pueden detener, usar la porra o el megáfono. Es de mal gusto y muy represivo.
Asimismo, ha opinado que también «hay que poner encima de la mesa por que se producen en ese ambiente actos claramente antisociales, en Donosti y La Habana, que hay que combatir y que rechazamos». «Tratar de simplificar esto con un debate semántico tiene poquísimo interés, no es un problema de semántica», ha afirmado.
Arnaldo Otegi ha afirmado que «hay que poner todo en la mesa o, si no, estamos en el debate de trinchera, hablar del modelo de ocio, del nihilismo existencialista que se ha impuesto a través del neoliberalismo, de ese modelo de ocio que necesita del consumo de determinadas sustancias alcohólicas o de otro tipo, del modelo policial, de la falta de futuro de los jóvenes, y después hablamos del odio». «Ese es el interés que tiene EH Bildu, buscar soluciones y hacer debates con una determinada altura intelectual», ha añadido. !Que estupendo!. ¡Por fin un debate intelectual!.Todo a cien y gratis.
Como no podía ser menos Otegi no busca culpables pues es ateo y le revienta el cristianismo y la búsqueda de culpabilidad (averiguamos con esto que nunca van a condenar nada pues no son católicos). Lo malo es que equipara el delito común de Donosti con las reivindicaciones sociales y políticas de La Habana. No está nada mal. Arkaitz se lo habrá soplado.
Sobre los recibimientos a gente que ha asesinado dice que quieren salir de las trincheras y que le aburren cosas de hace 40 años. Lo dicen ellos que siguen actuando como hace 40 años.
Finalmente le ha pedido al Lehendakari Garaikoetxea que no se equivoque que en Bildu «no sobra nadie». Es como ir a una carnicería, te pican la carne, te la convierten en albóndigas con un único sabor y resulta que no sobra nadie. Los que no quieren actuar como lo hacen los de Sortu en Cuba o en Venezuela, lo tienen claro.Convertidos en albóndigas de sabor único.
En fin. No han olvidado nada, no han aprendido nada y seguirán como hace cuarenta años.
Nunca te acostarás sin saber una cosa más.
